PRODUCTOS DESECHABLES

HECHOS

A diario utilizamos productos de usar y tirar, fabricados con materias primas de alta calidad. Algunos usos son del todo inapropiados. Por ejemplo, el uso de pulpa de madera para fabricar papel higiénico cuando, en realidad, se podría hacer con papel reciclado.

Muchos productos desechables son absolutamente innecesarios; no sólo provocan la necesidad de programas especiales de recogida, sino que también obligan a los fabricantes a utilizar materias primas que podrían usarse en productos más necesarios, o incluso no usarse. Mientras que algunos objetos son fáciles de identificar como desechables hay otros que, aunque presumen de no serlo, no son duraderos debido a la mala calidad de sus materiales y su diseño deficiente. El estilo de vida de "usar y tirar" se consolida cada vez más en los países industrializados. Los fabricantes ya no almacenan las piezas de repuesto, a menos que se encuentre una pieza idéntica en algún desguace o se extraiga de otra máquina semejante, los aparatos que se estropean acaban convirtiéndose en simple chatarra.

REDUCIR, REUTILIZAR, RECICLAR

Reduzca o anule el consumo de objetos desechables. Compre productos de primera calidad. Quizá cuesten más pero seguro que durarán más. Asegúrese de que tienen garantía y servicio de reparación. Es fundamental limpiar regularmente los aparatos para alargar su duración. Usted mismo puede hacer pequeñas reparaciones pero, en caso de averías graves, contacte con un profesional. Los aparatos que ya no sirvan, deposítelos en los lugares adecuados. No los abandone en cualquier parte.