Antiguos toques de las campanas de la torre de la Iglesia parroquial de Sta. Mª de la Estrella de Coria del Río

TIPOS DE TOQUES DE LAS CAMPANAS DE LA IGLESIA

F.J. Barragán con la colaboración de Fernado Saborido Pizarro y Rafael Cardenas LLano

A continuación vamos a enunciar y describir los toques tal como se daban en Coria basándonos en el testimonio de D. Fernando Saborido Pizarro antiguo sacristán de la parroquia. Nos vamos a referir a una época anterior al concilio Vaticano II ( los cambios ya empezaron sobre 1950), por tanto sin grandes cambios desde los usos marcados por el concilio de Trento (con posterioridad a1565).Los Toques lo podemos dividir en ordinarios (Avemaría o de Alba, del Ángelus del mediodía, del Ángelus de la tarde y de Animas Benditas), especiales (Toques de Misa, de viático, Señal de Difunto, Dobles de Entierro) y extraordinarios (Repiques de Fiestas, toques de la Fiesta de los Difuntos, de Matraca, de Fuego o Rebato)

Toques ordinarios o de oración

Los Toques ordinarios serían los tres toques cotidianos de llamada a la oración privada del feligrés, que corresponden al amanecer a rememorar la Resurrección de Cristo; al mediodía, en memoria de la Pasión, el vespertino del Ángelus en recuerdo del supremo momento de la Encarnación. El Ángelus sufrió un lento proceso evolutivo hasta alcanzar su forma definitiva tal como lo rezamos hoy. En el s. XIII comienza el Ángelus vespertino, en el s. XVI, en el que comienza el Francia el Ángelus del mediodía, y al final del s. XVI con su rezo también al amanecer en el que la fórmula de los tres Ángelus reunidos llega a ser universal y estable. Desde 1724 por orden de Benito XIII se fijan las palabras bíblicas del encuentro de María con el Arcángel y el rezo de tres avemarías. Especialmente el toque para la oración de mediodía y ocaso se recordaba a la Virgen en los momentos de la Anunciación y Encarnación del Verbo. El toque de ánimas era el último toque que se daba en el día, la Iglesia aconsejaba, al oír ese toque, hacer un rezo en recuerdo de las ánimas de los difuntos.

Estos toques de oración orientaban a todos los que se encontraban trabajando en el campo, marcando cuatro momentos fundamentales del día: el amanecer, el mediodía o la hora de comer, la hora de regresar a casa tras el trabajo y el último la hora en que la “gente de orden” ya no podía andar por las calles.

TOQUE DE ALBA, AVE MARÍA O ÁNGELUS DE LA AURORA. Se hacía al amanecer (si bien en Sevilla en cualquier estación era dos horas antes de aclarar el día), todos los días y se compone de 7 golpes a la campana mediana (TEN), seguido de 5 golpes continuos a la gorda (TAN), más 2 separados a la misma campana gorda.

TOQUE DE ÁNGELUS DEL MEDIODIA. A las 12 del día, y se tocaba directamente con tres campanadas separadas de la campana gorda (TAN) aludiendo a las tres Avemarías que se rezan, seguidas finalmente por un golpe ligero a la mediana (TEN).

TOQUE DE ORACIÓN A O ÁNGELUS DE LA TARDE. Todos los días al oscurecer. 7 golpes seguidos a la TEN, pausa más 1 TEN; otra serie de 7 golpes seguidos a la TEN, pausa más 2 TEN; 7 golpes seguidos a la TAN, pausa más 3 TAN; finalmente 8 golpes seguidos a la TAN sin pausa otros 8 seguidos de TAN.

TOQUE DE ÁNIMAS. Se hacía a las nueve de la noche en invierno y una hora después en verano. Era un toque que invitaba a rezar por las ánimas del Purgatorio, y consistía en de 3 golpes pausados pero simultáneos a la gorda y a la mediana (conocidos como BLAN o clamor, el tocar las dos campanas a la vez), seguido un TAN-TEN.

Toques especiales

Señalan y dan aviso de un acto religioso público ordinario que tiene lugar en cualquier momento del año.

