Neoclasicismo

1. La Ilustración

2. El Neoclasicismo

3. Actividades de regalo



1. La Ilustración


En el siglo XVIII Europa cambia: cambia el arte, la cultura, la economía, la política… El siglo XVIII recibirá varios nombres, todos ellos con un elemento común: “Siglo de la Ilustración” (ilustrar es enseñar), “Siglo de la razón”, “Siglo de la Luces” (la razón es como una luz para las personas) … La característica más importante del siglo XVIII es, pues, el interés por conocer, por la ciencia, por analizar todo con la razón.

Los conceptos básicos del siglo XVIII son en cultura la Ilustración; en política, el despotismo ilustrado; en las artes, el Neoclasicismo. La Ilustración es un movimiento cultural cuyo principio básico es la instrucción y cuyo propósito es renovar y mejorar la vida del hombre tanto individualmente como dentro de la sociedad y para ello se utiliza la educación como vehículo del pensamiento ilustrado.

Las ideas ilustradas penetraron durante el siglo XVIII en España muy lentamente, entre otros motivos, por la labor opositora de la Inquisición. La Inquisición prohibió libros fundamentales como la Enciclopedia y procesó a autores como Moratín, Samaniego o Iriarte. Las principales vías de penetración de las «luces» o «ideas ilustradas» son los medios de comunicación escritos (periódicos y revistas), las traducciones de libros franceses y las nuevas instituciones culturales, entre las que destacan la Real Academia Española, el Museo del Prado y la Biblioteca Nacional. También contribuyeron asociaciones privadas como las Sociedades de Amigos del País, cuyo fin era el fomento de la agricultura, la industria, el comercio, las ciencias útiles y las artes.


La mentalidad ilustrada se caracteriza por los siguientes rasgos:

1. Laicismo: búsqueda de unas soluciones que no proporciona la religión (lo cual no supone una orientación atea).

2. Racionalismo y espíritu crítico: búsqueda de soluciones de los problemas por medio de la experiencia y la razón. Se pone en duda la tradición como fuente de conocimiento. Los intelectuales del siglo XVIII combatieron los dogmas, la superstición y la ignorancia de la sociedad mayoritariamente analfabeta de su época, sometiéndolos al análisis de la razón.

3. Utilitarismo: énfasis en lo práctico.

4. Humanitarismo: obligación hacia el prójimo y búsqueda de la felicidad dentro de un colectivo. Los ilustrados piensan que la cultura, la ciencia, la tecnología… pueden hacer a las personas más libres y felices.


Por ello, el nuevo tipo de intelectual, el ilustrado, tiene las siguientes características, según Francisco Aguilar Piñal:

1. Usa la razón y la experiencia en contra de las tradiciones y supersticiones.

2. Es aficionado a las creencias empíricas y a la historia.

3. Ama la tolerancia, la paz y el progreso humano.

4. Defienden la dignidad humana y la superioridad del saber científico sobre la tradición indocumentada.


La Ilustración disfrutó de la protección de la nueva dinastía de los Borbones. Para modernizar el país, se puso en práctica una forma de gobierno denominada despotismo ilustrado, inspirada en las ideas de la Ilustración y el deseo de fomentar la cultura y prosperidad de los súbditos. Como el resto de los monarcas absolutistas de Europa, en España los Borbones se apoyaron en una minoría culta y en la incipiente burguesía para llevar a cabo todas las reformas.


2. El Neoclacisismo


El Neoclasicismo es una estética literaria y artística que recoge muchos elementos del humanismo renacentista: las nociones de modelo artístico y de imitación de los autores griegos y latinos, sus principios estéticos, el gusto por la perfección, la claridad y la sencillez de las estructuras clásicas... Los neoclásicos imitan a los clásicos grecolatinos y los clásicos españoles del siglo XVI.

La literatura ilustrada seguirá la máxima horaciana de deleitar instruyendo. Los neoclásicos querían realizar una reforma en los usos y comportamientos sociales, e intentan modificar la mentalidad colectiva por medio de la literatura y la educación. En la literatura predomina el didactismo y la utilidad; por ello se amplió el concepto de literatura a nuevos géneros como el ensayo, el tratado y el informe. Estas nuevas formas literarias eran más adecuadas que los géneros convencionales para la crítica y la transmisión de conocimientos útiles. En este sentido también fueron muy cultivadas en poesía la fábula (para corregir vicios y errores), la oda (para exaltar los ideales de la Ilustración) y la sátira (para burlarse de las viejas costumbres); y en teatro, la comedia con finalidad moralizante.

