Lenny (Woody Allen) es un periodista deportivo casado con la galerista Amanda (Helena Bonham Carter) por un cambio de opinión Amanda tiene ganas de tener un hijo, pero a estas alturas de la vida (y del sexo) ella prefiere adoptar. A Lenny no le causa gracia la idea, teme en esos mitos de la semilla de maldad, en que los hijos adoptados heredan conductas de sus progenitores, que no necesariamente son de conductas muy santas...
Pero Max (el niño), hijo de una prostituta, parece ser encantador... por lo que Lenny decide redimir a su madre, salvándola de la prostitución y del porno. Así su hijo nunca se avergonzará de su madre biológica. Es una obra en la que los dioses, el coro y muchos rasgos de las tragedias griegas están presentes anticipando designios fatales y mostrando señales del destino.