i. INTRODUCCIÓN
El libro de hechos de los apóstoles es conocido como "El evangelio del Espíritu Santo", pues en este libro es manifestada la presencia constante del Espíritu Santo, revelando la magnitud de la persona de Jesús.
Este libro muestra a Pedro y a Pablo de una manera especial como destaque en los hechos sucedidos en aquella época más que a los otros apóstoles.
Según el escritor de este libro, la iglesia cristiana primitiva estaba centralizada en la ciudad de Jerusalén; pero fue después de la muerte de Esteban que la iglesia salió por toda Judea, Samaria y hasta lo último de la tierra.
En este libro encontramos cómo la iglesia de Cristo se fortaleció y se estableció entre los gentiles sobre la influencia y la operación del Espíritu Santo en la vida de los apóstoles; es también en este libro que es narrado el principio de la persecución de la iglesia y su crecimiento, y sobre todo, la propagación del evangelio por todo el mundo.
En esta lección, aprenderemos cómo la iglesia de Cristo empezó su ministerio llevando el evangelio a todo el mundo por intermedio de los apóstoles; y sobre todo, revela la historia de la conversión del apóstol Pablo y su ministerio.
ii. SU MENSAJE
El libro de Hechos de los Apóstoles, transmite un mensaje profundo sobre la necesidad de cumplir la ordenanza de Jesús de predicar el evangelio y de esperar el revestimiento de poder para que la iglesia sea fortalecida con autoridad del cielo para cumplir los propósitos de Dios. A pesar que este libro es considerado un libro histórico; posee una relevancia importante en el desarrollo de las materias teológicas de Eclesiología, Soteriología y Espíritu Santo; estos elementos fueron importantes para la formación del cristianismo.
El escritor de este libro usó varías fuentes para escribirlo; él se relacionaba personalmente con los apóstoles, principalmente con Pedro y Pablo y sus seguidores.
iii. ESCRITOR
Según los estudiosos, el autor de este libro es San Lucas; el mismo que escribió el evangelio de San Lucas. San Lucas era medico y posiblemente era griego.
iv. FECHA
Según los historiadores, este libro fue escrito entre los años 62 a 70 d.C, antes de la destrucción de Jerusalén en el año 70.
v. EL PROPÓSITO DEL LIBRO DE HECHOS DE LOS APÓSTOLES
Podemos notar en el inicio de este libro que el propósito del escritor era relatar los acontecimientos sucedidos con el pueblo cristiano de aquella época. Este libro hace una transición del judaísmo radical por el cristianismo puro, mostrándonos que el poder de la obra salvadora está en el Espíritu Santo derramado en toda carne que confiese que Jesucristo es el Señor y salvador.
vi. ORDEN SISTEMÁTICO DEL LIBRO DE HECHOS DE LOS APÓSTOLES
1. INTRODUCCIÓN. Hechos 1:1-5.
2. LA IGLESIA EN JERUSALÉN. Hechos 1:6 A Hechos 7:60.
La ascensión de Jesús, Hechos 1:5-11.
La elección del sucesor de Judas, Hechos 1:12-26.
La venida del Espíritu Santo, Hechos 2:1-47.
Pedro y Juan, Hechos 3:1 a Hechos 4:31.
La comunidad cristiana, Hechos 4:32 a Hechos 7:60.
3. LA PERSECUCIÓN DE LA IGLESIA. Hechos 8:1 a Hechos 9:31.
Saulo persigue a la iglesia, Hechos 8:1-3.
Persecución del evangelio en Samaria, Hechos 8:4-40.
La conversión de Saulo, Hechos 9:1-31.
4. LA IGLESIA ALCANZA A LOS GENTILES. Hechos 9:32 a Hechos 12:24.
El ministerio de Pedro en Lida y Jope, Hechos 9:32-43.
Pedro y Cornelio, Hechos 10:1-23.
Pedro en Cesarea, Hechos 10:24-48.
Informe de Pedro a la iglesia de Jerusalén, Hechos 11:1-18.
La iglesia en Antioquia, Hechos 11:19-30.
La persecución de la iglesia, Hechos 12:1-24.
5. LA EXPANSIÓN DE LA IGLESIA. Hechos 13:1 a Hechos 21:16.
a) Primer viaje misionero de Pablo, Hechos 13:1 a Hechos 15:35.
b) Segundo viaje misionero de Pablo, Hechos 15:16 a Hechos 18:20.
c) Tercer viaje misionero de Pablo, Hechos 19:1 a Hechos 21:16.
6. EL MINISTERIO FINAL DE PABLO. Hechos 21:17 a Hechos 28:31.
a) Arresto de Pablo en Jerusalén, Hechos 21:17-40.
b) La defensa de Pablo, Hechos 22:1 a Hechos 23:35.
c) Defensa de Pablo ante Félix, Hechos 24:1 a Hechos 25:12.
d) Pablo ante Agripa y Berenice, Hechos 25:13 a Hechos 26:32.
e) Pablo es enviado a Roma, Hechos 27:1 a Hechos 28:22.
f) Despedida de Pablo, Hechos 28:23-31.
vii. LA IMPORTANCIA DEL LIBRO DE HECHOS DE LOS APÓSTOLES
Este libro, relata la ascensión de Jesús al cielo, la venida del consolador, y la ordenanza de Jesús para que este evangelio sea predicado a los gentiles.
Los evangelios narran la vida de Jesús y su ministerio, pero el libro de Hechos narra sobre el poder sobrenatural del Espíritu Santo, no solo en la vida de los apóstoles, sino también en la existencia de la iglesia, por esta razón este libro es conocido como "El quinto evangelio y el evangelio del Espíritu Santo".
San Lucas es el único evangelista que afirma que Jesús quedó 40 días con sus discípulos después de su resurrección y confirma la promesa del bautismo del Espíritu Santo profetizado por los profetas del antiguo testamento.
