Existe alrededor nuestro, un mundo espiritual poderoso y de recursos superiores a nuestro mundo visible.
Seres espirituales buenos y malos pasan en nuestro medio de un lado a otro, con grande rapidez y movimientos imperceptibles.
Muchos de estos seres espirituales están designados a hacer el bien, sin embargo, otros están comisionados a hacer el mal.
Muchas personas cuestionan si existen verdaderamente tales seres espirituales, quienes son, donde están y que hacen.
La palabra de Dios es la única fuente de información confiable que posee respuestas estas preguntas, de manera que la misma palabra de Dios nos afirma que hay otra clase de seres superiores a los hombres; estos seres habitan en una dimensión espiritual
Parte de estos seres espirituales habitan en el cielo y forman el ejército celestial. Estos ángeles están sujetos al gobierno de Dios y su importante papel que han desempeñado en la historia de la humanidad, los hace referencia especial en las escrituras sagradas.
Existen también aquellos que pertenecen a la misma clase de seres que anteriormente fueron servidores de Dios y que habitaban en los cielos, pero ahora se encuentran en actitud de rebelión contra Dios y su gobierno.
La doctrina de los ángeles sigue lógicamente la doctrina de Dios, pues los Ángeles son fundamentalmente ministros de la providencia de Dios. Esa doctrina nos permite conocer el origen, existencia, naturaleza, caída, clasificación, obra y destino de los ángeles.
: El término “Angelología” es derivado de dos vocablos griegos “Angelos” que significa “Ángel”, y “Logia” que significa “Tratado o estudio”. De esta manera entendemos que angelología es la ciencia teológica que estudia la doctrina de los ángeles. El término “Ángel” viene del griego “Angelos” y del hebreo “Mal’ak” que significa “Mensajero”.
En el sentido general, los ángeles son seres espirituales creados por Dios para alabar y exaltar su santidad y soberanía.
En el A.T. este término aparece 108 veces, y son considerados como miembros de la corte de Yavé o Jehová, que le sirven y le alaban.
En el N.T. este término aparece 175 veces y son considerados representantes del mundo celestial y mensajeros de Dios.
Las historias seculares, religiosas y también la arqueología, nos muestran que casi todas las culturas del mundo aceptan la idea de la existencia de seres sobrenaturales.
Muchas culturas antiguas no hacían ninguna distinción entre los seres espirituales buenos y malos. Los egipcios antiguos creían que los seres espirituales controlaban todas las esferas de la vida del ser humano; lo mismo sucedía con los persas, los babilónicos y otras naciones antiguas.
Los griegos a pesar de tener enteres por asuntos filosóficos e ideas humanísticas, creían en la existencia de los ángeles, de manera que la adoración a estos seres espirituales hacía parte de la vida cotidiana de los griegos.
En muchos países del mundo moderno, su folclore popular son llenos de alusiones a los seres espirituales o ángeles.
Aun en las culturas más orientales del mundo como China, Japón y Corea, los ángeles y demonios son partes integrantes de sus religiones.
En el extremo oriente, los espíritus son considerados espíritus de seres humanos que ya han muerto, resultando en la adoración de ancestrales y adoración a demonios.
En las tradiciones paganas, algunas de las cuales influenciaron a los judíos, ellos consideraban a los ángeles muchas veces como divinos, y en otros casos eran considerados fenómenos naturales, pero el reconocimiento genuino de los ángeles vino definitivamente por intermedio de la revelación divina.
Los asirios y los griegos crearon la idea que sus dioses y seres semidivinos tenían alas. “Hermes” el mensajero de Zeus, tenía alas en su calcañar. “Eros”, el espíritu volador del amor apasionado, tenía alas en sus hombros. “El Cupido”, el dios del amor erótico en forma de un angelito con arco y flecha en sus manos, creado por los romanos, tenían alas en sus espaldas.
El filosofo griego Plutón, entre los años (427 y 347 a.C.), también habló del ángel de la guardia.
La escritura hebrea atribuye nombres a solamente dos ángeles los cuales son: Miguel y Gabriel, pero el libro apócrifo de Tobías, entre los años 250 a 200 a.C. habla de un arcángel llamado “Rafael” que ayudaba a Tobías en situaciones difíciles.
En el periodo de la historia del nuevo testamento, los fariseos creían que los ángeles eran seres sobrenaturales que comunicaba la voluntad de Dios a su pueblo, Hch 23:8. En los primeros siglos de la era cristianas, los patriarcas de la iglesia no dieron mucha énfasis a los ángeles, sino que su asunto principal era la naturaleza de Cristo, pero aun así, ellos creían en la existencia de ángeles.
El Cupido de la mitología romana
Fueron registradas algunas afirmaciones de estos hombres, las cuales daremos algunas de ellas:
1. Jerónimo en el año 400 d. C. creía que los ángeles de la guardia eran dado a cada persona desde que nacía.
2. Orígenes (182 – 251), declaró la impecabilidad de los ángeles, afirmando que si fue posible la caída de un ángel, quizás sea posible la salvación de un demonio. Semejante proposición acabó siendo rechazada por el concilio eclesiástico.
3. Pedro Lombard entre los años 100 a 160 d.C. añadió que un ángel podía guarda a muchas personas al mismo tiempo.
4. Dionisio en el año 500 d.C. contribuyó de una manera especial para el estudio de la doctrina de los ángeles y declaró que un ángel es una imagen de Dios, es una manifestación de la luz oculta, es un espejo puro sin defecto ni impureza.
