Jesús a la S. D. Luisa Piccarreta


AUDIO


...el título que darás al libro que publicarás sobre mi Voluntad será éste:

 

‘El Reino de mi Divina Voluntad en medio a las criaturas.  Libro de Cielo.  Llamada a las criaturas al orden, a su puesto y a la finalidad para la que fueron creadas por Dios’.


El Reino del FIAT Divino

www.fiatdivinavoluntad.com

Libro de Cielo Vol. 19-51 (2)

Lc: 10, 9

“Digan a la gente: ‘El Reino de Dios está cerca de ustedes’”


AUDIO


"Que se haga conocer que mi Divina Voluntad ya quiere venir a reinar 

como en el Cielo así en la tierra 

en medio a las criaturas"

Vol. 25-21 (3)

Enero, 2024

Celebramos La Epifanía




EVANGELIO

Enero 28, 2024


Marcos 1, 21-28

Enseñaba con autoridad

 4 modos de hablar Jesús al alma

Mayo 13, 1917 Ntra. Señora de Fátima a los 3 pastorcitos


Rezad el Rosario todos los días

Para alcanzar la paz del mundo y el fin de la guerra

Santo Rosario

por el Reino



AUDIO Youtube:

Fiat Divina Voluntad


TEXTO Web: 

Virgen María, La Reina del Cielo

AUDIO



"Sé atenta a recibir continuamente la palabra de mi Fiat, que es portador de creación, de vida y de conservación”.

                 Jesús

El Reino del FIAT Divino

www.fiatdivinavoluntad.com

Libro de Cielo Vol. 27-4 (3)

EVANGELIO

Marcos 1, 21-28



Lectura del santo Evangelio según San Marcos

Enseñaba con autoridad


21.Llegan a Cafarnaúm. Al llegar el sábado entró en la sinagoga y se puso a enseñar. 

22.Y quedaban asombrados de su doctrina, porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas. 

23.Había precisamente en su sinagoga un hombre poseído por un espíritu inmundo, que se puso a gritar: 

24.«¿Qué tenemos nosotros contigo, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Sé quién eres tú: el Santo de Dios.» 

25.Jesús, entonces, le conminó diciendo: «Cállate y sal de él.» 

26.Y agitándole violentamente el espíritu inmundo, dio un fuerte grito y salió de él. 

27.Todos quedaron pasmados de tal manera que se preguntaban unos a otros: «¿Qué es esto? ¡Una doctrina nueva, expuesta con autoridad! Manda hasta a los espíritus inmundos y le obedecen.» 

28.Bien pronto su fama se extendió por todas partes, en toda la región de Galilea."


Palabra del Señor

"Gloria a Ti, Señor Jesús"

‘El Reino de mi Divina Voluntad en medio a las criaturas.  Libro de Cielo.  Llamada a las criaturas al orden, a su puesto y a la finalidad para la que fueron creadas por Dios’.


Sierva de Dios Luisa Piccarreta

"El Evangelio del reino de la Voluntad Divina"

Mc 1, 27

"... «¿Qué es esto? ¡Una doctrina nueva, expuesta con autoridad!"


AUDIO



La Reina del Cielo en el Reino de la Divina VoluntadDía 26

 

“Pero no es todo hija mía, nuestro amor ardía, y queríamos hacer conocer cuánto los amábamos y darles a ellos la más sublime de las lecciones, y he aquí como: En lo mejor del banquete faltó el vino, y mi corazón de madre se sintió consumir de amor porque quiso prestar ayuda, y sabiendo que mi Hijo todo podía, con acento suplicante, pero segura de que me habría escuchado le digo: “Hijo mío, los esposos no tienen más vino” Y Él me responde: “No ha llegado mi hora de hacer milagros.” Y Yo, sabiendo que de seguro no me habría negado lo que le pedía, digo a los que servían la mesa: “Hagan lo que les dice mi Hijo, y tendréis lo que queréis, más bien tendréis de más y sobreabundante.”