TOQUES DE MISA. Las misas que se decían siempre por las mañanas (nunca en las tardes) en latín conforme a las normas del concilio de Trento, misas tridentinas que se celebraban principalmente al alba todos los días y se llamaba también misa de (hora) Prima o de Alba que empezaba una hora antes del amanecer, era una Misa Rezada (Misa sin cantar en la que oficia solo el sacerdote y responde sólo el monaguillo). El motivo de esa hora era el hecho de que la Resurrección de Jesucristo había ocurrido en la mañana antes del alba, como decía San Cipriano de Cartago escribe sobre la celebración dominical: “celebramos la Resurrección del Señor en la mañana.” Con el tiempo la misa de Alba quedó reducida sólo a la que se hacía el domingo para que la gente se pudiese acercar al campo o algunas mujeres disponer mejor de su tiempo para sus obligaciones. Por otra parte la “hora tercia” (es decir, 9:00 a.m.) se consideró como “canónica” para la Misa Solemne de domingos y días de fiesta (misa cantada en que acompañan al sacerdote celebrante, el diácono y subdiácono) (aunque tambien se hacía esta misa rezada de tercia como misa de diario cuando se dejo de hacer la de alba, salvo en el domingo que se hacían las dos). Por eso los domingos además de la Misa de Alba se celebraba una Misa Cantada (semisolemne, cantada pero dicha por un sólo sacerdote sin los otros dos ministros o solemne con un sacerdote acompañado por otros dos generalmente diácono y subdiácono) a la que lógicamente en tal día festivo solía acudir más fieles, por lo que a veces se llamaba Misa Mayor.

La campana grande o gorda (Tan) denominada Santa María de la Estrella de 1759 (aunque no consta inscripción de esa fecha actualmente) orientada hacia el oeste (frente a la C/ Pinta) ha sido siempre la campana protagonista de la torre de la Iglersia parroquial de del mismo nombre en Coria del rio. Se recuerda que su sonido llegaba oirse practicamente en los pueblos de medio Aljarafe. Su inscripción superior reza: “Santa María de la Estrella ORA PRO NOBIS”.En la actualidad y como se aprecia en la foto se ha cambiado su colocación orientandose ahora hacia la Puebla del Río. Al fondo se aprecia la tercera, conocida como Esquila o Tin, llamada campana de de Nra. Sra. del Rosario pues fue costeada por la Hermandad de igual nombre.

El toque de Misa anunciaba a los feligreses, la celebración de la Santa Misa en cualquier Iglesia o Capilla. Se dan tres toques continuos de unos treinta golpes de TAN, con intervalo de ¼ de hora. El primero, media hora antes del comienzo de la misa y termina este toque, con pausa y un solo golpes a la misma campana (El primer aviso). Al ¼ de hora, el mismo toque, solo al final, tras pausa, se dan 2 golpes (Segundo aviso) y momentos antes del comienzo de la misa, el mismo toque a la misma campana, sólo que, tras la pausa, se dan tres toques o golpes.

Existía también la costumbre de dar tres golpes con la campana mayor, AL ALZAR , en el momento de la consagración en la Misa Mayor (cantada y celebrada a una hora del día para que concurra todo el pueblo). Avisaban a las gentes que no habían podido acudir a la celebración, para que hicieran la señal de la cruz. No obstante Fernando Saborido no recuerda desde su llegada a principio de los años 1950 que todavía se hicese así en Coria.

TOQUE DE VIATICO O DE ENFERMOS E IMPEDIDOS. Anunciaba la salida del Santísimo Sacramento a visitar los enfermos e impedidos, en muchos casos cuando estaban moribundos. Cuando iba por la calle el cura era acompañado por dos monaguillos uno de los cuales tocaba una campanilla de mano ininterrumpidamente. A veces algunos hombres devotos se unían ala comitiva del Santo Viático.

Por otra parte mientras el Santísimo estaba en la calle desde el campanario, se avisaba con 7 golpes con pausa a la TEN, golpes ininterrumpidos a la campana de Su Majestad (que era la esquilita o cuarta), terminando con 2 golpes a la TEN que daban por finalizada la salida. Este toque se pudo simplificar según nos indica Fernando Saborido ininterrumpidos de la tercera campana TIN durante todo el tiempo, por la incomodidad de tener que subir al campanario, ya que esta era la única campana que no se podía tocar desde la sacristía.