5. Gregorio Magno entre los años 540 a 604 d.C. afirmó que los ángeles tenían cuerpos celestiales.
El catolicismo romano desde el principio de su institucionalización creía en la existencia de los ángeles.
El cristianismo reformado continuó a enseñar que los ángeles ayudaban a los creyentes.
En la opinión de Calvino que vivió entre los años (1509 – 1564), creía y enseñaba que los ángeles eran administradores de la beneficencia de Dios para con nosotros, y mantiene la vigilancia por nuestra seguridad para que ningún mal venga sobre nosotros.
Martín Lutero que vivió entre los años (1483 – 1546), habló en términos semejantes a Calvino, observando que estos seres espirituales creados por Dios, sirven a los creyentes y al reino de Dios.
Martín Lutero dijo que ellos estaban de pie delante de Dios y sin ningún esfuerzo, viene rápidamente a socorrernos.
El la era de racionalismo en el siglo XIX, surgieron varias dudas sobre la existencia de los ángeles. Las enseñanzas historicas aceptados por la iglesia empezaron a ser reexaminados, y como consecuencia de esta especulación, algunas sectas resolvieron llamar a los ángeles de “Personificación de energía divina e influencias naturales”. Algunos eruditos judíos afirmaron que los ángeles no eran real, pero aun así la fe de los evangélicos conservadores no fue abalada que continúan a creer en la existencia de los ángeles como ministros de Dios.
Los ángeles fueron creados esencialmente espíritus, pero la Biblia nos muestra la posibilidad de de su materialización en algunos casos, entre ellos están:
Los ángeles de Dios visitaron a Abraham, Génesis 18:1-3.
Los ángeles de Dios le salieron al encuentro de Jacob. Génesis 32:1-2
Josué vio al Ángel de Dios con aspecto de hombre, Josué 5:13, 14.
El ángel de Dios le apareció a Gedeón con aspecto de un varón, Jueces 6:1.
El ángel de Dios le apareció en el camino a Balaam, Números 22:31.
Los ángeles fueron creados por Dios con una sabiduría más sublime que la sabiduría humana. Ellos hacen parte de la manifestación de la gloria de Dios y son comisionados por Dios para realizar algunas actividades establecidas por Dios y entre ellas, mas importante es cuidar a su pueblo Israel y a la iglesia de Jesucristo.
Muchos se preguntan porque Dios creó a los ángeles. Si analizamos en un aspecto teológico, todas las cosas que Dios hizo, tiene un propósito.
Los ángeles fueron credos exclusivamente para dar gloria, honra y acción de gracias a Dios. También fueron creados para cumplir los propósitos de Dios, guardar el trono de Dios y está delante de su trono para adorarlo.
Hay dos puntos importantes que deben ser tomados en consideración en cuanto al origen de los ángeles:
El primero es que los ángeles no existen desde la eternidad, pues en Nehemías 9:6, habla claramente de su creación, cuando dice: “Tú solo eres Jehová; tu hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, con todo su ejercito…”.
Sal 148:2, 5, dice: “Alabadle vosotros todos sus ángeles; alabadle vosotros todos sus ejércitos. Alaben en nombre de Jehová; porque él mandó y fueron creados.”.
El otro punto es el hecho que habla de la época de su creación que no es indicado con precisión, pero es posible que haya sido en la misma época de la creación de los cielos y la tierra, Gn 1:1.
Un estudio analítico más profundo nos muestra que posiblemente los ángeles fueron creados antes de la creación de la tierra, pues conforme Job 38:4-7, todos los ángeles se regocijaban cuando Jehová fundaba la tierra.
En cuanto a su existencia, hay pruebas contundentes tanto en el A.T. como en el N.T. que afirman que los ángeles fueron creados por Dios, entre ellos están:
Los ángeles fueron creados por Dios, Salmos 148:2, 5
Los ángeles fueron creados con mayor gloria que los hombres, Salmos 8:4, 5.
Los ángeles fueron creados en gran cantidad, Job 25:3; Daniel 33:2
Hay millones de millones de ángeles en los cielos, Apocalipsis 5:11.
Cuando los ángeles fueron creados, no hubo una clasificación entre ángeles buenos y malos, sin embargo, entendemos que ellos fueron creados en un mismo nivel de justicia, bondad y santidad. Podemos ver lo que dice Jud v 6: “Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día”.
La definición entre ángeles buenos y malos está en el hecho que ellos fueron creados como seres morales y con libre albedrío para elegir entre el bien o el mal; fue dentro de esta condición que sucedió la caída de Lucifer, aconteciendo de esta manera la mayor tragedia de la historia de la creación.
Lo que entendemos es que a los ángeles que no permanecieron en su dignidad, fueron expulsados de la presencia de Dios, pues vea lo que dice 2 P 2:4 dice: Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad para ser reservado al juicio”.
A los ángeles que permanecieron en dignidad, siguen en la presencia de Dios en los cielos, Apocalipsis 5:11, 12.
El estudio profundo de las escrituras afirma que los ángeles tanto del bien como del mal, están en acción en una esfera espiritual del universo, principalmente los principados y potestades que están en una dimensión espiritual del universo, Daniel 10:13, pero la habitación de los ángeles están divididas en dos, la habitación de los ángeles buenos y la habitación de los ángeles malos.
