La partitocracia no es representativa.

El caso español.

(Por José Fermín Garralda) -


Tomado de "Ahora - Información", digital (febrero de 2022)

Lo que faltaba en Navarra: el lío, el affaire político Esparza-Chivite (1)

  1. No se fíe a la larga ni de los mejores partidos políticos

El caso es que la Ejecutiva del partido de la UPN con Esparza a la cabeza, obligó a los dos diputados del partido, Sr. García Adanero y Sr. Sayas, que votasen Sí a la reforma laboral del Sr. Sánchez a aplicar para todo España, cuyo voto era necesario, por estar en un tris que esta mini-reforma fuese tirada por la borda. La votación fue el jueves 3 de febrero.

El motivo de obligar al fue un acuerdo secreto y muy reciente de Esparza con la presidenta de Navarra, la socialista Sra. Chivite, pues aquel quiere acercarse al PSOE para evitar –este evitar es un deseo muy loable- que los bilduetarras y separatistas sigan en el poder en Navarra. Según dice ahora Esparza, con ese acuerdo secreto se quería evitar los homenajes a etarras, proteger a las víctimas del terrorismo, y asuntos del desarrollo de Navarra. Esto queda muy bien, pero…. ¿es todo? ¿Para eso acuerdos secretos? ¿Acuerdos que obligan a votar a la reforma laboral de Sánchez para todo España? No, no me cuadra. ¿No fue que UPN había pactado con Félix Bolaños entregar dichos dos votos a cambio de que el PSN le apoyase en un pleno en el Ayuntamiento de Pamplona, donde UPN gobierna en minoría? ¿Acuerdos sobre los que dichos diputados no tenían información alguna? ¿Votar cuando era dar un respaldo a todo un gobierno social-comunista de Sánchez, de repente, en contra de toda la trayectoria mantenida por los diputados estos años? No, no me cuadra.

Después que los diputados, convocados por la Ejecutiva de UPN, aceptaban la disciplina del partido, lo pensaron mejor y votaron No, como todos los que desconocían el acuerdo secreto –votantes y no votantes- esperaban que fuera a ocurrir. Ellos dicen que obraron por coherencia.

Pero el culebrón no termina ahí. En ese momento interviene el Sr. Alberto Casero del PP, el que vota Sí equivocándose de tecla –según dijo después para poder corregir el voto- en el voto telemático. Jopé, qué torpe. ¿Sólo torpe…? Así, "El País" rotula: “Una reforma laboral aprobada de rebote con dos traiciones y un voto por error”. Pero no, no hubo tales traiciones, sólo lo fue por un voto, y quien votó dice que además que fue por error. Tan es así, el errático avisó a tiempo a la presidenta del Parlamento, y no se lo ha dejado corregir.

Pero eso no es todo. Ahora el Comité de Garantías y Disciplina de UPN propone para los supuestos díscolos la pena de suspensión de la militancia durante dos años y medio –es como echarles del partido-, mientras que la dirección de UPN quería echarlos de una vez.

Siendo un tema de partido, diríamos: allá ellos. Y más de un partido que por su germen liberal tanto se ha engañado a sí mismo y a los votantes, paralizando la solución política de la Navarra de siempre. Pero algo diremos sobre ello, porque lo ocurrido afecta a todo ciudadano por motivos diferentes en cada caso. Está en juego la transparencia y el caciquismo. Está en juego evitar el desprestigio personal cuando te opones al Gobierno, la buena fama si de entrada te acusan de traidor, desleal y tamayazo. Está en juego la coherencia de los diputados con los principios, y la posición mantenida en el Congreso durante años. Está en juego el mismo partido UPN. Lo está la dimensión nacional frente a los reinos de taifas, la verdadera representación, etc.

Siguiendo a los sufridos pobladores del llamado Euzcadi peneuvista, de la Cataluña del golpista y hasta de la Galicia pepera, donde se gobierna de forma insólita, el toro más picado de España es el viejo Reino de Navarra. Decimos viejo Reino para elevarnos de categoría –que nuestros padres la tenían-, pues hoy estamos sufriendo los efectos más brutales de la partitocracia, resumidos en un aldeanismo de vuelo de corral.

¿Es que los navarros no tenían bastante con sufrir al PSOE (PSN) con la pelmaza Chivite, a los burgueses separatistas, y a los amigos de ETA que intentan blanquear la banda terrorista a costa del honor de las víctimas del terrorismo y de los casi cinco mil navarros de hace 85 años, separatistas y bilduetarras que tanto cautivan a la Chivite y son sostén en el poder?

El socialista que, por ambición de poder, pacta con amigos de terroristas y con separatistas, que puede favorecer la entrega del Ayuntamiento de Pamplona a Bildu, y que da carnaza a cualquier lobo depredador, supone un gran peligro para la sociedad. Su tentación por el poder debe ser tan fuerte, que cae en la tentación sabiendo con quienes pacta. Si el Sr. Esparza se fía de tales, hoy por hoy…, y de Sánchez, pues que Santa Lucía le conserve la vista. Y si hay chantajes… pues que se diga, a ver quién queda peor. No hay cosa peor que ceder a un chantajista, al que te quiere tan mal y al que tiene esa catadura moral.

