Ingredientes para la base:
16 galletas María
80 gr de mantequilla sin sal
Ingredientes para el relleno:
250 ml de nata para montar
250 gr de queso crema Mascarpone
100 gr de azúcar
250 ml de leche
1 sobre de cuajada en polvo (12 gramos)
250 ml de leche condensada
Una cucharadita (de café) de esencia de vainilla
Para adornar:
Unas fresas
Preparación:
En primer lugar, vamos a preparar la base de nuestra mini tartas. Para ello, trituramos las galletas, le agregamos la mantequilla derretida y removemos bien los ingredientes.
A continuación, con esta mezcla de galletas molidas, vamos a colocar una capa en el fondo de los moldes donde vayamos a preparar las mini tartas, (yo he usado una bandeja de moldes para magdalenas y capsulas de papel).
Preparamos el relleno mientras dejamos enfriar el molde con la base de galletas en el frigo.
Ponemos la nata, el queso, la leche condensada, el azúcar y la esencia de vainilla en un cazo a fuego medio-bajo, removiendo constantemente con unas varillas manuales.
A continuación, en la leche vamos a diluir el sobre de cuajada en polvo y removemos hasta que no queden grumos.
Ahora, cuando la mezcla que tenemos en el fuego comience a hervir, agregamos la leche con la cuajada y removemos bien a fuego medio.
Luego, cuando la mezcla de la tartitas empiece a hervir de nuevo, retiramos del fuego.
Después, vertemos el relleno sobre las bases de galletas que teníamos reservada en el frigo
Finalmente, dejamos enfriar las tartitas a temperatura ambiente y luego la meteremos en el frigo, donde estará al menos durante unas 6 horas más o menos, para que cuaje bien.
Estas tartitas están más rica de un día para otro porque ha tenido tiempo suficiente de cuajar y que se integren bien los sabores.
Para desmoldarlas vamos con cuidado poquito a poco quitamos la capsulas de papel, (se pueden hacer en moldes de silicona).
Las puedes decorar con lo que más te guste, pero yo en este caso le he puesto unas fresas.