Las Naciones Unidas designaron el 5 de junio como el Día Mundial del Medio Ambiente para destacar que la protección y la salud del medio ambiente son un problema importante que afecta al bienestar de las personas y al desarrollo económico en todo el mundo. Al celebrar este día estamos ofreciendo una oportunidad para ampliar las bases de una opinión bien fundamentada y una conducta responsable de los individuos, las empresas y las comunidades para preservar y mejorar la salud del medio ambiente.
Como asesoras del programa EducaLectura en Extremadura proponemos una serie actividades no solo para mejorar la competencia lectora de nuestros, sino que también para ayudarles a desarrollar una conciencia ambiental crítica y activa, preparándolos para ser ciudadanos responsables con su entorno.
"Cuidar la Tierra es cuidar nuestro futuro"
Propuesta de actividades para celebrar el Día Mundial del Medio Ambiente
Celebrar el Día Mundial del Medio Ambiente es una oportunidad fundamental para sensibilizar a los escolares sobre la importancia de la conservación y la sostenibilidad, integrando la competencia lectora de una forma práctica y significativa. Aquí tienes una propuesta de actividades y ejemplos prácticos para cada nivel educativo.
El objetivo es que los niños se conecten con la naturaleza y comprendan la importancia de cuidarla, utilizando la lectura como un canal para explorar su entorno.
"Cuentos de la naturaleza": Se eligen cuentos con personajes de animales, árboles o ríos. Después de la lectura, los niños pueden dibujar a sus personajes favoritos y, con la ayuda del educador, escribir una frase sobre cómo cuidar el lugar donde viven. Esto fomenta el desarrollo del vocabulario relacionado con el medio ambiente y la expresión artística.
"El jardín de las palabras": Se planta un pequeño jardín o se cuidan macetas en el aula. Cada planta lleva una etiqueta con su nombre. A través de la observación y la lectura de las etiquetas, los niños aprenden a reconocer las plantas y sus nombres, conectando la lectura con la experiencia sensorial.
"La bolsa mágica de la naturaleza": Se llena una bolsa con elementos naturales (hojas, piedras, piñas, flores secas). Los niños meten la mano sin mirar, sacan un objeto y, con la ayuda de un adulto, lo describen y leen una tarjeta con una curiosidad sobre el objeto. Es una actividad ideal para el reconocimiento de texturas y la lectura de textos breves e informativos.
En esta etapa, las actividades buscan que los alumnos profundicen en la comprensión de los problemas ambientales y se sientan parte de la solución.
"Club de detectives ambientales": Se entregan a los alumnos artículos de periódico o fragmentos de noticias sobre un problema ambiental local (por ejemplo, la escasez de agua, la deforestación). En grupos, deben leer los textos para identificar el problema, sus causas y sus consecuencias, y luego proponer soluciones. Esto fomenta la lectura crítica y la escritura de propuestas.
"Elaboración de un 'Decálogo Verde'": Los alumnos investigan y leen textos sobre ecología, reciclaje y ahorro de energía. A partir de esa información, redactan un decálogo de acciones sostenibles para su escuela y sus hogares. Este ejercicio desarrolla la capacidad de síntesis y la lectura de textos funcionales.
"Poesía para la Tierra": Se lee poesía que celebre la belleza de la naturaleza o que plantee un mensaje de alerta. Después, los alumnos escriben sus propios poemas sobre un paisaje que les guste, un animal en peligro o un deseo para el planeta. El resultado se puede exponer en un "rincón poético" del centro. Esto fomenta la lectura expresiva y la escritura creativa.
En este nivel, el objetivo es que los alumnos analicen textos complejos, debatan sobre políticas ambientales y se conviertan en agentes de cambio.
"Análisis de textos científicos y manifiestos": Los alumnos leen informes del IPCC, manifiestos de organizaciones ecologistas o artículos científicos sobre el cambio climático. A partir de la lectura, identifican los datos clave, las fuentes y los argumentos científicos, y luego debaten sobre las implicaciones de los textos. Esto desarrolla la comprensión de textos argumentativos y la capacidad de análisis.
