En Levítico, Dios establece un patrón de vida tanto para sus líderes como para su pueblo. El libro nos recuerda que liderar significa ser un ejemplo: vivir una vida que valga la pena ser imitada. Nos enseña que Dios requiere algo más que un mero sacrificio de labios a la causa. Nuestra vida debería reflejar altos valores y una elevada norma de vida que sean visibles para todo el mundo.
Levítico describe el comienzo de una nueva era para los israelitas, algo como lo que ocurre cuando un director ejecutivo establece políticas y normas para una nueva organización. La nación judía acababa de salir de la tierra, como una iglesia que se establece o una nueva empresa. Todos los empleados necesitan un sistema que les ayude a realizar las cosas. Necesitan una pista con una gestión aprobada por la que correr, que es exactamente lo que Dios estable.
Los primeros dieciséis capítulos nos enseñan cómo acercarnos a Dios, mientras que los últimos once capítulos nos enseñan como relacionarnos con Él y con los demás. El libro también enumera las bendiciones por la obediencia y las consecuencias de la desobediencia.
Con las reglas básicas establecidas, la nación ahora puede avanzar dese una fase emprendedora a una fase establecida. La estructura organizacional permite que este enorme grupo de personas llamado los israelitas evolucione de ser una multitud dispersa a una multitud significativa.
Se han escrito muchos libros acerca de la diferencia entre dirigir y gestionar; las dos funciones son marcadamente distintas. Los gestores puede que no siempre sean líderes, pero los líderes deben ser capaces de gestionar lo que han comenzado hasta que emerjan personas y sistemas que permitan que la operación se desarrolle fluidamente.
Dios establece un patrón de vida. Una vez más, Dios toma la iniciativa y comienza a exponer las reglas para acercarse a Él. Porque Dios es santo, la relación de Israel con Yahvé no podía ser tomada a la ligera.
Dios dirige a Moisés y al pueblo por los detalles más complejos por su relación: desde las ofrendas que ellos habían de hacer, las leyes respecto a la pureza moral, hasta cómo implementar los sacrificios requeridos. Dios es santo, por lo tanto, su pueblo ha de ser santo.
El liderazgo no es una categoría aislada en nuestra vida. No podemos separar nuestro estilo de vida de nuestro liderazgo, o viceversa. El gran mensaje de Dios en este libro a los líderes es este: el carácter sí cuenta. Nuestra vida personal influencia tremendamente nuestro liderazgo público.
Moisés
Aarón
Nadab
Abiú
Itamar
OTRAS PERSONAS DESTACADAS
Eleazar
Los líderes deben ser primero buenos seguidores.
El carácter cuenta; la pureza interior influencia la profesión exterior.
El liderazgo debe ser impulsado por valores, no por la opinión pública.
Dios disciplina la desobediencia descuidada y bendice la fidelidad atenta.
LAS CLARAS INSTRUCCIONES DE DIOS sobre las ofrendas en el libro de Levítico apuntan al sacrificio propiciatorio final de Cristo. Como los sacrificios del pueblo representaban solo la expiación temporal de los pecados de Israel, tenían que repetirlos de tiempo en tiempo. Jesús llevó una vida perfecta en la tierra y se presentó como sacrificio final y definitivo por toda la humanidad. En contraste con la fiesta de la Pascua del AT, que se celebraba todos los años, los creyentes constantemente celebramos la «fiesta» de la nueva Pascua: Jesucristo, el cordero pascual (1 Co 5.7).
Sacrificio:
Dios requería sacrificios del pueblo para expiar los pecados (1.3, 9–13; 16.3; 17.8; 19.5; Éx 29.34; Dt 16.5, 6; Jue 11.31; Sal 66.13–15; Mt 5.23, 24; Ro 8.3; 12.1; He 2.17; 1 Jn 2.2).
Santidad:
Es el atributo que resume la perfecta naturaleza y el carácter de Dios; Israel se llamaría santo así como Dios es santo (11.44, 45; 19.2; 20.7, 26; 21.6–8; Éx 6.7; 19.6; Sal 22.3; 99.5; Is 41.14–16; 1 Ts 4.7; 1 P 1.14–16).
