Moviendo personas - una reflexion sobre el Festival TUDANZAS 2023

Del 18 al 21 de mayo de 2023, tuvo lugar la 12ª edición del Festival Social TUDANZAS en el Casc Antic de Barcelona, movilizando a un público de 2200 personas en danza, teatro, música, talleres, happenings, proyectos interdisciplinares y comunitarios, a través de la acción de más de 140 artistas divididos en actividades colectivas e individuales. La producción del evento contó con 9 voluntarios en el equipo motor, más 11 voluntarios del proyecto de Solidaridad Europeo, y cerca de 5 voluntarios locales.

Esta cuantificación se coloca aquí con el propósito de demostrar el número de personas, como sujetos, que ponen sus esfuerzos individuales para la realización y fruición de un proyecto que es ejecutado por personas y para personas, con el propósito de democratizar el acceso tanto para el público local, como para habilitar espacios de presentación y visibilidad de artistas y sus producciones o incluso la creación de nuevas producciones.

Según las definiciones de la propia asociación, "TUDANZAS es un movimiento artístico-social de referencia que facilita la generación de iniciativas artísticas colectivas que fomentan el desarrollo social sostenible en el territorio". 

Al analizar la procedencia de las personas que presentaron, tuvimos la presencia de artistas de diferentes partes del mundo, llamando la atención la cantidad de artistas latinoamericanos en esta edición. Cómo brasileña, entiendo estos espacios de apertura en los espacios de producción y compartición del arte (también) en el norte global, como fundamentales para intercambios culturales y discusiones decoloniales que puedan poner en cuestión las diferentes realidades socioeconómicas y culturales existentes y hacer temblar las relaciones de poder. Y si el arte produce posibilidades de transformación, abordar el tema es tan importante como la presencia de estos otros cuerpos compartiendo la producción de conocimiento y creando posibilidades de rupturas en los patrones de percepción y comportamiento, generando nuevas posibilidades de ser sujetos, alteridad y entendiendo diferentes colectivos.

Creo que es importante señalar la escasa presencia de inmigrantes árabes en las producciones artísticas del festival, a pesar de que representan una parte sustancial de las personas presentes en esta parte de la ciudad. Me queda la pregunta de cómo acercarse a esta población que sin duda tiene mucho que compartir y discutir.

A pesar de sus diferentes nacionalidades, la mayoría de los artistas que se presentaron en el festival son residentes del Casc Antic de Barcelona y de otros barrios de la ciudad, lo que demuestra la importancia del festival para la comunidad artística local. 

En cuanto a los temas presentados, se pudo observar un gran número de performances de temática feminista, que trataban desde la maternidad y el aborto hasta el feminicidio presente en América Latina. Entiendo esta pluralidad de trabajos sobre el tema como una necesidad de discusión y transformación de las performatividades sexistas presentes en nuestra sociedad, tanto en ámbitos personales como institucionales. En mi percepción, tales agendas identitarias surgen de la urgencia de cambios en un sistema de opresión que utiliza la subjetividad para mantener poderes hegemónicos que, a su vez, mantienen un sistema político-económico basado en la explotación. En este camino, las discusiones sobre la negritud, las discapacidades, las sexualidades, las colectividades, el medio ambiente (plástico y cambio climático) también estuvieron presentes en las obras y talleres presentados en el festival.

Que las produciones y discusiones estéticas continúen, porque es a través de este camino que la creación de nuevas subjetividades, nuevas formas de ser y percibir, pueden surgir para transformar. 

Y si el arte no habla por sí mismo, el público desempeñó un papel importante durante estos días del festival.

La gran mayoría del público eran adultos, y la mayoría venían también del barrio y de Barcelona, llegando también a turistas que estaban de paso por la ciudad y visitaban esta zona céntrica de la ciudad. La recurrencia de personas que estuvieron presentes y siguieron otras ediciones, notando cambios, disfrutando de nuevas obras y participando de las propuestas, trae la relevancia de la construcción continuada de un proyecto en el barrio, como es el caso de este festival. Además, las asociaciones con instituciones culturales locales también crean una red de acciones que llegan a diferentes personas que frecuentan los diferentes espacios, además de cumplir la importante función de ocupar los espacios públicos disponibles para el arte y la socialización.

Las presentaciones y talleres realizados en espacio abierto trajeron la posibilidad de participación de personas que no conocían el festival, pero además de cumplir esta función, también posibilitaron la participación de personas que sienten que no pertenecen a los espacios institucionalizados de fruición artística. Este factor se acerca a uno de los ideales de TUDANZAS de entender el arte como una pertenencia a la sociedad como un derecho común y como una forma de ser y estar en el mundo, en la creación y en el movimiento.

Con todos los datos presentados, tengo la seguridad de evaluar que los objetivos pretendidos con el festival fueron alcanzados al crear espacios de convivencia estética y reflexiva que movilizaron a personas de la escena y fuera de ella a compartir lo sensible, reconocer y respetar las diversidades, reflexionar sobre las realidades y estar en comunidad. Invertir en la creación y mantenimiento de estos espacios es invertir en la creencia de que podemos avanzar juntos hacia una convivencia respetuosa, la creación colaborativa, las transformaciones individuales y colectivas y las revoluciones en nuestras realidades.

Vea la alegría de compartír en este festival!