HECHOS
Las cocinas eléctricas con horno incluido son uno de los mayores consumidores de energía en el hogar; los hornos microondas reducen el consumo, puesto que emplean menos tiempo. Un horno de gas utiliza menos energía primaria que uno eléctrico. Una cocina de gas gasta hasta tres veces menos que una eléctrica. Las cocinas y los hornos están catalogados como electrodomésticos y son fabricados con acero reciclado. Reacondicionarlos y procurar que duren lo más posible ahorra mucha más energía que demantelarlos y vender la chatarra.
REDUCIR, REUTILIZAR, RECICLAR
Cuando tenga encendida la cocina, aproveche la energía cocinando varios platos a la vez. Las tostadoras consumen menos energía que los grill eléctricos. Aproveche al máximo los electrodomésticos y no se deshaga de ellos hasta que dejen de funcionar. Cuando adquiera una cocina nueva compruebe que en las etiquetas hay información sobre el consumo energético. Los aparatos viejos pueden venderse como chatarra, llevarlos a una tienda de segunda mano o donarlos a una organización benéfica.