Los temas principales de Jesús a sus discípulos en estos 40 días, después de su resurrección eran, sobre el reino de Dios y sobre el Espíritu Santo, entretanto, los discípulos estaban aprensivos sobre la restauración de Israel; ellos querían saber si este evento iba a suceder en aquellos días.
En la expresión "Pero recibiréis poder", la palabra "Poder" en Hechos 1:8, en griego es "Dinamis", que viene de la palabra "Dinamite" que es la expresión original; lo que Jesús quiso transmitir a sus discípulos era que a través del poder del Espíritu Santo, ellos cambiarían la historia del mundo, después que ellos recibieron el poder del Espíritu Santo, predicaban por todas partes, no con armas físicas, pero con la espada del Espíritu.
viii. CONTEXTOS HISTÓRICOS
San Lucas termina este libro de una manera repentina con la prisión de Pablo en Roma, Hechos 28:30, 31.
San Lucas no narra la audiencia de Pablo ni su muerte, no hace mención de la muerte de Pedro, no habla de las matanzas ordenadas por Nerón, y no habla de la destrucción de Jerusalén en el año 70 d.C. Estas circunstancias son suficientes para determinar que este libro fue escrito antes del año 67 a.C. Es importante observar que en el evangelio de San Lucas, él procuró investigar los hechos del ministerio de Jesús, pero en este libro, él fue testigo ocular de lo acontecimientos.
Si no fuera el libro de hechos de los apóstoles, seria imposible comprender el origen de la iglesia, ni podríamos comprender las epístolas paulinas, ni la venida del consolador, ni la expansión de la iglesia por toda la tierra.
i. EL DÍA DE PENTECOSTÉS Y LA VENIDA DEL ESPÍRITU SANTO
El Día de Pentecostés era una de las tres principales fiestas judaicas, las otras dos eran: La pascua y la fiesta de los tabernáculos.
La palabra "Pentecostés", es una palabra griega que significa "Quincuagésimo día" o sea "50 días después de la pascua"; esta fiesta era también conocida como "Fiesta de las primicias", pues en estos días, se realizaba la cosecha del trigo y la primicia era ofrecida a Dios, precisamente para los sacerdotes.
En Hechos 2:1, dice que los discípulos estaban todos reunidos en el día de Pentecostés en Jerusalén en un lugar denominado "El Cenáculo" más conocido como "El aposento alto", que se quedaba en un monte llamado "Olivar", Hechos 1:12; y eran como numero de ciento veinte personas que estaban reunidos en aquel lugar, Hechos 1:15; allí también estaba Maria madre de Jesús, Hechos 1:14.
Ellos estaban todos en aquel lugar perseverando en oración y ruego, Hechos 1:14. La venida del Espíritu Santo sobre ellos vino en forma de dos símbolos: Viento y fuego, que son símbolos representativos del Espíritu Santo en la Biblia. La manifestación divina ligada al fuego era común en el A.T. como una señal de juicio y también como inicio de una nueva era para el pueblo de Dios.
Las lenguas extrañas era una señal diferente para los discípulos y para los gentiles que estaban cerca de aquel lugar.
Los profetas y el pueblo del A.T. desconocían la experiencia pentecostal, pues esto fue una promesa de Jesús para la dispensación de la iglesia del Nuevo Testamento y de los últimos días.
¿Que significa ser lleno del Espíritu Santo?
Esta expresión es una figura de lenguaje que significa una persona abrir espacio en su vida para que el Espíritu Santo opere sin límites y sin restricciones.
ii. HABLAR EN LENGUAS EXTRAÑAS
Este episodio es casi igual a lo que pasó en la torre de Babel, la diferencia es que en la torre de Babel, ninguno entendía al otro, pero en el día de Pentecostés, dice Hechos 2:4, "Que ellos hablaban en lenguas según el Espíritu les daba que hablasen". El término "lengua" en este texto está escrito en el original griego como "Glossa", que significa "Lenguas angelicales".
En Hechos 2:6, la misma expresión "Lengua" en el original griego está escrito como "Dialektus", que significa "Lenguas de naciones diversas". Podemos comprender que las ciento veinte personas que estaban en el aposento alto hablaron dos clases de lenguas: Angelicales y terrenales.
Lenguas extrañas no es lo mismo que lenguas extranjeras; la lengua extranjera siempre hay alguien que la pueda entender, pero la lengua extraña solo el Espíritu Santo puede revelar; pues son lenguas angelicales. El apóstol Pablo dice en 1 Corintios 14:2 lo siguiente: "Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie entiende, aunque por el Espíritu habla misterios".
La expresión "Lenguas" en este texto en griego es "Glossa", o sea "Lenguas angelicales".
iii. EL BAUTISMO CON EL ESPÍRITU SANTO ES PARA TODAS LAS ÉPOCAS
No existe ninguna indicación en el N.T. que declara que el bautismo con el Espíritu Santo fue solo para la iglesia del primer siglo como defiende algunas denominaciones antipentecostal; hay registros en el transcurso de la historia del cristianismo de muchos cristianos que fueron bautizados con el Espíritu Santo y hablaron en leguas extrañas como ser: Irineo, Agustino, Martin Lutero, y otros.
Muchos siglos después de la época de la iglesia primitiva, hubo un gran avivamiento en el país de Gales, en Kansas Estados unidos y en Brasil de una manera casi simultanea.
El fenómeno de las lenguas extrañas volvió a ser generalizado en todos los lugares, y hasta el día de hoy, este mismo Espíritu sigue bautizando a millares de creyentes y distribuyendo dones a todos cuanto él quiere dar.
La promesa del derramamiento del Espíritu Santo en Joel 2:28, habla principalmente para los últimos días, o sea los días de hoy, y no estaba relacionado a los días de los apóstoles, pero allí era el principio. Aquel día de Pentecostés fue el inicio de la dispensación del Espíritu Santo, y que su total derramamiento sería en su plenitud en los últimos días, o sea, en los días de hoy.
iv. JUDAISMO Y CRISTIANISMO
Los judíos oraban tres veces al día, por la mañana, al medio día y a la hora novena, o sea, a las tres de la tarde; todavía en los días de hoy, los judíos religiosos hacen lo mismo; los musulmanes oran cinco veces en el día, pero nosotros los cristianos oramos continuamente.