Jesús mismo declaró que hay ángeles en los cielos, Marcos 13:32, esto se refiere a los ángeles buenos. Cuando Pablo habla en Efesios 3:15, sobre toda familia en los cielos, está hablando de los ángeles que habitan en los cielos.
En Lucas 22:43, nos habla que un ángel del cielo vino a fortalecer a Jesús cuando oraba.
Los ángeles malos, habitan en oscuridad en prisiones eternas que fueron reservados para el juicio, 2 Pedro 2:4; Judas 6.
Existen varias categorías de ángeles, de manera que cada una tiene su función y oficio. Podemos ver estas categorías las cuales son:
La palabra “Arcángel” significa “Aquel que es semejante a Dios”. Solo hay un arcángel en la Biblia el cual es “Miguel”. Este nombre viene del griego “Michael” y del hebreo “Mika’el”, que significa, “¿Quien es como Dios?”.
La Biblia menciona a Miguel como uno de los principales príncipes, Daniel 10:13. Conforme Daniel 12:1, Miguel es el defensor y protector del pueblo de Israel. Miguel tiene una participación importante en la historia bíblica, como ser:
La controversia contra Satanás por el cuerpo de Moisés, Judas 9.
La batalla en el cielo contra Satanás y sus ángeles,Apocalipsis 12:7-11.
La voz de Miguel será oída en la venida de Cristo, 1 Tesalonicenses 4:16
En las literaturas apócrifas judaicas, son mencionados la existencia de siete arcángeles, pero solo aparece los nombres de cuatros de ellos loa cuales son: Miguel, Gabriel, Rafael y Uriel.
Estas declaraciones no aparecen en los libros canónicos, por esta razón, no aceptamos esta afirmación.
Es derivado del vocablo hebreo “Queruvim”, que significa “Guardián”. Los querubines están relacionados directamente con la santidad de Dios, y también son guardianes del trono de Dios.
El vocablo “Querubín” está relacionado con verbos del idioma acadiano, los cuales son: Bendecir, alabar y adorar”, de esta manera se entiende que ellos bendicen, alaban y adoran al Señor.
Los querubines aparecen por primera vez en la Biblia en Génesis 3:24, para proteger el huerto del Edén; después aparece como figura imaginaria en el Arca del pacto, Éxodo 25:17.
Esta figura imaginaria también aparece en la decoración del templo, 1 Reyes 6:23-28. La Biblia dice que Dios habita en medio de los querubines, 1 Samuel 4:4; 2 Reyes 19:15; Salmos 80:1; Isaías 37:16.
El profeta Ezequiel se refiere a estos seres espirituales diecinueve veces y a la verdad relacionada con ellos deriva de estos pasajes, y son presentados con cuatro rostros diferentes: Rostro de león, rostro de buey, rostro de hombre rostro de águila, Ezequiel 1:3-28; Ezequiel 10:1-22. Este simbolismo está relacionado a los seres vivientes de la visión del apóstol Juan, Apocalipsis 4:6; 5:14.
La palabra “Serafín”, viene del original hebreo “Sarauph”, que significa, “Brillantes, ardientes o nobles”. Los serafines declaran la gloria incomparable de Dios y su santidad suprema.
El título “Serafín”, está relacionado a la adoración incesante y su ministerio de purificación. Ellos aparecen solamente una vez en las escrituras en Is 6:2, que dice: “Por encima de él había serafines, cada uno tenía seis alas; con dos cubrían sus rostros, con dos cubrían sus pies, y con dos volaban.”.
La atribución triple de la adoración según Isaías, es repetida por Juan en Ap 4:8, sobre el título de “Seres vivientes”, cuando dice: “Y los cuatros seres vivientes tenían seis alas, y alrededor, y por dentro estaban llenos de ojos; y no cesaban día y noche de decir: Santo, santo, santo es el Señor Dios todopoderoso”.
El texto bíblico de Col 1:16, indica la existencia de organizaciones de ángeles buenos, cuando dice: “Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos, y las que hay en la tierra, visibles e invisibles, sean Tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.”.
En el texto de Efesios 1:21, parece incluir también los ángeles malos, cuando dice: “Sobre todo principado y autoridad y poder y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no solo en este siglo, sino también en el venidero.”.
Otras referencias bíblicas se refieren definitivamente a los ángeles malos, las cuales son: Ro 8:38, Colosenses 2:15.
Las categorías de los ángeles gobernadores son:
Tronos
Viene del griego “Thronoi”, y se refiere a seres angelicales cuyo su lugar es delante del trono de Dios. Estos ángeles son revestidos de poder real.
Dominios
Viene del griego “Kuriotetes”, esta categoría se refiere a una clase de ángel con funciones ejecutivas, y cada una gobierna una esfera espiritual.
Principados
Viene del término griego “Archai”. Se refiere a una clase de ángel que tiene la dignidad de príncipe de un reino.
El arcángel Miguel es el príncipe de Israel, Daniel 10:21; Daniel 12:1. El texto de Daniel 10:21, habla del príncipe de Persia y de Grecia.
Potestades
Viene del griego “Exousiai”. Se refiere a seres angelicales designados para ejercer actividades especiales; aquí no se trata de ángeles con poderes especiales para hacer lo que quieren, sino que fueron revestidos de una autoridad especial para cumplir propósitos de Dios.