Hija mía, en estas pocas palabras Yo daba una lección, la más útil, necesaria y sublime a las criaturas, Yo hablaba con el corazón de Madre y decía: 

¿Hijos míos, queréis ser santos? Hagan la Voluntad de mi Hijo, no se aparten de lo que Él les dice y tendréis su semejanza, su santidad en vuestro poder; 

¿queréis que todos los males cesen? Hagan lo que les dice mi Hijo, 

¿queréis alguna gracia, incluso difícil? Hagan lo que les dice y quiere; 

¿queréis también las cosas necesarias para la vida natural? Hagan lo que dice mi Hijo, porque en sus palabras, en lo que os dice y quiere, tiene encerrada tal potencia, que en cuanto habla, su palabra encierra lo que pedís y hace surgir en vuestras almas las gracias que queréis.” 

Cuántos se ven llenos de pasiones, débiles, afligidos, desventurados, miserables, no obstante que ruegan y ruegan, pero como no hacen lo que dice mi Hijo nada obtienen, el Cielo parece cerrado para ellos. Esto es un dolor para tu Mamá, porque veo que mientras ruegan se alejan de la fuente donde residen todos los bienes, como es la Voluntad de mi Hijo.

Entonces, los sirvientes hicieron exactamente lo que les dijo mi Hijo, es decir: “Llenen las vasijas de agua, y llévenlas a la mesa.” Mi querido Jesús bendijo aquella agua, y se convirtió en vino exquisito. ¡Oh, mil veces bienaventurado quien hace lo que Él dice y quiere! Con esto mi Hijo me daba el honor más grande, me constituía Reina de los milagros, por eso quiso mi unión y plegaria al hacer el primer milagro. Él me amaba demasiado, tanto, que quiso darme el primer puesto de Reina también en los milagros, y con los hechos lo decía, no con las palabras: “Si quieren gracias, milagros, vengan a mi Madre, Yo no le negaré jamás nada de lo que Ella quiere.”

Fiat Divina Voluntad

Mc 1, 22

“Y estaban asombrados de su enseñanza, de hecho, les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas”

 

AUDIO


"Mi Voluntad, doctrina toda de Cielo" Vol. 1-1 (150-160)

⚜️  "Diferentes modos de hablar de Jesús"


"este modo en que Jesús se hace entender es rapidísimo, en un simple instante se aprenden muchas más cosas sublimes que leyendo libros enteros"


(150) ...Por orden del confesor actual debo manifestar los varios modos con los cuales el Señor me ha hablado: A mí me parece que los modos con los que Dios me habla sean cuatro, pero estos cuatro modos de hablar de Jesús son muy diferentes de las inspiraciones. 

(151) 1.- El primer modo es cuando el alma sale fuera de sí. Pero antes quiero explicar lo mejor que pueda este salir fuera de mí misma. Esto sucede de dos modos: El primero es instantáneo, casi como relámpago, y es tan repentino que me parece que el cuerpo se eleva un poco de la cama, para seguir al alma, pero después queda en la cama y a mí me parece que el cuerpo queda muerto, y el alma en cambio sigue a Jesús caminando por todo el universo, la tierra, el aire, los mares, los montes, el purgatorio y el Cielo, donde muchas veces me ha hecho ver el lugar donde yo estaré después de muerta. 

(152) El otro modo de salir el alma es más tranquilo, parece que el cuerpo se adormece insensiblemente y queda como petrificado ante la presencia de Jesucristo, pero el alma permanece con el cuerpo, y éste no siente nada de las cosas externas, aunque se trastornara todo el universo, aunque me quemaran y me redujeran en pedazos. 

(153) Estos dos modos tan diferentes de salir fuera de mí misma, yo los he notado sensiblemente, porque en el primer modo, debiendo yo obedecer al confesor que venía a despertarme, lo he visto desde el lugar a donde me conducía Jesús; es decir, desde los confines de la tierra, o del aire, o de los montes, o del mar, o del purgatorio, o aun desde el mismo Paraíso, más bien me parecía que no tenía tiempo de poder volver para que el confesor encontrara mi alma en el cuerpo, y poder obedecer, y como me encontraba con el alma tan lejos, me ajetreaba toda, me angustiaba y me afligía pensando que no tendría tiempo de volver al cuerpo para que el confesor me encontrara, y por tanto no tener tiempo de obedecer, sin embargo debo confesar que siempre me he encontrado a tiempo, y me parecía que el alma entrase al cuerpo antes de que el confesor comenzase a darme la obediencia de despertar. 