"Jornadas de divulgación 'Cuidando Extremadura'": Los alumnos, organizados por proyectos, eligen un tema ambiental relevante para la región (como la protección de las dehesas, la gestión de los ríos, el uso de energías renovables). Después de investigar y leer textos especializados, preparan ponencias o exposiciones para el resto del colegio, lo que mejora la comunicación oral y la síntesis de información compleja.
"Creación de una revista digital 'Sostenible'": Los alumnos diseñan y redactan una revista digital con artículos, entrevistas, reportajes fotográficos y reseñas de libros o películas con temática ambiental. La lectura de sus propios textos y los de sus compañeros fomenta la lectura con un propósito comunicativo y el aprendizaje colaborativo.
Actividades para trabajar de manera transversal la competencia lectora en el Día del Medio Ambiente
Cuentacuentos ecológico: Organizar sesiones de lectura en voz alta de cuentos relacionados con el medio ambiente, como "El árbol que hablaba". Después, realizar preguntas de comprensión y debates sobre las lecciones aprendidas.
Rincón de lectura verde: Crear un espacio en la biblioteca escolar dedicado a libros sobre naturaleza y ecología, como "El gran libro de los animales" de Chris Butterworth. Fomenta la lectura individual y en grupos pequeños.
Cartas al planeta: Los alumnos escribirán cartas expresando su compromiso con el cuidado del medio ambiente y proponiendo acciones concretas. Esta actividad mejora la expresión escrita y la conciencia ambiental.
Periódico ecológico: Crear un periódico escolar centrado en temas medioambientales, donde los alumnos escriban artículos, entrevistas y reportajes sobre iniciativas locales de conservación.
Debates ecológicos: Organizar debates sobre temas como la desertificación y la sequía, la contaminación plástica... Los alumnos deberán investigar y presentar argumentos basados en sus lecturas.
Podcast verde: Crear un podcast escolar donde los alumnos lean y comenten noticias sobre medio ambiente, como los avances en la lucha contra la contaminación plástica.
Taller de reciclaje literario: Combinar la lectura con las artes plásticas, creando obras de arte o objetos útiles a partir de libros viejos, fomentando así la reutilización.
Gymkana literaria ambiental: Diseñar una gymkana con pruebas que combinen actividad física, lectura y conocimientos sobre medio ambiente.
Libros o materiales didácticos recomendados para enseñar sobre el cuidado del medio ambiente
"¿Para qué sirve la naturaleza?" de Maud Legrand: Un libro con solapas que enseña a los niños la importancia de cuidar y proteger la naturaleza1.
"Una vuelta por el planeta" de Meritxell Martí: Utiliza ilustraciones y puzles para mostrar cómo el medio ambiente se está deteriorando y fomenta soluciones1.
"La gota perdida" de Grégoire Laforce: Explica el ciclo del agua de manera atractiva y fomenta el cuidado de los recursos naturales.
"80 actividades en la naturaleza" de Guilhem Lesaffre et al.: Ofrece actividades prácticas para realizar al aire libre y aprender sobre el medio ambiente.
"Eco-Héroes: Vidas en defensa del planeta" de Federica Magrin: Presenta biografías de 20 personas comprometidas con la lucha contra el cambio climático.
"Cambio climático" de Yayo Herrero y María González Reyes: Explica las causas y efectos del cambio climático de manera accesible para niños.
Guía de recursos de educación ambiental: Publicada anualmente por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ofrece una amplia variedad de recursos educativos.
Material didáctico de educación ambiental de Adrada: Aborda temas como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación.
"Crear y manejar un huerto escolar": Manual de la FAO para profesores y padres, destinado a escolares de 9 a 14 años.
"Verde que te leo verde": Recopilación de literatura infantil sobre naturaleza y medio ambiente para niños de 0 a 12 años.
"Los 12 libros más recomendados sobre medio ambiente para niños": Lista que incluye títulos como "10 cosas que puedo hacer para ayudar a mi mundo" de Melanie Walsh.
Videos educativos sobre el medio ambiente
"Cuidemos la naturaleza" de Happy Learning
Este video incluye canciones educativas que enseñan sobre la importancia de cuidar la naturaleza y no contaminar. Es una forma divertida de transmitir mensajes ambientales a los niños.
"10 consejos para cuidar del medio ambiente"
Este vídeo ofrece consejos prácticos y sencillos para que los niños puedan contribuir al cuidado del medio ambiente, como apagar las luces, reciclar y reutilizar.
