• Aparicio. Estampa de El hambre en Madrid, 1819.

La heroicidad manifestada por esta ilustre metrópoli cuando en la guerra ultima prefirió los tormentos de un hambre destructora a los beneficios del usurpador, conservando intacta la fidelidad a su amado y legitimo Monarca, inspiró el diestro pincel de D. Josef Aparicio, pintor de Cámara de S. M. y académico de la de S. Fernando y de la de S. Lucas de Roma, y produjo un grandioso cuadro, que obtuvo, además de la aprobación augusta del REY nuestro Señor y Sres. Infantes, los aplausos del publico en la exposición general de pinturas del año de 1818 en la academia de S. Fernando.

Pero no contento Aparicio con el honor de haber consagrado su talento a tan sublime objeto, y de haber conseguido para su obra una aceptación verdaderamente popular, fundada no solo en la feliz invención, ordenada composición y patética expresión del asunto, sino también en el excelente desempeño de los demás requisitos facultativos, deseaba todavía perpetuar en la manera posible a su profesión el indicado obsequio de una de tas bellas artes nacionales a la gloria de su patria, proporcionando a la calcografía una ocasión de ocuparse dıgnamente, y de cooperar a la empresa con el dibujo y la pintura.

A este fin ha acudıdo al REY nuestro Señor solicitando que S. M. Se digne protejer y aceptar la dedicatoria de una lamina del citado cuadro, conocido por el titulo del Hambre en Madrid, la cual debe ejecutarse a subscripción con el mayor lujo y esmero dable per D. Antonıo Galiano, celebre dibujante, acompañada al pie de una breve noticia del argumento.

El REY en consecuencia, accediendo gustoso al loable pensamiento y suplica de Aparicio, ha venido en declararse a si propio y a S.M. la REINA nuestra Señora y Sres. Infantes por los primeros suscriptores de la enunciada lamina, y en mandar que se invite en su augusto nombre a todos los muy reverendos arzobispos, reverendos obispos y cabildos de las catedrales, así como a los ayuntamientos de todas las ciudades y villas de la península y sus islas adyacentes para que concurran (suscribiéndose por el numero de estampas que juzguen conveniente) al buen éxito de una empresa artística, que recomiendan a la par el sentimiento mas hermoso y la consideración mas importante, el amor patrio, y el fomento de las artes liberales y de sus profesores acreditados. S. M. asimismo, en justa defensa de la propiedad individual, concede a D. Josef Aparicio privilegio exclusivo para vender las estampas de su citada lamina, y prohíbe, con arreglo a las leyes vigentes, todo contrahacimiento de ellas en cualesquier modo y tamaño con que se disfrace semejante exceso.

El precio de la suscripción por cada estampa será de 60 rs. vn., cuya mitad deberá pagarse en el acto de suscribirse en las diferentes administraciones de loterías del reino, bajo recibo numerado y firmado por el autor, y la otra mitad al recibir las estampas; estando Aparicio obligado a entregarlas en todo eI mes de Febrero próximo por el conducto de las mismas administraciones.

A su tiempo oportuno se publicará en la Gaceta una lista de todos los suscriptores, omitiendo o expresando sus nombres, según el deseo que manifiesten los interesados.

Del precio de cada estampa cede al mismo tiempo Aparicio 2 rs. vn., de que se llevará cuenta separada, con destino a aliviar las funestas consecuencias de la epidemia que ha devastado varios pueblos de la Andalucía.

La suscripción en Madrid se abrirá en la librería de Brun, frente a Ias gradas de S. Felipe.

Gaceta de Madrid, 18 diciembre 1819