Luis Carlos Hurtado

Propiedad privada

Luis Carlos Hurtado

 

‘Lo minúsculo siempre resiste’

Yásnaya Aguilar

[Defensora de los derechos humanos en las comunidades mixes de Oaxaca, México]

‘Puedo llegar ahí y decir: el polvo, el aire, la luz que cae sobre estos lugares-partes son de mi propiedad, y nadie me reclamará al respecto’.

Las rocas [la playa de mi infancia]; el escombro [los restos de mi antigua casa familiar]; mi ombligo [la duda de que probablemente mi cuerpo no es mío en su totalidad] es una triada visual de crítica negra al valor de la ‘propiedad’ y sus flujos económicos-simbólicos al interior de los sistemas neoliberales. Este marcaje y señalamiento del paisaje, los espacios de mi historia, de mi cuerpo, junto a la repetición de la frase "propiedad privada’, es un acto microscópico de ‘resistencia’ ante dinámicas de relación con lo ‘otro’ que aparentemente son inamovibles. A pesar de todo, estos breves nichos de energía rebelde sobreviven develando toda su vitalidad cuando, por la condición de una pandemia, los sistemas económicos y su voracidad [aparentemente] fueron obligados a detenerse.

La propiedad privada es un concepto que surgió a finales del s. XVIII en la efervescencia de la Revolución Industrial. Su praxis provocó la instauración de relaciones de explotación social y económica que sobreviven en el tiempo contemporáneo de manera irracional. Bajo el espectro crítico de las teorías económicas del s. XIX como las de Karl Marx con El Capital, la delimitación de la pertenencia o propiedad desplazó a los antiguos ‘señoríos’ o ‘feudos’, y junto con ellos a las formas del trabajo colectivizado [gremios laborales de artesanos] que implementaban mecanismos de utilidad y beneficios comunitarios.

 


Quisiera agradecer a Tiago y todo el equipo organizador, por la invitación a colaborar en este proyecto y por mantenerse en contacto durante el proceso.