"Reducir, Reutilizar y Reciclar"
Este video educa sobre las tres erres del reciclaje de manera interactiva, mostrando cómo estas acciones pueden mejorar el mundo.
"El Agua. Cuidemos Nuestro Planeta"
Este video educativo enseña sobre la importancia del agua y cómo cuidarla, lo cual es crucial para la vida en la Tierra.
"BASURIA"
Un cortometraje que muestra cómo la creatividad y la organización pueden transformar un entorno contaminado en un lugar más limpio y agradable.
"CUIDA EL AGUA"
Este corto animado destaca cómo nuestras acciones diarias pueden afectar el medio ambiente, utilizando la historia de un gato en una isla para ilustrar los cambios climáticos.
"LEMON"
Un cortometraje que refleja el impacto de la contaminación plástica en los animales marinos, como una tortuga que encuentra un tapón de plástico en el mar.
Propuesta de actividades por etapas educativas
Juego cooperativo con elementos de exploración y resolución de pequeños enigmas.
Duración: 60 minutos.
Materiales:
Cartulinas o papel grande para crear "Islas de Problemas" (una por cada problema).
Imágenes o pictogramas de diferentes problemas ambientales sencillos de entender para niños (ej: basura tirada, grifo abierto, árbol sin agua).
Tarjetas con "Soluciones Mágicas" (pictogramas y frases cortas que representen soluciones, ej: un cubo de reciclaje con niños tirando basura, un grifo cerrado, un niño regando una planta).
Pequeños "Objetos Mágicos" relacionados con el cuidado del medio ambiente (ej: una pequeña plantita, semillas, un trozo de cartón reciclado, una piedra pintada de verde).
Un "Muro de Problemas" (una pared o pizarra donde se pegarán las imágenes de los problemas al inicio).
Un "Libro Mágico de Soluciones" (un cuaderno grande, quizás con dibujos, donde se pegarán las tarjetas de soluciones).
Material fungible: pegamento, tijeras, rotuladores, cinta adhesiva.
Proyector (para proyectar imágenes o un video corto al inicio si se desea).
La actividad se desarrollará siguiendo los siguientes pasos:
Introducción Mágica (5 min): Se inicia la actividad con una breve conversación sobre la importancia del Día del Medio Ambiente. Se puede proyectar una imagen inspiradora de la naturaleza o un video muy corto y sencillo (<1 minuto) sobre cómo el planeta necesita nuestra ayuda. Se introduce la idea de que el planeta está un poco triste porque hay algunos problemas. Se presentan las imágenes de los problemas ambientales en el "Muro de Problemas" de forma visible.
Formación de Equipos Guardianes (5 min): Se explica a los niños que para ayudar al planeta necesitamos trabajar en equipo, como verdaderos "Guardianes del Planeta". Se forman pequeños grupos de 4-5 niños, fomentando la mezcla de diferentes personalidades para promover la solidaridad y la ayuda mutua.
Exploración de las Islas de Problemas (15 min): Cada grupo recibe una "Isla de Problemas" (una cartulina con una imagen de un problema ambiental). Se les invita a observar la imagen y conversar en su grupo sobre qué creen que está pasando allí. El educador circula para guiar la conversación con preguntas como: "¿Qué veis en esta imagen?", "¿Por qué creéis que esto no está bien?". Se fomenta el espíritu crítico al animarles a pensar por qué esa situación es un problema para el planeta.
Búsqueda de Soluciones Mágicas (15 min): Se explica a los niños que hay "Soluciones Mágicas" escondidas por el aula (se habrán escondido previamente de forma accesible). Las "Soluciones Mágicas" son las tarjetas con pictogramas y frases cortas que representan las acciones para solucionar los problemas. Cada grupo debe buscar las tarjetas que crean que solucionan el problema de su "Isla". Se fomenta la competencia lectora al animarles a intentar leer las palabras o a identificar las imágenes.
Unión de Problemas y Soluciones (10 min): Una vez que cada grupo tiene las tarjetas de soluciones que creen que corresponden a su problema, vuelven a sus "Islas". Ahora deben trabajar juntos para unir la imagen del problema con las tarjetas de solución que han encontrado. Se fomenta la ayuda mutua y la tolerancia al escuchar las ideas de todos los miembros del grupo y llegar a acuerdos. Pueden pegar las tarjetas en la cartulina.
