Misiones sanitarias 2016

Marzo 2016

MISIÓN SANITARIA

Nuestra sexta misión sanitaria a Senegal está ya en marcha. Un equipo dirigido por nuestra Pepa Conejos, también a cargo de la enfermería, y formado por Blas e Irene como médicos de adultos, Miriam y Ernesto como pediatras, Rosalía para enfermería y curas, Isabel y Begoña en la toma de datos y Cristina al cargo del triaje y los talleres de educación sanitaria, está ya en Senegal.

Todavía no tenemos toda la información competa de la misión. No será hasta el próximo boletín, que dedicaremos casi monográficamente a la misma, pero entre tanto algo podemos ir avanzando.

En esta misión nos hemos concentrado en la zona del País Bassari, que, como es sabido, es la que presenta unos datos de anemia y desnutrición más preocupantes. Los primeros días se han dedicado a las visitas de cortesía al Hospital de Kedougou, al alcalde de Dindefelo, al comité de salud y a las mujeres. El alcalde se acordaba de nuestra visita del año pasado y de sus malos resultados y nos aseguró que las cosas han cambiado mucho, veremos….Por lo pronto el centro de salud estaba todo recién pintado, como nuevo, ¡algo si que ha cambiado sr. Alcalde!

En Dindefelo, todo ha ido muy bien, sin agobios. El nuevo enfermero es un gran profesional. En paralelo hemos empezado también a desarrollar los talleres de higiene dental.

Ha habido días especialmente duros con nada menos que 7 casos necesitados de hospitalización, aparte de un niño con una gravísima desnutrición. Una de las tardes hubo parto en el dispensario. Había problemas con el bebé y nuestros pediatras Miriam y Ernesto hicieron una obra de artesanía, ¡bravo por ellos!. El bebé pasó bien la noche, con llanto fuerte y ganitas de comer y ya ha sido dado de alta junto con su madre.

En Bandafassi el trabajo ha sido en general mas relajado, pero nos hemos encontrado con dos casos gravísimos de niños con enfermedades del corazón, seguramente tendremos que recurrir a todos vosotros para buscar recursos para operarlos en Senegal o traerlos a España.

La traca final ha sido Thiabedji, donde íbamos por primera vez y los primeros datos indican que la avalancha ha sido total. Es tan raro tener un médico en tu poblado en Senegal…

Lo dicho, en el próximo boletín información pormenorizada y los famosos relatos desde el corazón de nuestros voluntarios.

Abril 2016

INFORME DE PEPA CONEJOS

Esta vez nuestro trabajo se ha desarrollado en el País Bassari. En nuestra última expedición, encontramos esta zona especialmente deprimida y falta de atención. Como siempre, hemos contado en el equipo con 2 pediatras, 2 médicos de adultos, 2 enfermeras y 4 personas de apoyo (triaje, somatometría y registro informático). Bueno, esto por la parte española, por la parte senegalesa hemos contado con nuestro coordinador incondicional, Ambrosio y con Cheikh, el mejor conductor de Senegal. Junto a ellos, toda una batería de traductores, ayudantes, cocinero….. en fin, una delicia de equipo.

Los 4 primeros días trabajamos en Dindefelo (iban a ser 5, pero pillamos el día de referéndum nacional y todo el país se quedó con sus actividades paralizadas, para propios y extraños). El recibimiento fue mas cálido que nunca. Parte de las autoridades, incluido el nuevo enfermero, Dembelé, vinieron la noche de nuestra llegada a darnos la bienvenida al campamento. Estaban contentos de que estuviéramos allí, pero lo que realmente sentían era orgullo de pensar en lo que nos íbamos a encontrar: un dispensario impecable, recién pintado y organizado y con todo su personal ávido de trabajar y colaborar con nosotros.

También sospechaban que íbamos a encontrar mejor a la población, porque han hecho una gran sensibilización con el tema de la alimentación, y la huerta está funcionando muy bien. A falta de trabajar los datos objetivos recogidos, la impresión ha sido buena, mucho mejor que en otros viajes y, sobre todo, lo mas importante es la organización que he visto en el dispensario, las buenas ideas y las ganas de hacerlo bien!!!!!