Existen algunos otros ángeles que son nombrados en la Biblia que ejercieron algunos propósitos y otros que ejercerán propósitos especiales en la historia de la humanidad, entre ellos hay también los ángeles que sirvieron como mensajeros de juicio.
Gabriel
El vocablo Gabriel viene del hebreo “Geber’El”, que significa “Hombre de Dios”, y aparece cuatro veces en la Biblia como revelador de los propósitos divinos.
En el A.T. Gabriel habló a Daniel sobre el fin de los tiempos, Daniel 8:15-27. Gabriel también habló a Daniel sobre los años que el pueblo de Israel iba a permanecer en el cautiverio, Daniel 9:20-27.
En el N.T. este mismo Gabriel dio el mensaje a Zacarías del nacimiento de Juan el bautista, Lucas 1:11-20. Gabriel dio el mensaje a Maria sobre el nacimiento del Jesús, Lucas 1:26-33.
Vigilantes
Viene del hebreo “Ur”, que significa “Atalaya”. Es mencionado solamente en Daniel 4:13, 17 y 23. Son los ángeles que promovieron celosamente los decretos de Dios y demostraron el señorío de Dios en el reinado de Nabucodonosor.
El ángel del abismo
El ángel del abismo es un ángel poderoso que tiene el poder para abrir el abismo y recibirá poder para liderar a un ejercito de demonios que van a atormentar a los habitantes de la tierra por cinco meses en el periodo de la gran tribulación, Apocalipsis 9:1-12.
Este ángel es llamado en Apocalipsis 9:11 de “Abadon” y “Apolión”, que son términos hebreo y griego que significan “Destructor”.
El ángel que tiene poder sobre el fuego
Apocalipsis 14:18. Según los estudiosos, este ángel tiene la misión de conservar encendido el fuego del altar celestial.
El ángel de las aguas
Apocalipsis 16:5. Este ángel tiene el poder y la misión de guarda los suplementos las aguas del globo terrestre.
Esta idea de que cada ángel tiene una tarea de controlar los elementos de la naturaleza es extraída de la tradición judaica helenística.
Los ángeles que controlan los vientos
Apocalipsis 7:1. Según el texto bíblico, existen cuatro ángeles que están cada uno en un ángulo de la tierra controlando los vientos de cada ángulo para evitar grandes destrucciones sobre la tierra Daniel 7:2, nos habla de estos cuatro vientos.
El respeto y reverencia a los ángeles era inmensa en el judaísmo de tal manera que era considerada como una experiencia tan profunda como ver al mismo Dios, Génesis 16:13; Jueces 6:11-14. Sabemos que algunos de estos casos son teofanía.
La teología judaica antigua consideraba a los ángeles como mediadores entre Dios y los hombres. Esta posición tan elevada hizo con que los hombres los adorasen.
La adoración a los ángeles también penetró en la iglesia cristiana a través de las sectas gnósticas.
¿Qué es gnosticismo?
Es una doctrina filosófica y religiosa de los primeros siglos de la iglesia cristiana, con mezclas de cristianismo con creencias judaicas y orientales, que se dividió en varias ramas, y pretendía tener un conocimiento misterioso de las cosas divinas.
El propio ángel exhortó a Juan que no lo adorase en Apocalipsis 19:10, “Yo me postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: No lo hagas; yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos que retienen el testimonio de Jesús. Adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía.”.
En el siglo II, Justino Martín declaró que los cristianos veneraban a las huestes de los ángeles buenos. A partir del siglo V, el culto a los ángeles se tornó generalizado, siendo que el arcángel Miguel era el más venerado.
La adoración a los ángeles estaba presente en el mundo cristiano medieval, como ser: En los cuadros, en forma de estatuas, en las poesías, en las canciones, etc. Lo más descriptivo fueron los cuadros pintados por los artistas renacentistas que representaban a los ángeles como figuras varoniles.
El cristianismo medieval asimiló la varias especulaciones sobre los ángeles, y como consecuencia, empezó a incluir l adoración a los ángeles en sus liturgias. Esa aberración continuó creciendo, llevando al Papa Clemente X, aproximadamente entre los años 1670 a decretar una fiesta en homenaje a los ángeles.
Las escrituras sagradas comprueba que existe una cantidad innumerables de ángeles, y son repetidamente mencionados como ejércitos de los cielos y de Dios, Daniel 7:10; Salmos 68:17; Deuteronomio 33:2; Apocalipsis 5:10; Hebreos 12:22; Lucas 2:13.
Es imposible determinar el número total de los ángeles creados por Dios. La cantidad existente de ángeles es única e incontable, porque desde que fueron creados, no aumentaron ni disminuyeron en número, pues ellos son inmortales, o sea, ellos no mueren.
Los ángeles no se procrean y no tienen sexo, pues esta idea equivocada surgió de los griegos y romanos, y aun los saduceos creían en esta idea.
El apóstol Juan en sus revelaciones confirma la innumerable cantidad de ángeles que están delante de Dios. “Y miré y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono, y de los seres vivientes y de los ancianos, y su número era millones y millones”, Apocalipsis 5:11.
El mismo Jesús declara en Mateo 26:53 que él podía orar al Padre, y él enviaría una legión de ángeles para protegerlo. Una legión era conformada por aproximadamente 5.000 soldados romanos.