Presentación y Libro Mágico (5 min): Cada grupo presenta su "Isla de Problemas" y las "Soluciones Mágicas" que han encontrado al resto de la clase. Esto refuerza la competencia lectora al "leer" (con ayuda si es necesario) las soluciones. Se pegan las imágenes de los problemas y las tarjetas de soluciones correspondientes en el "Libro Mágico de Soluciones", creando así un registro de los "Consejos de los Guardianes del Planeta".
Compromiso de los Guardianes (5 min): Para finalizar, se realiza un pequeño ritual de compromiso. Se puede entregar a cada niño un "Objeto Mágico" (semilla, piedra pintada, etc.) como recordatorio de que pueden ser "Guardianes del Planeta" en su día a día. Se conversa sobre pequeñas acciones que pueden hacer en casa o en la escuela para cuidar el medio ambiente, reforzando la solidaridad y el compromiso.
Fomentar la empatía hacia el planeta y sus seres vivos.
Generar un compromiso inicial con el cuidado del medio ambiente.
Desarrollar el espíritu crítico al identificar situaciones perjudiciales para el entorno.
Potenciar el desarrollo de la competencia lectora a través de la identificación de palabras y pictogramas en las tarjetas de soluciones.
Fortalecer la solidaridad y la ayuda mutua al trabajar en equipo para resolver los problemas.
Promover la tolerancia al escuchar y valorar las ideas de los compañeros.
La evaluación será continua y basada en la observación de la participación activa de los niños durante la actividad:
Observación de la interacción en grupo: ¿Cómo interactúan los niños en sus equipos? ¿Se escuchan unos a otros? ¿Colaboran para resolver el problema? (Evalúa solidaridad, ayuda mutua, tolerancia).
Observación de las conversaciones: ¿Expresan ideas sobre el problema ambiental? ¿Preguntan? ¿Intentan justificar por qué creen que una solución es adecuada? (Evalúa espíritu crítico, comprensión).
Observación de la identificación de soluciones: ¿Intentan "leer" las tarjetas de soluciones? ¿Relacionan las soluciones con el problema? (Evalúa competencia lectora, razonamiento).
Observación de la presentación: ¿Participan en la explicación de su "Isla"? ¿Muestran interés por las presentaciones de los otros grupos? (Evalúa comunicación, participación, tolerancia).
Observación del compromiso: ¿Muestran entusiasmo al final? ¿Hablan sobre lo que pueden hacer para ser Guardianes? (Evalúa compromiso, empatía).
Se pueden tomar notas breves sobre las interacciones más significativas o las reflexiones de los niños para documentar el proceso y los resultados. La evaluación no busca una calificación numérica, sino comprender el nivel de participación, comprensión y desarrollo de las competencias.
Imaginemos un grupo de 4 niños trabajando en la "Isla de Problemas" con la imagen de un grifo goteando.
Exploración: Los niños observan la imagen. Un niño puede decir: "¡El agua se está cayendo!". Otro puede añadir: "Se está perdiendo agua". La educadora pregunta: "¿Y eso es bueno o malo? ¿Por qué?". Un niño puede responder: "Malo, porque se gasta el agua".
Búsqueda de Soluciones: Los niños buscan las tarjetas de soluciones. Encuentran una tarjeta con un grifo cerrado y una frase corta: "Cierra el grifo". Otro niño encuentra una tarjeta con una persona regando plantas con una regadera y la frase: "Usa poca agua". Discuten si ambas son soluciones. Uno puede decir: "Pero el problema es el grifo abierto". Otro puede argumentar: "Sí, pero si cierras el grifo, usas poca agua". Negocian y deciden que la tarjeta del grifo cerrado es la más directa, pero también comentan la otra como una buena idea en general.
Unión: Pegan la tarjeta del grifo cerrado en su "Isla".
Presentación: Presentan su isla diciendo: "Nuestro problema es que el grifo está abierto y se pierde el agua. La solución es cerrar el grifo".
