Grace Murray Hopper nació el 9 de diciembre de 1906 en Estados Unidos, concretamente en el estado de Nueva York.
Grace se crió en Nueva York. Sus padres eran Walter Fletcher Murray y Mary Campbell Van Horne. Grace fue la mayor de sus hermanos, teniendo un hermano llamado Roger y una hermana llamada Mary.
Desde pequeña mostró gran interés por las matemáticas. Su abuelo John Van Horne, ingeniero civil, la animó a adentrarse en el mundo de la ciencia tras observar sus grandes capacidades. Fue así como a los 7 años de edad la pequeña Grace desarmó todos los relojes que encontró en casa para entender de alguna manera su funcionamiento, un claro indicio de su pasión por comprender y mejorar la tecnología. Además su padre luchó para que tanto ella como su hermana pudieran contar con la misma educación que se le impartía a su hermano.
Gracias a todo lo anteriormente citado y a sus posteriores estudios y hallazgos Grace se convirtió años más tarde en una demandada oradora en el ámbito informático y recibió innumerables reconocimientos por todos sus descubrimientos e innovaciones entre los que destacan las bases del lenguaje informático.
Lamentablemente Hopper falleció el 1 de enero de 1992 en el condado de Arlington. Fue enterrada con todos los honores de la marina por su gran labor.
TRAYECTORIA CIENTÍFICA
En sus primeros años, Grace estudió en numerosas escuelas privadas exclusivas para mujeres donde comenzó a interesarse por las matemáticas y la composición de los objetos que la rodeaban. En 1924 fue aceptada en el Vassar College (Nueva York) donde cursó la carrera de matemáticas y física. Finalmente se graduó en 1928 y dos años más tarde se le presentó la oportunidad de realizar una maestría en matemáticas en la prestigiosa universidad de Yale obteniendo así un doctorado en 1934. De estos últimos años debemos resaltar su papel como docente de matemáticas en el Vassar College.
Nueve años más tarde y con su bisabuelo como fuente de inspiración, Hopper ingresó en las fuerzas armadas a mediados de la Segunda Guerra Mundial tras recibir un permiso especial.
Una vez graduada de la escuela de cadetes navales para mujeres, fue enviada a Harvard para colaborar en la construcción de la Mark I desarrollando así junto a Howard Aiken varias aplicaciones utilizadas en primera instancia por las compañías de seguros.
En 1952 desarrolló el primer compilador de la historia, el A-0, y en 1957 inauguró el primer compilador para procesamiento de datos cuyas órdenes eran en inglés (B-0). Todo esto fue el resultado de la creación de un lenguaje de programación que tenía como principal objetivo una mejor comprensión por parte de los usuarios ya que el lenguaje matemático que se empleaba podía ser sencillo para expertos en la materia como la propia Grace pero resultaba imposible de comprender para el resto de personas. Esto es lo que expresaba la propia Grace:
“Ellos me dijeron que los ordenadores sólo podían hacer cálculos aritméticos, y mi compilador traduce notación matemática en lenguaje máquina. Para los matemáticos, usar símbolos es fácil, pero no era buena idea para los procesadores de datos ya que no entienden esos símbolos, además de que pocas personas entienden los símbolos y es mucho más sencillo que escriban en inglés. Así que decidí que estos procesadores de datos debían ser capaces de escribir los programas en inglés y los ordenadores tendrían que traducirlo al lenguaje máquina".
Una vez establecidas estas ideas, aparece la base de COBOL. Dos años después observaremos la creación de un comité que se encargaría de la creación de este lenguaje usando como base las ideas propuestas por Hopper.
Grace Hopper Murray permaneció en la Armada de forma intermitente durante los años siguientes y se retiró definitivamente en 1986 convirtiéndose en la oficial con más edad en Estados Unidos.
Esto no supuso el fin de su carrera ya que se unió a la Digital Equipment Corporation y comenzó a participar en incontables proyectos como charlas y programas educativos hasta que finalmente murió en 1992.
A lo largo de su distinguida carrera, fue honrada con innumerables premios, entre ellos más de 40 títulos de doctor honoris causa, la Medalla Wilbur Lucius Cross de la Universidad de Yale, y ascensos militares que culminaron con el rango de contraalmirante en 1985. Se destacó por ser la única mujer en alcanzar el rango de almirante en su nación.
Aunque no escribió libros, sus manuales y conferencias fueron fundamentales para educar a las generaciones futuras de programadores y científicos de la computación.
El cable submarino de fibra óptica "Grace Hopper" es un proyecto fascinante que refleja la importancia de la conectividad global. Su diseño avanzado promete mejorar la infraestructura de internet, ofreciendo mayor capacidad y seguridad en la transmisión de datos a través del Atlántico.
Por último cabe resaltar que aunque ella no fue la que instauró el término “bug”, referido a un fallo informático, si fue la que encontró este pequeño animal dentro de la estructura de un ordenador y pudo así explicar los errores de funcionamiento.