Público en la plaza de todos de Barbastro. Años 40. (J. Abizanda)
Desde el siglo XV hay noticias de que en Barbastro se corrían los toros ensogados. Cuando las Fiestas del Entremuro se celebraban por la Candelera (se celebraron en estas fechas hasta 1910)se corrían los toros con esta modalidad, noticia fidedigna recogida de nuestros padres.
En 1839, con motivo de las Fiestas Septembrinas se lidiaron, los días 7 y 8 de la ganadería de D. José murillo de Ejea de los Caballeros, cuatro toros cada tarde, por los espadas José Manuel Latorre de Zamora y Juan Rafael Rivera de Cádiz, corrida que patrocinó la Junta de Beneficencia del Hospital de S. Julián y Sta. Lucía, para recaudar fondos, dado que había necesidad de ellos.
Desconocemos que tipo de Plaza de toros había. Sí sabemos que en el mismo lugar que está ubicada la actual, existía lo que se llamaba “ El Campo del toro “, y que allí se daban las Corridas, resguardando al público con algún tipo de protección, fueran carros o cualquiera otra cosa.
Es en 1892 cuando se inaugura la Plaza de Toros tal como la hemos conocido. Su constructor y propietario fue D. Mariano Lacambra Marín, que vivía en la Plaza de la Candelera. Tenía 6 filas de oradas de piedra y se remontaba en su lado oeste por un airoso palco corrido. En algún tiempo los enfermos del Hospital tenían su lugar reservado para presenciar las corridas pues dicho palco comunicaba con el Hospital.
Tenía un aforo para 3.200 personas. En Septiembre de 1892 se inauguró oficialmente y los días 5 y 6 se lidiaron cuatro toros cada día de la ganadería de D. Pedro, Galo de Peralta de Navarra, por el diestro Antonio moreno Fernández, a. Lagartijillo de Granada. El cartel anunciador de esta corrida de inauguración se conserva enmarcado en las escaleras del Ayuntamiento que dan acceso al Salón de Sesiones.
Plaza de todos de Barbastro. (Programa de fiestas)
Transcurrido un siglo, la Plaza amenazaba ruina hasta el punto que el ultimo año antes de su reconstrucción se alquiló una de madera para el día 8 de Septiembre. Se acometieron las obras de la mitad de la Plaza en la parte de los antiguos palcos en el año 1995, suprimiendo los dichos palcos, quedando la otra mitad por reconstruir.
Durante varios años, el Entremuro celebró aquí sus corridas con vaquillas.
Luis Montes