Relato Viaje a West Timor, Flores y Sumba

Viaje del  23  de  Agosto al   9  de  Septiembre  de 2011

 WEST TIMOR

 

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Día 1 – Bali-(WEST TIMOR) Kupang-Soe

Empezamos el viaje a las principales islas del este de Nusa Tenggara con el vuelo diario de las 11’00 am de Garuda Indonesia desde Bali a Kupang (692.000 IDR), comprado ayer en el mismo aeropuerto de Bali.

WEST TIMOR. De la parte occidental de la isla de Timor (la parte oriental -Timor Leste- se independizó de Indonesia en 2002) nos atraían especialmente los pueblos ancestrales del interior de la isla, todavía poco conocidos y muy poco visitados. Lo más práctico es organizar su visita desde dos núcleos de población que disponen de alojamiento: Soe y Kefamenanu (Kefa). También vale la pena intentar coincidir con al menos un Día de Mercado de algún poblado de la zona para poder ver todo el mercadeo rural, el colorido y la curiosidad –todavía- de algunos aldeanos en ver a un occidental. De su capital, Kupang, es de rigor montarse en alguno de sus bemos para, probablemente, ensordecerse con la música máquina puesta a todo volumen. La puesta de sol desde el bemo terminal e ir a cenar al cercano y animado Pasar Malam también son muy recomendables.

En el aeropuerto de Kupang sondeo los vuelos y precios a Flores (Ende y Maumere) y Sumba (Waingapu). Aseguro el vuelo a Maumere (490.000 IDR) con Batavia air para dentro de 5 días. Sobre la 1 pm salgo de El Tari airport. Para aprovechar entero el día de mañana –y como habrá que volver a Kupang de todas maneras- la idea es ir a la estación de bus para tomar un bus a Soe y dormir hoy allí. Pacto con un taxi (30.000 IDR) para que me lleve al Oebobo Terminal. En el Terminal digo “Soe” y me dirigen a un bus que se supone sale para allí –de hecho era el único que había en ese momento en la estación-. El bus en cuestión primero irá a un restaurante donde pararemos a comer. Aprovecho yo también para saborear el clásico plato del día que tendrán en casi todas partes: una gran porción de arroz blanco, con alguna verdura, quizás huevo y un poco de carne con salsa. Al ir a pagar me señalan al conductor, que parece que ya lo ha pagado ¿?. Casi una hora después de llegar al restaurante salimos ¿para Soe?. No, primero pasaremos por la casa del conductor –o de alguien conocido- para cargar cosas en el techo del bus. Después iremos hacia una calle de Kupang donde el bus se para, y habrá que esperar a que se llene para salir. Suben unos estudiantes universitarios y uno se acercará para practicar un poco de inglés mientras esperamos. Por supuesto, ni el conductor ni su ayudante entendían ni hablaban una palabra de inglés. El ayudante intentó varias veces comunicarse conmigo. Incluso llamó con el móvil del conductor a alguien en Soe –que se supone tenía un hotel- pero tampoco nos llegamos a entender. Cerca de las 4 pm salimos por fin para Soe (20.000 IDR). El paisaje es bastante seco, no especialmente espectacular. Anochecerá en ruta. Hacia la parte final se sube un tipo al bus y empieza a hablarme bastante bien en inglés. Se intenta vender como guía para mañana, pero yo le voy dando largas. Llegamos a Soe. No se ve ni distingue nada con la escasa luz que hay en las calles. El bus va dejando a gente y en una de las paradas el improvisado guía me aconseja bajar, ya que se supone que hay una buena opción de alojamiento. Le hago caso. El hotel en cuestión se ve bastante básico. Los que lo llevan no hablan nada de inglés pero se muestran en un papelito las tarifas del hotel. A pesar de ello, el guía, que se había bajado conmigo, me decía su particular precio de habitación –casi doblando la tarifa expuesta-. Me despido cordialmente de él. De todas maneras, como no me convence demasiado el hotel, le pregunto a un Ojek para ir al Nope Homestay que sale en la Lonely. No me entenderá hasta que le digo, literalmente, “Pae Nope”. Me lleva, levantando dos dedos, por 2000 IDR. Llegamos –estaba cerca- y sale el Sr. Pae Nope, que habla un perfecto inglés -ha vivido en Darwin durante años según la Lonely-  y me dice que tiene su bungalow disponible (100.000 IDR). También parece básico y la ducha a cubos con agua fría no es que apetezca mucho teniendo en cuenta el fresquito que hace en Soe al ponerse el sol –está a 800 metros de altura-, pero ya opto por quedarme aquí. Como no tengo billetes pequeños le pido que le adelante al Ojek los 2000 IDR, pero él dice que el mínimo son 5000 IDR. Pues vale. Para cenar, el Rumah Makan Favorite es la única y recomendable cercana opción (Mee Goreng + coca cola 16.000 IDR). Tras cenar, me indicaron un lugar donde es posible conectarse a Internet. Conexión aceptable (5000 IDR, hora).