Este ejemplo ilustra cómo los niños interactúan, observan, piensan críticamente sobre el problema, buscan información (las tarjetas), negocian y colaboran para presentar su solución, todo ello reforzando las competencias buscadas.
Taller interactivo y colaborativo para Educación Primaria.
Duración: 60 minutos.
Materiales: Material fungible (papel, lápices de colores, rotuladores, pegamento, tijeras), cartulinas de colores, revistas antiguas, material de reciclaje (botellas de plástico, rollos de cartón, tapas, etc.), proyector, pizarra o papelógrafo, un texto breve y adaptado sobre un problema ambiental (ej. la contaminación de plásticos en el mar), tarjetas con preguntas abiertas sobre el texto.
Trabajo en grupos pequeños. La actividad se estructura en las siguientes fases:
Introducción y motivación (10 minutos):
Se inicia con una presentación visual corta (proyector) que muestre imágenes impactantes sobre la belleza de la naturaleza y, en contraste, ejemplos de problemas medioambientales (contaminación, deforestación).
Se plantea la pregunta: "¿Qué podemos hacer nosotros para cuidar nuestro planeta?". Se fomenta una breve lluvia de ideas inicial.
Se explica que hoy, en el Día del Medio Ambiente, vamos a trabajar juntos para convertirnos en "Guardianes del Planeta".
Explorando la realidad (15 minutos):
Se divide a la clase en grupos pequeños (4-5 alumnos).
Se entrega a cada grupo una copia del texto breve y adaptado sobre un problema ambiental específico.
Los grupos leen el texto de forma colaborativa, ayudándose mutuamente si alguien tiene dificultades.
Se entregan tarjetas con preguntas abiertas relacionadas con el texto (ej. "¿Por qué es un problema que haya tanto plástico en el mar?", "¿Cómo afecta esto a los animales?", "¿Quiénes son responsables de esta situación?"). Estas preguntas buscan fomentar el espíritu crítico y la comprensión lectora.
Creando soluciones conjuntas (20 minutos):
Cada grupo discute las preguntas y propone posibles soluciones al problema ambiental abordado en el texto. Se les anima a pensar de forma creativa y a considerar diferentes perspectivas. Se fomenta la ayuda mútua y la solidaridad al compartir ideas y construir sobre las propuestas de los compañeros.
Utilizando el material fungible y de reciclaje, cada grupo crea una representación visual (collage, maqueta sencilla, póster) de su propuesta de solución. Se enfatiza la importancia de trabajar juntos para lograr un objetivo común.
Compartiendo y reflexionando (10 minutos):
Cada grupo presenta su propuesta al resto de la clase, explicando el problema y la solución que han ideado.
Se abre un espacio para preguntas y comentarios respetuosos entre los grupos, fomentando la tolerancia y la escucha activa.
Se destaca la importancia de la solidaridad global para abordar los problemas ambientales.
Compromiso individual y colectivo (5 minutos):
Se anima a cada niño a pensar en una pequeña acción que puede hacer individualmente para cuidar el medio ambiente en su día a día.
Se crea un "Mural de Compromisos" en la pizarra o papelógrafo donde cada alumno puede escribir o dibujar su acción. Esto refuerza el compromiso personal.
Desarrollo de la empatía hacia el entorno natural y los seres vivos que lo habitan.
Fomento del compromiso individual y colectivo con el cuidado del medio ambiente.
Estimulación del espíritu crítico para analizar los problemas ambientales y buscar soluciones.
Potenciar el desarrollo de la competencia lectora a través de la lectura y comprensión de textos informativos.
Refuerzo de los valores de solidaridad y ayuda mútua en el trabajo colaborativo.
Promoción de la tolerancia y el respeto por las diferentes ideas y perspectivas.
La evaluación será principalmente formativa y se basará en la observación del docente durante todo el taller. Algunos indicadores a tener en cuenta son:
Participación activa: ¿Los alumnos participan en las discusiones grupales y en las actividades?
