CHATARRA

HECHOS

El comercio de chatarra es un buen negocio que suministra materiales de segunda mano para su reutilización o reciclaje. La chatarra es un recurso importante, sobre todo porque recorta el gasto de materias primas y el de energía empleado en procesos como la fabricación del acero. En el Reino Unido, el reciclaje de materiales ferrrosos supone un ahorro anual de diez millones de toneladas de materias primas. Diez millones de toneladas menos que acaban en el vertedero y mil cuatrocientos millones de litros de petróleo ahorrados. Cada año se procesan cerca de dos millones de vehículos y más de cinco millones de electrodomésticos.

Los coches viejos, el material de construcción y los electrodomésticos (cocinas, hornos, lavadoras, neveras) son una constante fuente de chatarra de hierro y acero. El aluminio alcanza un precio muy alto debido a la gran demanda. También el cobre y el latón. Los metales aleados apenas son apreciados en el mercado. Algunos chatarreros aceptan objetos que no son de metal, como tejidos (ver lana y productos de lana), para revenderlos a la industria textil. Los pequeños comerciantes de chatarra compran directamente a los particulares y a los "traperos", y venden todo el material ya separado a las empresas que tienen contratos regulares con la industria del acero.

En general, el precio de los materiales no refleja su coste social. Por ejemplo, los efectos medioambientales de la extracción y la fundición del metal, así como la energía que se gasta en su procesamiento. La reutilización y el reciclaje siempre ayudan a recortar esos efectos. No toda la chatarra procede del consumo o de los restos obsoletos (éste es el tipo de chatarra más difícil de reciclar por estar contaminada con otros materiales) o de la producción o de los residuos de fábrica, también la chatarra "casera" ofrece garantías de calidad y es fácil de reciclar.

REDUCIR, REUTILIZAR, RECICLAR

Si tiene conocimientos de mecánica, despiece los motores viejos o los aparatos que ya no le sirvan. Guarde las piezas que pueda aprovechar y el resto déselo al chatarrero. Si necesita piezas de recambio, busque en las chatarrerías. También puede comprar directamente a los "traperos" que recorren las calles.

Si está haciendo reparaciones en casa, será bueno que se dé una vuelta por los centros de recuperación o subastas, donde encontrará madera de buena calidad, materiales de construcción y fijadores. Los precios son mucho más bajos que en los almacenes y la calidad es, en muchos casos, superior.