Los apóstoles iban a la hora novena al templo a orar, esto significa que el judaísmo y el cristianismo se identificaban en ciertos aspectos, pues judíos y cristianos adoraban juntos a Dios, de esta manera, la práctica judaica aun estaba en el cotidiano vivir de los cristianos.
Hubo tres factores que contribuyeron para que los judíos se separasen de los cristianos, los cuales son:
La salvación por la fe, que permitió a los gentiles recibir la salvación en Jesucristo sin que sea necesario guardar la ley.
La divinidad de Jesús, hizo que los cristianos fuesen rechazados por los judíos y ser llamados de herejes.
La destrucción de la ciudad de Jerusalén en el año 70 d.C. que antes era un símbolo de unidad, esparció a todos los judíos y cristianos por todas partes.
LA LIMOSNA ENTRE LOS JUDÍOS Y CRISTIANOS
Los judíos consideran hasta el día de hoy dar limosna como una actitud religiosa y piadosa; los cristianos adoptaron esta misma actitud de misericordia de los judíos.
La tarea esencial de la iglesia es la predicación del evangelio, pero no debemos dejar a un lado el trabajo social que es ayudar a los menos favorecidos que siempre fue una preocupación de los apóstoles, pues tanto Jesús como los apóstoles enseñaron la práctica de esta virtud.
LA ÉPOCA DE LA GENEROSIDAD
La palabra "Generosidad" significa "Largueza de bondad, demostración de amor a los demás y hacer el bien a las personas ayudándolos moralmente y económicamente".
En Hechos 4:34, 35, dice: "Así que no había entre ellos ningún necesitado; porque todos los que poseían heredades o casas las vendían, y traían el precio de lo vendido, y lo ponían a los pies de los apóstoles; y se repartía a cada uno según su necesidad.".
Entre estas personas generosas estaba un hombre llamado José que recibió de los apóstoles por sobrenombre Bernabé, un nombre arameo que significa "Hijo de consolación"; Bernabé era un levita natural de Chipre, isla griega en el Mar Mediterráneo, No podemos olvidar de Cornelio en Hechos 10:1, 2; este era un hombre piadoso y temeroso de Dios que hacía muchas limosnas al pueblo y oraba siempre; esta era una de las características principales de la iglesia primitiva que infelizmente se está perdiendo, pues hoy en nuestras iglesias más se dedican a pedir que a dar; muchos piden ofrendas de amor, hacen campañas para recaudar fondos y se olvidan de los necesitados; esta es una realidad que estamos viviendo en muchas iglesias. Existen en nuestros días muchos obreros exploradores que utilizan textos bíblicos para sacar dinero de sus feligreses.
El apóstol Pablo dice en 2 Corintios 9:9, 10, lo siguiente: "Como está escrito: Repartió, dio a los pobres; su justicia permanece para siempre. Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia.".
v. LA COMUNIÓN SIN IGUAL DE LOS CREYENTES DE LA IGLESIA PRIMITIVA
La comunión y la igualdad era algo común en la iglesia primitiva, de manera que en Hechos 4:32-34 dice: "Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común. Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia era sobre todos ellos. Así que no había entre ellos ningún necesitado; porque todos los que poseían heredades o casas, las vendían y traían el precio de lo vendido.".
Todas las cosas eran en común a los creyentes, pues el Espíritu Santo había transformado aquella naturaleza egoísta que es tan común en los corazones de las personas, y puso un corazón quebrantado y lleno de misericordia, de manera que todos compartían el pan, la vestimenta y sobretodo, el gozo que ellos sentían en Jesús.
San Lucas dice que la vida de los primeros cristianos eran de la siguiente manera: en Hechos 2:44-47: "Todos los que habían creído estaban juntos; y tenían en común todas las cosas; Y vendían sus propiedades y sus bienes; y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. Y perseveraban unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, Alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos.".
Hemos aprendido con esto que los creyentes de la iglesia primitiva vivían por el nombre de Jesús, asumiendo una nueva postura de vida, gozando de compañerismo mutuo, comunión, amor, gracia; y el Espíritu Santo estaba con ellos.
i. ELECCIÓN DE LOS SIETE DIÁCONOS
Hechos 6:1-7.
La necesidad de la elección de diáconos en la iglesia primitiva vino por razón de la murmuración de los griegos contra los hebreos que decían que sus viudas eran desatendidas en la distribución diaria de los alimentos. Los griegos en este contexto era el grupo de judíos que hablaban griego y no habían nacido en Israel, pero eran considerados judíos porque sus antepasados fueron llevados cautivos a Babilonia, y allí permanecieron viviendo, pero hubo un grupo que retornó con Zorobabel y otro grupo retornó con Esdras y Nehemías, Esdras 2:1; Esdras 7:1-7; Nehemías 2:9. Estos grupos que retornaron a Jerusalén son considerados hebreos, y estos mismos hebreos consideraban al otro grupo como judíos griegos, por esta razón, había esta rivalidad entre ellos, entonces los apóstoles se reunieron para discutir el problema y llegaron a la conclusión que no era justo que ellos dejasen de predicar la palabra de Dios, para preocuparse en la obra social, por esta razón, ellos eligieron a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría a quienes encargaron este trabajo, Hechos 6:3.
La palabra "Diácono" es derivada del término griego "Diakonein". la palabra "Diakonein" significa "Servir", de esta manera, se deriva la palabra "Diakono", que significa "Servidor". La función de los diáconos en la época de los apóstoles era administrar la distribución de los alimentos a los necesitados y también administrar las finanzas de la iglesia. Jesús utiliza este término en Mateo 20:8 usando la expresión "Mayordomo". En Lucas 22:27, Jesús se consideró un servidor.
La propuesta de los apóstoles de elegir a siete servidores le agradó a la multitud, y de esta manera eligieron siete varones los cuales son: Esteban, Felipe, Prócoro, Nicanor, Timón, Parmenas y a Nícolas de Antioquia, Hechos 6:5.
La actividad del diácono no deja de ser un ministerio, pues toda persona que desea ser un futuro pastor, debe primeramente ejercer el diaconado de la misma manera que Jesús lo ejerció, pues un pastor es sobre todo un servidor de Dios para guiar a su pueblo.
San Lucas no relata mucho sobre los siete diáconos que fueron elegidos, pero destaca el arresto y muerte de Esteban y sobre Felipe predicando al etíope eunuco, Hechos 7:58-60; Hechos 8:26-40.
ii. LOS MÁRTIRES DE LA IGLESIA PRIMITIVA
La palabra "Mártir", significa "Sacrificado" o "Torturado". El libro de Hechos de los apóstoles habla que muchos cristianos fueron perseguidos por amor a Jesús, y fueron esparcidos por las tierras de Judea y Samaria, Hechos 8:1; pero el primer mártir, o sea sacrificado por amor a Jesús, fue Esteban, uno de los siete diáconos de la iglesia primitiva, Hechos 7:58-60.
Otro mártir de la iglesia primitiva fue uno de los apóstoles de Jesús llamado Jacobo, hermano de Juan que fue muerto a espada por el rey Herodes, Hechos 12:2.
Sabemos que Pedro y Pablo también fueron muertos, pero sus muertes no están descritas en este libro, sino por los historiadores bíblicos, pero sabemos que es verdad; no olvidemos de Policarpo, y de los cristianos que eran lanzados a los leones, y otros quemados en el fuego en el período de la santa inquisición.
i. LOS HECHOS DE PEDRO EN EL LIBRO DE HECHOS DE LOS APÓSTOLES
Pedro era hijo de Jonás, hermano de Andrés, y era pescador. Su nombre verdadero era Simón, pero Jesús lo llamó Cefas. El nombre "Cefas" está en arameo y significa "Roca"; en griego es "Pedro" que es "Piedra".
Pedro fue juntamente con Pablo el principal apóstol de esta narrativa de San Lucas; Pedro fue el discípulo de Jesús que tubo la osadía de dar el discurso en el día de pentecostés en Jerusalén.
San Lucas narra muchos episodios que sucedieron con Pedro en su ministerio después de la ascensión de Jesús; de esta manera en esta oportunidad daremos todos los hechos sucedidos con el apóstol Pedro en este libro según el relato de San Lucas:
Pedro da su discurso en el día de pentecostés, Hechos 2:14-42.
Pedro sana a un paralítico en la puerta del templo, Hechos 3:1-10.
Pedro habla delante de los gobernantes y de los ancianos, Hechos 4:8-16.
Pedro reprende a Ananías y Safira, Hechos 5.1-11.
La sombra de Pedro sanaba a los enfermos, Hechos 5:12-16.
Pedro es liberto de la cárcel por un ángel del Señor, Hechos 5:17-23.
Pedro da su defensa ante el concilio, Hechos 5:27-40.
Pedro fue enviado a Samaria, Hechos 8:14.
Pedro reprende a un mágico llamado Simón, Hechos 8:17-24.
Pedro resucita a Dorcas, Hechos 9:36-46.
Pedro sana a un paralítico llamado Eneas, Hechos 9:32-35.
Pedro visita la casa de Cornelio, Hechos 10:1-48.
Pedro da su informe a la iglesia de Jerusalén, Hechos 11:1-18.
Pedro es preso por Herodes, Hechos 12:1-5.
Pedro es librado de la cárcel por un ángel del Señor, Hechos 12:6-19.
Pedro en el concilio en Jerusalén, Hechos 15:1-29.
San Lucas termina la narrativa de Pedro en el capítulo 15 del libro de los hechos, dedicándose a narrar el ministerio y los viajes del apóstol San Pablo.
ii. LOS APÓSTOLES PREDICAN EL EVANGELIO A LOS GENTILES
En la época de los apóstoles, el mundo estaba dividido en dos grupos de personas: Los gentiles y los judíos. Los gentiles son todos aquellos que no son judíos, o sea de otras naciones; por ejemplo: todos nosotros que somos bolivianos, argentinos, brasileños, peruanos venezolanos, etc, somos gentiles; pero todo aquel que es de la descendencia de Abraham en la sangre, son hebreos o judíos, más conocidos como "Israelitas".
El mundo de hoy está dividido en Gentiles, judíos y la iglesia de Cristo, por eso entendemos que nosotros somos gentiles, pero cristianos. La salvación a los gentiles era un plan establecido por Dios.
La expresión "Serán bendita en ti todas las familias de la tierra", en Génesis 12:3, era una promesa de Dios para salvar a todas las naciones y pueblos. Esta tarea empezó en el día de Pentecostés, y después los apóstoles llevaron el mensaje de salvación por todos los lugares.
En Hechos 9:43, Pedro se queda hospedado muchos días en la casa de un cierto Simón curtidor, o sea, un hombre que curtía cuero de animales; esta profesión era inmunda para los judíos, y según las leyes judaicas, le daba derecho a la mujer a divorciarse del hombre que adoptaban profesiones inmundas como esta; pero Pedro ya tenía una visión más allá de las restricciones religiosas y leyes judaicas. Otra prueba de la manifestación de la salvación a los gentiles es la visita de Pedro a la casa de Cornelio, en Hechos 10:1-48.
Cornelio era un centurión, "Centurión" era jefe de un grupo de cien soldados de la milicia romana; este hombre vivía en Cesarea. Cuando Pedro llegó a la casa de Cornelio y empezó a dar su discurso, todos los gentiles que estaban allí, fueron bautizados con el Espíritu Santo, Hechos 10:44-46; esto fue el principio de la obra de Dios en medio de los gentiles.
El evangelio llegó también a los gentiles por intermedio de Felipe, uno de los siete diáconos; que predicó a un hombre africano eunuco, Hechos 8:26-40. La palabra "Eunuco", tuvo su origen en Asíria, y significa primeramente "Oficial de la corte real". Para los hebreos, "Eunuco" tiene un sentido de "Castrado", o sea, que le fue sacado los testículos o aun mismo su miembro viril para no tener deseos del placer sexual.
Cuando la Biblia habla que Daniel era eunuco del rey, se refería a un oficial de la corte real y no a un hombre castrado. Los eunucos, o sea, los castrados no podían entrar en la congregación de Jehová, Deuteronomio 23:1.
La evangelización de Felipe al eunuco tiene un gran contexto histórico, pues este hombre llegó a ser bautizado en aguas, y según los historiadores, él fue responsable de llevar este mismo mensaje a los africanos de Etiopía.
Hablaremos en la próxima lección sobre la expansión del evangelio de Jesucristo a través del apóstol que es considerado el apóstol de los gentiles y el mayor apóstol de nuestro Señor y salvador Jesucristo.
Pablo fue considerado el mayor apóstol de Jesucristo y el mayor apóstol de los gentiles, pues él se dedicó a predicar el evangelio a todas las naciones, pueblos e islas del mundo de su época, haciendo con que la iglesia cristiana se expandiese por todos los lugares.
El nombre "Saulo", es la traducción griega del nombre hebreo "Shaul", que es lo mismo que "Saúl", que significa "Pedido o súplica"; después de su conversión, su nombre fue cambiado a "Paulo", nombre romano derivado del latín que significa "Pequeño". En español se escribe "Pablo".
Pablo nació en Tarso, ciudad principal de la provincia romana, denominada "Cilícia", que quedaba al sudoeste de Asia menor, pero se crió en Jerusalén, Hechos 21:39. Pablo tenia también la nacionalidad romana, Hechos 22:25.
Pablo fue criado e instruido a los pies de su maestro Gamaliel, Hechos 22:3; Pablo era miembro del Sanedrín, por esta razón, tenía derecho a dar su voto para tomar ciertas decisiones, Hechos 26:10. Pablo era fariseo, Hechos 26:5.
SAULO, EL PERSEGUIDOR
Antes de su conversión, Pablo es citado tres veces en el libro de Hechos con el nombre Saulo, Hechos 7:58; 8:1; 8:3; Pablo era de la tribu de Benjamín, Filipenses 3:5. Lucas declara en su narrativa en Hch 8:3, lo siguiente: "Y Saulo asolaba a la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres; y los entregaba en la cárcel".
El emperador de Roma había dado a los judíos el derecho a extradición a los criminosos fugitivos de Jerusalén. Ser cristiano en aquella época era considerado un crimen religioso y civil; por esta razón, ellos eran perseguidos de manera tan devastadora. Pablo mismo declaró ser él perseguidor de la iglesia, Hechos 22:4; 1 Corintios 15:9; Gálatas 1:13; Filipenses 3:6.
Pablo también declaró en Hechos 26:9-11, diciendo: "Yo ciertamente había creído mi deber hacer muchas cosas contra el nombre de Jesús de Nazaret; lo cual también hice en Jerusalén. Yo encerré en cárceles a muchos de los santos, habiendo recibido poderes de los principales sacerdotes; y cuando los mataron, yo di mi voto. Y muchas veces, castigándolos en todas las sinagogas, los forcé a blasfemar; y endurecido sobremanera contra ellos, los perseguí hasta en las ciudades extranjeras.".
LA CONVERSIÓN DE SAULO
Saulo había recibido de manos del sumo sacerdote, cartas de autorización para prender a los cristianos en las sinagogas de Damasco; Hechos 9:1-2. Damasco quedaba a 240 Km. de distancia de Jerusalén y tardaba una semana en llegar. Su objetivo, era prender a hombres y mujeres y traerlos presos a Jerusalén.
Cuando estaba cerca de Damasco, le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: "Saulo, Saulo, ¿Por qué me persigues?" Hechos 9:3- 4. A la verdad, esta era la voz del mismo Jesús de Nazaret; Saulo inmediatamente comprendió que se trataba de un hecho sobrenatural, de manera que en el mismo instante clamó diciendo: ¿Quien eres Señor? Y le dijo: "Yo soy Jesús, a quien tu persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.", Hechos 9:5.
La palabra "Aguijón", significa "Punta o espina"; Jesús quería decir a Saulo que si él lastimara a la iglesia él iba a pagar un gran precio, o sea, el castigo de Dios vendría sobre él; por esta razón, él entendió el mensaje, de esta manera se dispuso inmediatamente a la voluntad de Dios diciendo: "¿Qué quieres que yo haga?" Hechos 9:6.
Después que oyó la voz de Jesús y se dispuso a su voluntad, el Señor le dijo: "Levántate y entra en la ciudad y se te dirá lo que debes hacer". Fue llevado por los hombres que estaban con él, que también oyeron la voz, pero no vieron nada, de manera que se quedaron atónitos, o sea, atemorizados; y fueron ellos que lo llevaron a la ciudad de Damasco, pues cuando se levantó, no veía nada, Hechos 9:8.
SAULO EN DAMASCO
Saulo estuvo tres días en Damasco, en la casa de un hombre llamado Judas, en una calle llamada Derecha; estaba orando y en la visión Dios le mostró que un hombre llamado Ananías oraba por él y le recobraba la vista, y así sucedió; el Señor le apareció en visión a Ananías y le mandó que vaya a la casa de Judas y ore por Saulo; Ananías sin embargo, teme porque él sabía que Saulo era un perseguidor de los cristianos, pero obedeciendo a la voz de Dios, se dirigió a la casa de Judas y allí, poniendo las manos sobre él dijo: "Hermano Saulo, el Señor Jesús, que en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo.". En aquel momento cayeron de sus ojos como escamas, y recibió al instante la vista y fue lleno del Espíritu Santo; y fue bautizado en aguas, Hechos 9:18. A partir de este momento, Dios empezó a trabajar en la vida de Saulo de una manera especial, llenándolo de su gracia, preparándolo para su obra.
SAULO PASA DE PERSEGUIDOR A PERSEGUIDO
Después que Saulo hubo experimentado el poder y la gracia de Dios en su vida, empezó a predicar a Cristo en las sinagogas diciendo que este era el hijo de Dios, Hechos 9:20; y todos los que le oían, se quedaron atónitos y decían: "No es este el que asolaba en Jerusalén a los que invocaban este nombre, y ha venido aquí para prender y a llevar a los cristianos al sumo sacerdote", Hechos 9:21. Fue desde este momento que los judíos resolvieron en consejo matarlo. Saulo tuvo que salir de Damasco en una canasta llevado por los discípulos de noche y le bajaron por el muro para no ser agarrado por los judíos, Hechos 9:25.
SAULO EN JERUSALÉN
Cuando Saulo llegó a Jerusalén, trataba de juntarse con los discípulos, pero todos le tenían miedo y pensaban que él estaba engañándolos, fingiendo que era cristiano para poder agarrarlos, pero Bernabé tomándolo, lo trajo a los apóstoles y les contó todo lo que le había sucedido en Damasco, y desde entonces Saulo estaba con ellos en Jerusalén, Hechos 9:26-28.
Saulo hablaba con valor en el nombre del Señor, disputando con los griegos, estos procuraban matarle; cuando supieron esto, los discípulos lo llevaron hasta Cesarea y lo enviaron a Tarsos, Hechos 9:29-30.
PABLO, EL HÉROE DE LA IGLESIA PRIMITIVA
La primera vez que Saulo es llamado de Pablo es en Hechos 13:9. Pablo se tornó el principal representante de la nueva religión llamada "Cristianismo"; y no Pedro como interpreta la iglesia Católica; pues sus enseñanzas y sus conceptos en cuanto a la divinidad de Jesús, contrariaba frontalmente las religiones politeístas y el judaísmo; Pablo consideraba a los judíos y a los gentiles en una sola posición delante de Dios en cuanto a su situación espiritual, pues en Romanos capítulo primero, el describe la depravación de los gentiles; en el capítulo dos, habla sobre la incredulidad y desobediencia de los judíos, y en el capítulo tres, coloca a los dos en una sola situación diciendo: "Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios", Romanos 3:23.
LA MISIÓN DE PABLO
Con el resultado de los tres viajes misioneros de Pablo, surgieron las iglesias de Asia y de Europa; por eso, reconocemos que Pablo tuvo una gran influencia en el establecimientos de estas iglesias y en la gran expansión del cristianismo por todo el mundo.
Las estrategias misioneras de Pablo, aun en nuestros días, son ejemplos a ser imitado por todas las iglesias; ningún hombre hizo tanto por la expansión del cristianismo y el evangelio de Jesucristo como el apóstol Pablo, por esta razón, él es considerado el mayor apóstol de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
LAS EPÍSTOLAS DE PABLO
Las cartas que Pablo escribió a las iglesias, son frutos de sus experiencias y de su trabajo sobre la dirección del Espíritu Santo, por eso, consideramos como el mayor tesoro que Pablo nos dejó para que vivamos a través de sus enseñanzas y sus doctrinas que él ha aprendido del mismo Jesús, 1 Corintios 11:1, 2 y 23.
SU MINISTERIO ENTRE LOS GENTILES
Los viajes de Pablo, sus epístolas, su convicción y coraje lo ha convertido en el mayor apóstol de nuestro Señor Jesucristo y el mayor héroe del cristianismo. Su ejemplo debe ser seguido por todos los obreros; sus enseñanzas deben ser observadas por todos los cristianos y sus ideas deben permanecer vivas y actuales porque fueron inspiradas por el Espíritu Santo para la iglesia en todas las épocas.
LOS VIAJES MISIONEROS DE PABLO
EL PRIMER VIAJE MISIONERO, Hechos 13 y 14. (Ver mapa)
Este primer viaje misionero de Pablo fue comisionado por la iglesia en Antioquia alrededor del año 46 a.C. Pablo hizo este viaje con Bernabé, Lucas y Juan Marcos, el que escribió el evangelio de San Marcos que era sobrino de Bernabé.
Ellos fueron a la Isla de Chipre y al sur de la provincia Galacia; llegando a Salamina, anunciaron el evangelio en la sinagoga; en Pafos, hallaron a un falso profeta llamado Barjesús que estaba con el Procónsul Sergio Paulo, este mago llamado Elimas trató de apartar de la fe al procónsul, pero Pablo reprendió al mago y quedó ciego. Su estrategia consistía en predicar primero en la sinagoga; algunos judíos y gentiles aceptaron el mensaje y se convirtieron; cuando los judíos rechazaban con violencia, el foco de la predicación se transfería a los gentiles.
A pesar del peligro de ser apedreados y muertos, y a pesar del regreso de Juan Marco que abandonó el viaje en Perge, esta misión logró establecer un buen testimonio cristiano en Antioquia de Pisidia, esta Antioquia no es la misma de donde ellos fueron enviados.
El ingreso de los gentiles a la iglesia generó algunos problemas en cuanto a las costumbres y las leyes judaicas; algunos judíos querían que los gentiles fuesen circuncidados y que debieran observar la ley mosaica. Pablo y Bernabé fueron perseguidos en Antioquia de Pisidia, por esta razón fueron a Iconio y allí predicaron con autoridad confiados en el Señor, el cual daba testimonio a la palabra de su gracia concediendo que se hiciesen por las manos de ellos señales y prodigios, Hechos 14:3 .
Algunos judíos y gentiles se juntaron con sus gobernantes en Iconio, se lanzaron a afrentarlos y apedrearlos, habiéndolo sabido, huyeron a Listra y Derbe, ciudades de Licaonia, y a toda región circunvecina, y allí predicaron el evangelio, Hechos 14:6.
Llegando a Listra, Pablo sanó a un cojo de nacimiento; viendo la gente lo sucedido, querían adorar a Pablo y a Bernabé, considerándolos como dioses, pero Pablo y Bernabé los reprendieron, y ellos apedrearon a Pablo y lo arrastraron fuera de la ciudad pensando que estaba muerto, pero rodeándolo los discípulos vieron que estaba vivo, y entró a la ciudad y al otro día siguió con Bernabé para Derbe; predicando el evangelio en Derbe y haciendo muchos discípulos volvieron a Listra, a Iconio y a Antioquia de Pisidia, Hechos 14:21.
Antes de volver a Antioquia de Siria de donde ellos fueron enviados a esta misión, constituyeron ancianos en cada iglesia, y habiendo orado con ayuno, les encomendaron al Señor, Hechos 14:23.
EL SEGUNDO VIAJE MISIONERO, Hechos 15:36 a 18:22. (Ver mapa)
En su segundo viaje, Pablo se separó de Bernabé porque no estaba de acuerdo que Bernabé llevase otra vez a su sobrino Juan Marcos, pues en el primer viaje, Marcos los había abandonado en Perge de Panfília y no había ido con ellos a la obra, habiendo tal desacuerdo entre ellos, se separaron el uno del otro, Hch 15:37-39.
En su segundo viaje, Pablo llevó a Silas, Hch 15:40. Saliendo desde Antioquia de Siria una vez más, Pablo juntamente con Silas, viajaron por tierra y llegaron a Listra, y fue allí que agregaron al grupo al joven Timoteo, hijo de una mujer judía creyente, pero de padre griego que tenía buen testimonio, y lo circuncidaron por causa de los judíos que habían en aquellos lugares, porque todos sabían que su padre era griego, Hch 16:1-3; mas adelante se unieron a Lucas. El Espíritu Santo les prohibió evangelizar en Asia y Bitinia
Ellos llegaron a Troas, en este lugar Pablo tuvo una visión de noche que un varón macedonio estaba en pie, rogándole y diciendo: Pasa a Macedonia y ayúdanos. Cuando vio la visión, procuraron partir para Macedonia porque entendieron que Dios estaba enviándolos para anunciar el evangelio en aquel lugar. De esta manera empezó la evangelización en Grecia, haciendo misiones en Macedonia, Filipos, Tesalónica, Berea, Acaya y al sur de Grecia.
En Atenas y en Corinto, Pablo permaneció casi dos años, fundando una comunidad cristiana que por medio de Lucas se unió al grupo de Troas y a través de algunas epístolas que fueron enviadas a ellos, mantuvieron contacto con las iglesias de Macedonia.
Saliendo de Troas, fueron a Somotracia, y el día siguiente a Neápolis, y de allí a Filipos; En Filipos bautizaron a una mujer llamada Lidia de la ciudad de Tiatira. Fue en Filipos que Pablo y Silas fueron presos, y azotados Hechos 16:19, pero a la media noche cuando ellos estaban cantando y orando, hubo un terremoto en aquel lugar y las cadenas de todos los presos fueron sueltas, y predicando al carcelero lo bautizaron, y después fueron puestos en libertad.
Llegando a Tesalónica, anunciaron el evangelio durante tres semanas, donde fueron perseguidos y huyeron a Berea; llegando a Berea, enseñaron en la sinagoga, y los del lugar recibieron la palabra con toda solicitud, y muchos creyeron, pero los de Tesalónica sabiendo que ellos estaban en Berea fueron allá y persiguieron a Pablo, entonces los discípulos enviaron a Pablo hacia el Mar, pero Silas y Timoteo se quedaron allí; Pablo fue enviado a Atenas, y Timoteo y Silas fueron al encuentro de Pablo.
Llegando a Atenas, Pablo predicó el evangelio a la gente, y lo llevaron al Areópago para escucharlo, pero algunos se burlaban y se reían de Pablo, pero algunos creyeron, entre ellos estaban Dionisio, una mujer llamada Damaris y otros con ellos, Hechos 17:32-34.
Llegando a Corintos, Pablo conoció a Aquila y su mujer Priscila, estos tenían el mismo oficio de Pablo, pues hacían tiendas y se quedaron con Pablo, Hechos 18:1-3. Pablo predicaba en las sinagogas de Corintos en los días de reposo, y estuvo en Corinto un año y seis meses, Hechos 18:11.
Los judíos de Corinto se levantaron contra Pablo, lo llevaron al tribunal, pero el procónsul no halló delito en él; Hechos 18:15, 16. Dejando Corinto, navegó a Siria con Aquila y Priscila, pasando por Cencrea, llegó a Éfeso y predicaba en la sinagoga,y se despidió de ellos y zarpó rumbo a Cesarea y pasó a Antioquia, terminando su segundo viaje misionero, Hechos 18:22.
EL TERCER VIAJE MISIONERO, Hechos 20:5 a 21:15. (Ver mapa)
En su tercer viaje no hay narrativas de que Pablo llevó a alguien con él, pero según los estudiosos, Lucas lo acompañó, Hechos 20:5, 6. Empezó su tercer viaje por las provincias romanas de Galacia y de Frigia confirmando a todos los discípulos, Hechos 18:23.
Dios había empezado a confirmar los viajes de Pablo, levantando predicadores como Apolo en Efeso, Aquila y Priscila, de manera que fue de gran provecho a los hermanos que habían creído en Jesús. Cuando Apolo fue llevado a Corinto por Aquila y Priscila, Pablo llegó a Efeso, y allí oró por algunos discípulos y fueron bautizados con el Espíritu Santo y hablaron en lenguas extrañas y profetizaban, Hechos 19:5, 6.