(154) Es más, digo la verdad, muchas veces yo veía de lejos al confesor que venía, pero para no dejar a Jesús, parecía que no pensara en confesor que venía y entonces Jesús mismo me apresura a volver con el alma al cuerpo para poder obedecer al confesor, y entonces yo sentía una gran repugnancia, por dejar a Jesús, pero la obediencia vencía, y dejando a Jesús, Él mismo, o me besaba o me abrazaba o hacía otra cosa para despedirse de mí. Y yo dejando a mi amado Jesús le decía: “Voy con el confesor, pero Tú mi buen Jesús, vuelve pronto en cuanto el confesor se vaya”. 

(155) Estos son los dos modos con los cuales el alma parecía que saliese del cuerpo, y en estos dos modos de salir el alma, Dios me habla. Este modo de hablar, Él mismo lo llama hablar intelectual. 

Trataré de explicarlo: El alma salida del cuerpo y encontrándose delante a Jesús, no tiene necesidad de palabras para entender lo que el Señor le quiere decir, ni el alma tiene necesidad de hablar para hacerse entender, sino que todo es por medio del intelecto, ¡oh, qué bien nos entendemos cuando nos encontramos juntos! 


De una luz que de Jesús me viene a la inteligencia, siento imprimir en mí todo lo que mi Jesús quiere hacerme entender. 


Este modo es muy alto y sublime, tanto que la naturaleza difícilmente sabe explicarlo con palabras, apenas puede decir alguna idea, este modo en que Jesús se hace entender es rapidísimo, en un simple instante se aprenden muchas más cosas sublimes que leyendo libros enteros. 

¡Oh, qué maestro ingeniosísimo es Jesús, que en un simple instante enseña muchas cosas, mientras que cualquier otro necesitaría años enteros, si es que lo logra, porque el maestro terreno no tiene potencia para poder atraer la voluntad del discípulo, ni de poderle infundir en la mente sin esfuerzos ni fatigas lo que le quiere enseñar, pero con Jesús no es así, tanta es su dulzura, la amabilidad de su trato, la suavidad de su hablar, y además es tan bello, que el alma apenas lo ve se siente tan atraída, que a veces es tanta la velocidad con la que corre al lado de Jesús, que casi sin advertirlo se encuentra transformada en el objeto amado, de modo que el alma no sabe discernir más su ser terreno, tanto queda identificada con el Ser Divino. ¿Quién puede decir lo que el alma experimenta en este estado? Se necesitaría a Jesús mismo, o bien a un alma separada perfectamente del cuerpo, porque el alma encontrándose otra vez circundada por los muros de este cuerpo, y perdiendo esa luz que antes la tenía abismada, mucho pierde y queda oscurecida, de tal modo que si quisiera decir algo, lo diría burdamente... 

(156) Ahora trataré de explicar el segundo modo que tiene Jesús para hablar, y es que el alma encontrándose fuera de sí misma ve la persona de Jesucristo, como por ejemplo de niño, o crucificado, o en cualquier otro aspecto, y el alma ve que el Señor con su boca pronuncia las palabras y el alma con su boca responde, a veces sucede que el alma se pone a conversar con Jesús como harían dos íntimos esposos. Si bien el hablar de Jesús es poquísimo, apenas cuatro o cinco palabras y a veces aun una sola, rarísimas veces se extiende más, pero en ese poquísimo hablar, ¡ah, cuánta luz pone en el alma! 

Me parece ver a primera vista un pequeño arroyo, pero viendo bien, en vez de un arroyo se ve un vastísimo mar, así es una sola palabra dicha por Jesús, es tanta la inmensidad de la luz que queda en el alma, que rumiándola muy bien descubre tantas cosas sublimes y provechosas a su alma, que queda asombrada. 

(157) Yo creo que si se juntaran todos los sabios, quedarían todos confundidos y mudos ante una sola palabra de Jesús. Ahora, este modo es más accesible a la naturaleza humana, y fácilmente se sabe manifestar, porque el alma entrando en sí misma se lleva consigo lo que ha oído decir de la boca de Nuestro Señor y lo comunica al cuerpo; no resulta tan fácil cuando es por medio del intelecto. Yo considero que Jesús tiene este modo de hablar para adaptarse a la naturaleza humana, no que tenga necesidad de la palabra para hacerse entender, sino porque de este modo el alma más fácilmente comprende y puede manifestarlo al confesor. 