 Día 2 –  Soe-Niki Niki-Oinlasi-Boti-Niki Niki-Kefamenanu

Mientras tomo el desayuno en la casa del Sr. Nope, éste me intenta vender un Tour de medio día por la zona: me llevaría al pueblo de Nome y luego a Niki Niki, que hoy miércoles celebraba su Día de Mercado, y me traería de vuelta –o me podía dejar para seguir camino en Niki Niki- por 350.000 IDR. No incluía el poblado de Boti, que según la guía parecía el pueblo más tradicional de la zona. Como lo que incluía su Tour puede uno hacerlo con transporte público, y además yo quería ir a Boti, le digo que intentaré ir por mi cuenta. Como no sé a qué hora volveré le pido si puedo dejarle la mochila grande. Me contesta que no, que en la casa vive su madre y no puede dejarle cosas ¿?. Podría haberme quedado una noche más en su cutre bungalow y así dejar allí la mochila, pero me lo pienso mejor y ahora prefiero no estar forzado a volver a Soe. Me voy con el equipaje.

 

Visita POBLADOS alrededor de SOE

Bajando a la carretera principal de Soe, a unos 200-300 metros hacia la derecha está el punto desde donde salen los bemos a Niki Niki (5000 IDR), que queda a 34 km. A mitad de camino está el desvío al poblado de Nome –queda a 1 km de la carretera-, pero como voy cargado prefiero dejar su posible visita para más tarde. Llegamos a Niki Niki, cuyo Día de Mercado parecía estar en plena ebullición. Hay una tienda de Western Union donde intento preguntarles si hay algún lugar para dormir en el pueblo y así dejar el equipaje. Me dicen que no, pero no tienen inconveniente en que les deje la mochila grande. Paseo por el Mercado y soy el centro de atención. Me saludan y me sonríen. Hay algunos lugareños que visten tradicionales Ikat sarongs. Algunos tienen tanta curiosidad que incluso me siguen un rato. No les importa que les haga fotos. Al rato de pasear, un tipo que habla algo de inglés se interesa por mí. Le digo que tengo pensado ir al poblado de Boti, y le pregunto si conoce a algún ojek que entienda algo de inglés. Me dice que me llevarían por 200.000 IDR. Le digo que ya me lo pensaré y me baja enseguida a 150.000 IDR. Me lo seguiré pensando. En la carretera hay muchos ojeks esperando clientes. Le digo a uno “Boti”. Se corre la voz que quiero ir a Boti. Un hombre me dice que le siga –nos seguirán bastantes curiosos- y me lleva hasta un ojek, que se supone puede llevarme Boti. Para decirme el precio de ir y volver de Boti me piden un bolígrafo y escriben en la palma de la mano 80.000 IDR. Aceptaré.

Hay un largo camino a Boti. En la ida pasamos primero por Oinlasi. En este poblado –Día de Mercado el martes- se ven las tradicionales casas Ume Kebubu que utilizan los locales de la etnia Dawan. Le digo  al Ojek que pare y le pido a la propietaria si puedo hacer alguna foto. Ella está contenta que me interese por su casa. Desde Oinlasi ya tomaremos caminos de tierra e iremos subiendo los 12 km que les separan. Llegamos a Boti. En este aislado pueblo se supone que siguen rituales animistas y su Rey mantiene las estrictas leyes del Adat. Hay que abrir y  cerrar la valla para entrar. El chico del Ojek me hace de guía y me acompaña a la Casa del Rey. Se ven banderas en el camino. 