Con la partitocracia, si no quieres taza, ahí va la taza y media. En este caso, a la ambición de la oligarquía socialista, se suma la sorpresa que nos ha dado el Sr. Esparza, como por lo visto se la dio a los dos diputados. Sorpresa por comunicarles el cambio de dirección del voto hacia el Sí, y de hacerlo tras el acuerdo secreto con el PSOE, cuya gestión aquellos no conocieron. Este lío no es fácil de desenredar, y se convierte en un nudo gordiano en la soga de la democracia liberal.

Este es el tema que nos trae. Triste, pero cierto. Ya se dice que nunca hemos visto bastante en la vida. Sin duda, el nerviosismo político de los Esparza no es saludable. Le apoya el sr. Maya, al que alguno pudo votarle tan sólo para evitar la asquerosidad bilduetarra… sobre el Monumento de Navarra a sus muertos en la Cruzada. Tampoco es saludable la falta de transparencia. Ni los cambalaches. Los taifas, lo son menos. Se puede negociar en política, pero importan todas las circunstancias, los principios y el interés general. Quizás haya votantes -gente “buena” pero comodona, perezosa y algo más- que permitan que su voto se transforme en un cheque en blanco a conveniencia y con los ojos cerrados, lo que es un magno error político, germen de problemas y transfuguismos prácticos y de principios, en el sistema que nos hemos dado. Pero otros, quizás no lo permitan. Que se les pregunte. Esto nos lleva a lo que diremos después.

Navarra de nuevo (2). El por qué del affaire Esparza-Chivite.

2.El lío político Esparza-Chivite tiene que ver con las malas costumbres y nueve “teorías políticas”.

El affaire ya explicado del Sr. Esparza, es un ditirambo a la partitocracia, que nos ha convencido de que todo es posible, y que basta que se haga. Como durante la IIª República. Será que España está aburrida, y necesita la sorpresa del Sr. Esparza-Chivite. Será que Navarra está dormida, y los navarros, acostumbrados a vaguear no poco en política, están atemorizados, dejando la Política para los políticos de oficio. Aunque no ocurrió así en otras ocasiones históricas, hoy sí ocurre.

La partitocracia, una vez más, nos hace reír por no llorar, y desde luego crea una absoluta desconfianza y “bajón” moral en aquella sociedad que aún queda potencialmente activa.

Es la teoría del diputado inútil. ¿Es diputado es un mandado del partido o bien de la sociedad que le vota? En esto, el problema es del sistema, no de la sociedad que lo sufre: si empezásemos por hacer listas abiertas…. Digamos que el diputado y el Partido se deben al Programa, a la tendencia que se ha marcado en la práctica de ese momento, y desde luego no se deben a pactos secretos a posteriori e incluso hechos con aquel al que casi se juró hacer oposición. Dice con acierto España Confidencial: “La UPN de Esparza es un partido de palabra que cumple sus acuerdos, pero qué palabra y qué acuerdos resulta que son secretos”. Los hay chapuceros y torpes.

Es la teoría de que el pueblo está para obedecer, según practican los políticos hoy. Es como decir que los errores de la democracia se corrigen con más errores. El hecho es que, hoy, democracia es decir quién va a mandar pero sin límite alguno; algún cándido se autolimita como debe ser, otros no y cuidado que hay curva, y unos terceros se acomplejan como lelos. Hoy, democracia es una mera distribución o reparto de parcelas de poder. En realidad, la democracia debiera ser más que la elección, el ejercicio del poder, y demostrado todos los días, lo que pocos hacen.

Es la teoría del cheque en blanco. ¿El Sr. Esparza y los Sres. Diputados creen que el voto popular es un cheque en blanco? Algo de razón llevan cuando el sistema obliga a votante decidir sobre lo que ignora. Sin embargo, en el affaire Esparza-Chivite, preguntemos: ¿y el votante?, ¿se pensó en la negociación secreta en lo que éste quería al votar?, ¿y en los programas y compromisos electorales? Esto explica la necesidad del mandato imperativo y el juicio de residencia, la especialización del diputado que no puede saber de todo como se le exige saber, y, sobre todo, que la representación política es de las instituciones sociales, cada una en su esfera de conocimiento e interés.

Está visto que para el Sr. Esparza el voto es un cheque en blanco porque subordina el voto de los diputados a cierto acuerdo secreto postelectoral. De chiflados. Sin ser quien esto escribe de UPN, creemos que los dos diputados, Sr. García Adanero y Sr. Sayas, en esto han actuado recta y correctamente. Además, para hacer el ridículo votando a Sánchez, que elijan a otros, no a dos pobres diputados navarros. Algo de orgullo hay que tener, pues más bajo no se podría caer. Al menos, un casero del PP se equivocó votando telemáticamente. ¡Ay la tecla…! ¡Ay el casero! ¡Qué más quería el gobierno social-comunista y la tal Meritxell Batet Lamaña para justificar la mini reforma y su portentosa presidencia respectivamente!

