246.— Tan sólo pueden ser promovidos a las órdenes los frailes que:
1º sean profesos de votos solemnes;
2º estén dotados de las debidas cualidades;
3º sean presentados por su propio superior mayor;
4º sean aprobados por el consejo conventual, al cual incumbe el examinar si los ordenandos reúnen los debidos requisitos (cf. CIC 1029 y 1051).
246. — Ad ordines promoveri possunt
tantum fratres qui:
1° sint professi a votis sollemnibus;
2° debitis qualitatibus praediti sint;
3° a proprio superiore maiore praesententur;
4° a consilio conventuali adprobentur, cuius est examinare si ordinandi requisita habeant (cf. CIC 1029 et 1051).
247.— § I.– Los superiores no admitan a nadie a las órdenes, mientras no les conste por una cuidadosa investigación de su conducta religiosa, de su aptitud para el oficio sacerdotal y de su aprovechamiento en los estudios.
§ II.– No omitan interrogar ellos mismos a cada uno de los ordenandos, previa solicitud escrita y firmada de su puño y letra, a tenor del CIC 1036, a fin de tener certeza de que ellos quieren, libre y conscientemente, ser promovidos a las órdenes en el estado religioso.
247. — § I. – Superiores ad ordines neminem admittant
quamdiu de eiusdem moribus religiosis, de aptitudine ad sacerdotale officium et de profectu in studiis sibi per accuratam inquisitionem non constiterit.
§ II. – Ipsi vero singulos ordinandos interrogare et declarationem manu exaratam et subscriptam, de quo in CIC 1036, recipere ne omittant ut certiores reddantur eos libere ac scienter ad ordines in statu religioso promoveri velle.
248.— § I.– Después de la aprobación en el consejo, y hecho el examen sobre la orden que van a recibir, en presencia de los examinadores designados por el Capítulo Provincial, el superior mayor extienda las letras dimisorias a enviar al obispo diocesano, siguiendo las normas del derecho (cf. Apéndice n. 10).
§ II.– El Prior Provincial no conceda las letras dimisorias sino a los hijos de su Provincia o a los frailes asignados en su Provincia, con el consentimiento del Prior Provincial de la Provincia de afiliación.
248. — § I. – Post adprobationem in consilio
et examine peracto circa ordinem suscipiendum coram examinatoribus a capitulo provinciali designatis, superior maior litteras dimissorias conficiat ad episcopum dioecesanum mittendas, servatis de iure servandis (cf. appendicem n. 10).
§ II. – Litteras dimissorias prior provincialis ne concedat, nisi filiis suae provinciaee vel fratribus in sua provincia assignatis, de consensu prioris provincialis provinciae affiliationis.
249.— § I.– Los presbíteros estudiantes que permanecen fuera del estudiantado sean introducidos gradualmente en la vida y apostolado sacerdotal mediante coloquios y ejercicios oportunos, por el Prior o algún otro fraile presbítero señalado por el Prior Provincial.
§ II.– Sin embargo, estarán siempre bajo la jurisdicción del prior, quedando a salvo los derechos del regente en lo que se refiere a los estudios.
249. — § I. – Presbyteri studentes
extra studentatum manentes, a priore vel ab aliquo fratre presbytero a priore provinciali designato, opportunis colloquiis et exercitationibus in vitam et apostolatum sacerdotalem gradatim introducantur.
§ II. – Sint tamen semper sub iurisdictione prioris conventus, salvis iuribus regentis quoad studia.
249, I: Cambio técnico BH 393: se cambió "padre" por "fraile presbítero".
250.— § I.– Terminado el período de estudio, los presbíteros jóvenes deben dedicarse a la vida religiosa y apostólica con sentido de responsabilidad, de tal forma que su ministerio sacerdotal fomente e integre realmente su vida espiritual e intelectual, conscientes de los problemas especiales que en los primeros años de su sacerdocio se les plantearán.
§ II.– Los frailes, sobre todo los superiores, ayuden fraternalmente y asistan con su consejo a los sacerdotes jóvenes en sus ministerios.
250. — § I. – Curriculo studiorum peracto,
iuvenes presbyteri religiosae et apostolicae vitae cum sensu responsabilitatis applicentur, ita ut ministerium sacerdotale vitam eorum spiritualem et intellectualem revera foveat et integret, conscii specialium problematum quae primis annis sui sacerdotii ipsis impendent.
§ II. – Fratres, praesertim superiores, iuvenes presbyteros in eorum ministeriis fraterne adiuvent consilioque adsistant.
251.— § I.– Antes de ejercer el oficio de confesor hágase un examen especial. El modo de hacer dicho examen se establece en la Ratio Studiorum Generalis.
§ II.– Los frailes deben hacer* el examen dentro de los seis meses después de terminar el ciclo institucional de sus estudios, o después de la ordenación sacerdotal si esta se difiere por cualquier causa justa.
§ III.– Antes de hacer este examen, se requiere, para su validez, la votación de conducta de la que se trata en el n. 318, 4º.
251. — § I. – Exercitio muneris confessarii
praemittatur examen speciale. Modus hoc examen faciendi in Ratione generali studiorum statuitur.
§ II. – Fratres* examen subire debent infra sex menses ab institutionali studiorum curriculo theologico absoluto, vel ab ordinatione sacerdotali si haec quacumque ex iusta causa differatur.
§ III. – Ante hoc examen requiritur ad validitatem votatio de moribus de qua n. 318, 4°.
* 251-II: En nota del 30 de noviembre de 1999 (Addenda, delenda, corrigenda, mutanda in ultima editione LCO, Prot. N. 50/99/2066 LCO -ver documento aquí-), el entonces Procurador de la Orden, fray Carlos Azpiroz Costa, se hizo eco de los errores señalados en la última edición por fr. Mark De Clauwe, fr. Philippe Toxè y fr. Orlando Húber, y entre otros, mandó incluir una palabra omitida en el texto que diría así: "Fratres primum examen subire debent..." [Los frailes deben hacer un primer examen...]
251. III.- Esta es la única votación "de moribus" que ha quedado en las Constituciones (ver nota al n. 245). Dicha votación previa hace a la validez del examen, y en el reenvío se establece que es competencia del Consejo Conventual.