En suma, Jesús hace como un maestro doctísimo, sabio, inteligente, que posee en grado eminentísimo todas las ciencias y que nadie puede igualarlo, pero como se encuentra entre discípulos que no han aprendido aún las primeras letras del alfabeto, reteniendo todos los otros conocimientos en sí, enseña a los discípulos sólo el a, b, c, etc. 

¡Oh, cómo es bueno Jesús!, se adapta a los doctos y les habla de modo altísimo, de modo que para entenderlo deben estudiar muy bien lo que les dice, se adapta a los ignorantes y se finge también Él ignorante, y habla en modo bajo, de manera que nadie puede quedar en ayunas de las lecciones de este Divino Maestro. 

(158) El tercer modo con el que Jesús me habla es cuando hablando participa al alma su misma sustancia. A mí me parece como cuando el Señor creó el mundo, con una sola palabra fueron creadas las cosas, así, siendo su palabra creadora, en el acto mismo en que dice la palabra, crea en el alma aquella misma cosa que dice, como por ejemplo, Jesús dice al alma: “Mira como son bellas las cosas, por cuanto tus ojos puedan recorrer la tierra o el cielo, jamás encontrarán belleza similar a Mí”. En este hablar de Jesús, el alma siente entrar en ella un algo divino y queda muy atraída hacia esta belleza, y al mismo tiempo pierde el atractivo de todas las otras cosas, por cuán bellas y preciosas fueran no le causan ninguna impresión, lo que le queda fijo y casi transmutado en sí es la belleza de Jesús, en eso piensa, de esa belleza se siente investida, y queda tan enamorada, que si el Señor no obrara otro milagro se le rompería el corazón, y de puro amor por esta belleza de Jesús expiraría el alma para volar al Cielo a gozar de esta belleza de Jesús. Yo misma no sé si digo desatinos. 

(159) Para explicar mejor este hablar sustancial de Jesús digo otra cosa, Jesús dice: “Mira cuán puro soy, también en ti quiero pureza en todo”. En estas palabras el alma siente entrar en sí una pureza divina, esta pureza se trasmuta en ella misma y llega a vivir como si no tuviera más cuerpo, y así de las otras virtudes. ¡Oh, cómo es deseable este hablar de Jesús! Yo daría todo lo que está sobre la tierra, si fuera la dueña de todo, con tal de tener una sola de estas palabras de Jesús. 

(160) El cuarto modo en que Jesús me habla es cuando me encuentro en mí misma, esto es en el estado natural, y este hablar es también de dos modos: El primero es cuando encontrándome en mí misma, recogida, en el interior del corazón, sin articulación de voz o sonidos al oído del cuerpo, Jesús internamente habla. El segundo es como hacemos nosotros, y esto sucede a veces estando aun distraída o bien hablando con otras personas. Pero una sola de estas palabras basta para recogerme si estoy distraída, o para darme la paz si estoy turbada, para consolarme si estoy afligida. 

Fiat Divina Voluntad

Mc 1, 22

... les enseñaba como quien tiene autoridad


AUDIO

Vol. 27-24 (5) Diciembre 25, 1929

“¿no fue acaso nuestra palabra Fiat la que pronunciándose creó el cielo, el sol y todo lo que se ve en el universo entero, y también la misma vida del hombre?”

(5) “...Ahora hija mía, después que puse al seguro el reino de mi Divina Voluntad en mi Humanidad, debía manifestarlo para hacerlo conocer, por eso vine a ti y comencé a narrarte la larga historia de mi Fiat Divino. Ahora tú debes saber que tantas manifestaciones he hecho y haré, tantas verdades, tantas palabras he dicho, por cuantos renacimientos Ella hizo en mi Humanidad; estarán en perfecto equilibrio sus renacimientos en Mí y sus conocimientos que te manifiesto; cada renacimiento de mi Querer Divino hecho en Mí y en cada hostia consagrada, encontrará una manifestación y una verdad suya que la confirma, y le dará el renacimiento en la criatura, porque en Dios la palabra forma la vida del bien que quiere formar en la criatura, nuestra palabra es portadora de vida, ¿no fue acaso nuestra palabra Fiat la que pronunciándose creó el cielo, el sol y todo lo que se ve en el universo entero, y también la misma vida del hombre? Mientras no pronunciamos Fiat todo estaba en Nosotros; en cuanto se pronunció pobló cielos y tierra de tantas obras bellas y dignas de Nosotros, y daba principio a la larga generación de vidas humanas. Mira entonces que todo lo que te digo acerca de mi Divina Voluntad llevará con la potencia de mi palabra creadora sus tantos renacimientos hechos en Mí en medio a la familia humana. Esta es la gran razón de una historia tan larga y de mi hablar tan continuado, Ella estará equilibrada con todo lo que fue hecho por Nosotros en la Creación y con todo lo que hice en la Redención; y si parece que alguna vez hago silencio, no es porque haya cesado mi decir, sino porque hago reposo, pues es mi costumbre reposarme en mi misma palabra y obras que salen de Mí, como hice en la Creación, no siempre se pronunció, decía Fiat y hacía un alto y después lo pronunciaba de nuevo; así hago en ti, hablo, te doy mi lección y tomo reposo, primero para gozarme en ti los efectos de mi palabra y para disponerte a recibir la nueva vida de mi lección. Por eso sé atenta y tu vuelo en mi Divina Voluntad sea continuo”