Puede ser la teoría de que se puede ser muy liberal y no seguir la voluntad del votante. Porque, o se equivoca Esparza, o bien los dos diputados. Creemos que yerra el primero, pues estos dicen: “Nosotros no hemos ido en contra de los principios y valores de UPN, al revés, todo lo contrario. Los hemos defendido, por lo tanto, la conciencia tranquila”. Y añaden que su oposición a Sánchez durante estos años era contraria a lo que el Sr. Esparza les mandó de repente y sin información previa sobre dicho acuerdo secreto. ¿Qué iban a decir ellos a los votantes y a los que han visto su estela parlamentaria absolutamente contraria a Sánchez? ¿Por qué debían quedar mal ellos? ¿Fiarse además de la Chivite que lleva apoyándose en bilduetarras y separatistas contra la lista electoral de Navarra Suma, con diferencia la más votada? ¿Aumentar los males del sistema, que se ve es un reparto de cromos e intereses? Para esto no necesitamos tales alforjas.

Puede ser la teoría del sistema que nos hemos dado. (Ojo, que la cursiva es muy importante). No, esta teoría no la puede invocar el Sr. Esparza, porque otras veces hubo desconexión entre el diputado y su partido correspondiente al caso, y el primero siguió en las Cortes a pesar de la reprobación del segundo. Luego el diputado está en su derecho para seguir representando. El lío de Esparza-Chivite hace que Esparza pierda a sus diputados, líe al partido, hipoteque el futuro, engorde al PSOE, y sus mayores enemigos se cachondeen de él. Y encima todo por un acuerdo oculto.

Es la teoría del poder, de la necesidad de un partido político que se ponga como primer deber la ocupación del poder… o conservar parcelas del mismo a toda costa, lo que supone pan para hoy y hambre para mañana, por la pérdida de confianza. Esto ayuda a que los partidos caigan en el vicio de la partitocracia, promovida por el sistema, que es impolítico por ser pésimo, como impolíticos son los partidos divisores, que el resto restante –lo que hemos dicho ha ocurrido- es de risa. ¿No es impolítico quien mete la política en el lío que tenemos delante? Mayores que actúan como críos. Con estos líos se hunde más a la sociedad que confía en el voto, se hunde más a quien entienda la política como virtud, al margen de los partidos –al fin bien partidos-, con desinterés personal, pues no hay nada mejor que gastarse al servicio del Bien Común. Si te dejan.

Junto a la teoría del poder se encuentra a la teoría del oportunismo, que logra pan para hoy y extiende el hambre para mañana. Cuando se juega con oportunistas, no se debe entrar en su juego:

“La semana pasada vimos un pucherazo vergonzante en la sede de la soberanía, que ha sido archivado con un carpetazo, como si fuese un asuntillo de poca monta. Aquí se han decretado dos estados de alarma ilegales y un cierre del Parlamento también ilegal, según los más altos tribunales. Baja la calidad de nuestra democracia a "deficiente", según la prensa británica. ¿Y aquí qué pasa, pasa algo?” (Rafael Nieto, 13-2-2022)

Es la teoría del dictado, la teoría del jefe, pues el jefe del partido, Sr. Esparza, declara que es el que más sabe, dicta unilateralmente cambios radicales y repentinos a los diputados, y dicta al votante para que quiera lo que quizás no quisiera. A esto se llama dictadura dentro del partido y sobre el votante. Está visto que la dictadura no es cuestión elección, sino sobre todo de cómo actúas.

Es la teoría sociológica, la de quien dice: “mira, como hacen todos”. Así, España se ha convertido en el país menos transparente, menos coherente (si miramos a los gobiernos nacionales peperos, de Aznar y Jajoy, fue de llorar), con más corrupción, con más enchufes socialistas, con un continuo chorreo y reparto de dinero público a los amigos, también socialistas, pues el dinero es de nadie sino del viento.

Poco es decir que España es una “democracia defectuosa” (The Economist), pues es una dictadura cuasi perfecta, porque tienen todos los ingredientes para jugar con la sociedad, “dar el pego”, y perpetuarse en el poder. Querido y paciente lector, aún nos queda qué decir.

Lío en Navarra y Castilla-León (3). Un circo para aguantar un rato.

3. Al affaire o acuerdo secreto Esparza - Chivite se le suma la nueva escena circense en el PP de Castilla-León, y la crisis Casado. Yo no sé cómo los españoles de “derechas” aguantan el hazmerreir.

Ya nos apena, ya, decir todo esto, porque no deseamos el mal ajeno, pero con el primer affaire Esparza (UPN) – Chivite (PSOE-PSN) en NAVARRA, los españoles tienen circo para rato. De risa por no llorar. Como lo tienen con el casero del PP que por “error” votó, con un voto súper decisivo, la mini reforma laboral de Mr. Sánchez – Mrs. Yolanda Díaz.