Los datos numéricos de Dindefelo son: 303 adultos visitados, 197 niños y 78 curas. Total 578 personas atendidas. Hemos detectado 3 casos para el próximo programa quirúrgico y mandado 14 pacientes al hospital de Kedougou para ingreso, consulta, pruebas, intervención quirúrgica o como paso previo para acudir a un hospital mas especializado.

El trabajo ha sido una delicia, con una colaboración entre las dos partes como nunca la hemos tenido y desde la vuelta a España mantengo una comunicación fluida con el enfermero, para resolver cosas que quedaron pendientes y para informarme de como van los pacientes que mandamos al hospital. ENHORABUENA, DINDEFELO!!!!

Siguiente parada, Bandafassi y el honor de estrenar el campamento para voluntarios de Yakaar África. Seis cabañas perfectamente equipadas para alojarnos, inmersos en el poblado y cerca del dispensario… todo un lujo!!!!! Gracias a todos aquellos que han hecho posible este proyecto.

En el dispensario, la verdad, me sentí defraudada. Allí estaba solo el enfermero Mansaly y un estudiante de enfermería en prácticas. La sage femme se ha trasladado a otra localidad y todavía no la han sustituido y las matronas no se dejaron ver en ningún momento, así que nos repartimos las estancias y empezamos a trabajar, totalmente a nuestro aire, durante cuatro jornadas. Se visitaron 309 adultos, 172 niños y se hicieron 63 curas, total 544 personas atendidas. Detectamos 5 casos para el programa quirúrgico y canalizamos 8 pacientes al hospital (entre ellos dos niños con cardiopatía que están siendo estudiados en Dakar).

El trabajo fue satisfactorio para nosotros, pero echamos en falta las iniciativas y la ilusión por mejorar que vimos en Dindefelo. En general se vive un ambiente de apatía en todo el poblado que personalmente no comprendo, y me cuesta de aceptar, pues es el primer poblado de País Bassari que visité en mi primer viaje a Senegal y me enamoré de él… la verdad no sé lo que pasa con la granja, la huerta, el dispensario, el taller de costura…

Por último hicimos una sola jornada exprés en Thiabedji. Es un poblado grande que está a unos 45 minutos en coche de Bandafassi y del que normalmente acude mucha gente caminando. Por este motivo decidimos hacer un día intenso de trabajo para valorar las posibilidades que tenemos en próximos viajes. El problema es que no hay lugar para alojarnos, entonces hay que ir y venir todos los días desde el campamento del voluntario. No obstante lo tendremos que hacer, puesto que la demanda de atención es grande. Tienen un buen dispensario para acogernos en el trabajo.

Tuvimos los problemas habituales que se presentan cuando vamos por primera vez a un poblado. Avalancha de gente, personal de dispensario no preparado y… caos total. Aún así salimos victoriosos y atendimos 153 adultos, 168 niños y 17 curas, 338 personas atendidas en un solo día. Detectamos 3 casos para el programa quirúrgico. Nos marchamos de allí con un sabor agridulce ya que quedaron muchos pacientes por atender, pero el día llegó a su fin. Este poblado hay que incorporarlo con mas jornadas de trabajo en próximos viajes.

Y se acabó!…….el resumen sería esto:

  • 9 jornadas de trabajo

  • 1460 actos de salud realizados

  • mucha cooperación senegaleses-españoles

  • mucha, mucha satisfacción y orgullo

y ……PROYECTANDO YA EL SIGUIENTE VIAJE

Hay una cosa conmovedora que quiero compartir: pacientes que nos han consultado en misiones anteriores vienen a visitarnos cuando saben que estamos allí, quieren que sepamos lo bien que están y nos regalan su gran sonrisa. Gracias a todos.


INFORME DE BLAS CLOQUELL

PROGRAMA ADULTOS I

INTRODUCCIÓN:

Muchos de los pacientes visitados venían con múltiples dolencias, ello hace que el total de pacientes visitados no coincide con las posibles enfermedades detectadas. Pienso que el resultado final puede servir para planificar las necesidades de futuras misiones sanitarias tanto a nivel de cargas de trabajo como de la cantidad y tipo de medicación necesaria. En las patologías crónicas se les ha dado medicación para dos meses como máximo debido a la insuficiencia de medicamentos, y por la falta de fidelización de los pacientes cuando ya se intentó lo mismo hace 3 años y se repartió medicación para 6 meses. También se ha realizado un listado nominal de pacientes crónicos para su posible seguimiento en misiones sanitarias posteriores.

