TORIO
SI QUIERES MÁS INFORMACIÓN, EN VÍDEO, INFOGRAFÍA Y TEXTO, HAZ CLIC ABAJO
El Dios Thor en la tabla periódica
Este elemento fue descubierto en 1829, por químico sueco Jöns Jacob Berzelius (1779-1848). Este lo llamó Thorium, en honor a Thor (dios guerrero de los relámpagos en la mitología escandinava).
El torio pertenece a la familia de las sustancias radiactivas, si bien su periodo de semidesintegración es extremadamente largo. Su potencial como combustible nuclear, como material fértil, se debe a que presenta una alta sección eficaz (alta probabilidad de que partículas como los neutrones hagan blanco en su núcleo) frente a neutrones lentos (térmicos), derivando en protactinio-233, que rápidamente se desintegra en uranio-233, el cual es un isótopo fisible que puede sostener una reacción nuclear en cadena. Aparte de su incipiente rol como combustible nuclear (ir a la página del Polonio para más información sobre propulsores nucleares), otros usos del torio son
Aplicaciones en material cerámico de altas temperaturas
Catalizador en la industria química
Agente de aleación en estructuras metálicas
Acompañando al wolframio en los filamentos de las lámparas eléctricas
¿Qué tiene que ver el torio con el país de los cerezos en flor y los asteroides?
Tras Estados Unidos, Luxemburgo y Emiratos, el también conocido como “el país de los cerezos en flor” es la cuarta nación que sienta las bases legales que favorecen la incursión de sus empresas en la explotación comercial de los asteroides que pululan por el cosmos. Algunos contienen importantes cantidades de níquel, hierro y cobalto, elementos pesados como uranio y torio, metales preciosos como oro, platino y rodio, tierras raras y otros minerales todavía desconocidos. (Para saber más sobre minería espacial, ir a la página del Europio)
En la Luna encontramos torio y las cenizas de un geólogo.
La nave automática Lunar Prospector, la primera misión enviada por la NASA a la Luna en un cuarto de siglo, estuvo un año y medio en órbita polar tomando allí datos geológicos. Ha permitido hacer un mapa detallado de la composición química de su superficie (abundancias de torio, potasio, uranio, hierro, oxígeno, silicio, aluminio, calcio, magnesio y titanio). En esta sonda se cargaron cinco instrumentos: tres espectrómetros, un magnetómetro y un reflectómetro de electrones.
Pero la Lunar Prospector llevaba también unos recuerdos: una inscripción del Romeo y Julieta de Shakespeare e imágenes del cometa Hale-Bopp y de un cráter de Arizona. Lo más emotivo es una cápsula con cenizas del famoso geólogo planetario Eugene Shoemaker, que siempre soñó con ir a la Luna y que murió meses antes del lanzamiento de esta sonda. Shoemaker será el primer terrícola depositado para siempre en otro cuerpo celeste.