Si el affaire Esparza-Chivite tiene varios perfiles, que ya comentamos al hablar de la partitocracia y sus teorías, el perfil del pacto secreto de Esparza con el PSN y con él provocar el hundimiento de sus dos diputados, como si Esparza fuese Bismarck, es de antología.

Ya hicieron los españoles sus risas cuando se enteraron del affaire del señor Santiago Cervera (PP), agente de un autoengaño antológico cuando buscaba no se qué en los huecos de las murallas de Pamplona. Ahora el tal es tránsfuga escribiendo en un periódico enemigo acérrimo de todo hasta de la más mínima decencia, como es el subvencionado Diario de Noticias. Pero no quedan ahí las cosas, pues retrocediendo algo más en el tiempo, los españoles se quedaron atónitos cuando el Sr. Alli rompió el partido UPN que le dio la presidencia de Navarra, creó el CDN de corta vida y peligroso enredo, y hasta planteó el órgano común permanente con Euzcadi. Hasta hubo un alcalde de Pamplona y un presidente de Navarra de UPN que se jactaban de tener un papá republicano.

Jopé, y luego dicen que los carlistas siempre están divididos. Pues los liberales lo están repetidamente cuando casi ocupan el poder, o cuando pueden tener mayoría absoluta. Aquí hay más que COMPLEJOS. Aquí, los hay que salen rana, ya por ponerse nerviosos, ya por COMPLEJINES,… ya por convertirse en submarinos de alguien, o todo a la vez. ¿Y qué ocurre hoy con el affaire PP de Castilla-León?

Ahora, mientras UPN busca romper con el PP para acercarse al PSOE en Navarra, resulta que el PP quiere ponerse a merced del PSOE en CASTILLA-LEÓN. El PP gana en Castilla-León pero depende de Vox para gobernar o, mejor, para tener mayoría absoluta. ¿Quién no la quisiera? ¿Sánchez acaso? Pero Sánchez, ofrece la abstención del PSOE, exigiendo al PP romper con Vox en toda España, incluido Madrid, Andalucía… Órdago a la grande y pequeña, a los pares y al juego. Y al punto. Ya antes la izquierda ha condenado a Vox al ostracismo psicológico y material. Y el PP se lo ha creído, pues tanto el tal Fernández Mañueco (jefe de derechas con políticas de izquierdas), como la dirección nacional del PP bajo la jefatura de Casado, tienen claro que lo que no se hará bajo ningún concepto es formar coalición con Vox, con el que tendrían mayoría absoluta en Castilla-León. En eso –dicen- no hay consenso. Así, el PP dependería del PSOE, siempre. Amor, amor… la derechona comunica el virus socialista.

Pues bien, la postura que ahora tiene el PP es una manera de equiparar de hecho a Vox con el daño que provocan los socios del PSOE, esto es, con los separatistas, golpistas y amigos de terroristas. ¡Qué más da -dirán los peperos- cuando se trata de que caiga el otro, al que envidian! El otro, el otro es el malo, el facha, el ultra... Y diciendo esto, se llaman inteligentes. Así quieren hacerse perdonar. ¿Perdonar de qué?

Como de un día para otro saltan cosas nuevas a la palestra, además del affaire de Castilla-León, hay un tremendo lío en la cúpula nacional del PP, y la tal Ayuso debe lidiar con el botarate Casado. Aún no se sabe bien por qué. Admitiendo que es una nueva hazmerreir, ¿no es verdad que el PSOE comienza a pasar sus apuros y a desgastarse? ¡Pues habrá que salvarlo como se pueda!

¿Nos damos cuenta hasta dónde puede conducir la partitocracia? Partidos que ayer parecían sanotes a muchos votantes -otros les conocen hace tiempo-, hoy están hechos unos zorros, aunque no ocultamos que en ellos siempre cabe gente decente. Incluso Julio Anguita caía simpático a más de uno. Pero cuidado con los submarinos.

Pues bien, todo este hazmerreir es una pena, pero es lo que tiene la partitocracia. Aunque no sé cómo aguantan los españoles que se dicen de “derechas”, sin embargo la obcecación es grande, pues hay gente oportunista -que se consideran "inteligentes" y muy "profesionales" o serios- que justifica lo que ocurre en Navarra, Castilla-León, la cúpula política pepera, y más. Será para no perder ellos lo poco que les queda. Perdonan todo, o quizás sea que el votante quien se perdona todo a sí mismo. Afortunadamente, a la partitocracia, después de chuparse los dedos llenos de mermelada como un crío travieso, le sale todo mal. Pero no –y esta es nuestra gran pena-, es a la sociedad a la que le sale todo mal. ¿Hasta cuándo? Algún día, como ya se predijo, pediremos al NOM: quitadnos nuestros propios políticos y gobernad vosotros. Pero como sea a través de Sánchez, al que por ahora le sale todo bien porque duerme en Moncloa, estamos perdidos. ¿Por qué seguirá?

