La Pre-escritura

TEORÍA

En el proceso de escritura no hay nada más difícil que sentarse frente a una hoja en blanco. Es como comenzar a correr sin haber hecho un calentamiento previo. Hay algunas pasos esenciales para abrir la llave de la escritura y dejar que las ideas fluyan libremente.


LA PRE-ESCRITURA COMO PROCESO:

Todo proceso requiere un primer momento para accionar la maquinaria y poder iniciar la producción. Para activar presaberes y perder el miedo a la hoja en blanco, es necesario seguir algunos pasos. Este proceso inicial se denomina

pre-escritura. Observa con atención cuáles son esos primeros pasos.

ABRIR LA LLAVE DE LAS IDEAS

Cuando se abre un grifo, la presión hace que el agua se

precipite, sin orden aparente; simplemente sale, fluye y se deja correr. Dejar correr las ideas es fundamental en el momento de escribir. En esta parte del proceso, se debe tomar nota de todas las ideas que van saliendo; es el momento en que se activan los conocimientos previos y las experiencias.

TENER UN MOTIVO

Para iniciar el proceso de escritura es fundamental tener un motivo, un tema o una idea para desarrollar. Conocer el tema y delimitarlo permite canalizar mejor la creatividad; tener claro sobre qué se escribirá ayuda a conectar apropiadamente las ideas: los conocimientos previos funcionan a la perfección si se activan en forma adecuada.

CAPTURAR IDEAS

El segundo paso es tomar nota de todas las asociaciones que los conocimientos previos generan. Sin importar el orden ni la aparente coherencia, es necesario aprovechar el caudal de ideas que buscará salida en la escritura.

PONER ORDEN

Después de capturar ideas, el siguiente paso es elaborar el escrito, pero ya no frente a una página en blanco. Ahora, las ideas deben ampliarse.

IMPORTANCIA DE LA PRE-ESCRITURA

La pre-escritura: es una etapa clave en el proceso de producción textual. La generación de ideas antes de la escritura propiamente dicha, garantiza el éxito y la satisfacción del escritor.

Cada paso del proceso de pre-escritura implica una serie de estrategias y condiciones para que puedan llevarse a cabo.

Para abrir la llave de las ideas, puedes hacerte estas preguntas.

¿Cuál es mi razón para escribir?

• ¿Para cumplir con una tarea o trabajo?

• ¿Para convencer a alguien de determinadas ideas?

• ¿Para divertir?

• ¿Para responder a algo que se ha leído?

• ¿Para dar una opinión?

• ¿Para explicar un concepto?