El Rey no está, pero no hay inconveniente en que visite el poblado. Hay más Ume Kebubu, en torno a un patio donde secan los instrumentos de cocina, y veo un par de mujeres tejiendo. Viene una chica y me invita a sentarme en una especie de recepción que tienen preparada. Me traen té y frutas secas. Pregunto si puedo entrar en los aposentos del Rey y no hay ningún problema. Sacarán el libro para registrarme y, como es de rigor, hago la voluntaria donación. En todo momento han sido muy atentos y no han pedido nada. Para bajar a Niki Niki el Ojek tomará un camino más recto que en la ida. Es un descenso que en buena parte es casi un sendero. Veremos bastantes aldeanos caminando por él transportando su carga en la cabeza. Parece que estamos en el Timor profundo. Pasaremos por una zona que ha habido un desprendimiento. Mirando el precipicio cruzamos la montaña desprendida por un sendero que han habilitado, yo a pie y el Ojek como puede con la moto. Llegamos sobre las 3 pm a Niki Niki. Ha sido una excursión cansada pero muy intensa. Ha valido la pena.

 

Tras la visita de Boti –se supone el poblado más tradicional de la zona- no me apetece demasiado retroceder y visitar Nome. Opto por visitar las Tumbas Reales y los dos Palacios que comenta la Lonely hay en Niki Niki y luego tomar un bus para que me lleve hasta Kefa y tener disponible el día entero de mañana. El Ojek que me ha llevado a Boti no entiende Palace ni Royal Tombs pero sí al mencionar “Rajah Nope”. El Palacio en cuestión es una bonita casa en la que viven –supongo- los descendientes del Rajah Nope. Nada más entrar me van a buscar el libro de registro y me quieren invitar a tomar el té, pero me vale con una rápida mirada del interior de la casa. Las Tumbas Reales supongo debían ser las tumbas de piedra que se veían frente a la casa.

Frente al Mercado de Niki Niki, en la carretera, se van parando los buses para dejar o recoger pasajeros. Pronto pasa un bus que va hasta Atambua y, por tanto, puede dejarme en Kefa (15.000 IDR). Me dejará en un cruce frente al Hotel Livero (250.000/300.000 IDR) con una bonita fachada, habitación grande y lo mejor, una muy deseada ducha de agua caliente. Me quedaré aquí. Al caer la tarde, al lado del hotel se ponen muchos puestecitos vendiendo pescado. Todos querían que les hiciese la foto a su tenderete. Para cenar cerca sólo vi la opción de algún pequeño restaurante local con el plato del día (6.000 IDR). En el hotel trabajaba un chico que hablaba bastante bien inglés. Me indicó un lugar cercano para conectarme a internet.

Día 3 – Kefa-Maubesi-Temkessi-Kefa-Kupang

Después de desayunar aprovecho que el chico que habla inglés estaba por el hotel para que le diga a un ojek que me lleve a alguna Colonial Church de Kefa y luego me deje en el Terminal (4000 IDR). De la Iglesia Colonial portuguesa queda un poco su estructura. Al lado han construido una gran Iglesia Moderna, que es la que deben utilizar actualmente para dar los Servicios a la gran comunidad cristiana de la zona.

 

Visita POBLADOS alrededor de KEFAMENANU

El objetivo principal es Temkessi, a 50 km de Kefa, que la Lonely lo pinta como el poblado más aislado y mejor preservado de Timor Occidental. Para ir en transporte público, teóricamente, hay buses o bemos que llegan hasta Manufui y para los últimos 8 km hasta Temkessi es cuestión de pillar un Ojek; pero en la misma carretera hay un par de paradas que pueden ser interesantes: Maubesi, por ser hoy jueves su Día de Mercado, y la Gua Santa Maria, una cueva de piedra caliza con una estatua de la Virgen Maria y muchos murciélagos dentro. 

