Roscón de Reyes Corona de bolitas

Ingredientes:

Para la masa madre:

* 70 gramos de leche semidesnatada (o la que uséis en casa)

* 130 gramos de harina de fuerza

* 5 gramos de azúcar blanca (una cucharadita más o menos)

* 1 sobre de levadura seca de panadería (7 gramos)

Para la masa:

* 60 gramos de leche semidesnatada

* 30 gramos de agua de azahar

* 70 gramos de mantequilla

* 2 huevos

* 450 gramos de harina de fuerza

* 1 pellizco de sal

* 1 sobre de levadura seca de panadería (7 gramos)

Para decorar:

* 1 cucharada de leche para pintar la superficie

* 100 gramos de chocolate negro de cobertura

* Azúcar perlado

Elaboración:

1. Para preparar la masa madre ponemos en un bol los ingredientes, mezclamos y hacemos una bola. Es una textura similar a la de la plastilina así que es la mar de sencilla hacerlo a mano. Podemos ayudarnos de un tenedor para no mancharnos al principio, pero se maneja muy bien con las manos después.

2. Llenamos un bol con agua templada y ponemos la bola en el fondo. Toca esperar hasta que la bola flote. También se hinchará ligeramente. Ya tendremos lista nuestra masa madre para ser usada. En cuanto a qué entendemos por agua templada es agua que al meter la mano no sentimos ni frío ni calor. Yo puse agua del grifo y dejé que se pusiera a temperatura ambiente.

En cuanto al tiempo que tarda la bola en flotar depende de la temperatura que tenemos en casa. La mía tardó entre 40 minutos y una hora, es cuestión de ir echándole el ojo de vez en cuando.

3. Una vez ha flotado la bola de masa madre pasamos a preparar la masa del roscón. Yo lo hago con ayuda de mi panificadora. Para ello ponemos en la cubeta los ingredientes de la masa en el orden en el que aparecen escritos. La mantequilla la pongo derretida y los huevos batidos como para hacer tortilla.

También añado la bola de masa madre hecha trocitos.

Pongo dos veces el programa de amasado de quince minutos que tiene mi panificadora.

También se puede amasar a mano o en otro robot de cocina que tengáis

4. Pintamos un bol amplio con un poquito de aceite de oliva y ponemos la masa hecha una bola. La giramos para que quede bien impregnada de aceite. Tapamos con film transparente y dejamos reposar en un lugar calentito para que leve y duplique su volumen.

5. Una vez levada la masa espolvoreamos con un poquito de harina la superficie de trabajo y amasamos ligeramente.

6. Dividimos la masa en porciones de igual tamaño. Yo la he dividido en 8 bolas de 115-120 gramos cada una.

7. Para que quedara una corona perfecta y por miedo a que se movieran las bolitas al levar y/o al hornearse me he ayudado de un molde con chimenea que he untado bien de mantequilla y además he puesto papel de hornear en la base y los laterales para facilitar el desmoldado. Mi consejo es que también pongáis papel en la chimenea, especialmente en la base para evitar malos tragos al desmoldar.

También se puede hacer en un molde redondo normal poniendo en el centro un aro de emplatar, una lata forrada con papel de aluminio o de hornear o cualquier otra cosa apta para llevar al horno y que tengáis en casa.

8. Colocamos las bolitas en nuestro molde, con un poquito de separación y dejamos levar.

9. Cuando hayan doblado su tamaño pintamos con leche y llevamos al horno precalentado a 180º C

Si queréis adornar el roscón antes de hornearlo es ahora el momento. Yo le puse azúcar perlado a cuatro bolas alternas y el resto las dejé sin nada porque las iba a bañar en chocolate.

Podéis poner azúcar perlado, crocanti de almendra, fruta escarchada, almendra en láminas ¡lo que os guste!

10. Horneamos durante unos 20 minutos.

11. Dejamos templar unos minutos y desmoldamos.

12. Ponemos sobre una rejilla y dejamos enfriar. Mientras podemos decorar el resto de las bolas con chocolate derretido y espolvoreamos con perlas de azúcar.

Anotaciones:

1. Por lo general preparo las masas para dejarlas levar toda la noche, especialmente en invierno, porque así no tengo que estar pendiente. Esta masa levó muy rápido así que la metí en el frigorífico por la noche y la saqué y dejé templar una hora antes de desgasificar y hacer las bolitas. Creo que no le gustó demasiado pernoctar en el frigorífico porque después le costó mucho levar.

2. Sacar el roscón del molde (si lo usáis) y dejar enfriar sobre una rejilla. La masa os lo agradecerá bastante en cuanto a esponjosidad. Yo le puse el chocolate antes de desmoldar y tuve que dejarlo enfriar en el molde y creo que contribuyó bastante a que aguantase poco tiempo blandita la masa.

3. Sobre todo dejar levar la masa. Cuanto más leve más esponjoso será el roscón.