Mc 1, 22

“Y estaban asombrados de su enseñanza, de hecho, les enseñaba como quien tiene autoridad...

 

AUDIO


Vol. 29-14 (2); mayo 4, 1931

“Cuando hago un trabajo en el alma, cuando hablo y enseño, tu Jesús tiene tal potencia, de convertir en naturaleza el bien enseñado y obrado en la criatura, y el bien en naturaleza no se puede destruir”


“Hija mía, porque todos los actos que haces en tu interior son actos enseñados y formados por Mí, así que son actos míos, y Yo no quiero que tú te quedes atrás, sin unirte conmigo para seguirlos. Porque tú debes saber que cuando hago un trabajo en el alma, cuando hablo y enseño, tu Jesús tiene tal potencia, de convertir en naturaleza el bien enseñado y obrado en la criatura, y el bien en naturaleza no se puede destruir, sería como si tú tuvieras el ojo dado a ti por Dios como propiedad de tu naturaleza y no te sirviera para ver; la voz, las manos, los pies, y no te sirvieran para hablar, para obrar y caminar, ¿no serías digna de condena? Ahora, así como doy los dones en naturaleza al cuerpo, así cuando hablo, mi palabra creadora tiene la potencia de dar al alma, como en naturaleza, el don que intento dar con mi palabra, porque un Fiat mío puede encerrar un cielo, un sol, una plegaria incesante por don, con la cual mi Fiat tiene la potencia de convertir como en naturaleza del alma estos dones. Por eso lo que tú haces en tu interior son dones en naturaleza que mi palabra ha formado en ti, por eso estarás atenta para no tener inútiles mis dones, Yo los he puesto en ti para hacer que con estos actos repetidos en mi Querer podamos juntos impetrar el gran don de que mi Divina Voluntad venga a reinar sobre la tierra.

Mucho más hija buena que los actos repetidos son como la sabia a la planta, si la planta no tiene sabia está seca y no puede producir ni flores ni fruta…”.

Fiat Divina Voluntad

Mc: 1, 27 

“¿Qué es esto? ¡Enseña de una manera nueva, llena de autoridad!”


AUDIO


"Mi Voluntad, doctrina toda de Cielo" Vol. 23-32 (2-3); enero 29, 1928

"Mi Voluntad, doctrina toda de Cielo y que tiene virtud de comunicar la Vida palpitante y toda celestial de Ella a quien leerá estos escritos"


“Hija mía, tú agradéceme que te he hecho escribir lo que respecta a mi Voluntad, doctrina toda de Cielo y que tiene virtud de comunicar la Vida palpitante y toda celestial de Ella a quien leerá estos escritos. Mi Voluntad está palpitante en medio a las criaturas, pero vive sofocada por el querer humano, estos escritos harán sentir tan fuerte su latido, que sofocarán el querer humano y tomará su primer puesto de vida que le toca, porque mi Voluntad es el latido y la vida de toda la Creación, por eso el valor de estos escritos es inmenso, contienen el valor de una Voluntad Divina; si fueran escritos de oro no superarían el gran valor que en sí mismos contienen, 

estos escritos son soles impresos con caracteres de luz brillantísima en las paredes de la patria celestial, y forman el más bello adorno de aquellos muros de la ciudad eterna, en los cuales los bienaventurados, todos quedan raptados y sorprendidos al leer los caracteres de la Suprema Voluntad, por eso, gracia más grande no podía hacer en estos tiempos que transmitir los caracteres de la patria celestial por tu medio a las criaturas, los cuales llevarán la vida del Cielo en medio de ellas.

