Se dice que los elefantes tienen muy buena memoria. Pero Paco no es un elefante normal. Tiene problemas serios con la memoria. Nunca recuerda nada. ¿Conoces a algún estudiante como Paco? ¿Hay algunos en tu escuela?
Cuando Paco va a clases, no trae sus materiales. Los deja en el armario. Nunca está en su asiento en la clase de matemáticas cuando la clase empieza porque por accidente va al laboratorio. Se prohíbe llegar tarde a la clase de matemáticas. También se prohíbe ir al laboratorio sin permiso. Paco quiere respetar las reglas, pero no recuerda las reglas.
Anoche escribió un informe sobre Isabel y Fernando. Lo trae a la clase de historia, pero no lo entrega. Nunca recuerda entregar la tarea.
Paco tiene un examen de vocabulario sobre una lista larga de palabras. Decide aprender las palabras de memoria. Cuando empieza el examen, no sabe ninguna de las palabras de memoria y no tiene bolígrafo. Nunca recuerda ninguno de sus materiales. No saca una buena nota en el examen.
En la clase de arte, Paco nunca presta atención, Lo que se hace en la clase es dibujar, pero él nunca recuerda traer ni lápiz ni tijeras. Hacen un proyecto y dan un discurso en la clase de arte, pero Paco no recuerda quién está en su grupo. Empieza a dar un discurso sobre Fernando e Isabel porque no recuerda que tiene que dar un discurso sobre el arte. Todos los estudiantes conocen a Paco. No respetan mucho a Paco porque nunca recuerda nada.
Paco va a la cafetería. Compra un almuerzo y busca un asiento en la cafetería. Come un poco de su sándwich y empieza a gritar. Grita: "¡Uf! ¡Alguien me puso comida en la boca! ¿Quién me puso comida en la boca?"
Su amiga Susana le explica que él mismo se puso el sándwich en la boca. Entonces, Paco mira el sándwich y hace otra pregunta: "Alguien se comió parte de mi sándwich. ¿Quién se lo comió?" Susana contesta que él mismo se comió el sándwich.
Paco no sabe qué hacer y le pide ayuda a su amiga. Le pide ayuda a Susana, pero no recuerda su nombre. Los dos discuten el problema de Paco, pero en un instante, Paco no recuerda su propio nombre.
Susana le pide a Paco su carnet de identidad. Por suerte, lo lleva. Susana le muestra a Paco su carnet de identidad. Paco mira el carnet de identidad y no entiende por qué él se llama Susana. El carnet de identidad dice: "Susana Ochoa Nieto." ¡Ay! Paco tiene el carnet de identidad de Susana. Susana escribe "Paco Fernández Mondragón" en una servilleta, corta la servilleta con tijeras y pone la servilleta en el carnet de identidad con cinta adhesiva y una grapadora. Paco está contento por un minuto y luego hace una pregunta más: "Pero, ¿quién se comió todo mi almuerzo?"