Los tres balazos
Fecha de publicación: 04-may-2011 20:22:12
Obra escrita por:
Adaptación del cuento La ruleta rusa, de Sonia Catela
ESCENA 1
Es una representación de un parque, con árboles, una banca una calle y al otro lado, un bar con sillas afuera y mesitas.
El narrador, que se encontraba sentado afuera del bar, en una silla, leyendo el periódico, se acerca a ver lo que sucedía en la banca del parque.
Motosa: (después de un gran silencio; con cara suplicante) ¡Ya no lo haga!
Hombre sentado: (recontando el dinero en un sombrero) ¡Necesito mil!
(Silencio. Suena un balazo. El narrador sale corriendo de la silla donde se encontraba leyendo el periódico y va hacia el alboroto; coloca un billete de diez pesos. El hombre sentado coloca una bala en el cargador y muestra que adentro solo está esa).
Señor de portafolios: (hacia el narrador) ¿Cómo saber que no se trata de un truco, una trampa?
(El hombre sentado completa el tanque, hace girar el tambor y dispara a un poste de luz).
Señor de portafolios: (hacia el narrador) No se animará.
Hombre sentado: (con desesperación) ¡Necesito mil pesos! (Cierra los ojos y se apunta; tira del gatillo).
(La motosa pierde el equilibrio y los espectadores: la sujetan).
Motosa: (reaccionando) ¡Bueno, ya basta!
Muchacho de bermudas: (gritando) ¡Viene la policía!
(El hombre sentado abre los ojos, se calza el sombrero, recuenta lo juntado, arregla los billetes y los sujeta; se sacude el polvo y permanece sentado).
ESCENA 2
(Llega al parque un policía con una pareja de borrachos).
Policía: (averiguó lo que sucedía y agregó 20 pesos a la pila de dinero) ¿Usted está seguro de que sabe lo que hace?
Hombre sentado: (al policía) Estoy seguro. (Suspira). Si no fuera por ésta necesidad no me hubiera metido en esto.
Policía: No seré yo quien detenga a este necesitado.
(Los borrachos hurgan en sus bolsillos y sacan lo que encontraron).
Motosa: (arrodillándose frente al hombre sentado) ¡Desista de esto, váyase!
(El hombre sentado acerca el sombrero y cambia la bala. El proyectil dorado rueda a los pies del narrador, quien lo recoge y se lo guarda en el pantalón. En ese momento pasan unos deportistas por el lugar y agregan dinero a la pila de billetes. El hombre sentado cierra los ojos y se coloca la pistola en la cabeza).
Narrador: (al señor de portafolios) ¿Qué dice?
Señor de portafolios: No se alcanza a escuchar.
(La motosa se pone a rezar de rodillas. El hombre sentado aprieta el gatillo y solo se escucha un click. El narrador se seca el chorro de sudor que lo empapa, el señor de portafolios hace lo mismo).
Motosa: (al hombre sentado) Piense: si se muere, ¿quién se beneficiará?
Policía: (a la motosa) Es una obligación que uno tiene. De morir, habrá alguien que se ocupe. Ya deje al hombre.
Motosa: Está bien.
ESCENA 3
(Llega un carro y de él se bajan tres hombres con traje y corbatas, uno de ellos trae una corbata amarilla).
Muchacho de bermudas: (a los hombres de corbata) ¡Vengan!
(El señor de corbata 1 y el señor de corbata 2 colocan gran cantidad de dinero en el sombrero).
Señor de corbata1: (al señor de corbata 3) ¡Pon!
Señor de corbata 3: (se niega) Un hombre que junta dinero disparándose de ese modo es un fracaso de hombre y no pienso apoyarlo.
Espectadores: (al hombre de corbata 3) ¡Retírese, entonces! ¡Váyase!
Hombre sentado: ¡Apártese! (dispara contra el poste de luz; alza una bala nueva).
Señor de portafolios: (con rabia) Cada cual se gana la vida como puede.
Muchacho de bermudas: (refiriéndose al arma) Es una vieja Smith y Wesson.
Alguien de los espectadores: ¡Qué linda arma!
Muchacho de bermudas: (al hombre sentado) Me gustaría saber su nombre.
Hombre sentado: No, ya no puedo hacerlo. No podré intentarlo una tercera vez (deja el arma y se agacha hacia el sombrero).
(Los espectadores se empiezan a dispersar y se oyen suspiros de alivio).
ESCENA 4
(El muchacho de bermudas, el narrador y el señor de portafolios van al bar para celebrar).
Narrador: (al hombre sentado) ¿Se une a nosotros?
(El hombre sentado alza el rostro, se sacude, asiente y se mete el dinero a la camisa).
Muchacho de bermudas: (tratando de llamar la atención desde la entrada del bar) ¡Eh! (agita el brazo) ¡Apúrense!
Narrador: (se voltea caminando hacia el bar) ¡Vamos!
(Se oye un balazo. Los espectadores voltean desde el lugar donde están y se acercan asombrados para ver lo que pasó).
Mujeres: (sollozando) ¿Por qué lo hizo...? Pero... ¿por qué...?
(El sombrero negro cae a los pies del narrador, quien se arrodilla, lo recoge, se lo pone y cruza la calle hacia el bar esquivando a los demás).
TELÓN