De lo que se olvidan Esparza-Chivite, Mañueco-PSOE y el Sr. Casado, es de la teoría estética. Lo que ocurre en Navarra, en Castilla-León y el la cúpula pepera, es una chapuza, todos se ríen de ello. Van de chapuza en chapuza, de charco en charco, de tontuna en tontuna. Y la gente atónita, menos los tradicionalistas o carlistas, a quienes no obstante, la Revolución, casi sin mover un dedo, quisiera que se hiciesen el harakiri ellos mismos. Les anima a crearse, muy virtuosamente, su propio auto remordimiento alojado en el subconsciente. ¿Transformarán la auto culpa en líbido?

La gente, atónita, toma a UPN y al PP a rechifla, pues los liberales nos dicen que así quieren ganar a los socialistas y separatistas juntos. ¿Pero no se dan cuenta que aquí somos gente seria? Otros, quizás por estar infiltrados de socialistas, toman a Vox como apestado. No, no preguntaré ahora por qué Vox creció tanto, como ayer Podemos o Ciudadanos, que afortunadamente han caído en una absoluta desgracia para robustecer -y esto es malo- a un PSOE radicalizado que está reconvirtiendo a un PP por entregas -pero, claro, no sus siglas para mantener el engaño-. Quizás Vox ha crecido tanto porque hace lo que el PP no hizo y porque la gente está más que harta.

De lo que también se olvidan UPN y PP es de la teoría del trabajo. La derecha sociológica nunca ha trabajado políticamente, quizás porque siendo familiar, profesional y quizás parroquiana, la vida le hace entender que los partidos políticos son una política del artificio. No le falta razón, pero si ha elegido el actual sistema, debiera trabajar en él, salir a la calle, molestarse y apechugar con él. La teoría del trabajo se opone a la teoría del no hacer nada bueno desde el poder civil, del laisser faire, laisser passer. La vagancia y el primer principio del Liberalismo se dan la mano. ¿Cuándo UPN, el PP etc. han dado la “batalla cultural”? Y así están, su porción social cada vez más desorientada y ellos poniéndose a sí mismos contra las cuerdas.

Muchos, sobre todo en la izquierda, han caído en la teoría de la envidia, que es un defecto –dicen los sabios- muy hispano.

Y muchos, gran parte de la derecha sociológica y piadosa, han caído en la teoría de la no oposición. La derechita –error mío es hablar de derechas e izquierdas, pues los jefes y la política seguida son casi lo mismo, pero es para que nos entendamos- no sabe mandar (piensen en Jajoy), ni sabe estar en la oposición (piensen en Casado). Este no saber oponerse es por COMPLEJO y por creerse lo que la izquierda les dice: las derechas fueron causantes de la guerra. Si abrimos la tapadera del misterio, quizás haya líderes en el PP muy dispuestos a oponerse mucho más a los compañeros de su partido (¿les suena Cayetana?) que a los social-comunistas. La partitocracia está muy abierta a generar verdaderas fraternidades.

Los que saben qué pasa y nada dicen es -puede ser- porque dependen del cocido. Y dependen exageradamente por la falta de la teología del martirio. ¿No nos basta saber que ante Dios nunca serás héroe anónimo? Y la falta de esa teología es por la machacona práctica de los más altos eclesiásticos en España del seguidismo al jefe civil, seguidismo al pensamiento y quehacer del Estado o del partido dominante, por no decir que, hasta hoy al menos, los clérigos de rango en España han estado muy politizados. Porque además que el jefe eclesiástico no se hace seguir, no da de comer cocido. Salvo a quienes trabajan en la administración eclesiástica, lo que les anima a estar parados, anulados. Pero este secuestro es otra historia.

Esto es la bomba partitocrática (4): affaire Casado/García Egea – Ayuso, affaire Castilla – León…. y affaire Navarra. Tres en uno, cuando el PSOE empezaba a hacer agua.

Empecemos por el último affaire para no cansar el lector, cabreado del espectáculo político en España. Claro que sólo se cabrean los que pusieron esperanzas en estos partidos y tales cabezas de lista.

En realidad, los tradicionalistas estamos muy tranquilos, aunque siempre nos afecte la deslealtad de otros hacia los pobres votantes, que llevan más que despistados durante decenas de años.

Hay guerra abierta en la cúpula del PP. En efecto, Casado y su inspirador García Egea del que el sr. Casero es un instrumento, arremeten contra la digna presidente de la Comunidad de Madrid, cuyo acceso al poder por mayoría absoluta representa el enfado mayúsculo de muchos españoles contra el PSOE podemita. Ya sabemos que Díaz Ayuso es el PP en estado puro, nada más, pero con más talla que los tuercebotas de sus jefes. Ahora que el PSOE perdía Madrid, Andalucía, Castilla-León, y casi pierde la reformita laboral –que gana gracias a un voto “equivocado” del Sr. Casero, el diputado fenómeno pepero-..., resulta que la derecha y centroderecha -tomamos el habla común- quiere a toda costa dividirse. Como también el Sr. Esparza en Navarra Suma (y que parece sumó).