La doctrina del ángel de la guardia es la idea que cada persona tiene un ángel como un guía espiritual ayudador que cuida a cada persona. Esta doctrina es muy antigua, y es adoptada por los judíos y la iglesia cristiana.
El libro de Daniel se refiere a esta antigua creencia que las naciones también tenían sus ángeles guardianes, y menciona a Miguel como el guardia de Israel, Daniel 10:13-21.
La Biblia dice en Salmos 91:11, 12, “Pues a sus ángeles mandará a cerca de ti, que te guarden en todos tus caminos, en las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra.”.
En el hinduismo, el ángel de la guardia es visto como una porción superior del propio ser de cada persona, siendo llamados de “Sobre ser”. Este concepto dice que el cuerpo es el instrumento del alma, y el alma es un instrumento de un elevado poder sobrenatural, esta es una creencia que cada persona tiene un ángel dentro de sí
Este falso concepto no tiene un fundamento bíblico, pues los ángeles de Dios no viven dentro de nosotros, sino que acampan alrededor de los que temen a Dios, Salmos 34:7.
El ángel de la guardia hace parte de la tradición hebrea
El término “Teofanía”, viene del original griego que significa “Manifestación del mismo Dios”. Esta manifestación del mismo Dios es revelada en la persona del Ángel del Señor, también conocido como “El Ángel de Jehová”. Esta designación especial en el A.T. ocurre sesenta veces, y se puede entender como el mismo Dios manifestándose en forma de un ángel para hablar a sus siervos. Mostraremos algunos episodios que revelan la teofanía en la Biblia, entre ellos están:
1.- Aparición a Abraham
Génesis 18:1, 2, ”Después le apareció Jehová en el encinar de Monre, estando él sentado a la puerta de su tienda en el calor del día. Y alzó sus ojos y miró, y he aquí tres varones que estaban junto a él y cuando los vio, salió corriendo de la puerta de su tienda a recibirlos y se postró en tierra”.
2.- Aparición a Jacob
Génesis 32:24,”Así se quedó Jacob solo; y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba. Y el varón le dijo: No se dirá más tu nombre Jacob, sino Israel porque has luchado con Dios y con los hombres y has vencido. Y llamó Jacob el nombre de aquel lugar Peniel, porque dijo: Vi a Dios cara a cara y fue librada mi alma.”.
3.- Aparición a Agar
Génesis 18:1, 2,”Y la halló el Ángel de Jehová junto a una fuente de agua en el desierto, junto a la fuente que estaba en el camino de Shur.”.
4.- Aparición a Moisés
Éxodo 3:2,”Y se le apareció el Ángel de Jehová en una llama de fuego en medio de una zarza, y él miró y vio que la zarza ardía en fuego, y la zarza no se consumía”.
5.- Aparición a Balaam
Números 22:31,”Entonces Jehová abrió los ojos de Balaam, y vio al Ángel de Jehová que estaba en el camino, y tenía su espada desnuda en su mano. Y Balaam hizo reverencia y se inclinó sobre su rostro.”.
6.- Aparición a todos los hijos de Israel
Jueces 2:1,”Y el Ángel de Jehová subió de Gilgal, y dijo: Yo os saqué de Egipto, y os introduje en la tierra de la cual había jurado a vuestros padres, diciendo: No invalidaré jamás mi pacto con vosotros.”.
Los ángeles son ejércitos y no raza: La s escrituras sagradas nos enseña que no existe compatibilidad con la idea de los saduceos relacionado al matrimonio entre ángeles y humanos, tampoco entre ángeles entre si.
Jesús mismo declaró en Mateo 22:30, acerca de este tema diciendo:
”Entonces respondiendo, Jesús les dijo: Erráis, ignorando las escrituras y el poder de Dios. Porque en la resurrección ni se casarán ni se darán en casamiento, sino serán como los ángeles de Dios en el cielo”.
El texto de Lucas 20 34, 35, habla más claramente sobre este tema, cuando dice: “Entonces respondiendo Jesús, les dijo: Los hijos de este siglo se casan, y se dan en casamiento; más los que fueron tenidos por dignos de alcanzar aquel siglo y la resurrección de entre los muertos, ni se casan, ni se dan en casamiento”.
Si analizamos en un contexto teológico, Jesús estaba relacionando la situación de todas las personas que irán al cielo, con la distinción de los ángeles. Jesús quería mostrar a los saduceos que no existía en el cielo la doctrina de procreación de los seres espirituales, de esta manera llegamos a la conclusión que los ángeles no son razas, porque una raza se procrea, pero seres espirituales son creados por Dios como un ejercito para su servicio, por lo tanto, no se caracteriza una raza.
En el libro de Job 1:6; 2:1 y 38:7, los ángeles son llamados hijos de Dios, pero nunca hemos leído o encontrado en las escrituras sobre los hijos de los ángeles.
Los ángeles son siempre descritos en las escrituras como varón, sin embargo, ellos no tiene sexo.
Los ángeles son seres racionales, morales e inmortales
A los ángeles les son atribuidos características personales. Son seres inteligentes y dotados de voluntad y actividad. A pesar de que ellos no son omniscientes, Mateo 24:36, son superiores a los hombres, y por el hecho de tener naturaleza moral, son recompensados por la obediencia, y castigados por la desobediencia.