Interacción colaborativa: ¿Se ayudan mutuamente en los grupos? ¿Comparten ideas y se escuchan? (Solidaridad, ayuda mútua)
Comprensión del texto: ¿Muestran comprensión del problema ambiental planteado en el texto a través de sus respuestas a las preguntas y sus propuestas de solución? (Competencia lectora, espíritu crítico)
Originalidad y viabilidad de las soluciones: ¿Las soluciones propuestas son creativas y muestran una comprensión de los desafíos? (Espíritu crítico)
Actitud de respeto: ¿Respetan las ideas de los demás durante las presentaciones y discusiones? (Tolerancia)
Compromiso individual: ¿Muestran interés en realizar acciones concretas para cuidar el medio ambiente? (Compromiso)
Se puede realizar una breve puesta en común final donde los alumnos expresen lo que han aprendido y la importancia de cuidar el planeta.
Problema ambiental (texto breve):
La tortuga Mariana y las bolsas de plástico. "Mariana es una pequeña tortuga marina que vive en el océano. Le encanta nadar y explorar. Pero últimamente, el mar está lleno de cosas extrañas flotando. Un día, Mariana vio algo que parecía una medusa deliciosa... ¡Era una bolsa de plástico! Las tortugas confunden a menudo las bolsas con medusas. Si se las comen, se ponen muy enfermas. Muchos animales marinos sufren por toda la basura que llega al mar. ¿Podemos ayudar a Mariana y a sus amigos?"
Preguntas para los grupos: ¿Por qué Mariana confunde las bolsas con medusas? ¿Qué le pasa a Mariana si se come una bolsa de plástico? ¿Quién tira las bolsas de plástico al mar? ¿Qué podemos hacer para que menos bolsas lleguen al océano?
Creando soluciones conjuntas: Un grupo podría decidir crear un póster gigante con dibujos de tortugas felices nadando en un mar limpio y mensajes como "No tires basura al mar" o "Usa bolsas de tela". Otro grupo podría construir una maqueta sencilla de una playa con contenedores de reciclaje bien colocados y personas utilizándolos, mostrando cómo la correcta gestión de residuos ayuda a evitar que la basura llegue al mar. * Un tercer grupo podría inventar una "canción de guardianes del planeta" que hable sobre la importancia de reciclar y no contaminar.
Compartiendo y reflexionando: Cada grupo mostraría su creación y explicaría por qué su solución es importante. Se abriría un debate sobre otras acciones que se pueden llevar a cabo, como reducir el consumo de plástico, recoger basura en la playa o en el parque, etc. Se enfatizaría que pequeñas acciones, sumadas, hacen una gran diferencia. Este taller ofrece un equilibrio entre el aprendizaje de información relevante (competencia lectora), la reflexión crítica sobre un problema (espíritu crítico), el trabajo colaborativo para encontrar soluciones (solidaridad, ayuda mútua) y el desarrollo de la empatía y el compromiso con el entorno.
Dinámica grupal interactiva, con un enfoque en el debate informado y colaborativo para Educación Secundaria.
Duración: Aproximadamente 60 minutos.
Materiales: Papel continuo o cartulinas grandes, rotuladores de colores, post-its, acceso a internet (opcional), proyector, material fungible para la escritura, tarjetas con temas de debate predefinidos (ver ejemplo).
Esta actividad sigue una metodología basada en el aprendizaje cooperativo y el debate informado. Se fomentará la investigación previa (si se da tiempo y acceso a ella), la escucha activa, el respeto por las diferentes perspectivas y la búsqueda de soluciones conjuntas. Los pasos a seguir son:
Introducción (5 minutos): breves palabras sobre la importancia del Día del Medio Ambiente y la necesidad de abordar los desafíos ecológicos desde la solidaridad y la acción conjunta. Presentación de la dinámica y sus objetivos.
Formación de grupos (5 minutos): Se dividirá la clase en grupos pequeños (4-5 estudiantes) de forma heterogénea.
Asignación de temas y lectura inicial (15 minutos): Cada grupo recibirá una tarjeta con un tema específico relacionado con un problema medioambiental (ejemplos: la contaminación plástica, la deforestación, el desperdicio de agua, etc.). Junto al tema, se incluirá un breve texto introductorio que sirva como punto de partida para la lectura y la reflexión inicial. Este es el momento clave para potenciar la competencia lectora. Se les pedirá que lean detenidamente el texto, identifiquen los puntos clave y discutan en grupo su comprensión.