El PSOE y Soros deben estar encantados, o bien éste último está en todos los sitios, que así lo creo. Los grupos secretos andan muy sueltos. Tanta casualidad y circo es imposible. Loor a la desgobernabilidad. Loor a la doble vara de medir supuestas irregularidades ajenas (recuerden el caso de Uxue Barkos -Geroa Bai- o de varios socialistas navarros). Loor a la izquierda radicalizada y al separatismo, los niños malos pero preferidos por las instituciones políticas.

Y luego diremos que los carlistas están divididos. Si estos estuviesen como y con todos los españoles de a pie -es lo que son-, expresándose por el cauce de una verdadera representación social, no tendrían problema alguno, porque habría un rey neutral y con poder que apoyaría las instituciones.

El caso de Castilla – León, que debiera estar resuelto sin problema alguno, resulta que está pendiente de un hilo.

¿Y el caso de Navarra? Pues mire, aquí nos vamos a explayar un poco. Cuando algún experto comentarista esparcista que no quiere hacer sangre con los dos diputados, García Adanero y Sayas, explica todo de forma demasiado complicada y subjetiva, es que hay que evitar caer en la ingeniería política. Y zafarse de la partitocracia como exageración de la concepción de partido político, exageración innata a todos ellos, germen oculto en su propio seno. Esto lo explicaba Pedro de la Hoz y de la Torre, director de la Esperanza, hacia 1845.

Desde luego, una cosa es tener una política navarra propia, en defensa de los intereses forales de Navarra, y otra abordar un tema como la mini reforma laboral que nada tiene que ver con el Fuero. Pero es sobre esto último sobre lo que votaron los dos diputados de UPN.

Más; si la reforma laboral fuese aceptable por estar pactada (pero de veras y libremente) entre empresarios y sindicatos, y fuese buena, nadie hubiera hecho ascos a ella, porque ya hay otros motivos para enfrentarse al PSOE-Podemos.

Y más todavía; una cosa es hacer una política navarra propia, y otra liarse con los socialistas que hacen una y otra vez de las suyas: ellos y el poder a toda costa, y para deshacer todo lo que se pueda. Lo suyo no es: Navarra sí y Euzcadi no (pero Navarra… ¿qué Navarra?), sino una Navarra totalmente transformada con la ideología socialista y mundialista, separada o unida a Euzcadi, ¡qué más les da! Recuerde Vd. que el primer PSOE en Navarra era euzcadiano. ¿Estos pueden ser socios de UPN?

También dicen a García Adanero y a Sayas que deben saber que el partido nacional te vende en cualquier momento a beneficio de sus propios intereses. ¿Y..? ¿Es que el PP ha vendido a Navarra Suma? Pues no. Entonces, en éste y en cualquier caso, esta afirmación demuestra que la partitocracia no es representativa.

Y desde luego, si Navarra Suma se va al carajo ya habrá quien recoja el guante. Esta coalición realmente sumó votos, y casi toma el poder si no es por la corrupción del espíritu partitocrático en este caso del PSOE/PSN. El guante lo debieran recoger los tradicionalistas o carlistas, que son Comunión, amigos de que la sociedad independiente se represente a sí misma, pero hoy el poder va por otros lados. Por eso, del nuevo que quizás lo tome el guante, prevención.

¿Querrán los esparcistas y chivistas ser el nuevo Centro democrático, que además baila al son del PSOE de Sánchez? Si el Sr. Aizpún levantase cabeza, no se qué pensaría o si daría un nuevo puñetazo en la mesa.

Desde Navarra (5). Los navarros y resto de españoles, como secuestrados, tras sestear. Es una pena.

Los carlistas se pueden callar puntualmente, pero nunca se callan. Cuando ven los frutos del sistema que tanto critican y hasta denuncian, es decir, el cadáver de su enemigo que pasa delante de sus puertas, el silencio puede ser una actitud que habla por sí sola. Pero no, no creo que la partitocracia haya muerto, que sea cadáver, sino que va acabando, con rostro cadavérico, con cualquier vecino de nuestros pueblos y ciudades. Por eso tenemos que ejercer la libertad con empeño para que todos despierten.

Si ayer eran recios y sinceros, gente de palabra y franqueza, activos y vivos..., los navarros de hoy: ¿seguirán en la eterna siesta ante el affaire Esparza – Chivite, parte del continuo affaire que vivimos desde hace tiempo, máxime si la tal Chivite y Sánchez se regodean de cómo la torpeza de la oposición apuntala indirectamente los desgobiernos socialistas de Navarra y nacional?

Pero no es la primera vez. Los navarros estuvieron de siesta cuando, tras el esfuerzo supremo contra los comunistas y separatistas en la guerra, se les garantizó la seguridad y el desarrollo, luego con el engaño de la manzana llamada democrática, y ahora se han quedado en la siesta por el sistema de partidos políticos que primero produce un fuerte sopor en la sociedad… Lo primero que llega es el sopor con el sueño.

Poco a poco, el milenario Reino de Navarra, Navarra, ha ido convirtiéndose en la bella durmiente aunque hoy, por la pérdida del pulso social y sobre todo moral y religioso –suele ir unido, sobre todo entre nosotros-, ya no parezca tan bella y cada vez más viva de rentas que, desde luego, se pueden acabar. Su caso es el de toda España.