La Biblia habla de los ángeles que permanecieron fieles como sus santos ángeles, Mateo 25:31; Marcos 8:38; Lucas 9:26; Hechos 10:22. Pero también muestra a los que cayeron como mentirosos y pecadores, Juan 8:44; 1 Juan 3:8-10.
La inmortalidad de los ángeles está relacionada al sentido de que los ángeles buenos y malos no están sujetos a la muerte, pues son inmortales, pero los ángeles buenos están listos para hacer todo lo que el Señor ordenar, Salmos 103:20; Colosenses 1:16; Efesios 1:21; Efesios 3:10; Hebreos 1:14. Sin embargo, los ángeles malos forman el ejército de Satanás, empeñado a destruir la obra del Señor, Lucas 11:21-26; Juan 10:10.
Los ángeles adoran al Señor, Salmos 148:2. Los ángeles contemplan la faz de Dios, Mateo 18:10. Los ángeles reconocen su inferioridad delante de Jesús, Hebreos 1:4-14.
Por la sublime tarea que los ángeles desempeñan en el tiempo y en el espacio, desde el principio, y por todo lo que la Biblia dice relacionado a ellos, llegamos a la conclusión que los ángeles exceden en sabiduría y conocimiento, a todos los hombres, pues tenemos la convicción bíblica que los ángeles fueron creados como espíritus inteligentes, cuyo conocimiento tuvo origen desde el principio de su creación.
Los ángeles son superiores a los hombres
En 2 Pedro 2:11, afirma que los ángeles son mayores en fuerza y en potencia. Estos seres espirituales recibieron la inmortalidad, y esto ya los hace superior a los hombres que son seres mortales. Lucas 20:36.
El poder y la superioridad que tienen los ángeles es derivado de su creador, sin embargo, su poder es restricto, pues ellos no tienen potestad para realizar ciertas funciones y atributos que son peculiares de Dios, como: Crear las cosas, sondear los corazones de los hombres o perdonar los pecados.
El poder angelical es superior, pero no es supremo. Dios simplemente los revistió de poder celestial para que ellos sean ministros para cumplir sus órdenes, Salmos 103:20. Con el poder que ellos han recibido, han de cumplir los últimos juicios de Dios sobre la humanidad, 2 Tesalonicenses 1:7, 8.
Demonología es la doctrina teológica que estudia la relación de los demonios con la Biblia. La demonología es un estudio doctrinario que ha despertado el interés de las personas en estos últimos tiempos.
Teorías religiosas y filosóficas, alusiones bíblicas desproveídas de una interpretación han invadido el mundo de la literatura secular.
Todos los que leen la Biblia en un aspecto cristológico, identificará a los demonios como seres espirituales caídos que siguieron a Lucifer en su rebelión contra Dios.
En este comentario tendremos la oportunidad de conocer esa doctrina de un punto de vista bíblico, como la única autoridad capaz de revelar y aclarar la realidad y la identidad de estos seres espirituales.
El término “Demonio” aparece solamente tres veces en el antiguo testamento: Deuteronomio 32:17; Salmos 106:37; Levítico 17:7. En el nuevo testamento, el término griego para esta palabra es “Daimonion”, que tiene el sentido literal de una malignidad. Ellos son seres espirituales inteligentes, impuros, dotados de poderes malignos para dañar a la raza humana en el aspecto moral y espiritual.
Según la Biblia, hubo una gran rebelión de los seres espirituales que originó una gran batalla en el cielo, Job 4:18; Apocalipsis 12:7; Mateo 25:41; 2 Pedro 2:4.
Apocalipsis 12:7-9 dice: “Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles; pero no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo. Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él”.
Lucifer, el más elevado de los ángeles, comandó esta rebelión, de esta manera, surgieron los ángeles caídos, que son los demonios, ángeles infernales, malos, que por orden de Satanás, buscan destruir a los seres humanos, principalmente a los hijos de Dios.
Teológicamente, los demonios son los ángeles caídos que siguieron a Lucifer en su rebelión contra Dios. El término griego “Demonio” está relacionado a los ángeles caídos, pero este título no es dado a Lucifer, sino solamente a sus súbditos que son los ángeles caídos que están a su servicio.
El término “Demonio”, significa “Divinidad maligna”. Los demonios son dotados de grades poderes espirituales, eso significa que aun siendo expulsados del cielo, los ángeles caídos no perdieron sus poderes angelicales; la única diferencia es que ellos utilizan su poder para hacer el mal.
Los ángeles caídos perdieron gloria y hermosura, quedando maldecidos y con aspecto horrible según la tradición hebrea.
Estos espíritus caídos están divididos en dos clases, los que están en libertad y los que están en prisiones.
Los que están en libertad
Son todos aquellos demonios que están libres y viven en las regiones celestes que es una dimensión espiritual en el universo sobre el dominio de Satanás. Estos espíritus malignos que están en libertad son emisarios y súbditos de Satanás, Mateo 12:26.
Los que están en prisiones
Son todos aquellos demonios que se tornaron tan depravados, malos y peligrosos, que tuvieron que ser encerrados en el abismo por el mismo Dios para no causar daño a la humanidad, Apocalipsis 9:1, 2, 11, Judas 6.
