Los átomos tienen el mismo número de protones y de electrones, pero a veces pierden electrones, ya que son muy pequeños y se mueven a gran velocidad en la corteza. En este caso el átomo se queda con más cargas positivas que negativas. Diremos que tienen carga positiva y se llama ión positivo o catión.
Otros átomos ganan electrones y se quedan con más cargas negativas de las que debería tener; éstos se llaman iones negativos o aniones.
Los iones se representan igual que los átomos, con el número atómico abajo a la izquierda, el número másico arriba a la izquierda. Arriba a la derecha se escribe cuántas cargas hay sin compensar, mediante un número y un signo más si se han perdido electrones o un número y un signo menos si se han ganado electrones. Al número y su signo se le llama carga eléctrica del ión:
Por ejemplo, el Litio tiende a perder un electrón, mientras que el Oxígeno tiende a ganar dos electrones: