CAPITULO No. 2 VITALIDAD EN LA FE CRISTIAN

CAPITULO No. 2

VITALIDAD EN LA FE CRISTIAN

Un estudio de pacientes hospitalarios en relación a su esperanza de vida informada llegó a la conclusión de que había una fuerte correlación entre esperanza de vida y pensamiento orientado hacia el futuro. Un hombre cuya mente tomaba en cuenta las actividades a un año en el futuro era más probable que viviera que uno cuyo pensamiento solamente era en términos de la rutina hospitalaria cotidiana. Por regla general, aquellos sin un futuro en mente no tenían futuro. Esta conclusión no debiera sorprendernos. Habiéndonos creado al hombre a imagen de Dios, se crea con una mente que no está encadenada al momento.

Físicamente, el hombre está atado a la hora; él no puede retroceder en el tiempo o épocas pasadas, ni se puede trasladar al futuro por un salto repentino, salvando años intermedios en un segundo. Para Dios todopoderoso, toda la historia está presente ante El. Dios no está atado al tiempo porque El es el creador del tiempo, como de todas las cosas. Antes de la creación del mundo, El ordenó y decretó todas las cosas que vienen a pasar, así que el principio y el fin de la creación están siempre totalmente ante El.

Dios está más allá de la historia, pero ni un segundo ni un pelo de toda la historia está nunca más allá de El o fuera de su gobierno y visión. El es el Señor, el todopoderoso. Porque el hombre se creó a imagen de Dios, el hombre tiene intelectualmente esta misma capacidad, al nivel de una criatura. El puede ver, como en un cristal misteriosamente, el principio y el fin, cuando su pensamiento y visión están gobernados por Dios y su palabra. Aún sin fe, el hombre piensa y planifica, estudia la historia y a si mismo, y no está encadenado al momento.

Sin embargo, sin fe en Dios, el hombre pierde el significado del momento, así como también del pasado y del futuro. El hombre vive en el tiempo y en la historia, y si él no encuentra ningún sentido en este respecto, él se retira del tiempo y la historia hacia un mundo convento, el cual por el hecho de que no existe significa entonces un retiro hacia la muerte. Ellenberger ha escrito: “Lo que llamamos el sentimiento del “Significado de la vida” no se puede comprender independientemente del sentimiento subjetivo el tiempo experimentado. Las distorsiones de las sensaciones del tiempo forzosamente resultan en distorsiones del significado de la vida. Normalmente, miramos el futuro no solamente por si mismo, sino que también para compensar y corregir el pasado y el presente. Contamos con el futuro para pagar nuestras deudas, lograr éxito, disfrutar de la vida, convertirnos en buenos cristianos. Donde quiera que el futuro se vuelva vacío, como con los maniáticos y ciertos psicópatas, la vida es como una lotería y se toma con consideración de la ventaja del minuto actual; donde quiera que el futuro sea inaccesible o se obstruya, como con los deprimidos, forzosamente desaparece la esperanza y la vida pierde todo sentido.

(1)”Henry F. Ellenberger, “A Clinica Introductión to Psychiatric Phenomenology and

Existential Analysis”, en rollo May, Ernest Angel, Henry F. Ellenberger, editores: Existence, A New Dimensión in Psychiatry and Psychology, P. 106f New Yor: Basic Books, 1959

Asi que una fe orientada hacia el futuro significa una perspectiva que planea corregir los errores pasados en la acción futura, pero también construir en el futuro sin esos errores o pecados. Hasta el grado de que en una sociedad que carezca de futura orientación hasta ese punto no solamente está estancada, sino que también carece de vitalidad para corregir y reconstruir.

Minkowski, al discutir un caso de depresión esquizofrénica, dice del paciente: No había acción ni deseo que, emanando del presente, se extendiese hacia el futuro, midiendo los días sombríos y similares. Como resultado, cada día mantenía una insólita independencia, sin lograr sumergirse en la percepción de alguna continuidad de la vida; cada día la vida comenzaba de nuevo, como una isla solitaria en un mar gris del paso del tiempo. Lo que se había hecho, vivido y hablado ya no desempeñaba el mismo papel como en nuestra vida porque parecía que no había ningún deseo de seguir adelante; todos los días era una monotonía exasperante de las mismas palabras, las mismas quejas, hasta que uno sentía que este ser había perdido todo sentido de necesaria continuidad. Así era la marcha del tiempo para él. Sin embargo, nuestro cuadro está todavía incompleto; le hace falta un elemento esencial el hecho de que el futuro estaba obstruido por la certidumbre de un evento destructivo y aterrador. Esta certidumbre dominaba la perspectiva completa del paciente y absolutamente toda su energía estaba atada a este inevitable evento.

(2) Lo mismo es cierto de gente que no es esquizoide. En 1972, no pocas personas me informaron de su preocupación por amigos y parientes, quienes carecen de toda fe, habían leído None Dare Call It Conspiracy (Nadie Osa llamarlo conspiración), de Gary Allen (1972) y habían llegado a la conclusión de que al mundo le espera una espantosa incautación de todas las cosas por parte de los semi-omnipotentes y míticos enterados; a veces, su reacción se volvía suicida; se debilitaba su capacidad de trabajo y funcionamiento, y vivían una vida mínima de temor y terror. Debemos reconocer que la esperanza premilenaria no está en el mismo nivel. En verdad tiene su evento aterrador, la gran tribulación. Algunos sostienen que la iglesia será “Raptada” antes de la tribulación, otros durante, y algunos después. No obstante, el “Rapto” es un evento bendito, una salvación en el cielo. Sin embargo, esta esperanza es personal, no social. El mundo entero se ve como en un curso inútil, de modo que no hay esperanza de ningún tipo de acción social, ni d reconstrucción cristiana. Como resultado, hay una orientación puramente mundana y un desprecio de la historia y del tiempo. El amilenarismo no tiene “Rapto” y ve la historia deteriorándose ininterrumpidamente hasta el final; y como resultado, no es de sorprenderse que haya creado iglesias que van hacia el ocaso y la parálisis. De esta manera, tanto el amilenarismo como el premilenarismo tienen el mismo impacto social que la depresión esquizofrenia; producen un futuro bloqueado, un futuro que no ofrece esperanza con respecto a la historia y el tiempo. Pero si tienen una esperanza con respecto a la eternidad. No obstante, tenemos el derecho de preguntarles a muchos de ellos cuán válida es su esperanza, puesto que nuestro Señor declara enfáticamente que la prueba de fe es muy práctica: ¿Los hombres dan buenos frutos aquí y ahora? (San Mateo 7:15-20) “El fruto apacible de justicia” (Hebreos 12:11) es sencillamente el resultado del castigo de Dios a sus hijos, para limpiarlos de la infructuosidad y conducirlos hacia la justicia, y significa resultados aquí y ahora. “La noche viene, cuando nadie puede trabajar” (San Juan 9:4). Si los cristianos tienen un futuro bloqueado, entonces el mundo está en una tremenda condición porque son los cristianos los que son la luz del mundo y la sal de la tierra (San Mateo 5:13-15).

Diversos historiadores últimamente han observado el impacto de la escatología sobre el hombre. Por ejemplo, Gary North ha escrito: Los puritanos de la primera generación motivados por una visión postmilenaria de la victoria terrenal; ellos iban a reformar el mundo a través de la predicación y la reconstrucción divina. Por el año de 1660, un pesimismo radical había sustituido al optimismo escatológico anterior. La nueva generación no se había convertido en términos de los requisitos carismáticos de la experiencia cristiana. Un rey hostil estaba de regresos en el trono de Inglaterra. Parecía que la Sagrada Mancomunidad iba al colapso. Parecía que los cañones heredados de la economía medieval eran inaplicables. Nadie sabía como manejar las crisis económicas, la ascendente movilidad social ni las Leyes del mercado como pérdidas y ganancias. Se afianzo una especie de antinomia social al predicar los pastores sermones generales contra pecados sin especificar, pero evitaba ofrecer alternativas concretas a la estructura medieval que se desplomaba. El pesimismo escatológico se combinaba con la antinomia social para producir posteriormente una mojigatería puritana, marcada con mayor dramatismo por los Mathers. Premilenaristas, emotivos y derrotados en política, Increase y Cotton Mather regresaron a la predica de la salvación individual y la creación de sociedades voluntarias de auto-ayuda. Franklin aprendió de Cotton Mather la importancia de hacer el bien; el no comprendió la teología con la que contaba Cotton al hacer el bien humano.

(3) Un postmilenarismo renovado fue una fuerza bien central que condujo a las colonias a resistir contra las usurpaciones de poder sobre ellas por parte del parlamento Ingles. Jonathan Edwards, sostenía que la gloria moderna probablemente comience en los Estados Unidos. El escribió: Es conforme a la manera de Dios, cuando él logra cualquier trabajo glorioso en el mundo a fin de introducir un estado nuevo y más excelente de su iglesia comenzar donde aún no se había echado los cimientos, para que el poder de Dios pudiera ser más conspicuo; para que el trabajo pudiera parecer ser enteramente de Dios y ser más evidentemente una creación de la nada. Conforme a Oseas 1:10Y en el lugar en donde les fue dicho: Vosotros no soís pueblo mio, les será dicho: sois hijos del Dios viviente”. Cuando Dios está a punto de convertir la tierra en un paraíso, él no comienza su trabajo donde ya hay algún buen desarrollo, sino en el desierto donde nada crece y no se ve nada sino arena seca y rocas estériles; que la luz pueda brillar de la oscuridad, el mundo se pueda rellenar del vacío y la tierra se pueda regar con manantiales de un desierto árido: Conforme a muchas profecías de la Escritura, como Isaias 32:15: “Hasta que sobre nosotros sea derramado el Espíritu de lo alto, y el desierto se convierta en campo fértil”. Y el capitulo XLI 18,19: “En las alturas abriré ríos, y fuentes en medio de los valles; abriré en el desierto estanques de aguas, y manantiales de aguas en la tierra seca. Daré en el desierto cedros, acacias, arrayanes y olivos; pondré en la soledad cipreses, pinos y bojes juntamente”. Y en el capitulo XLIII 20: “Daré aguas en el desierto, ríos en la soledad, para que beba mí pueblo, mí escogido”. Y se podrían mencionar muchas otras escrituras paralelas. Ahora, cuando Dios está a punto de hacer algún gran trabajo para su iglesia, su manera es empezar por el extremo inferior; de tal manera que cuando esté a punto de renovar toda la tierra habitable es probable que empiece en esta parte máxima, más humilde y más débil, donde se ha plantado por último la iglesia de Dios; y de esa manera el primero será el último, y el último primero; y eso se cumplirá de una manera eminente en Isaias XXIV 19: “De la parte más remota de la tierra hemos ecuchado anciones, incluso gloria al justo”.

(4) Joseph Bellamy (1719-1790) vió un glorioso futuro para el mundo, durante el cual más serán salvados “Que nunca antes moraron sobre la faz de la tierra desde la fundación del mundo”. En realidad, él señalaba que si le era de triunfo duraba mil años literales, entonces es vista del crecimiento poblacional, “Se selvarían más de diecisiete mil, a uno perdido”.

(5) Samuel Hopkins (1721-1803) dedicó “Un tratado sobre el Milenio” “Al pueblo que vivirá en los días del milenio”. Entre otras cosas, Hopkins, dijo de esa era gloriosa: “Pero cuando el milenio comience, los habitantes que a la sazón estén en la tierra estarán dispuestos a obedecer el mandato divino de someter la tierra y multiplicarse hasta que ellos la hayan llenado; y tendrán pericia, y estarán bajo todas las ventajas deseables para hacerlo, y la tierra pronto se rellenará de habitantes, y se llevará a un estado de alto cultivo y mejoramiento en todas partes, y producirá abundantemente para el abastecimiento completo de todos; y habrá muchos miles de veces más gentes a un mismo tiempo de lo que nunca antes existió en el mundo. Entonces se cumplirá la siguiente profecía, que se refiere a ese día: “El pequeño vendrá a ser mil, el menor, un pueble fuerte. Yo Jehová, a su tiempo haré que esto sea cumplido pronto”. (Isaias LX 22). Y hay razón para creer que en ese tiempo la tierra estará ensanchada en más formas de lo que ahora se puede mencionar o pensar. Dentro de muchos millares, cientos de millares, si, millones de casos, se pueden agotar grandes zonas que ahora están cubiertas de agua, ensenadas y brazos de mar, o cierre de agua por medio de terraplenes y murallas a fin de que cientos de millones de personas puedan vivir en esos lugares y puedan mantenerse con el producto de ellos, que ahora están desbordados de agua. ¿Quién puede dudar de esto, que recuerda cuántos millones de personas ahora viven en Holanda y los países bajos, la mayor parte de lo cual estaba antiguamente cubierto por el mar, o que piense no ser capaz mejoramiento? Se podrían mencionar otros casos.”

Aunque habrá tantos millones de millones de personas en la tierra al mismo tiempo, esto no será de la menor inconveniencia para nadie, sino la contrario; pues a cada quien se le abastecerá completamente con todo lo que él quiera, y estarán unidos en el amor, como hermanos de una familia, y habrá bendiciones y ayuda mutua entre sí. Ellos morirán, mejor dicho, quedaran dormidos y pasarán a un mundo invisible, y otros aparecerán en escena en su cuarto. Pero entonces a la muerte no se le acompañará con las mismas circunstancias terribles y calamitosas como ha sido y es ahora, y no se considerará como un mal. No acarreará larga y penosa enfermedad, ni se acompañará con ningún gran dolor del cuerpo o la mente. Ellos estarán listos para eso en todos los aspectos y la recibirán con el mayor júbilo y consuelo.