El Nuevo Testamento menciona varias personas posesas por influencias demoníacas, menciona también el conflicto de Jesús con los demonios. El evangelio de San Marcos relata varios textos relacionados a los demonios, entre ellos están: Marcos 1:23-26; 32; 34, 39; 3:10-12; 5:1-20; 6:7, 13; 7:25-30; 9:17-29; 16:17.
En Mateo 12:43-45, Jesús explica como los demonios se apoderan de las vidas de las personas, diciendo: “Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, anda por lugares secos, buscando reposo, y no lo halla. Entonces dice: Volveré a mi casa de donde salí, y cuando llega, la halla desocupada, barrida y adornada. Entonces va, y toma consigo otros siete espíritus peores que él, y entrados moran allí; y el postrer estado de aquel hombre viene a ser pero que el primero”.
Efesios 6:12, afirma que los demonios son partes de las potestades y otras categorías angelicales de maldad., por eso los cristianos deben luchar contra ellos no carnalmente, sino en un aspecto espiritual. La Biblia confirma que los demonios pueden habitar en el cuerpo de una persona, Lucas 4:41; Marcos 5:15; Lucas 8:27, 28; Hechos 16:18.
La Biblia también afirma que hay muchas enfermedades malignas que son colocadas por demonios en las personas, Mateo 9:32, 33; 12:22; 17:18. Los espíritus inmundos están operando activamente en estos últimos días con la divulgación del ocultismo, de la inmoralidad, violencia y crueldad. Ellos atacan la Palabra de Dios y la sana doctrina, Mateo 24:24; 2 Corintios 11:14, 16; 1 Ti moteo 4:1. El mayor empeño de la posesión demoníaca será en la actividad del anticristo y sus seguidores, 2 Timoteo 2:9; Apocalipsis 13:2-8; Apocalipsis 16:13, 14.
Cuando Jesús hacia un milagro, frecuentemente atacaba el poder de Satanás y los demonios, Marcos 1:25, 26; 34, 39; 3:10, 11; 5:1-20; 8:17-29; Lucas 13:11, 12, 16. Uno de los propósitos de Jesús en su ministerio era subyugar a Satanás y libertar a las personas que estaban siendo esclavizados por él, Mateo 12:29; Marcos 1:27; Lucas 4:18.
Jesús derrotó a Satanás primeramente, expulsando a los demonios, y de modo pleno, a través de su muerte y resurrección, Juan 12:31.
Colosenses 2:15 dice: Y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz”. De esta manera, Jesús aniquiló el dominio de Satanás y restauró el dominio del reino de Dios en la tierra.
La Biblia enseña que ningún creyente verdadero, que habita el Espíritu Santo, puede quedar poseso de demonios, o sea, el Espíritu Santo y los demonios no habitan en un mismo cuerpo al mismo instante, 2 Corintios 6:14-16.
Sin embargo, los demonios pueden influenciar en los pensamientos, emociones y acciones de los creyentes que se descuidan espiritualmente, Mateo 16:23; 2 Corintios 11:3, 14.
Jesús nos prometió dar autoridad sobre el poder de Satanás y sus huestes. Cuando nos deparamos con estos poderes malignos, debemos aniquilar el poder que ellos quieren ejercer sobre nosotros, confrontándolos sin tregua por el poder del Espíritu Santo, y de esta manera, podemos ser libres del los poderes de las tinieblas.
Según la parábola en Marcos 3:27, el conflicto espiritual contra Satanás, involucra algunos aspectos, entre ellos están: Declarar guerra contra Satanás según el propósito de Dios, atacarlo y vencerlo por el poder de la oración y de la Palabra de Dios, destruir sus armas de engaño y posesión demoníaca, apoderarse de sus bienes, o sea, libertar a los cautivos y entregarlos a Dios para que reciban el perdón, mediante la fe en Jesucristo.
Debemos recordar que en la lucha contra el mal, no estamos en un conflicto contra la carne y contra sangre, sino contra fuerzas espirituales de maldad, Efesios 6:12. Recordemos también que el poder de Satanás puede ser aniquilado, Hechos 26: 16, 17; Efesios 6:16; 1 Timoteo 5:8. Debemos reconocer que tenemos armas espirituales poderosas dadas por Dios para destrucción de fortalezas, 2 Corintios 10:3-5. Debemos confrontar a Satanás y su poder de manera directa, por la fe y en nombre de Jesús por la Palabra de Dios, Efesios 6:17.
Su nombre antes era “Lucifer”, termino griego que significa, “Lucero” o “Hijo de la mañana”, mencionados en Isaías 14:12. La Biblia en español no menciona el nombre Lucifer, pues este nombre es derivado de la Septuaginta, pero fue desde el siglo tercero de la era cristiana que este nombre quedó más conocido entre los cristianos.
La categoría angelical de Lucifer es Querubín Ezequiel 28:14, y según la tradición hebrea, Lucifer era regente del coral celestial y tenía gran poder y autoridad dados por Dios. Hay dos textos bíblicos que relata una deslumbrante revelación del origen y caída de Satanás, los cuales son: Is 14:12-17 y Ezequiel 28:13-15.
Is 14:12-17 dice: “¡Como caíste del cielo, oh lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tu que debilitabas a las naciones. Tu que decías en tu corazón: Subiré al cielo en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al altísimo.
