BENDICIÓN  A  TRAVÉS DE MARÍA 

Enseñanzas,

ESTUDIO Y PRÁCTICA


para profundizar la Hora 1

Jesús se Despide de Su Madre Santísima

De los escritos de la S. D. Luisa PiccarretaVol. 14-40 (1-4) Julio 6, 1922 

Bendición de Jesús a su Mamá...  


Estaba pensando y acompañando a Jesús en la hora de la Pasión cuando fue ante la Divina Mamá para pedirle su santa bendición, (Hora 1 de su Pasión)  y mi dulcísimo Jesús en mi interior me ha dicho:

“Hija mía, antes de mi Pasión quise bendecir a mi Mamá y ser bendecido por Ella, pero no fue únicamente a mi Mamá a quien bendije, sino a todas las criaturas, no sólo animadas sino también inanimadas; vi a las criaturas débiles, cubiertas de llagas, pobres, mi corazón tuvo un latido de dolor y de tierna compasión y dije:  

‘¡Pobre humanidad, cómo estás decaída, quiero bendecirte a fin de que resurjas de tu decaimiento;

mi bendición imprima en ti el triple sello de

 la potencia, de la sabiduría y del amor de las Tres Divinas Personas 

y te restituya la fuerza, te sane y te enriquezca, 

y para circundarte de defensas

bendigo todas las cosas creadas por Mí, a fin de que las recibas bendecidas por Mí:  te bendigo la luz, el aire, el agua, el fuego, el alimento, a fin de que quedes como abismada y cubierta con mis bendiciones, pero como tú no las merecías, por eso quise bendecir a mi Mamá, sirviéndome de Ella como canal para hacer llegar a ti mis bendiciones ”.  


Y así como me correspondió mi Mamá con sus bendiciones, 

así quiero que las criaturas me correspondan con sus bendiciones; pero, ¡ay de Mí!, en vez de correspondencia de bendiciones, me corresponden con ofensas y maldiciones, por eso hija mía, 

entra en mi Querer, y poniéndote sobre todas las cosas creadas sella todas con las bendiciones que todos me deben, y trae a mi doliente y tierno corazón las bendiciones de todos”.

Después de haber hecho esto (Luisa), como para recompensarme me ha dicho:

“Amada hija mía, te bendigo en modo especial, te bendigo el corazón, la mente, el movimiento, la palabra, el respiro, toda y todo te bendigo”.


Fiat Divina Voluntad