Ahora, así como tú me agradeces a Mí, así Yo te agradezco a ti que te has prestado a recibir mis lecciones y a hacer el sacrificio de escribir bajo mi dictado. Era mi Voluntad Divina que hacía correr mientras tú escribías, la viva virtud de su latido ardiente, eterno y vivificante, y que imprimía en tus caracteres, por eso tú releyéndolos sientes la renovación toda celestial impresa en ellos. ¡Oh, cómo resultará difícil a quien lea estos escritos el no sentir la Vida palpitante de mi Querer y el no sacudirse, por la virtud de su latido vivificante, del letargo en el cual se encuentran. Estos escritos sobre mi Supremo Fiat, con la fuerza de su luz eclipsarán la voluntad humana, serán bálsamo a las heridas humanas, serán opio a todo lo que es tierra, las pasiones se sentirán morir, y de la muerte de ellas resurgirá la vida del Cielo en medio a las criaturas, serán el verdadero ejército celestial, que mientras pondrán en estado de asedio a la voluntad humana y a todos los males producidos por ella, harán resurgir la paz, la felicidad perdida, la Vida de mi Voluntad en medio a las criaturas, el asedio que pondrán no hará daño a ninguno, porque mi Voluntad es de poner en estado de asedio al querer humano, a fin de que no tiranice más a las pobres criaturas, sino que las deje libres en el reino de mi Voluntad. Por eso he insistido tanto e insisto en hacerte escribir, te he tenido en la cruz, te he sacrificado, era necesario, se trataba de la cosa más importante, era el eco del Cielo, la vida de allá arriba que quiero formar sobre la tierra. He aquí la causa de mi continuo estribillo: Sé atenta, no omitas nada y tu vuelo en mi Voluntad sea continuo”.

Fiat Divina Voluntad

Mc 1, 22

... les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas”


AUDIO


"Mi Voluntad, doctrina toda de Cielo"Vol. 24-39 (4-5) Agosto 30, 1928

El lenguaje que Jesús tuvo en la Redención y el que tiene para el reino de la Divina Voluntad son diferentes uno del otro.


(4) “Hija mía, mi lenguaje fue muy diferente en la Redención de aquél que he tenido para el reino de mi Divina Voluntad, porque en la Redención mi lenguaje debía adaptarse a personas incapaces, débiles, enfermas, sordas, mudas y ciegas, y muchas sobre el borde de la tumba, por eso para hablar me serví de parábolas, semejanzas del bajo mundo, que ellos mismos podían tocar con la mano, por eso ahora les hablaba como médico y les llevaba las medicinas para curarlos; ahora como padre, que esperaba su retorno aunque fuesen hijos licenciosos; ahora como pastor que iba en busca de la oveja perdida; ahora como juez que no pudiendo atraerlas por vía de amor, buscaba atraerlas al menos con las amenazas y con el temor; y tantas otras semejanzas. Este mi lenguaje dice que a aquellos a los cuales Yo hablaba no me conocían, no me amaban, mucho menos hacían mi Voluntad, más bien estaban lejanos de Mí, y que Yo con mis parábolas hacía las búsquedas y extendía la red para pescarlos y dar a cada uno el remedio para curarlos, pero cuantos me huían, y Yo aumentaba las búsquedas y las enseñanzas para dar luz a tantos ciegos, a fin de que salieran de su obstinada ceguera. 