Del sueño se pasa al secuestro psicológico, hecho costumbre. La bella durmiente ha quedado secuestrada de los impulsos y la maquinaria partitocrática, donde tan pocos mandan tanto, y de una manera para la que no fueron elegidos, asistiendo la sociedad al espectáculo de hoy, no obstante previsible desde hace tiempo. Nuestro sistema, paraliza y secuestra mientras se consume en sí y por sí mismo.

Ahora están todos contra todos, y el PSOE casi con todos. Está encantado con un PP quebrado por Madrid y con una Navarra Suma también quebrada… Este secuestro nos lleva a un sopor eterno. El PSOE-PSN desearía que Esparza le entregase en bandeja las cabezas de los dos diputados “díscolos” , o que les abandonase a su suerte como un residuo de su victoria. Dicen que estos dos diputados han pasado de ser amigos de Esparza ayer, a ser hoy “súbditos díscolos” del jefe del partido, que ya no les resulta amigo por haberles velado los grandes secretos políticos con el PSOE de la Chivite, y por ser castigados por el partido ante su digno voto en contra de la mini reforma laboral de Sánchez. Menos mal que algún veterano de UPN se niega a hacer de Herodes.

El empobrecimiento o nulidad de la vida política entre los navarros, hoy es asombroso. Los bilduetarras se ven tan seguros que el Casco Antiguo de Pamplona está limpísimo, sin mensajes “en lucha” por paredes y escaparates, sin colorines, ni ná. Es muy preocupante y nulo interés de los navarros por sus cuerpos sociales, desvertebrados y absolutamente ajenos a la vida política porque los partidos políticos les expulsan de ella. Como esto es antinatural, se suele escuchar eso de "hablemos con los agentes sociales"... aunque destacando que "el poder es sólo nuestro". Que la sociedad se desvertebre, se inhiba y paralice, ha sido buscado por los grandes partidos parlamentarios, y en eso basan su ideología y su práctica política. Representar a todos y en todo indistintamente, y sin medios de control -juicio de residencia y mandato imperativo-, es representarse tan sólo a sí mismo en función del jefe de partido, que es otro igual.

El régimen partitocrático que ha dormido a casi todos, ha hecho que los navarros y el resto de españoles no sepan dónde y a través de qué medio hablar, ni qué decir más allá de cuatro grandes principios morales y políticos, y menos cómo articular en la práctica lo que piensan. Con esto último, por mucho que dijesen bla bla bla, eso no se traduciría en nada práctico por falta de cauce, instituciones y poder. Tan es así, que la sociedad se sabe IMPOTENTE para poder algo, salvo su ejercicio de su libertad privada -social o económica-... y ya ni eso. La única voz y posibilidad política pasa por la partitocracia, por, en Navarra, por Diario de Navarra que selecciona muy bien lo que escribe y ahora está a favor del sr. Esparza, y por un constitucionalismo que secuestra Navarra, reduce la política a un Parlamento y Ejecutivo con un excesivo poder de absorción, y prescinde de lo definitoria que la vida social del día a día debiera de ser en política. Por eso, aquí tienen que haber un cambio, una reconversión, y, en materias morales y religiosas, una conversión de veras. No, nuestra gente no es feliz, aunque algunos, cuando van de compras, estén "contentos".

En su eterna y culpable siesta, los navarros y el resto de españoles, secuestrados, se han impuesto el silencio. Nada de esto es mecánico, por lo que siempre mantienen su libertad para despertar, sacudirse la modorra, exigir un cambio de régimen a uno verdaderamente representativo y, si no saben que decir y hacer, que lo pregunten a los carlistas por tradicionalistas. Porque el parlamentarismo no es representativo sino que conspira contra la verdadera representación. Dijimos que lo demostraba don Pedro de la Hoz en su diario La Esperanza hacia 1845. Los los contrario, erre que te erre hasta hoy. Todo lo bueno puede y debe ser representado, y se necesita que lo sea por un cauce y de un modo válidos. ¿Volverán los navarros a sus raíces y a exigir un cambio hacia la verdadera representación social?

Navarra (6). La "teoría del quesito"... ¿ y para que gobierne el segundo partido más votado, el PSOE/PSN?

La política se reduce a un reparto de poder entre dos o más. Al parecer, el sr. Esparza quiere aplicar a Navarra y exportar al resto de España, la vieja teoría del quesito. Como es muy difícil que haya mayorías absolutas, hoy esta teoría cobra auge. Lo que se ignora son sus grandes inconvenientes y el esperpento final, al que ya hemos llegado.

La teoría del quesito dice que UPN y PSOE vayan juntos, muy democráticamente, para frenar y vencer el separatismo antiespañol y la ultraizquierda. El partido más votado de ambos tendría la presidencia, mientras se reparta el resto del poder. Esto, en principio queda muy cómo para el elector perezoso, el político mediocre, y una administración clerical asustada, pero luego señalaremos sus graves inconvenientes. Aplíquese esta teoría al PP y PSOE nacionales.

