La nueva comunidad cristiana, desde muy pronto, empezó a ser perseguida por los judíos. Pedro y Juan, fueron arrestados y encarcelados. Primero se les prohibió hablar de Jesús y predicar en su nombre. Luego llegó la violencia.

Esteban muere lapidado. Es el primer mártir cristiano que muere por defender su fe. Santiago también muere en estas persecuciones, siendo el primer apóstol que muere martirizado.

La persecución de Jerusalén provocó la huida de los cristianos, a otras regiones de Palestina. Esto propició la expansión del cristianismo primero más allá de Jerusalén y luego por Asia menor y el resto del Imperio Romano.

Pablo había empezado a predicar entre los gentiles. Había bautizado a Cornelio, militar romano, y a otros paganos que no cumplían la ley judía.

La comunidad de Antioquía se oponía pues afirmaban que los bautizados debían cumplir la ley judía: circuncisión, sábado, comidas...

El conflicto les llevó a Jerusalén a consultar a los apóstoles. Esta reunión se conoce como el Concilio de Jerusalén.

Ante el problema planteado, Pedro afirmó que la incorporación de los gentiles al cristianismo era obra del Espíritu Santo que no distingue entre judíos y paganos. Para ser bautizado no hacía falta cumplir la ley judía. La salvación proviene de la gracia de la fe, no de cumplir la ley.

Esta decisión abrió a la puerta de la iglesia a la evangelización de judíos o gentiles, y al mandato de Jesús de "Id por todo el mundo".

Jesús durante toda su vida mostró su apertura a los gentiles. Curaba a judíos y no judíos, alababa la fe del centurión romano, conversaba con la samaritana...

En una sociedad judía profundamente marcada por las diferencias y sectarismos sociales, esta actitud no era siempre entendida por los que entendían que su mensaje era solo para el pueblo de Israel.

Tras la resurrección los discípulos reciben de Jesús el mandato de predicar el evangelio por todo el mundo. Reconocido por Pedro, llevado adelante por Pablo... la iglesia se extiende por palestina y llega hasta Roma extendiéndose por todo el mundo.

La Iglesia se convierte así en católica. Católico significa universal. El mensaje de Jesús se dirige a todos los seres, de todos los lugares y de todos los tiempos, sin distinción.