Ofrendas:
Forma de adorar a Dios, de expresar un corazón penitente y agradecido (1.1–17; 2.1–16; 3.1–17; 4.1—5.13; 5.14—6.7; Gn 4.4, 5; Dt 16.10; 1 R 18.33–40; Job 42.8; 2 Co 5.21; 2 Ti 4.6).
Israel como nación santa de Dios:
El pueblo a través del cual Cristo entraría en el mundo (26.42–46; Gn 15.12–21; Éx 19.5, 6; 2 S 7.13; 23.5; He 8.6– 13).
Dios es accesible: 16.12–15
Dios es glorioso: 9.6, 23
Dios es santo: 11.44–45
Dios se aíra: 10.2
El título de este libro es derivado de la Septuaginta. El libro de Levítico contiene las leyes que Dios dio a Moisés durante los dos meses entre la construcción del Tabernáculo y la partida de los hijos de Israel del Sinaí, Éxodo 40:17; Número 10:11. El libro de Levítico enseña las leyes del culto, del sacrificio y los deberes de los sacerdotes.
Fue escrito entre los años 1445 y 1405 a.C.
Según la tradición, fue escrito por Moisés.
Este libro fue escrito para instruir a los israelitas y sus mediadores sacerdotales acerca del acceso a Dios por medio de la sangre de los sacrificios y también para mostrar un padrón divino de una vida santa de un pueblo separado para Dios.
Los sacerdotes tenían el deber de enseñar al pueblo a tomar consciencia de su pecaminosidad y de su necesidad de recibir la misericordia de Dios, al mismo tiempo, el sistema de sacrificio enseñaba al pueblo que Dios proveía una forma de librar al pueblo del pecado y santificar sus vidas.
Existen dos temas importantes que caracterizan el libro de Levítico los cuales son: La expiación y la santidad.
Cuatro cosas importantes caracterizan el libro el libro de Levítico:
La revelación divina y su manifestación de Dios es más constante en este libro. El libro de levítico declara expresamente treinta y ocho veces que el Señor habló a Moisés.
Este libro da diversas instrucciones acerca de los sacrificios y de la expiación.
El cap 16 es el principal de la Biblia que habla sobre el día de la expiación.
Este libro resalta el hecho que los hijos de Leví tenían que cumplir su vocación sacerdotal viviendo en pureza, moral y espiritualmente, separándose de las otras naciones y obedecer a Dios.
El conjunto de las leyes concernientes a los sacrificios, cap 1 al 4 y partes de los cap 5 al 7.
La institución del sacerdocio, cap 8 al 10.
Las leyes ceremoniales y morales, cap 17 al 26.
Un suplemento sobre los votos, cap 27.
Debido al énfasis a la expiación a través de la sangre y el tema de la santidad, este libro tiene una relevancia permanente para los creyentes del nuevo pacto.
El N.T. nos enseña en Hebreos 10:1, que la sangre de los animales sacrificados era sombra de los bienes venideros. En Hebreos 9:12 nos habla que la sangre derramada de Jesús hizo el sacrificio permanente por nuestros pecados, o sea estos textos bíblicos se refieren al libro de Levítico y nos da una idea que los sacrificios que eran hechos en el antiguo pacto no tenia un valor permanente, pero el sacrificio que hizo Jesús fue una sola vez y para siempre.
EL SACRIFICIO
Este era el medio por lo cual Dios utilizaba para acercar a su pueblo a él por medio de la muerte de un animal. Esto era un pedido de Dios hacia su pueblo, Éxodo 34:20; Deuteronomio 16:16.
El primer sacrificio de animales en la Biblia fue hecho por Abel, Gn 4:4. Los sacrificios de animales no fue una costumbre sacada de las otras naciones, pero era peculiar del mismo Dios, de esta manera podemos entender que el sacrificio de animales fue un medio que el propio Dios creó para que el hombre se acercara a él.
