Emily Dickinson
Poema 165
Un Ciervo Herido–salta más alto–
Oí al Cazador decir–
Pero es sólo el Éxtasis de la muerte–
¡Luego los Helechos enmudecen!
¡El agua brota de la Grieta!
¡Surge del Acero hendido!
¡Una mejilla siempre está más roja
Allí donde la Fiebre sube!
La Alegría es Portadora de la Angustia––
y en ella Cauta se Escuda,
No sea que alguien advierta la sangre
¡Y exclame “te han herido”!