Preparación del debate (15 minutos): Los grupos prepararán argumentos y posibles soluciones para el tema asignado. Se les animará a considerar diferentes perspectivas, incluyendo a aquellos más afectados por el problema, y a pensar en acciones solidarias que podrían ayudarles. Se pueden utilizar los post-its para anotar ideas y organizarlas.
El "Debate Ecológico con Corazón" (15 minutos): Cada grupo presentará brevemente su tema y sus argumentos. Posteriormente, se abrirá un debate moderado por el docente. El objetivo no es "ganar" el debate, sino compartir ideas constructivas, escuchar y comprender los puntos de vista de los demás, y explorar posibles acciones conjuntas. Se fomentará el espíritu crítico al cuestionar información y plantear alternativas.
Acciones concretas y compromiso (5 minutos): Al finalizar el debate, cada grupo propondrá una o dos acciones concretas (individuales o colectivas) que se comprometen a realizar para contribuir a la solución de su tema asignado o de otro tema abordado. Se anotarán estas acciones en el papel continuo o cartulinas, creando un "Mural de Compromisos Ecológicos". Se reforzará la ayuda mutua al proponerse apoyar mutuamente en la realización de estas acciones.
Empatía: Los estudiantes se pondrán en el lugar de las personas afectadas por los problemas medioambientales.
Compromiso: Asumirán la responsabilidad de contribuir a la solución de los problemas ecológicos con acciones concretas.
Espíritu crítico: Desarrollarán la capacidad de analizar información, cuestionar ideas y proponer alternativas.
Potenciar el desarrollo de la competencia lectora: A través de la lectura comprensiva de los textos proporcionados.
Solidaridad: Comprenderán la importancia de la colaboración y el apoyo mutuo para abordar los desafíos medioambientales.
Tolerancia: Respetarán las diferentes opiniones y enfoques durante el debate.
La evaluación será principalmente formativa y basada en la observación y la participación activa. Se evaluará:
La participación y colaboración dentro de cada grupo durante la preparación del debate.
La calidad de los argumentos y soluciones propuestas, mostrando espíritu crítico y empatía.
La capacidad de escuchar activamente a los demás y responder de manera respetuosa, demostrando tolerancia.
La comprensión de los textos iniciales y su capacidad de extraer información clave (evaluación indirecta de la competencia lectora).
El compromiso expresado en las acciones concretas propuestas, reflejando la solidaridad y la ayuda mutua.
La reflexión final sobre la importancia de la acción individual y colectiva.
No se buscará una respuesta «correcta» en el debate, sino la capacidad de argumentar, reflexionar y proponer soluciones desde una perspectiva informada y solidaria. Se puede utilizar una rúbrica sencilla para guiar la observación.
Imaginemos un grupo de estudiantes de 3º de ESO. Reciben la tarjeta con el tema: "El desperdicio de alimentos en nuestro entorno".
Texto introductorio en la tarjeta: "Cada año, toneladas de comida en buen estado terminan en la basura a nivel global. Esto no solo es un derroche de recursos (agua, energía) utilizados para producirla, sino que también afecta a personas que pasan hambre. Reflexiona sobre cómo este problema nos impacta y qué podríamos hacer al respecto."
Durante los 15 minutos de preparación, los alumnos del grupo leerían el texto, discutirían qué significa el desperdicio de alimentos, identificarían quiénes podrían ser los más afectados (personas con menos recursos, productores), y pensarían en posibles soluciones: reducir el desperdicio en casa, donar alimentos, compostaje, etc. Utilizarían post-its para organizar sus ideas y argumentos.
En el debate, presentarían su tema, explicarían por qué es importante y propondrían sus soluciones. Otro grupo, que haya trabajado sobre la contaminación plástica, podría debatir cómo el empaquetado excesivo contribuye al desperdicio de alimentos y a la contaminación, generando un debate interesante y conectado.
Como acción concreta, este grupo podría proponer organizar una campaña de concienciación en el instituto sobre el desperdicio de alimentos o investigar si hay bancos de alimentos locales donde pudieran donar comida no utilizada. Se comprometerían a documentar su progreso en esta acción, utilizando el mural de compromisos para hacer seguimiento.
Esta actividad no solo informa sobre problemas medioambientales, sino que promueve activamente la participación, la reflexión crítica y la acción solidaria en un ambiente de respeto y colaboración.