LATAS DE REFRESCO
HECHOS
Las latas de comida y bebida se hacen con hojalata de acero, aluminio o mezcla de ambos. Los índices de reciclaje varían según sean de un tipo o de otro. Cuatro de cada cinco latas de refresco que se fabrican en el mundo son de aluminio y sólo el 50% se recupera para su reciclaje. En Estados Unidos, cerca del 90% de las latas de refresco son de aluminio y en 1989 se alcanzó un reciclaje del 60%. En dicho país se utilizan a diario tantas latas de acero como las necesarias para construir una cañería desde Los Angeles a Nueva York, y viceversa. En 1991 se reciclaba el 34% de las latas de acero (una de cada tres). En comparación, en el Reino Unido se recicla el 10% de los doce mil millones de latas que se usan cada año. Los Países Bajos y Alemania reciclan cerca del 45% de sus latas de acero y en Francia se alcanzó el 50% de reciclaje durante 1995. Australia es uno de los países con mayores índices de reciclaje de latas alcanzando un ratio del 62%. La capacidad de reciclaje del acero y el aluminio aún puede incrementarse en todo el mundo.
En la fabricación de 1000 latas de acero (con una media de reciclaje del 30%) se consumen 64 kg de hierro, 25 kg de carbón, 0,9 metros cúbicos de agua y se desprenden 170 kg de dióxido de carbono que van a parar a la atmósfera.
Pero el reciclaje no es la única forma forma de ahorrar recursos. La mejor estrategia será aquella que evite que las latas acaben en los vertederos de residuos sólidos, lo cual implica una reducción en la fabricación de este tipo de envases.
REDUCIR, REUTILIZAR, RECICLAR
En los paises en vías de desarrollo, el metal es un recurso muy valioso y las latas se reutilizan continuamente para la fabricación de otros objetos: lámparas de aceite, embudos, envases para el agua o cajas de metal.
Si no puede comprar productos en envases rellenables o retornables intente reciclar el mayor número de latas posible. Identifique las latas de acero y las de aluminio y sepárelas. Las latas de comida suelen ser de acero y las de bebida de aluminio.