Características del Neoclasicismo

1. Didáctismo. Se escriben las obras para enseñar, para adoctrinar a la población; en la comedias se ridiculiza el vicio y en la tragedia se purifican las pasiones.

2. Imitación de la naturaleza. Para los neoclásicos, la naturaleza lo es todo, tanto material como espiritual; para ellos la literatura es imitación de la naturaleza en su forma de crear.

3. Decoro y verosimilitud. La imitación de la naturaleza nos conduce al dogma del decoro y a la verosimilitud. Decoro es la correspondencia entre la condición de un personaje, las acciones y el modo de hablar que se le atribuyen en una obra literaria con la realidad. En cuanto a la verosimilitud, esta se defiende como requisito imprescindible en una obra: la materia escogida, los personajes, el desenlace, las acciones, etc., todo debe ser verosímil, creíble. Todo lo anormal, insólito e inesperado está prohibido.

3.1. La verosimilitud aplicada al teatro requiere un encadenamiento estructurado de los hechos y un fundamento en las acciones de los personajes: aplicada al modo de ser de estos, equivale al decoro; aplicada a la representación, exige las tres reglas o unidades dramáticas clásicas: de lugar, tiempo y acción. Los neoclásicos las consideran necesarias para lograr la identificación del espectador.

a) Unidad de lugar es el carácter de una obra teatral cuya acción se considera situada en un lugar único y preciso representado por el escenario. La acción ha de transcurrir en el mismo espacio físico.

b) Unidad de tiempo es el carácter teatral cuya acción dura a lo sumo 24 horas, o por lo menos, tanto como la duración real de la representación.

c) Unidad de acción es el carácter teatral cuyo argumento debe ser unitario, debe tener una sola acción principal y supeditada a esta acción las acciones secundarias.

4. Sometimiento a la razón. Los artistas evitan en sus obras los sentimientos y la imaginación.

5. Buen gusto. Las obras de creación deben respetar el principio estético del buen gusto, esto es, deben reflejar equilibrio y serenidad. Esto se logra con la imitación de los modelos clásicos y la aplicación de las preceptivas o códigos de normas estéticas. En esta misma línea se separa la cómico de lo trágico y se rechaza la mezcla de verso y prosa. La preceptiva española más importante del siglo XVIII fue la Poética de Ignacio Luzán.



3. Actividad de regalo

1. Lee este texto y responde a las preguntas.


DON PEDRO.- Es demasiada necedad, después de lo que ha sucedido, que todavía esté creyendo el señor que su obra es buena. ¿Por qué ha de serlo? ¿Qué motivos tiene usted para acertar? ¿Qué ha estudiado usted? ¿Quién le ha enseñado el arte? ¿Qué modelos se ha propuesto usted para la imitación? ¿No ve usted que en todas las facultades hay un método de enseñanza y unas reglas que seguir y observar; que a ellas debe acompañar una aplicación constante y laboriosa, y que sin estas circunstancias, unidas al talento, nunca se formarán grandes profesores, porque nadie sabe sin aprender? Pues ¿por dónde usted, que carece de tales requisitos, presume que habrá podido hacer algo bueno? ¿Qué, no hay más sino meterse a escribir, a salga lo que salga, y en ocho días zurcir un embrollo, ponerlo en malos versos, darle al teatro y ya soy autor? ¿Qué, no hay más que escribir comedias? Si han de ser como la de usted o como las demás que se le parecen, poco talento, poco estudio y poco tiempo son necesarios; pero si han de ser buenas (créame usted) se necesita toda la vida de un hombre, un ingenio muy sobresaliente, un estudio infatigable, observación continua, sensibilidad, juicio exquisito, y todavía no hay seguridad de llegar a la perfección.


Leandro Fernández de Moratín: La comedia nueva o el café, Castalia


a) ¿Qué reprocha don Pedro a su interlocutor?

b) ¿A qué se dedica dicho interlocutor?

c) ¿Qué es necesario para que un escritor de comedias pueda aspirar a la perfección?

d) Enuncia el tema del texto.

e) ¿Qué pretende don Pedro dirigiendo a su interlocutor tantas preguntas seguidas?

f) Explica si el texto refleja la actitud crítica de la Ilustración.

g) Razona si tiene finalidad didáctica el fragmento.

h) Identifica los rasgos del Neoclasicismo a los que hace referencia el texto.