En el Terminal pregunto por un bus o bemo a Maubesi. Parece que de momento no sale ninguno y hay que esperar. Se me acerca un chico que habla inglés para saber qué pienso hacer hoy. Al saberlo y comentárselo a la peña que estaba por allí, parece que le dicen que hay un grupo de españoles que van a ir hoy con un coche a Temkessi. Me dice que se va a buscarlos y que en quince minutos vuelve. Sobre la media hora parece que hay un bemo que va a salir para Maubesi (5000 IDR) y me subo. Primero irá al Mercado de Kefa a dejar a los pasajeros que le quedaban, y en pocos  minutos saldrá para Maubesi, a 19 km de Kefa. En una media hora llegamos. Hay mucha gente en su Día de Mercado aunque no se ve tanto colorido como el de ayer en Niki Niki. Doy unas vueltas, hago alguna foto y voy a la carretera para subirme al primer bemo que vaya hacia Manufui. Por aquellas casualidades veo al chico que antes me había hablado en el Terminal y al grupo de ¿españoles? que iban a subirse a su bemo privado. Realmente era una familia francesa con la pareja y sus tres hijos. El chico del Terminal –que se les había enganchado como guía- me dice que hable con el hombre y que vaya con ellos. Me dice el francés que 50.000 IDR para compartir el transporte y que puedo ir con ellos. Van también a Temkessi y a la Gua Santa Maria. Está claro que voy a ganar tiempo y acepto.

Contándonos nuestros respectivos viajes llegamos a Manufui. A partir de aquí ya se coge un camino de tierra que empieza a ascender. Durante varios kilómetros la carretera va por encima del páramo. Vamos muy despacio porque a veces es un bache continuo (no me puedo estar de pensar que por aquí en un Ojek se va mucho más cómodo). Hay muy buenas y amplias vistas. Paramos una vez para hacer fotos. A un lado queda el territorio de Oecussi perteneciente a East Timor. “Mismo paisaje, misma gente pero diferente país”, nos dice el guía.

Llegamos a la base de la colina donde está el poblado de Temkessi. El guía, antes de subir, ya intenta marcar los importes de la donación. Primero aparece una casa donde está la mamma donde vive la más anciana del pueblo. Luego vas subiendo  la colina y se van viendo otras casas tradicionales hasta llegar al punto de recepción donde te sacan el libro de registro. También hay en otra casa un par de mujeres tejiendo. No sé si fue por el guía o por la mujer que llevaba el cotarro en el poblado, pero en este pueblo me dio la sensación de empezar a estar un poquito acostumbrados a los turistas y a sus rupias. De todas maneras, vale la pena llegar hasta aquí.

En el camino de vuelta a Kefa pararemos en la Gua Santa Maria. En la base de la colina donde está la cueva ya hay un par de estatuas religiosas. Subimos las escaleras que hay para llegar a la entrada de la cueva y… hay una verja con un candado; o sea, que no podremos entrar a su interior. Sin más novedad seguimos camino hacia Kefa, dejándome en mi hotel alrededor de las 4 pm.

Aunque sean más de 5 horas volver directamente a Kupang, como tampoco me queda ningún atractivo más a visitar por Kefa, tomaré ahora mismo un bus de regreso hacia la capital de West Timor (35.000 IDR) y así también puedo aprovechar entero el día de mañana. Viaje sin novedad, menos cansado del previsto. Al llegar a Kupang, como ya era tarde, los del bus se dedicaron a ir dejando a todos los pasajeros en su destino, como si fuera un taxi, vaya. Al preguntarme a mí, no entendieron Lavalon pero si Maya hotel, que está en la misma Jalan Sumatera. Me dejan de los últimos y llego al Maya Beach Hotel (175.000 IDR) pasadas las 10’30 pm. No me gusta la habitación, pero sólo veo las luces del Pantai Timor, que es más caro y la habitación tampoco me convence. En la poca luz que hay en la calle no se distingue ninguno más. Me quedaré esta noche en el Maya.