Más tu derribado eres en el Seol, a los lados del abismo. Se inclinarán hacia ti los que te vean, te contemplarán diciendo: ¿Es este aquel varón que hacía temblar la tierra, que trastornaba los reinos; que puso el mundo como un desierto, que asoló sus ciudades, que a sus presos nunca abrió la cárcel?”.
Veamos también el texto de Ezequiel 28:13-15 que está relacionado con el rey de Tiro y una alusión profética a Satanás que dice: “En Edén, en el huerto de Dios estuviste; de toda piedra preciosa era tu vestidura; de cornerina, topacio, jaspe, crisolito, berilo y ónice; de zafiro y carbunclo, esmeralda y oro. Los primores de tus tamborines y flautas estuvieron preparados para ti en el día de tu creación. Tu, querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te paseabas. Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste Creado, hasta que se halló en ti maldad. A causa de la multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad, y pecaste por lo que yo te eché del monte de Dios, y te arrojé de entre las piedras de fuego, oh querubín protector.”.
La personalidad es el carácter propio de cada ser; también entendemos como el medio de vida de cada persona. Él era conocido antiguamente como la antigua serpiente, llamado de diablo, como siendo simplemente “El Malo”. Las escrituras sagradas revela constantemente y relativamente su personalidad, usando un pronombre personal que muestra su enemistad con su creador: Job 1;8; Job 2:2, 3; Zacarías 3:2; Mateo 4:10.
Es importante que sepamos que Satanás no es un símbolo mitológico del mal, sino un ser vivo, real e inteligente. No olvidemos que su nombre verdadero es Lucifer, y era portador de la luz, fue dotado de libre albedrío, era perfecto. La luz de Dios reflejaba sobre él, y estaba siempre participando de la gloria y de la luz divina.
La caída de Lucifer fue una ilusión y engaño acerca de su propio poder sobre las huestes angelicales. El motivo de la caída de Lucifer fue su orgullo y soberbia en querer ser igual a Dios. Él se creía superior a los demás ángeles, y pretendió de esta manera tomar el lugar del creador. La caída de Lucifer fue el resultado de su propia decisión, pues Dios estableció su soberana voluntad para ser obedecida y apreciada por sus ángeles; entretanto, esta voluntad divina no sería obedecida a la fuerza, sino con libre albedrío; es por este principio bíblico que podemos comprender la caída de Lucifer. En Isaías 14:13,14, hay cinco afirmativas que revelan las pretensiones de Lucifer, las cuales son:
Subiré al cielo: Este era el intento de estar sobre toda la creación.
Junto a las estrellas de Dios levantaré mi trono: Él quería tener dominio sobre todos los ángeles.
En el monte del testimonio me sentaré: Él quería ocupar el lugar de Dios.
Sobre las alturas de las nubes subiré: Una vez más, él revela su intento de superioridad.
Seré semejante al altísimo: Aquí está el pecado más terrible de Lucifer; Él quería colocarse en una posición unilateral con el creador, queriendo ser igual a Dios.
Lucifer es un ser inteligente, hostil y traicionero. La Biblia lo muestra resistiendo a Dios y perturbando la paz de las naciones con guerra, destrucción y desastres.
Las escrituras sagradas, utiliza varios substantivos y pronombres personales a la persona de Lucifer, entre ellos están:
Satanás
Este nombre fue dado a Lucifer después de su caída. Este término viene del hebreo “Satán”, que significa “adversario”. 1 Crónicas 21:1; Job 1:6; Lucas 10:18; Apocalipsis 20:2.
Diablo
Este término aparece solamente en el N.T. Es una trascripción del vocablo “Diabolos”, que significa “Calumniador” o “Acusador”, Mateo 13:39; Juan 13:2; Apocalipsis 12:12.
La antigua serpiente
Este término indica su carácter de deshonestidad, astucia y falsedad, Génesis 3:1; 2 Corintios 11:3.
Beelzebú
Esta es una palabra griego derivado del idioma sirio, que significa “Señor del estiércol” o “Señor de las moscas”. Este título está relacionado a un dios pagano de Ecron llamado “Baal Zebub”, 2 Reyes 1:6. En el contexto griego este nombre aparece como “Beelzebú”, cuya atribución dada por los judíos del tiempo de Jesús era al “Príncipe de los demonios”, Marcos 3:22.
Belial
Este término es un término hebreo que significa “Perverso”, “Depravado” o “Malvado”, 2 Corintios 6:15. Los texto de Jueces 20:13 y 1 Samuel 30:22, están relacionados a los hijos de Belial.
El tentador
Este término indica su propósito de llevar a los seres humanos al pecado, Mateo 4:3.
El malo
Esta es una descripción de su carácter y su obra, Mateo 13:19, 38.
Príncipe de la potestad del aire
Este término indica que el es el líder de las huestes espirituales de maldad que están en las regiones celestes, o sea, en una dimensión espiritual en el aire.
El dios de este siglo
Como dios de este época, él patrocina la religión del hombre natural, y sin duda, él es el responsable por todos los falsos cultos de adoración a otros dioses y sistemas doctrinarios que están en contra del cristianismo en todo el mundo.
Dragón
Esta palabra viene de un vocablo hebreo “Tamiz”, que significa “Monstruo marino”, que se entiende como un animal raro, monstruoso de horrible parecer y destructor.
SETEADB. ANGELOLOGÍA. Editorial La Epístola. Bolivia. 2012.
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Publicación de Jose Luis Pereyra