Los motivos de consulta se han subdividido en los tres puntos asistenciales. Muchos diagnósticos pueden ser erróneos debido a la escasez del tiempo necesario para realizar una buena anamnesis y exploración, a la falta de exploraciones complementarias, y a la relajación psicológica secundaria por falta de medios que imposibilitaba el futuro tratamiento de algunas patologías graves que se sospechaban.

RECOMENDACIONES:

A excepción del hierro, la medicación que se ha llevado ha sido muy insuficiente. Además algún medicamento no es el más adecuado por los efectos secundarios que producen como los antihipertensivos Amlodopino, que produjo edemas importantes en extremidades inferiores obligando al paciente a dejar la medicación y los betabloqueantes, que producen bradicardias e impotencia funcional. Es mejor llevar Enalapril y diuréticos. Otro medicamento cuestionado es la Amoxicilina/clavulánico por producir diarreas con mucha frecuencia, siendo mejor llevar sólo Amoxicilina, Doxiciclina y Septrim.

Así como otros años se hizo un listado de patologías que requieren tratamiento de forma continuada, este año también he confeccionado listado con pacientes adultos susceptibles de tratamiento quirúrgico, fundamentalmente a nivel de oftalmología.

A nivel oftalmológico, sería conveniente sondear la predisposición de alguna gran empresa de oftalmología. Debido a lo laborioso que resultaría este listado, son cerca de 140 pacientes, se remitirá en otro documento aparte en el caso de que sea solicitado por ser posible realizar las intervenciones quirúrgicas, al igual que se ha hecho con los pacientes infantiles. Previamente, convendría que los pacientes susceptibles de ser operados fueran revisados por el optometrista del hospital de Kedougou o un optometrista que aportara la propia empresa de oftalmólogos.

En pacientes crónicos de localidades con enfermeros responsables y con ganas de colaborar, como es el caso de Dindefelo, sería recomendable entregar a dicho enfermero la medicación de pacientes crónicos para que él sea el responsable se su distribución y administración. En los otros poblados se podría buscar a una persona responsable distinta del enfermero, pero no tengo claro si esto resolvería el problema o provocaría más conflictos.

La gran incidencia de patologías oculares secundarias a la exposición de luz solar tan intensa, recomiendan la distribución de gafas solares sin graduar. Al igual que se ha hecho con los cepillos de dientes, podrían organizarse campañas de recogida de gafas de sol. Ya en el poblado sería conveniente anotar a quién se le da, para evitar vengan a por ellas gente reincidente que no las necesita y las utiliza para venderlas posteriormente, tal y como, al parecer, ocurrió con algunos de los medicamentos antihipertensivos que se repartieron hace 3 años.

La gran cantidad de bocas catastróficas debidas a la rotura y ausencia de piezas dentarias por caries, hace conveniente sondear la existencia de equipos de dentistas, ONG o empresas, dispuestos a ir por los poblados para la extracción de los restos de dientes, tal y como ocurrió en el año 2013 con una ONG de dentistas vascos, y colaborar con ellos hasta donde se pueda.

INFORME DE IRENE BASTIDA

PROGRAMA ADULTOS II

Volver, Siempre volver. Como un sueño que se hace realidad, esta vez he sido parte de la misión sanitaria, que de nuevo vuelve al País Bassari. Esta vez 10 personas, casi todos repetidores, para algunos era la primera vez. Cada día con ánimo, esfuerzo, trabajo y sobre todo con mucho apoyo del equipo local de Yakaar África hemos desarrollado el plan establecido.

Las mañanas empezaban bien temprano, llegando al dispensario y como hormiguitas que ya tienen su tarea asignada nos dispersábamos y ocupábamos nuestro puesto de trabajo para empezar lo antes posible a atender a todo aquel que acudía para consultar. Las jornadas se desarrollaban con tranquilidad. A la vez el sol ascendía, el calor de justicia hacía más dura la tarea, pero nada que un poco de agua y la sonrisa de agradecimiento del siguiente paciente no pudiera paliar. Por las tardes continuábamos trabajando hasta la caída del sol, apurando la luz, intentando que todo el mundo quedase atendido.

