CFC

HECHOS

El gas CFC (Clorofluorocarbono) está prohibido, tanto su fabricación como el consumo. Durante décadas se utilizó como un maravilloso propelente y parte básica de los circuitos de los productos de la industria del frío. Hay varias clases, pero todas devoran la capa de ozono (que protege al planeta de las radiaciones ultravioletas del Sol, filtrándolas). Esta desastrosa capacidad del CFC se descubrió hace muchos años, pero hasta hace muy poco tiempo no se han tomado medidas radicales para impedirlo.

No tire ningún aparato que contenga CFC (frigoríficos, aire acondicionado, extintores) , intente que sea extraído antes de que pase a formar parte de la atmósfera; su poder destructor de la capa de ozono se mantendrá operativo durante décadas, muchas veces durante más de 100 años, al ser un gas muy estable que poco a poco se eleva hasta reaccionar con el ozono estratosférico (ver frigoríficos y aerosoles).