SIN SOSTEN NO HAY PARAISO

Recientemente, echando un vistazo a uno de los libros de Grau, altamente recomendables, por cierto, llegué al capítulo XIX, titulado: Las piezas sin sostén. En él, el autor explica mucho mejor que yo aquí, un principio básico del ajedrez: todas las piezas deben estar sostenidas. Grau afirma que las piezas adquieren una potencialidad extraordinaria cuando cooperan, cuando se sostienen unas a otras, con el viejo principio de que el todo es mayor que la suma de las partes.

Por lógica, si eso es bueno, lo contrario debe de ser malo. El consejo es sencillo. En cualquier posición hay que tener siempre el ojo atento a piezas indefensas, propias y ajenas, porque ello puede ser la idea fundacional de una combinación que permita ganar material que incline la balanza de la partida hacia un lado. Así pues recuerda: sin sostén no hay paraíso.

Nosotros, como aficionados al ajedrez, debemos tener la mentalización de buscar siempre piezas indefensas sobre las que podamos calcular la posibilidad de realizar una secuencia ganadora.

El siguiente ejemplo, sencillísimo, (hay que atender a aficionados de todos los niveles) se produjo en una partida personal reciente. En dicha partida llegamos tras la jugada de las negras: Cc5 a la posición siguiente:

En ella, las blancas tienen una sencilla jugada que pone en práctica la idea anterior. El alfil de e7 está sin sostén. Por tanto, no hay paraíso para él. La jugada exacta es Axh7+, porque el caballo está “clavado”. Así se permite ganar un peón.

Más interesante y serio es el diagrama siguiente.

En él, a simple vista se aprecia que las negras tienen su dama y sus dos torres sin sostén. Además, el rey está al aire, y ambas damas están en la misma diagonal. La idea de la descubierta asoma rápido al cerebro del aficionado, la cuestión es cómo pueden las blancas, que juegan, sentenciar la partida. Anticipo que yo no fui capaz de encontrar la maniobra exacta, que no es difícil, pero me equivoqué. La que vi, a golpe de vista fue: 1. Dxh6+ Rxh6; 2. Cg8+, Rg7; 3. Cxe7 y han recuperado un peón pero ni mucho menos tienen la partida ganada. Existe otra maniobra mucho más contundente. ¿Cuál? Es tu turno.