Pablo enseñaba en la sinagoga con autoridad acerca del reino de Dios, pero muchos no creyeron; pero estuvo por un espacio de dos años enseñado a los discípulos cada día en una escuela de un hombre llamado "Tiranno"; y Dios hacía muchos milagros extraordinarios por manos de Pablo de manera que la gente llevaba a los enfermos y eran sanados y los espíritus inmundos salían, Hechos 19:9-12.
Sobre este fundamento crecía la iglesia de Cristo, y Dios realizaba milagros extraordinarios por medio de Pablo que algunos exorcistas judíos comenzaron a querer usar el nombre de Jesús, el que predica Pablo, pero no tuvieron éxito, Hechos 19:13-17.
Hubo una gran oposición provocada por los devotos de la diosa Diana de Efeso, por causa de Demetrio el platero, fabricante de ídolos, que puso a la gente en contra de Pablo, Hechos 19:23-30.
Después de esto, Pablo fue a Macedonia, exhortando a los hermanos con abundancia de palabras, y se fue a Grecia y allí estuvo tres meses, Hechos 20:1-3. Huyendo de los judíos, Pablo fue enviado a Macedonia donde partieron a Filipos y llegaron a Troas donde lo esperaban algunos discípulos, Hechos 20:5. Saliendo de Troas, Pablo llega a Mileto, e hizo llamar a los ancianos de la iglesia de Efeso y dio su último discurso a los líderes de la iglesia de Efeso.
Saliendo de Mileto en Barco, llegaron a Tiro, y allí se quedaron siete días con los discípulos, después zarparon a Tolemaida quedando un día con los hermanos en aquel lugar; al otro día Pablo fue a Cesarea y posó en casa del evangelista Felipe, y allí un profeta llamado Agabo profetizó que él seria preso en Jerusalén, pero Pablo estaba decidido en ir a Jerusalén por amor a Jesús, y después de estos días, hicieron los preparativos y partieron a Jerusalén; Hechos 21:15. De esta manera terminó su último viaje misionero de Pablo, el apóstol de los gentiles.
PABLO ES ARRESTADO EN JERUSALÉN Y ENVIADO A ROMA
Cuando Pablo llegó a Jerusalén, fue recibido por los discípulos con gran gozo; y contó todo lo que Dios había hecho entre los gentiles en su ministerio, Hechos 21:17-19. Después de siete días que Pablo estaba en Jerusalén, unos judíos de Asia alborotaron a la multitud y echaron mano de Pablo y le golpearon, pero el tribuno llevó atado a Pablo con cadenas y lo prendió en la fortaleza.
Pablo pide para hablar al pueblo y dio su discurso en lengua hebrea y relató también su conversión, Hechos 22:1-21. Declaró al tribuno que tenía la nacionalidad romana y por esta razón no lo azotaron y el tribuno tuvo temor de haberlo atado.
PABLO ANTE EL CONCILIO
Los principales sacerdotes querían saber la razón por la cual Pablo había sido preso, y lo llevaron ante el concilio y a los principales sacerdotes para oírlo, pero hubo un gran tumulto entre los fariseos y saduceos en el concilio, por esta razón, el tribuno sacó a Pablo y lo llevó a la fortaleza para que no lo golpeasen.
DEFENSA DE PABLO
Pablo es llevado ante las autoridades para ser oído y juzgado; de manera que podemos enumerar en el siguiente orden:
Ante el concilio, Hechos 22:30 a 23:11.
Ante el gobernador Félix, Hechos 23:23 a 24:26.
Ante Porcio Festo, Hechos 25:1-12.
Ante Agripa y Berenice, Hechos 25:13 a 26:32.
PABLO ES ENVIADO A ROMA
Después de haber decidido que Pablo tenía que ser llevado a Roma, fue enviado con un centurión llamado Julio de la compañía llamada Augusta; fueron en una nave adramitena que iba a pasar por los puertos de Asia; con él fueron Lucas y Aristarco macedonio de Tesalónica. Llegando a la ciudad portuaria de Licia, agarraron otra embarcación alejandrina que zarpaba para Italia, y fueron en ella.
La nave que estaba Pablo fue azotada por una tempestad cerca de la isla de Creta; había doscientos setenta y seis personas en la nave y todos los que allí estaban no comían a catorce días; por causa de la tempestad, pero por intermedio de Pablo todos comieron y recobraron ánimo y cuando se hizo de día, cerca de una isla llamada Malta, la nave naufragó, y los soldados querían matar a los presos para que no escape ninguno, pero el centurión intentando salvar a Pablo, no permitió que maten a los presos y todos nadaron hasta la playa.
Pablo fue muy bien recibido por los moradores de aquella isla, y el Señor operó milagros por manos de Pablo, sanando a los enfermos; y estuvieron en aquella isla tres meses.
Después de tres meses, apareció una nave alejandrina y zarparon en ella, llegando a Siracusa, quedaron allí tres días, luego llegaron a Región y al otro día a Puteoli. Llegando a Roma, el centurión entregó los presos al prefecto militar, pero a Pablo, se le permitió vivir aparte, con un soldado que le custodiaba.
PABLO EN ROMA
Después de tres días, estando en Roma, Pablo convocó a los principales de los judíos y les habló la razón por la cual él había sido enviado a Roma, pero los principales dijeron que no sabían nada de lo que había pasado, pero querían oír a Pablo, por eso, señalado un día, vinieron a escuchar a Pablo, y les habló acerca de Jesús tanto por la ley de Moisés como por los profetas. Algunos creían, pero otros no creían en el mensaje de Pablo.
San Lucas termina la narrativa de este libro diciendo: "Y Pablo permaneció dos años enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a él venían, predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin impedimento.".
SETEADB. HECHOS DE LOS APÓSTOLES. Editorial La Epístola. Bolivia. 2012.
Cuestionarios para imprimir. Ver
Publicación de Jose Luis Pereyra