Atendimos a pacientes de todas las edades, para mi sorpresa algo bastante difícil de concretar (la gran mayoría de la población no conoce con exactitud su edad). Con la ayuda de los traductores (Daniel, Buddy, Arouna, Diao), un poco de francés y nuestras ganas de aprender peul, cada día era más fácil y más dinámica la comunicación.

Los motivos de consultan han sido muy variados. Los más frecuentes: dolores osteomusculares (derivados del duro trabajo que desempeñan, principalmente las mujeres), problemas de visión (cataratas, secundarias al gran daño solar por exposición prolongada, las cuales ya se veían a edades muy tempranas), problemas dentales (caries, flemones, piezas en mal estado), infecciones (piel, urinarias, ginecológicas, respiratorias), problemas digestivos (estreñimiento, dispepsia, parasitosis). Detectamos algunos casos de hipertensión arterial, que se pusieron en conocimiento del personal sanitario local para su futuro seguimiento.

En Dindefelo, estuvimos 4 días. Fue para todos una grata sorpresa el estado del dispensario, limpieza y orden que la población agradece. Allí todo el equipo local ha trabajado con nosotros codo con codo, lo cual hizo esos días muy enriquecedores, acercándonos mucho más a las formas y costumbres de la población. Dispuesto a ayudar en todo lo que necesitábamos. Atendimos a tres personas en domicilio, una de ellas con tratamiento intravenoso durante los 4 días. Se realizaron 6 informes para derivación hospitalaria. Intervenimos un caso de cirugía menor, y colaboramos en la asistencia de un parto y atención al recién nacido.

En Bandafassi, estuvimos 4 días. En esta ocasión contábamos con algunas personas del equipo local, cuya colaboración agradecimos enormemente. Allí se atendieron a dos personas en domicilio, una de ellas precisó tratamiento intravenoso varios días. Se derivaron 5 casos a hospital.

En Thiabedji durante un día se atendió a toda la población posible. Fue todo un éxito el acudir allí, ya que de esta forma la población no necesitó desplazarse hasta Bandafassi. De tal manera que fue difícil organizar a los pacientes que esperaban para ser atendidos por la cantidad de personas que acudieron. Durante la jornada atendí en consulta 79 personas, algunos de ellos niños, para reforzar la consulta de pediatría que funcionó a un ritmo frenético durante toda la jornada. Aquí también se atendió a una persona en domicilio, afectado por una patología neurológica que le causaba una paraplejia y problemas derivados de la inmovilidad.

Han sido días de intenso trabajo, en los que hemos tratado de ayudar y colaborar lo máximo posible dentro de nuestras posibilidades, y creo que así ha sido. Lo que seguro que ha sucedido es que nos traemos una gran cantidad de historias, muchas sonrisas, palabras y miradas de agradecimiento; por otra parte, allí dejamos un trocito de nosotros, que nos mantendrá unidos a esa tierra y a su gente que nos ha enamorado.

INFORME DE MIRIAM SIELVA Y ERNESTO LAVERNIA

PROGRAMA PEDIATRÍA

Respecto a la expedición previa en la época húmeda, destaca la ausencia de casos de malaria. Los pacientes pediátricos en general presentan un mejor estado nutricional respecto a la anterior expedición, aunque se atendieron varios casos de desnutrición severa que requirieron manejo hospitalario. Llama la atención la diferencia importante en cuanto al estado nutricional entre los pacientes de Dindefelo y los de los poblados cercanos, presentando en estos un mayor grado de anemia, peor estado nutricional y de salud.

Persisten muchos casos de anemia la mayoría de probable origen nutricional aunque es posible que existan muchos casos de anemias hereditarias sin filiar. Sin embargo sí que pudimos observar un cambio de actitud favorable de los padres con respecto a la alimentación de los niños, aportándoles mayor variedad de nutrientes.

Uno de los objetivos de esta misión era la mejora de la higiene bucodental de la población general sobre todo de los pacientes pediátricos mediante el reparto de cepillos. Prácticamente todos los pacientes atendidos por otras causas presentaban múltiples caries dentales, por lo que consideramos que este es un punto sobre el que es importante incidir.