Cada quien morirá a la hora y en la forma en que le sea mejor a él y a todos con quienes está relacionado; y la muerte no le acarreará dolor a los parientes y amigos que le sobrevivan; y ellos más bien se regocijarán en vez de lamentarse, mientras tengan un vivo sentido de la sabiduría y bondad de la voluntad de Dios, y de la mayor felicidad del mundo invisible al cual se fueron sus amados amigos y a donde ellos esperan pronto llegar. Así que, en ese día, la muerte en gran medida perderá su escozor y tendrá la apariencia de un amigo, y será bienvenida por todos como tal.

(6) De acuerdo con Bushman, estos y otros hombres, con Bellamy, como lider destacado, cambiaron la naturaleza de su pueblo y crearon al Yanqui de los años posteriores a 1765.

(7) En eras anteriores, los hombres que sentían el llamado de Dios buscaron refugio del mundo en un convento. Posteriormente, bajo la influencia de la beateria, la iglesia misma se convirtió en un convento en el mundo, un refugio de los problemas y de las corrientes de fuerzas y movimientos sociales. En la era moderna, el hombre seglar ha buscado la experiencia conventual en diversas formas de escapismo, retiros, manicomios, la jubilación y muchas otras avenidas de rendición. El pensamiento postmilenario fue muy importante en la formación y desarrollo de los Estados Unidos separadamente de esta escatología.

Un erudito seglar, George Shepperson, al discutir las formas cristianas y paganas del milenarismo, comentó de todos estos grupos, y en particular de un movimiento en Nyasaland: Como muchos movimientos similares en otras partes del mundo, las expectativas asumen una forma premilenaria dramática; la agencia liberadora o salvadora viene antes y no como en el caso del postmilenarismo después de la batalla contra las fuerzas del mal. El premilenarismo siempre significa una profunda desconfianza de las fuerzas ortodoxas de la reforma abierta a la sociedad.

(8) Este es un punto de una importancia muy grande. Tanto en sus formas políticas y seculares, donde se lleva el milenio, no por reconstrucción sino que por revolución violenta, como en sus formas religiosas, en donde un acto sobrenatural produce el milenio, los grupos milenarios son hostiles a la reforma y la reconstrucción. Este ha sido conspicuamente el caso en la historia reciente de la iglesia. Las iglesias premilenarias, con raras excepciones del modernismo en sus denominaciones; demasiado a menudo han preferido sentarse comodamente y mirar esto como una señal del “Fin de los tiempos” y como prueba de que el rapto está cerca.

En mí propia experiencia dentro de una importante iglesia norteamericana, Yo veía que los premilenaristas deliberadamente y por declaraciones confesadas ante mí llegaban tarde a reuniones claves donde su voto podría haber conducido a la recuperación de un sínodo, porque rehusaban comprometerse en tratar de “reformar” la iglesia; para ellos era una actividad que “no era espiritual”, y se sentían confiados en que la apostasía era ordenada por Dios como preludio al “rapto”. En la era colonial, hombres como el Rev. Thomas Clap (1703-1767) le dieron poco interés al desarrollo y avance teológico, y se contentaban como contra Joseph Bellamy con extirpar la herejía.

(9) La naturaleza del amilenarismo moderno no es distinta a la de Clap y sus Antiguas Luces (Old Lights): Es indiferente al mundo en general, contentos de mantenerse en línea, repetir las antiguas formulaciones teológicas en vez de desarrollados en términos de los problemas actuales, y más interesados en extirpar la herejía que en adelantar la fe. Las diversas iglesias presbiterianas ortodoxas y reformadas son ejemplos excelentes de esto, con menores excepciones aquí y allá. No es de sorprenderse que las Nuevas Luces (New Lights), jeteadas por Bellamy, pronto se hayan convertidos en una fuerza dominante en Connecticut.

Bushman escribió: En 1763, William Johnson, se maravillaba de que las Nuevas Luces que en su memoria “Era un partido pequeño, meramente religioso”, había “Adquirido tanta influencia como para casi ser la parte gobernante del gobierno debido a su atención superior a los asuntos civiles y estrecha unión entre ellos en la política”.

(10) Actualmente nos espera un poder e influencia mucho más importante.