Los dos partidos juntos, UPN/PSN, “controlarían” la política oficial Navarra, algo así como el partido liberal conservador y liberal fusionista, ambos absurdamente caciquiles y que impedían a los ciudadanos el “aprender a ser tales”, en la política de la Restauración liberal alfonsina desde el 29-XII-1874.

He aquí dos grandes partidos, alternos incluso, pero sin que la llamada derecha regionalista (el PP en España) deshaga, sino consolide, lo que hace la llamada izquierda, que no al revés. Así fue desde 1875 y así es hoy.

Así, el PSOE/PSN se convertiría en un “centro democrático” (¿) de ocasión: en un lado UPN –“centro-derecha”- y en el otro los separatistas, bilduetarras y podemitas etc., pero con los que el PSOE no obstante hoy ha pactado a beneficio lógicamente de la ultraizquierda. Aclaremos de paso un caso muy extraordinario: los separatistas estuvieron en el poder en Navarra, mandando Uxue Barkos, quizás como premio o muestra de buena voluntad, al prometer que no se iba a repetir más la tragedia del terror etarra. También ocuparon la alcaldía del Ayuntamiento de Pamplona con EH Bildu… ¿por un voto?

La cúpula de UPN (y del PP) favorecería la teoría del quesito. Pero también lo hace Diario de Navarra, comprado con el mismo gusto por la UPN y el PSOE/PSN, por lo que el negocio editorial es seguro.

Claro que, esta comodona teoría del quesito, tiene sus graves inconvenientes.

1º Sólo se utiliza cuando no se tiene mayoría. En tal caso la teoría del quesito se ha visto que es un error, que es pan para hoy y hambre voraz de poder para mañana, como la que ha hecho el PSOE/PSN tras tantos años de estar en la oposición. Y ahora, a sufrirles. Y el sr. Esparza, tras ellos.

2º Poco a poco se llega al desastre seguro, dormida la sociedad y cómodos los del reparto, el supuesto “centro-derecha” cedería a sus socios en materia de principios fundamentales –matrimonio, vida, familia, educación…-. ¿Ceder principios fundamentales? La teoría del quesito no debiera jugar o relativizar lo constitutivo y los fundamentos de la realidad, que NUNCA puede depender del oportunismo ni del vivir de rentas.

El hipócrita se desentenderá cada vez más de los principios, ignorando sus obligaciones, mientras reta a la sociedad que arregle la situación, y además sin hacer nada para ayudarle. ¿El problema del aborto? Es un problema de la sociedad, en el que el político hoy no debe entrar, dicen algunos. Quizás hayamos olvidado que la mayor mentira del liberalismo es el Estado neutro y sin Dios, unido a que el político viva de gorra engañando a su electorado, mientras aplica un supuesto y comodón laisser faire - laisser passer.

3º Cualquier teoría del quesito favorece el secuestro de Navarra por desenfocar el problema. Ni Navarra es un quesito, ni la política navarra lo debe ser. Con su laisser faire - laisser passer, el supuesto “centro-derecha” no trabajaría la verdadera política pues la ignora, pensaría más en evitar mayores males que en hacer el bien, confundiría la tolerancia del mal con su aprobación y promoción, iría por detrás de una sociedad cada vez más desmoralizada y descristianizada y además modelada por la aplicación de leyes corrosivas –desde el indiferentismo moral y religioso hasta la promoción del mal-, y finalmente se conformará con la libertad individual del sujeto que la reclame. Más aún, no atendería el “frente cultural” del que se desentiende y deja en manos de la sociedad desvertebrada (en realidad, Diario de Navarra), y se mostraría incapaz de mirar al futuro, atascado en la fea y agotadora e inútil política el “salto de mata”. Sí, lejos, cada vez más lejos de la recomposición y recristianización de la sociedad y las instituciones políticas.

4º Se agudizan los males de la partitocracia, donde la administración y el poder político paralizan y ahogan la sociedad viva y articulada que debiera de ser. Quien se enfrasca en la teoría del quesito, reafirma con los hechos su creencia en la partitocracia. Ya no sabe o no quiere salir de los enormes defectos del sistema político liberal-socialista, con lo que se consolida la alienación de los navarros y engorda a sus enemigos.

5º El PSOE o PSN en Navarra es muy desleal, pues en vez de dos grandes porciones quiere el caos de cinco cachitos y, además, contra el mayor “cacho” de todos (Navarra Suma) por el ser más votado.

6º Y ahora, ¿qué hacemos? ¿La teoría del quesito pero al revés? Es decir, que gobierne el segundo partido más votado (PSOE) en contra de todo sentido común, pues Navarra Suma tiene muchos más votos (127.246 en 2019) y escaños que el PSOE (71.838 votos).Como el PSOE quiere mandar, ha trepado al poder, dándole un feísimo codazo en plena costilla a Esparza tras las elecciones. Pero no creo que ahora se haya arrepentido. Más bien e Esparza el que busca a Chivite.

José Fermín Garralda Arizcun