Recogida de residuos en Bandafassi
Diciembre 2012
INFORME DE PAOLA MAESTRE
Bandafassi al igual que muchos poblados necesitan sin mucha demora un proyecto de basuras. Hay un árbol donde se reúnen los jóvenes todas las noches. Todos los días me levantaba y llenaba una bolsa de platico pequeña. A los pocos días opté por poner una nota en su lengua, colgada del árbol en la cual les pedía mantener esa zona limpia ya que a todos nos gustaba reunirnos allí, gracias por colaborar y funcionó: es la zona mas limpia y se nota con diferencia y más aun la sorpresa fue que cada 2 días alguien se encargaba de vaciar la bolsa y dejarla de nuevo en el árbol.
Noviembre 2013
INFORME DE CARMEN GUTIERREZ
En cuanto al posible proyecto de limpieza de Bandafassi se les explicó lo importante que es la higiene para la prevención de enfermedades. Hablamos de que Yakaar podría comprar los cubos o contenedores necesarios y ellos organizarían la infraestructura para llevar a cabo la recogida de basura. En la reunión nos comentaron que sería bueno la colocación de 4 grandes contenedores de un metro de altura, situados en el centro de salud, la mezquita, iglesia católica y escuela. En cada punto habrá un responsable de los contenedores. Cuando estuvieran llenos este responsable se encargaría de que se trasladasen a una zona fuera del poblado donde quemar los residuos. Se concretó que crearían un comité responsable de limpieza para coordinar con los responsables de los contenedores las actuaciones.
También hablamos de este proyecto con el director de la escuela, Tidiane Sidibe, que nos permitió darle a los niños del colegio unas charlas sobre limpieza e higiene y el compromiso de los profesores de continuar en las aulas concienciando a los niños de la necesidad de tener limpio el pueblo para prevenir enfermedades.
Dando continuidad a lo hecho por otros voluntarios en la limpieza y concienciación de la población, cuando entregamos a los niños ropa o juguetes les pedimos que a cambio recogieran basura por el pueblo y nos las trajeran en bolsas. Fue todo un éxito.
Irene se encargaría, cuando nos fuésemos, de seguir adelante con el proyecto y durante el resto del viaje nos llamó varias veces para decirnos que estaba haciendo juegos de concienciación y sensibilización con los niños y que además habló con los responsables de los puntos de ubicación de los contenedores que le informaron de que en la iglesia católica no solía haber mucha gente, por lo que se decidió ponerlo en la tienda del pueblo, por la cantidad de basura que se genera en torno a ella y la gran cantidad de gente que se mueve en sus alrededores.
Personalmente, aunque los veo muy implicados de palabra en el proyecto, reconozco que tengo dudas ya que si no se implican en algo tan fundamental como es su alimentación en el tema de la granja, me cuesta creer, aunque me gustaría equivocarme, que en algo que supone una rutina diaria diferente sean capaces de adaptarse. Lo veo más a largo plazo si realmente se consigue trabajar en la concienciación de la gente más joven. De todas formas el coste inicial del proyecto no es más que comprar cuatro cubos, así que ¿por qué no intentarlo?
Marzo 2021
José María Piñero
JORNADA DE LIMPIEZA EN BANDAFASSI
Hoy tenemos jornada de limpieza en Bandafassi. La verdad es que el pueblo está bastante sucio lleno de papeles y plásticos incluso en sus “avenidas” principales. El ayuntamiento ha querido aprovechar nuestra presencia para convocar una jornada de limpieza, ya que estima que con nuestro apoyo la convocatoria tendrá mucho más éxito.
El comienzo de la jornada es decep-cionante. Solo nuestro equipo formado por Demba, Mor, Alpha y el técnico Cheikh Tidiane se presentan en la puerta del ayuntamiento para comenzar la faena. Nuestro equipo está bien preparado ya que hemos comprado 3 rastrillos y una pala. Poco a poco, con casi una hora de retraso, se van incorporando mujeres a la faena. Ellas solo traen las escobillas esas sin palo tan habituales en África. La cosa no promete grandes resultados.
La verdad es que al final la jornada se va animando. Algunos jóvenes ayudan, muy pocos, algunos mayores también y además dotados con rastrillo, se nota que las herramientas deben ser cosa de hombres y, al final, entre todos se monta un pequeño ejército. En todo caso, la presencia de mujeres es muy mayoritaria, los hombres no dejan de ser mera anécdota.
El método de limpieza no me convence mucho, ya que lo que se hace es agrupar los desechos en pequeños montones que se van quemando sobre la marcha. Nadie ha previsto un carro o motocarro para recoger todos los residuos y llevarlos a quemar a algún lugar adecuado. Al final entre el polvo levantado por las escobillas y el fuego de los montoncitos, se monta un escenario de niebla bastante irrespirable. Pero poco a poco se va consiguiendo el objetivo.
Hemos empezado en los alrededores del ayuntamiento y hemos limpiado hasta la zona del árbol ceremonial, atravesando la avenida principal de poblado y las plazas, si es que se les puede llamar tal cosa, adyacentes.
El ayuntamiento nos ha repartido bebidas a los trabajadores, fundamentalmente aguas y algunos refrescos y eso parece haber sido motivación suficiente para las mujeres presentes. Yo he intentado limpiar algún trozo, puro postureo, y he acabado con las piernas a rayas debido a que las pajas secas de esta zona en las que se esconden
los papeles y plásticos son realmente duras y rascan de verdad. Eso de que tenemos la piel muy fina debe ser cierto.