(5) Ahora ve cómo es diferente mi lenguaje que he tenido al manifestar las verdades sobre mi Divina Voluntad, que deben servir para los hijos del reino de Ella, mi lenguaje sobre el Fiat ha sido como el de un padre en medio a sus queridos y amantes hijos, todos sanos, y que poseyendo cada uno mi misma Vida en ellos, en virtud de mi Querer serán capaces de entender mis lecciones más altas, y por eso he pasado más adelante poniéndoles enfrente las bellas semejanzas del sol, de los cuerpos celestes, del cielo, del mismo modo de obrar divino que se extiende hasta el infinito, porque teniendo en ellos a mi Fiat Divino, tendrán en ellos a Aquél que ha creado el cielo, las astros, el sol y les dará virtud de hacer copiar en ellos todo lo que ha creado y sus mismos modos que tiene en su obrar divino; estos serán los copiadores de su Creador, y por eso Yo he sido tan magnánimo al manifestar las verdades acerca de mi Fiat, lo que no hice en la Redención, porque eran parábolas que contenían modos humanos y finitos, por lo tanto no tenían tanta materia para poderme extender tanto, en cambio las semejanzas que respectan a mi Voluntad son de modos divinos y por lo tanto hay tanta materia para decir que se vuelven inagotables, ¿quién puede medir la vastedad de la luz del sol y la intensidad de su calor? Nadie. ¿Quién puede dar un termino al cielo y a las múltiples obras mías divinas? ¡Oh! si tú supieras cuánta sabiduría, amor, gracia, luz, he puesto al manifestar mis verdades sobre mi Fiat Divino, tú quedarías ahogada de alegría, tanto, que no podrías seguir viviendo, y amarías que el trabajo de tu Jesús fuese conocido, para hacer que un trabajo tan exuberante, que cuesta un precio incalculable, tenga su gloria y comunique sus benéficos efectos a las demás criaturas”.

Mc 1, 23 

"...un espíritu inmundo, que se puso a gritar"


AUDIO



Vol.17-15 (1-3) 22 de septiembre 1924

"¿quienes son los que hacen tanto escándalo? Me parecen demonios enfurecidos, ¿qué cosa quieren que se pelean tanto?"


He aquí por qué se pelean con tanto furor, sienten la potencia de mi Voluntad en estos escritos, y ante la sola duda de que pueden salir fuera, montan en furia y buscan con todo su poder el impedir un bien tan grande.

Continúo: Mientras escribía lo que está dicho arriba, veía a mi dulce Jesús que apoyaba su boca en la parte de mi corazón y con su aliento me infundía las palabras que estaba escribiendo, y al mismo tiempo oía un horrible escándalo a lo lejos, como de personas que se peleaban y golpeaban con tanto estrépito que infundía espanto. Y yo, dirigiéndome a mi Jesús le he dicho:

“Jesús mío, amor mío, ¿quienes son los que hacen tanto escándalo? Me parecen demonios enfurecidos, ¿qué cosa quieren que se pelean tanto?

Y Jesús: “Hija mía, son precisamente ellos, quisieran que tú no escribieras sobre mi Voluntad, y cuando te ven escribir verdades más importantes sobre el vivir en mi Querer sufren un doble infierno, y atormentan de más a todos los condenados; temen tanto que puedan publicarse estos escritos sobre mi Voluntad, porque ven perdido su reino sobre la tierra, adquirido por ellos cuando el hombre, sustrayéndose de la Voluntad Divina, dio libre paso a su voluntad humana. ¡Ah! sí, fue precisamente entonces cuando el enemigo adquirió su reino sobre la tierra; y si mi Querer pudiese reinar sobre la tierra, el enemigo, él mismo se escondería en los más oscuros abismos. He aquí por qué se pelean con tanto furor, sienten la potencia de mi Voluntad en estos escritos, y ante la sola duda de que pueden salir fuera, montan en furia y buscan con todo su poder el impedir un bien tan grande. Tú no les hagas caso, y de esto aprende a apreciar mis enseñanzas”

Fiat Divina Voluntad

Marcos 1, 21-28
Les enseñaba con autoridad

AUDIO


Reparemos en María a Jesús,

por todo lo que sufriste en tus sacratísimos oídos, para darte toda la gloria que las criaturas te hubieran dado, si hubieran hecho buen uso del oído al escucharte.


Las Horas de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo

Una parte de la Hora 20

La Primera Hora de Agonía sobre la Cruz


"...Adoro tus santísimos oídos y te doy gracias por todo lo que sufriste mientras aquellos malvados te ensordecían con sus gritos e injurias estando sobre el Calvario. Te pido perdón a nombre de todos por cuantas malas conversaciones se escuchan; y te ruego que todos los oídos de todos los hombres se abran a la verdad eterna, a la voz de la gracia y que nadie más te ofenda con el sentido del oído. También quiero ofrecerte todo lo que sufriste en tus sacratísimos oídos, para darte toda la gloria que las criaturas te hubieran dado si de este órgano hubieran hecho buen uso"...