Esta idea quedó enraizada en la mente de la humanidad y esta costumbre fue transmitida a toda la humanidad. Las naciones paganas distorsionaron las leyes de los sacrificios y empezaron a sacrificar a la creación, olvidando al creador.
LAS LEYES DE LOS SACRIFICIOS
Mostraremos el sistema mosaico de los sacrificios, Levítico 1 al 4 y partes de los capítulos 5 al 7.
El motivo básico de los sacrificios es alcanzar la misericordia de Dios y se concluye con la "expiación" que es lo mismo que la reconciliación del hombre con Dios, por la cual los hombres vuelven a gozar de la comunión con Dios. El hombre que peca merece morir, pero Dios buscó una forma para que el hombre no muriera, colocando en su lugar un cordero. La sangre es el principio vital, por eso, la sangre derramada del cordero es como si fuese la sangre del ser humano siendo una tipología. La expiación es la purificación de los crímenes y de los pecados. La regla de alcanzar la expiación de los pecados mediante un sacrificio substituto, revela la gracia divina y constituye el corazón del antiguo pacto.
La segunda idea relacionada al sacrificio es la consagración a Dios. Al colocar las manos sobre el animal antes de degollarlo, el que ofrecía el sacrificio se identificaba con el animal ofrecido sobre el altar, indicando de una manera simbólica que el que estaba ofreciendo estaba siendo consagrado a Dios.
La tercera idea simbólica del sacrificio es la de la mayordomía, o sea la administración de las cosas que pertenecen a Dios. Por ejemplo: En las ofrendas de los alimentos, la mejor parte del animal era quemada sobre el altar, esto significa que lo mejor es para Dios.
En las ofrendas de paz está presente el símbolo de la deliciosa comunión con Dios, de forma que el que ofrecía la ofrenda, participaba de la carne sacrificada en un banquete sagrado.
La otra idea es la adoración a Dios, pues, sacrificar significa ofrecer culto a Dios y atribuir gloria a su nombre. Algunos israelitas pensaban que solo en sacrificar a Dios ya estaban cumpliendo con sus deberes con él, pero, ellos tenían que hacer el sacrificio con un corazón quebrantado y agradecido a Dios, esto era algo que había en pocos israelitas. Dios quería a través de algunos profetas dar un mensaje a los judíos que él no se contentaba con un sacrificio ofrecido sin arrepentimiento, sin fe, sin justicia y sin piedad, 1 Samuel 15:22; Salmos 51:16,17; Isaías 1:11-17.
LOS ANIMALES QUE ERAN OFRECIDOS
La ley no admitía más de cinco especies de animales como aptos para el sacrificio, los cuales son: La vaca, el macho cabrio, la tórtola, el cordero y el palomino. Estos animales son considerados animales limpios para los judíos. Antes del diluvio ya había esta distinción entre los animales puros e inmundos, Génesis 7:2.
Moisés hizo la división de los animales basándose en el sabor de cada uno y en las consideraciones religiosas simbolizando una señal de separación entre Israel y las otras naciones.
En el Nuevo Testamento, Jesús invalidó esta distinción considerando puro a todos los alimentos, Marcos 7:19. En Hechos 10:12-15, podemos ver que esta distinción también fue invalidada diciendo que los gentiles no son más inmundos para los judíos.
LA FORMA QUE SE HACÍAN LOS SACRIFICIOS
La persona llevaba personalmente el animal a la puerta del tabernáculo donde estaba el altar del holocausto.
Después colocaba la mano en el animal para simbolizar que este era su sustituto. En determinados sacrificios este símbolo representaba la transferencia de los pecados para el animal y en otras ocasiones, representaba la consagración de la misma persona por intermedio del animal.
Se degollaba el animal como un símbolo de la justa paga por sus pecados y en seguida el sacerdote derramaba la sangre sobre el altar.
Dependiendo del tipo de sacrificio, el animal era quemado solamente una parte, en otros casos se quemaba todo el animal, y lo restante era comido por los sacerdotes y su familia.