Persiste un elevado número de casos de tiña y sarna. También destaca el número de pacientes que acudían por dolor abdominal crónico y distensión abdominal, cuadro clínico altamente sugestivo de parasitosis intestinal.

Desde el gobierno y ministerio de sanidad de Senegal se ha implementado un programa de desparasitación mediante la entrega de medicación en colegios y casas particulares. No obstante, todos los niños atendidos fueron desparasitados, completando el tratamiento en aquellos casos altamente sospechosos de parasitosis intestinal.

PACIENTES ATENDIDOS QUE HAN PRECISADOS ATENCIÓN HOSPITALARIA

  • Lactante de 4 meses con desnutrición severa

  • Recién nacida de 14 días de vida con desnutrición severa por mala técnica alimentaria

  • Niño de 6 años con síndrome febril prolongado, anemia, síndrome constitucional y esplenomegalia ya atendido en la expedición previa

  • Niño de 2 años con anemia de 4 mg/dl que precisó transfusión de sangre

  • Niño de 6 años con luxación de cristalino y uveítis post-traumática

  • Parto dificultoso con reanimación neonatal (Apgar 3) en dispensario

  • Niña de 4 años con leucocoria bilateral y estrabismo

  • Niño de 5 años con crisis convulsivas de repetición

  • Niña de 5 años con exposición de tibia secundaria a celulitis

  • Neonato de 10 días de vida con sepsis clínica

  • Niña de 14 años con sospecha de cardiopatía con insuficiencia cardiaca estadio IV de la NYHA (diagnosticada finalmente de doble lesión mitral severa con dilatación de cavidades e hipertensión pulmonar severa). Ya conocida aunque no estudiada ante falta de recursos de los familiares.

  • Niño de 6 años con sospecha de cardiopatía congénita cianosante con insuficiencia cardiaca severa estadio IV de la NYHA y sospecha de síndrome de Eissenmenger. (diagnosticado de cardiopatía del espectro Tetralogía de Fallot con hipertensión pulmonar severa). Sin diagnóstico previo de sospecha ni valoración sanitaria previa.

INFORME DE ROSALÍA ROS

PROGRAMA ENFERMERÍA

En marzo-abril he vuelto con la misión sanitaria acompañada de Pepa al país Bassari. En la consulta de enfermería hemos visto un total de 158 curas entre los tres dispensarios.

En Dindefelo atendimos más casos que en Bandafassi, pero teniendo en cuenta que nos desplazamos un día desde Bandafassi a Thiabedji, pues se equipara. Ha sido muy positiva la visita a Dindefelo, donde Dembelé el nuevo enfermero y Pap que ayuda en el dispensario mostraron mucho interés en que viéramos algunas heridas que ellos ya estaban curando y evolucionan favorablemente. Atendimos 78 casos. Aprovechan-do la estrecha relación entre el equipo sanitario del dispensario y de la misión, el último día le dimos un registro de las curas más complejas que necesitan continuidad y para las que Yakaar África ha facilitado material. El dispensario estaba muy limpio, lo cual hizo nuestro trabajo más fácil sin olvidar que todos los que trabajan allí nos hicieron la estancia acogedora como siempre. Yo pude disfrutar de la sala de partos con la compañía de Danfaga enfermero en prácticas, chico entusiasta con el que he trabajado codo con codo, en el que he podido ver la preocupación por una cura en sus ojos, que me ha enseñado mucho vocabulario de peul, que me ha ayudado a sobrellevar el calor cuando sonreía tímido y al que he podido compartir pequeños trucos a la hora de administrar una intramuscular o canalizar una vía periférica para evitar dolor.

En Bandafassi acudieron 63 personas a curarse. El trato con el personal del dispensario ha sido más distante, salvando a Gerard en el triaje y seguro que alguien más me olvido, no se si por las fechas o por no estar Lucy, pero se ha notado.

Thiabedji ha sido un dispensario nuevo para nosotros, aunque al entrar Pepa nos dijo…”¿no os recuerda a Kagnout?” y si, tenía la impronta del edificio de la región de Casamance. El trabajo allí fue intenso, coordinado por Ambrosio y Cristina, seguidos de Pepa, Isa, Bego y Bea para que en pediatría, adultos y curas fluyesen las consultas en nuestras escasas horas allí. Por la mañana atendimos la mayoría de casos de curas, 14 de los 17 en total vistos.

