Teoría Literaria

Género Dramático

El género dramático también se llama drama o teatro . La obra dramática puede definirse desde el punto de vista clásico como la composición dialogada, escrita en prosa o en verso, que tiene como finalidad el ser representada en un teatro. Drama viene de la palabra griega “drao” que significa “ejecuto”.

El origen conceptual del drama es el instinto de imitación

que tiene el hombre. El ser humano ha encontrado, a través de los tiempos, un placer en imitar las acciones de sus semejantes y representar sucesos ficticios, basados en acontecimientos reales o

deseados. Esta tendencia instintiva, perfeccionada por el arte, ha dado lugar al género dramático.

Normas y aspectos del género Dramático

Todos los géneros literarios responden a una serie de normas a partir de las cuales el escritor desarrolla, según su capacidad creativa y talento estético, su propio lenguaje, su estructura poética o narrativa personal. Así mismo, este género obedece a ciertas

mínimas reglas que lo caracterizan:

VEROSIMILITUD

Es la correspondencia que la obra dramática debe guardar entre la acción que desarrolla y la vida, hecho real o imaginario que trata de representar.

UNIDAD DE LA ACCIÓN

La unidad de acción. De la misma manera que en el cuento, la obra dramática no permite la dispersión de la trama. Cada obra es una acción, un argumento.

INTEGRIDAD

Es la convergencia de los tres elementos de la estructura dramática: la exposición, que generalmente se presenta por medio de un prólogo, un monólogo

o un narrador confidente. El nudo o momento en que la acción teje el conflicto, y el desenlace o suceso que da fin al conflicto.

INTERES

Las características de la obra dramática o, mejor, de su representación no admiten, como en los otros géneros, la posibilidad de parar la lectura, de meditarla, de consultar su contenido, de volver las veces que se quiera sobre el texto. Por ello, esta debe mantener el interés del auditorio todo el tiempo de duración de la trama.