Las pilas son aparatos que convierten la energía química en energía eléctrica. Éstas tienen dos electrodos, donde se intercambian los electrones, conectados mediante un electrolito para que las cargas se puedan mover completando un circuito.

En este experimento uno de los electrodos será el papel de aluminio y el otro el oxígeno del aire. Así el papel de aluminio desprenderá electrones que captará el oxígeno. Para que sea más sencillo realizar el electrodo del oxígeno nos ayudaremos de un material muy poroso y que mantenga en su interior el oxígeno, como, por ejemplo, el carbón activo.

¿Qué necesitamos?

¿Cómo lo hacemos?

1. Cortar tiras de papel de aluminio

1. Recubrir un vaso pequeño con las tiras de papel de aluminio y fijarlas con papel cello.

1. Cortar tiras de papel de filtro y recubrir con ellas el vasito, pero sin llegar a cubrir totalmente el aluminio. Dejar el borde libre para poder enganchar la pinza de cocodrilo.

4. Preparar una disolución saturada con agua y sal. Humedecer el papel de filtro con la disolución saturada.

5. Añadir el carbón activo y humedecerlo también.

¿Cómo conseguir que funcione?

Para ello necesitarás mínimo dos cables. Uno de ellos lo uniremos al papel de aluminio con una pinza de cocodrilo, mientras que el otro lo uniremos al carbón activo (sujetamos uno de los trozos de carbón con una pinza de cocodrilo). Entre esos cables ya podemos colocar un aparato eléctrico, aunque esta pila presenta un problema importante, y es que presenta un voltaje muy pequeño, por lo que dependiendo del aparato necesitaremos utilizar más o menos pilas dispuestas en un circuito en serie para encenderlo. En la foto puedes ver un polímetro cerrando el circuito. La medida que da es de 0,76 V.