Como en otras misiones, hemos tenido curas simples por cortes, caídas o quemaduras y otras que han requerido un seguimiento por estar infectadas o por la profundidad/extensión de la misma. Hemos colocado una escayola a un niño, quitado algún tapón de cera en niños que las madres decían que parecía que eran sordos, atendido varios casos de mastitis de distinta gravedad, en Bandafassi con antibioterapia intravenosa y curas mejoró, pero en Dindefelo una chica precisó limpieza quirúrgica en el hospital.

En octubre tuvimos el caso de un chico que se corto con un hacha y la sutura unía tejido desvitelizado, cuando nos fuimos estaba casi cerrada, cuando visitamos la escuela vino corriendo a saludarnos y levantó la muñeca curada. Esta vez en Bandafassi un hombre con una sutura en la rodilla tras una caída en moto no terminaba de cerrársele a pesar de tener tejido de granulación…nuevamente la sutura era un problema. Una señora añosa de Iwol que se cayó haciéndose una herida en tobillo que también habían suturado se estaba complicando. Esto me planteó una disyuntiva, ¿cuándo suturan en los dispensarios, saben el tiempo máximo que debe pasar desde que aparece la lesión? ¿Diferencian las suturas reabsorbibles de las que no?

Vinieron algunas heridas quirúrgicas o no, suturadas a las que se les había retirado los puntos y tenían dolor, nuestra sorpresa fue encontrar algún punto olvidado. En Dindefelo a Danfaga y Pap pude transmitirles mi preocupación y enseñarles la importancia de no cortar ambos cabos del nudo y que son diferentes de las suturas continuas, compartir con ellos distintas formas de hacer lo cual ha sido muy enriquecedor.

Hemos visto menos casos de tiña que en octubre o quizás no tan extensos, a los que se le ha dado tratamiento oral. No suele ser motivo de consulta, pero al ser atendidos por nuestros facultativos, los derivaban a la consulta de enfermería. Han sido frecuentes en adultos y niños las lesiones pruriginosas por sarna, que han precisado tratamiento tópico con explicación minuciosa de como deben aplicarlo por parte de nuestros amigos y traductores, se ha insistido en la importancia del higiene y el contacto con animales. Otras lesiones frecuentes son los «butones» (múltiples granos de picaduras de insectos infectadas al rascarse), esta vez ha habido menor incidencia y principalmente han sido en la población infantil.

Podemos concluir que igual que en las últimas veces y que siempre comentamos, los senegaleses en nuestra pequeña suma hacen una gran suma… responden muy bien a los tratamientos administrados o aplicados haciendo las curas agradecidas.

AGRADECIMIENTO DE PEPA CONEJOS

Al acabar esta misión sanitaria, el corazón me pide escribir estas letras: La mayoría de veces recibimos elogios acerca de nuestro trabajo y esfuerzo, también de los resultados, y todo resulta muy vistoso, como muy extraordinario y emocionante, pero desde la oportunidad que me ofrece este boletín, quiero dar unas GRACIAS ENORMES a todas las personas que colaboran en este maravilloso proyecto de una forma totalmente anónima, ya que ni siquiera son socios de Yakaar pero viven el sentimiento de la solidaridad de una forma profunda y muy directa y sobre todo con una gran confianza en la gente que nos desplazamos a Senegal.

Es por ello que tengo muchas ganas de enumerar a todas estas personas y espero que me lo permitáis. De verdad se lo merecen.

Gracias a todas mis compañeras del hospital por la ropa y juguetes; a los amigos de «gent de l’horta» por las sábanas, móviles, gafas; a Catxi, Mª Carmen y su amiga (maestras las tres) por la recogida de cepillos de dientes y la sensibilización en las escuelas; a mi excompañera y amiga Mª Jesús, que nos ha comprado todas las chuches; a Maricarmen que siempre me trae a casa toda la ropa de sus hijos y sus amiguitos; a Fina, por la recogida de material de curas; a Elisa, Fina y Marga, Mª José y Salva, Lola y su prima (que vive en EEUU) por su aportación económica, que nos permite comprar más medicación. Todas ellas son personas normales, trabajadoras, que viven su vida, pero que también piensan en los demás y sus necesidades. Por ello se merecen unas ENORMES GRACIAS.