Moral y Ética

¿Qué es la moral?

¿De dónde salen las reglas morales?

 La tradición 

 La religión 

El sentido común

 ¿Basta con la moral tradicional, religiosa o de sentido común?

¿Tenemos respuesta para todos los problemas morales? Para muchas situaciones “típicas” tenemos reglas morales claras: no robar, no matar, no mentir, etc.

Incluso cuando hay conflictos entre distintas normas morales, tenemos una jerarquía entre los valores que estas normas representan. Por ejemplo: mentir si ello es imprescindible para salvar una vida humana.

Pero hay muchas situaciones que no hemos vivido nunca y para las que no tenemos un criterio moral formado. Por ejemplo:

¿Hay acuerdo en temas morales?

Otro problema que surge enseguida es que hay distintas opiniones sobre cuestiones morales. No es ninguna sorpresa. Si aprendemos la moral siguiendo lo que nos dicen, lo que vemos, lo que nos parece mejor, o nuestras creencias religiosas, no es extraño que distintas personas tengan distintas opiniones:

¿Qué podemos hacer cuando no estamos de acuerdo?

La Ética propone que razonemos, que debatamos entre nosotros y que tratemos de llegar a un acuerdo. Aunque no tengamos la misma cultura, ni la misma religión, ni la misma edad, ni la misma situación económica, ni...

¿Qué es la Ética?

Requisitos para hacer Ética

Desacuerdos morales

Conflictos entre reglas morales

Cambios sociales y tecnológicos

Cambios en nuestra moral

Una posible solución: La Regla de Oro

Es verdad que nuestras normas morales no cubren todos los casos que puedan ocurrirnos. Por ejemplo, si somos cristianos, no esperamos que los Diez Mandamientos nos digan si debemos donar nuestros órganos, si debemos oponernos a las corridas de toros o si es mejor afiliarse a Greenpeace o a Cruz Roja. Debemos adaptar o interpretar los mandamientos religiosos a nuestra situación, pero esa interpretación no es fácil y distintos creyentes tienen distintas interpretaciones.

También es verdad que gente de diversas culturas y religiones tiene distintas ideas de lo bueno y lo malo.

Pero quizá haya una norma moral muy general que resuelva ambos problemas:

Esta norma muy general es La Regla de Oro, y con unas u otras palabras está presente en muchas religiones:

¿Nos ayuda la Regla de Oro a decidir en situaciones como las anteriores?

La Regla de Oro no resuelve nuestras dudas y, en definitiva, depende de quién aplique la regla así hará una cosa u otra. Porque lo que la regla de oro dice es que trates a los demás como te gustaría que tratasen a ti, no como les gustaría que les traten.

Imaginemos que padecemos una enfermedad y pedimos al personal médico que deje de mantenernos con vida artificialmente. El médico o la médica, aplicando la regla de oro, decidirá desconectarnos de las máquinas o mantenernos con vida artificialmente según lo que desee para sí mismo/a. ¿Pero, y si lo que quiere para sí no es lo mismo que lo que nosotros le pedimos?

Si lo pensamos, la regla de oro es una regla tan difundida y aceptada en tantas culturas porque, en el fondo, lo que nos dice es que tenemos razón en hacer lo que hacemos, que nuestras ideas morales son las correctas y que estamos justificados en tratar a los demás (a personas de otras culturas) según nos parezca a nosotros: es una regla etnocéntrica. ¿Qué es el etnocentrismo?

Y aún hay otro problema: supongamos (aunque no sea así) que la Regla de Oro resolviera todos nuestros problemas. ¿Cómo convenceríamos a alguien de que también debería seguirla? ¿Y si esa persona no quiere tratar a los demás como el gustaría que le tratasen a él o ella? ¿Y si piensa que no hay que tratar a los demás como se trataría a sí mismo/a? Algunas personas piensan que no todos los seres humanos merecen el mismo trato: piensan que podemos tratar a unos mejor que a otros. ¿Cómo podemos convencerles de que están en el error?

Además de tener una regla, necesitamos tener razones para seguirla, razones que puedan convencer a otros a que la sigan también; no podemos seguirla ciegamente. Así pues, y a pesar de su popularidad universal, la Regla de Oro puede ser severamente criticada.

Moral y Etica 3º