 Día 4 – Kupang-Pulau Semau-Kupang

Tras desayunar voy a empaquetar el equipaje para cambiarme de hotel. La anécdota la pone un empleado de la limpieza del hotel, cuando noto que entra en mi habitación por una de las ventanas que no cerraba bien. Me callo y casi se muere del susto al verme dentro, pegado a la pared, mirándole fijamente. Se me arrodilló como si le tuviese que perdonar la vida. Al hacer el check out comenté el incidente al dueño del hotel, pero contestándome un yes,yes creo que no me llegó a entender ni una palabra. Voy al cercano Lavalon B&B (55.000 IDR), muy básico y con baño compartido, pero es la referencia mochilera de Kupang y hoy ya me quedaré aquí.

Como en mi recorrido por el interior de Timor había podido enlazar en el mismo día las conexiones en bus al siguiente destino, tenía un día añadido en Kupang. Como no hay grandes atractivos en la ciudad de Kupang decido visitar alguna isla cercana. Elijo Pulau Semau, fácilmente accesible y pequeña para una excursión de un día. La más conocida, más grande y más alejada Pulau Rote parece necesario dedicarle varios días.

 

Excursión a  PULAU SEMAU  desde Kupang

Me subo en la Jalan Sumatera a un bemo (todos los bemos en Kupang 2.000 IDR) para ir al Terminal (cualquiera en dirección izquierda). En el Terminal –un cruce de calles- espero uno que ponga Tenau, que son los que van al Tenau Harbour, desde donde salen las barcas a la isla. Ya experimento algo habitual en la mayoría de bemos de Kupang, la vibración que produce en su interior la música máquina puesta a toda pastilla. También, que si eres más bien alto, es más cómodo sentarse en alguno de las dos plazas de delante.

En el Puerto me indican donde espera la barca que va a Pulau Semau (10.000 IDR). Es una barca muy local. Vas sentado en el suelo. En una media hora llegamos. No tengo mucha información de la isla, pero según la Lonely hay “decent sandy beaches and snorkelling”. Pregunto a algún Ojek que está por allí y me enseña en su móvil una foto de playa con unos turistas. Como cerca del embarcadero no se aprecia nada interesante a visitar, con el lenguaje de signos le hago entender al Ojek que cuánto por ir allí. Me muestra 2 billetes de 50.000 IDR. Le digo que No con la cabeza y le acabaré aceptando sólo 1 billete de (50.000 IDR). Cruzaremos la isla -compruebo que, en general, la vegetación de la isla es bastante seca aunque se ve algún tramo de palmeras y algo de vida rural- hasta su lado oeste. Aquí hay una amplia playa completamente desierta. El agua no es del todo cristalina y hay algas cerca de la orilla, pero el Ojek me intenta decir que hay muchos peces y que si tengo otras gafas se mete conmigo, pero no me acaba de convencer (tampoco me apetece ahora demasiado). 

Me señala otra playa que se ve a lo lejos, a la derecha, que forma como una bahía. Vamos hacia allí. En el trozo final no hay camino y va pasando como puede, sorteando arbustos y cabras. El agua es un poco más cristalina y quizás hay menos algas, pero la marea está más baja y para meterte descalzo como que no es muy agradable. Definitivamente yo no recomendaría visitar Pulau Semau por sus playas. Por este tramo de la isla se divisan barcas de pescadores –que empiezan a estar embarrancadas al ir bajando la marea-. Lo que más me llamará la atención son una gran cantidad de enormes ostras secadas al sol. Ya volveremos al embarcadero. Ha bajado la marea y se aprecia ahora una bahía de agua cristalina. Ya esperaré la primera barca que vuelva a Kupang. He de esperar un rato a que haya suficientes pasajeros. Me intentan convencer para que pague más y salgamos antes, pero no tengo prisa. La excursión del día ya estaba hecha. Poco después saldremos. Ya en el Tenau Harbour, con la intención de ir a buscar un bemo, un Ojek que chapurrea algo de inglés me dice que me suba, que acaba de dejar a un friend que se va en el enorme barco de Pelni que está atracado en el Puerto. Parece simpático. Me insiste que si necesito algo que lo llame. OK. Me dejará en el Terminal.