LAS OFRENDAS
EL HOLOCAUSTO. Era el sacrificio que se degollaba el animal y quemaba en el altar del holocausto, Levítico 2:1-16; 6:8-13.
OBLACIÓN. Era la ofrenda de alimentos vegetales Levítico 6:14-23.
OFRENDAS DE PAZ. Era una ceremonia caracterizada en que la mayor parte del alimento ofrecido era consumido por la persona que ofrecía el sacrificio juntamente con su familia y sus invitados simbolizando un banquete de amistad entre Dios y el hombre, Levítico 3:1-17.
OFRENDA POR EL PECADO. Era caracterizada por los pecados cometidos por inocencia y algunos otros como por ejemplo: Recusar a testificar contra un criminoso delante de un tribunal o jurar falsamente contra otra persona, Levítico 4:1-4; 5:13.
OFRENDA EXPIATORIA. Era ofrecida en caso de violación de los derechos de Dios o del prójimo, Levítico 5:14.
EL SACERDOCIO
DEFINICIÓN
La palabra sacerdote significa mediador entre Dios y los hombres que tiene el poder de ofrecer sacrificios por los pecados de la humanidad.
El primer sacerdote de los israelitas fue Aarón, la vocación sacerdotal era hereditaria, eso significa que podía ser pasada de padres a hijos de manera que los padres podían enseñar detalladamente las leyes del sacerdocio a sus hijos.
En la nación de Israel los sacerdotes solo podían ser de la tribu de Leví, los levitas fueron escogidos por su cuidado espiritual y por su cuidado con la adoración a Dios, Éxodo 32:25,29; Números 3:5-7.
LAS FUNCIONES DEL SACERDOCIO
Primeramente, era servir como mediadores entre Dios y los hombres, interceder por el pueblo, expiar el pecado mediante el sacrificio y de este modo, reconciliar al pueblo con Dios.
Consultar a Dios para discernir la voluntad de Dios para el pueblo, Números 27:21; Deuteronomio 33:8.
Eran los interpretes y maestros de la ley, enseñaban al pueblo los estatutos del Señor, Levítico 10:11; Ezequiel 44:23.
Ministraban alabanzas a Dios en el tabernáculo y cuidaban el templo, 1 Crónicas 25 y 26.
EL SUMO SACERDOTE
El sumo sacerdote era el sacerdote jefe; era el más importante de los sacerdotes, era el único que podía entrar una vez al año en el lugar santísimo en el día de la expiación para expiar los pecados de la nación de Israel. El sumo sacerdote era una tipología de la persona de Cristo, Hebreos 2:17, 4:14.
REQUISITOS DE UN SACERDOTE
Primeramente, el sacerdote debería ser un hombre sin defectos físicos, Levítico 21:16-21. Debería ser hombre casado con una mujer ejemplar, no debería contaminarse con las costumbres paganas, ni tocar cosas inmundas, el sacerdote debería tener una vida habitual de pureza incompatible con la vida de un hombre común.
LAS VESTIDURAS DE LOS SACERDOTES
Las vestiduras de los sacerdotes eran hechas de lino fino y era una vestidura primorosa, o sea, elegante para que ellos estuviesen siempre vestidos con dignidad y hermosura. Éxodo 28.
Había una diferencia entre las vestiduras del sumo sacerdote y de los sacerdotes oficiales, o sea los ayudantes del sumo sacerdote.
Podemos ver algunas de estas diferencias, como ser:
EL SACERDOTE
Usaba una túnica blanca.
Usaba por debajo de la túnica un calzoncillo.
Usaba por en cima de la túnica una faja de lino fino y un cinturón
Usaba una mitra de lino fino
Usaba un pectoral de 0,25 cm, de oro, azul, púrpura, carmesí y lino fino, cadenas de oro y su estola adornada con doce piedras, tenía también Urim y Tumin.
EL SUMO SACERDOTE
Usaba una ropa más lujosa y un poco diferente.
