Recuerdos de mi infancia

Fecha de publicación: 10-mar-2011 23:39:37

La Cervecería de Mexicali era mi lugar preferido, y todavía recuerdo su cerveza como si hubiera sido ayer.

Yo de pequeño siempre salía a dar un recorrido a la ciudad, pues me aburría de estar en mi casa haciendo nada.

Mi papá trabajaba en la Cervecería, y de vez en cuando iba a visitarlo al trabajo. Me gustaba ir porque no me aburría. Era interesante ver todo el proceso que se hacía para que la cerveza quedara lista ya en la botella.

Además, no tardaba mucho en llegar, pues mi casa quedaba cerca de la cervecería. Mi recorrido era siempre el mismo: me iba de la calle D, cruzaba enfrente del edificio de la maltera, y daba vuelta a la derecha, en la calle Zaragoza.

Llegaba rápido y no tenía que preocuparme del tren, pues no cruzaba por ahí, ni del tráfico, ya que iba antes de que la gente saliera de trabajar.

Yo asistía a la escuela Leona Vicario, la cual quedaba algo lejos de donde vivíamos. Al salir de la escuela siempre podía ver a mi mamá atrás de la reja esperándome.

Siempre que había una fiesta familiar o de amigos, tomaban esa cerveza, pues a todos les gustaba. Nunca pude llegar a probarla, pues antes de que pudiera tomarla la Cervecería ya estaba cerrando.

Cuando llegábamos a nuestra casa nos recibía la rica comida ya preparada. De ahí hacíamos la tarea de la tarde; tenía tiempo para ir a ver a mi papá al trabajo.De vez en cuando, a mi padre le regalaban botellas, las cuales conservaba de recuerdo.Siempre que había una fiesta familiar o de amigos, tomaban esa cerveza, pues a todos les gustaba. Nunca pude llegar a probarla, pues antes de que pudiera tomarla la Cervecería ya estaba cerrando.

Eso creo yo que fue lo más difícil, ya que mi papá era el gerente de ahí y al cerrar la Cervecería se quedaría sin trabajo. Lo bueno es que avisaron tiempo antes y mi padre tuvo tiempo de buscar un nuevo empleo.

El 23 de octubre de 1973 cerró la cervecería de Mexicali.

Al principio fue raro llegar a las tiendas o fiestas y ver que no había esa cerveza, pero poco a poco nos fuimos acostumbrando. Además, mi papá consiguió un mejor trabajo. Así que ése no fue un problema.

Mi papá sigue conservando las botellas en su casa. Algunos amigos suyos le dicen que las venda para ganar dinero, pero él prefiere seguirlas guardando, para recordar los viejos tiempos en los que trabajaba en la Cervecería de Mexicali.

Primer grado (2010)