Enfrente del Bemo Terminal hay una buena panorámica para observar la puesta de sol en Kupang, con alguna barca de pescadores o transportando pasajeros de fondo. Hay ambientillo al caer la tarde. Se instalan pequeños puestecitos ambulantes vendiendo cualquier cosa. Tras la rojiza puesta de sol voy hacia el Pasar Malam –viene de paso también para ir hacia los hoteles de la Jalan Sumatera-, que en mi opinión es el mejor lugar para cenar por la zona, o al menos en el que hay más ambiente. Cerca de las 6 pm, una gran número de chiringuitos invaden y cortan la calle con sus freidoras ambulantes, sus mesas y sus sillas.

 Día 5 – Kupang-Baun-Kupang

Último día de visita en West Timor y lo aprovecharé para visitar un pueblo que queda a 30 km. al sudeste de Kupang, y que el sábado es su Dia de Mercado: Baun.

En el breakfast –por decir algo- del Lavalon B&B,  unos mochileros anglosajones viajando meses por Indonesia explican sus batallitas de East Timor a un holandés recién llegado con su bicicleta. Éste a su vez cuenta lo poco que le han dejado dormir los indonesios poniendo la música a toda pastilla a partir de las 3 de la mañana en el ferry de esta pasada noche proveniente de Ende(Flores). Tras las galletas incomibles y el café inbebible me cambio al muy cercano Hotel Susi (75.000 IDR), con una bonita fachada y que no salía en la guía. La habitación seguía siendo básica pero al menos era más grande y tenía baño propio.   

 

Excursión a  BAUN  desde Kupang

Según la Lonely, los bemos a Baun salen desde el Bus Terminal o Pasar Inpres. Me subo al bemo nº 10 que va hasta la estación principal de buses, pero una vez allí me dicen que desde aquí no salen, y un tipo, muy amablemente, hace parar al bemo nº 27 –que debe conectar desde aquí con el Pasar Inpres- diciéndole al conductor que me deje donde salen los bemos a Baun. Ya en el gran Mercado que es el Pasar Inpres parece que a esta hora no sale ningún bemo para Baun. Según un Ojek, que chapurreaba algo de inglés, salían más temprano. Espero unos minutos y como no aparece ninguno acabo aceptando el ofrecimiento del Ojek para llevarme a Baun (30.000 IDR). 

El Mercado del sábado de Baun está bastante animado. Llamo bastante la atención. Cuando me siento un rato a descansar vendrán a intentar -dado que el inglés aquí es nulo-, darme conversación. Se ven bastantes personas –sobretodo gente mayor- vistiendo Ikat Sarongs. Les encanta que les haga fotos. Cuando ya tengo bastante me subo a un bemo (5.000 IDR) que vuelve para Kupang.

En Kupang el bemo me deja en el Pasar Inpres y aprovecho para dar unas vueltas por el gran Mercado de la capital. No deben venir muchos turistas, porque algunos tenderos, sobretodo en el sector de la fruta, quieren llamarme la atención y me piden que les haga fotos. Salgo del Mercado y me subiré al bemo nº 2 que pasa por la calle de los hoteles. Cerca hay un par de restaurantes locales. Mientras como algo entablo conversación con un trabajador de las Naciones Unidas de East Timor que habla muy bien inglés y portugués. Está muy enterado de la actualidad futbolera y me informa que el Barça ha ganado la Supercopa Europea ante el Porto. 

Por la tarde me dirigiré al Flomabora Mall al que se llega con el bemo nº 6. Es más bien modesto comparándolo con los grandes Centros Comerciales de las grandes ciudades asiáticas. Lo más moderno es el edificio anexo del KFC que además dispone de Internet gratuito para los clientes. Cerca del Flomabora hay una gran rotonda, donde ves circular los bemos a uno y otro lado,  con una pequeña Torre del Reloj en su centro coronada con un techo similar al de las casas tradicionales. Es una imagen modesta que bien pudiera resumir lo que es hoy en día West Timor. Al caer la tarde repetiré la bonita puesta de sol frente al Bemo Terminal y la deliciosa cena en el Pasar Malam.

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