Tarta de queso quark con cobertura de crema de cacao y avellanas

Ingredientes:

* 1,5 kilos de queso quark 0% (tres tarrinas del que venden en LIDL)

* 4 huevos

* 200 gramos de azúcar.

* 2 sobres de azúcar vainillada

* 200 gramos de maizena (si no tenéis la podéis sustituir por harina de trigo)

* 1 cucharadita de bicarbonato sódico

* 125 gramos de yogur griego (el que yo usé era light) También os vale cualquier yogur natural (desnatado o no) que tengáis en la nevera.

* Crema de cacao y avellanas para cubrir la superficie (la cantidad a vuestro gusto)

* Bolitas de cereales bañadas en chocolate

* Escamas de chocolate blanco.

Elaboración:

1. En un bol muy amplio ponemos el queso y batimos hasta obtener una crema homogénea.

2. Añadimos los huevos de uno en uno y no añadimos el siguiente hasta que el anterior no está perfectamente integrado.

3. Incorporamos el yogur e integramos.

4. Por último ponemos los dos tipos de azúcar, el bicarbonato y la harina y mezclamos hasta que la masa sea homogénea. Intentaremos hacerlo con el menor número de movimientos para no incorporar demasiado aire y así evitamos que después la superficie se cuartee.

5. Vertemos la masa en nuestro molde. Si tenéis uno de silicona mejor. Si es desmoldable os aconsejo poner un papel de hornear sobre la base y fijarlo con el aro porque ya sabéis que el queso quark tiene mucho componente líquido y aunque la masa no es muy líquida más vale prevenir que tener un escape en el molde.

6. Metemos en el horno precalentado a 180º C y horneamos durante unos 25-30 minutos. Pasado ese tiempo bajamos la temperatura a 160º C y continuamos horneando durante otros 60 minutos aproximadamente. El tiempo depende de lo grande que sea nuestro molde porque cuanto más pequeño sea más tardará en estar cuajada nuestra tarta.

Ya sabéis que las tartas de queso no admiten muy bien que se abra la puerta del horno pero si sois rápidas hay dos trucos para comprobar si ya están. Uno es pinchando en el centro con un palillo de madera y comprobando si sale limpio. El otro que es el que yo suelo usar es agitando el molde (la mano enfundada en un buen guante de cocina, obvia decirlo supongo) para comprobar si la tarta sólo "tiembla" ligeramente por el centro.

7. Cuando esté horneada dejamos la puerta del horno entreabierta para que se vaya templando sin que se raje la superficie y además bajará de volumen porque durante el horneado sube.

Si podéis dejadla dentro del horno hasta que se enfríe completamente y después la pasáis al frigorífico.

8. Cuando esté fría desmoldamos y cubrimos la superficie con nuestra crema de cacao favorita y decoramos como más nos guste. Yo esta vez he usado bolitas de cereales y escamas de chocolate blanco.

Me gustaría hacer dos aclaraciones:

- Kilo y medio de queso quark puede parecer una cantidad excesiva pero hay que tener en cuenta que este queso tiene una gran cantidad de suero y que gran parte se pierde durante el horneado ya sea porque la tarta lo supura mientras se hornea o porque se evapora.

- Con la cantidad de azúcar que le puse queda muy justa de dulzor. Incluso escasa aunque para mí es suficiente con el toque que le da la crema de cacao. Mi marido no obstante no paraba de repetir que estaría mejor con más dulce y quizá tenga razón porque el queso quark no es precisamente "sabroso" y necesita su cantidad de azúcar. Os lo advierto por si sois más golosos para que aumentéis la cantidad de azúcar que no quiero que os desilusionéis porque la receta está bien buena.