Molino en Ndanday

ABRIL 2021

Khalipha Badji

MOLINO EN NDANDAY

Ndanday es un pueblo situado al oeste y a 1 km de Hamada Heri, donde sólo hay dos aulas. En este pueblo, la población vive principalmente de la agricultura y la ganadería. Y para la cría se suele recurrir a la pequeña ganadería que consiste principal-mente en ovejas, cabras, aves de corral y algunos pequeños rebaños de vacas. Durante el invierno, esta pequeña aldea permanece aislada de Thiabedji y del resto de Hamada Hery, donde la población se dedica al cultivo de alimentos diversificados compuestos por maíz, sorgo y cacahuetes. Así, esta cosecha sirve para alimentar a la población durante todo el año. Los hombres se ocupan del trabajo del campo y las mujeres del trabajo doméstico.

Sin embargo, las mujeres se enfrentan a muchas dificultades relacionadas con la transformación de los cereales crudos en productos acabados y en forma de bouille (consumo en el desayuno y la cena) la comida del mediodía y el cuscús.

Esta transformación la realizan las mujeres de forma manual y a golpe de pilón. Esto requiere mucho esfuerzo y tiempo. Las mujeres se levantan temprano por la mañana no sólo para ir a buscar agua, sino también para asegurar el riego y volver a machacar los cereales para terminar la jornada a las 14 horas. Por ello, Yakaar África ha decidido poner en marcha un proyecto de molino para ayudar a las valientes mujeres de Ndanday, comprándoles un molino de gasoil.

De este modo, las mujeres tendrán más tiempo para realizar otras tareas, como la horticultura, que requiere un gran esfuerzo físico. Para ello, se ha habilitado un lugar para la máquina.

Con la colaboración del jefe y de los jóvenes del pueblo, la obra está casi terminada y los habitantes esperan con impaciencia la llegada de su nuevo molino.

MAYO 2021

Khalipha Badji

En Ndiandaye el molino ya ha llegado y se ha instalado, y tal como estaba previsto, un joven está recibiendo un curso de formación de tres días, afortunadamente hay otro joven en el pueblo que ya sabe utilizarlo. Él es quien se hará cargo del nuevo Molino. Por parte de las mujeres, la alegría es inmensa, y el jefe de la aldea dio las gracias a Yakaar. Estas son sus palabras:

"Esta máquina nos permitirá dejar de usar el pilón durante 24 horas al día. Por fin podremos dedicarnos a otras ocupaciones durante el día, para ocuparnos plenamente de la huerta. Desde hace muchos años, aquí en Ndiandaye, las mujeres se dedican a las tareas domésticas todo el día, todos los días, durante todo el año. Pero hoy Yakaar África ha reducido los esfuerzos humanos tan dedicados al golpe del mortero en la época de las transformaciones cerealistas. Les damos las gracias, gracias por todo lo que han hecho desde la huerta hasta la obtención de este nuevo molino. Lo cuidaremos y haremos un buen uso de él. Gracias a Badji que siempre ha estado disponible para responder a las llamadas de las mujeres, le deseamos a él y a todo el personal de Yakaar cosas buenas. Le deseamos lo mejor a él y a todo el personal de Yakaar. Que Dios les cuide y les agradezco de todo corazón.

El pueblo realmente merecía conseguir este molino, dado su aislamiento y especialmente el mal estado de su pista de acceso durante la temporada de invierno. Esta máquina les permitirá sin duda reducir el esfuerzo humano de las mujeres, pero también obtener nuevas fuentes de ingresos.