Usaba sobre la túnica un manto azul con campanillas.
Usaba una mitra y una estola de oro y un cinturón
Usaba en sus vestiduras piedras de ónice en cada hombro, cada una tenía el nombre de seis tribus de Israel.
Usaba una mitra de oro con el nombre "Santidad a Jehová".
Levítico es tanto un manual para la adoración de Dios en Israel como una teología del ritual del antiguo pacto. Un entendimiento claro de las ceremonias, leyes y detalles de ritual prescritas en el libro es difícil de poseer hoy día debido a que Moisés asumió cierto contexto de entendimiento histórico. Una vez que el reto de entender las prescripciones detalladas ha sido enfrentado, la pregunta emerge en cuanto a cómo los creyentes en la iglesia deben responder a ellas, debido a que el NT claramente abroga la ley ceremonial del AT (cp. Hch. 10:1–16; Col. 2:16, 17), el sacerdocio levítico (cp. 1 P. 2:9; Ap. 1:6; 5:10; 20:6) y el santuario (cp. Mt. 27:51), como también instituye el nuevo pacto (cp. Mt. 26:28; 2 Co. 3:6–18; He. 7– 10). En lugar de tratar de practicar las ceremonias antiguas o buscar algún significado espiritual más profundo en ellas, el enfoque debe estar en la identidad santa y divina detrás de ellas. Esta puede ser en parte la razón por la que las explicaciones que Moisés frecuentemente dio en las prescripciones para la limpieza ofrecen un mayor entendimiento de la mente de Dios que lo que las ceremonias mismas ofrecen. Los principios espirituales en los que los rituales estaban arraigados son permanentes porque están arraigados en la naturaleza de Dios. El NT afirma claramente que desde Pentecostés en adelante (cp. Hch. 2), la iglesia está bajo la autoridad del nuevo pacto, no del antiguo (He. 7–10).
El intérprete es animado a comparar características de este libro con escritores del NT que presentan tipos o analogías basadas en el tabernáculo y los aspectos ceremoniales de la ley, con objeto de enseñar lecciones de valor acerca de Cristo y la realidad del nuevo pacto. Aunque la ley ceremonial solo servía como una sombra de la realidad de Cristo y su obra redentora (He. 10:1), la tipología excesiva debe ser rechazada. Solo aquello que los escritores del NT identifican como tipos de Cristo debe ser designado de esa manera (cp. 1 Co. 5:7: “Cristo es nuestra Pascua”).
El estudio más provechoso de Levítico es aquel que presenta la verdad en el entendimiento del pecado, la culpabilidad, la muerte sustitutiva, y la expiación al enfocarse en características que no son explicadas o ilustradas en otros lugares en las Escrituras del AT. Más adelante, autores del AT, y especialmente escritores del NT, edificaron sobre el entendimiento básico de estos asuntos provistos en Levítico. Las características sacrificiales de Levítico apuntan a su cumplimiento definitivo y único en la muerte sustitutiva de Jesucristo (He. 9:11–22).
Cuestionario • Responder
SETEADB. PENTATEUCO. Editorial La Epístola. Bolivia. 2012.
Maxwell, John. Elmore, Tim. La Biblia de Liderazgo de Maxwell. Nashville: Grupo Nelson; 2016.
MacArthur, John. Biblia de Estudio MacArthur. Nashville: Grupo Nelson; 2011
HOFF, Pablo. EL PENTATEUCO. Editorial VIDA. USA, 1978.
MacArthur, John. El Manual Bíblico MacArthur. Nashville: Grupo Nelson; 2016
Análisis de temas y personas destacados en Levítico
Dios en Levítico
El llamado
La levadura
El macho cabrío
Siete tipos de ofrendas
La unción de Aarón
El avivamiento en El Pentateuco
Lo santo y lo profano
El camaleón
El hisopo
El expiación
Inmoralidad sexual
Ser santos
Dios nos santifica
Virgen
Número 14
La lámpara
El año del jubileo
El diezmo