Geología del Río Gualeguaychú
LA EROSIÓN POR LAS LLUVIAS
PARTE VI
La presencia de grandes bloques de arenisca a flor de agua, en el río Gualeguaychú puede causar extrañeza, ya que las rocas pertenecen a los primeros milenios del período terciario o finales del secundario, es decir cerca de 30 millones de años, anteriores al cuaternario que suma los dos millones.
El cuaternario, se superpone al terciario en muchos metros de terrazas compuestas de sedimentos de gravas, gredas, arcillas y arenas.
Es conveniente aclarar el porqué de la presencia, casi superficial de arenisca en nuestro río y en los terrenos próximos a su cauce.
Al retirarse el mar que cubría la zona, hace más de 5.000 años, los estratos cuaternarios y los acumulados posteriormente, fueron erosionados por las corrientes de agua provocadas por las lluvias. El agua llovida se desplazaba hacia el río con previa acumulación en proximidad de su cauce.
Antes de fundarse Gualeguaychú y a través de 5.000 años, la acción de la erosión acuífera afectó los estratos transportando el material más liviano y arrastrando arenas y gravas al lecho del río. El desgaste erosivo de tantos años, aunque fuera sólo de 1 ó 2 milímetros por año, trazó una pendiente más o menos rápida, según el caudal de agua que corriera.
En la zona Norte de lo que hoy ocupa la ciudad, el desagüe se orientó a través de los afluentes del arroyo Gualeyán, como el canal Bolacuá; y al Sur por los que corrían hacia el arroyo del Cura, como los cañadones Manantiales y el Laurel.
El agua de las lluvias del N.O. y del Oeste, corría por cañadas de menor porte y a través del terreno que hoy ocupa la ciudad.
Consideremos el proceso actual: El agua de esos puntos corre, en un 25% por el canal Clavarino, que es desde luego, el Gaitán y sólo afectó la erosión en la zona que comprende unas 70 manzanas del sector S.E., antes de volcar en el río.
El 75% restante, corre principalmente por Rocamora, luego por la zona de Plaza Ramírez y toma por calle Del Valle acumulándose por lo que era el cauce del arroyo Munilla. Ya sabemos lo que al presente ocurre en esos lugares.
También tenían su desagüe por cañadas menores, a través de la ciudad. No quedan señales de es tas cañadas que fueron corregidas a medida que se edificaba y nivelaban los terrenos.
Una cañada menor de la que tenemos memoria era la que evacuaba el agua del centro, particular mente de la calle 25 de Mayo y que tenía caída por calle Suipacha (hoy Perón). Llegaba hasta Andrade, cruzaba en diagonal la manzana de la Escuela Normal (sin edificar aún), doblaba por G. Méndez hasta 3 de Febrero, y de ahí a calle Del Valle.
Los niveles de Perón, Pellegrini y Chalup, desde G. Méndez al Sur, eran muy elevados y no permitían el desagüe por ellas. Sólo la G. Méndez daba curso a las aguas llovidas. Vemos aquí, lo que ocurría en Gualeguaychú hasta principios de este siglo XX.