TOQUE DE SEÑAL DE DIFUNTO O A MUERTO. Anunciaba la muerte de un feligrés. Con la campana gorda, se daban 9 toques lentos pero seguidos. Pausa pequeña y sigue con los dobles durante unos diez minutos ininterrumpidamente: 3BLAN- TAN-TEN-TAN-3BLAN si el difunto era un hombre, mientras si el fallecido era una mujer la secuencia es 3BLAN- TEN-TAN-TEN-3BLAN.

TOQUE DE GLORIA O DE PARVULO. Así se llamaba cuando fallecía algún niño menor de siete años. Se tocaba mediante repique ordinario de la TAN y de la TEN, con uso del volteo de la esquila que al final se quedaba un tiempo sola tocando.

TOQUE DE ENTIERRO O DE DOBLES, O FUNERAL. Se empezaba percutiendo lentamente 3 veces la campana bis de TIN para seguir con los dobles (BLAN-TEN-BLAN), a continuación un número indefinidos y pausados de bises de TIN más los dobles, y así repitiendo esa secuencia ininterrumpidamente mientras duraba el entierro. Se hacía el día del entierro, y según la categoría de fallecido a la hora de pagar sus familiares los estipendios a la Iglesia, se dividían en entierros de: 1ª Clase, 2ª Clase, 3ª Clase y 4ª Clase. En los entierros de 3ª y 4ª se suprimía el señalado toque de la esquila (TIN) por lo que se reducía a ocasionales dobles (BLAN-TEN-BLAN). Es posible que anteriormente al testimonio que nos aporta Fernando Saborido, el tiempo total en que se ejecutaban los dobles antes del entierro estuviese en relación con su categoría, siendo el máximo de tres horas.

Los dobles se iniciaban antes del sepelio, significando que la comitiva religiosa compuesta, al menos por un Sacerdote, el Sacristán y tres Monaguillos con la Cruz Parroquial (manguilla) y ciriales se había puesto en camino, hacia la casa mortuoria, para desde allí, acompañar al féretro en el cortejo fúnebre hasta la Iglesia. Mientras el féretro estaba en la Iglesia, finalizaba la Señal, para reanudarse cuando el cadáver era conducido al cementerio durante todo el recorrido.

A la semana del entierro se solía celebrar la “misa de funeral” (ya que antes era muy rara la misa de “corpore insepulto” y las misas se decían todas por la mañana), un buen rato antes de la misma se tocaba del mismo modo que se ha indicado a funeral. Este toque a funeral se repetía también antes de la misa del primer aniversario del fallecimiento, llamado “Cabo de Año”. Para diferenciarlo el toque a misa funeral o a misa de “cabo de año” estos eran de menor duración que el de entierro.

Toques extraordinarios

Señalan un momento o fiesta especial de la Iglesia, o un acontecimiento especial en la vida del pueblo.

TOQUE DE REPIQUE DE CAMPANAS .Las grandes fiestas, el Domingo de Ramos, el de Resurrección, en el Corpus o el día de la Patrona, son anunciadas en la víspera con repique general de todas las campanas que están fijas, volteándose también la esquila. El repique se hace siempre subiéndose al campanario, pues es desde allí como se puede percutir las campanas con fuerza y viveza suficiente y no desde abajo. El repique son golpes muy rápidos y cada vez más acelerados de la secuencia tris TAN-tris TEN-TAN-TEN-TAN-TEN etc ejecutado con la mayor fuerza y ligereza posible con brevísimas pausas para retomar fuerzas. En el caso de Coria este repique se acompaña del volteo alegre de la esquilita.

En la víspera de la Fiesta los TOQUES DE VISPERAS señalaban la celebración del día siguiente con un repique al mediodía y otro a la dos de la tarde (también es posible que anteriormente este se hiciese por la noche después del toque de ánimas). El Repique se efectúa también durante las procesiones de la Virgen o del Santísimo. También había repique de campanas los Domingos en las misas parroquiales, a las 9 de la mañana, y cuando había misa mayor los días festivos. En general, repicaban las campanas anunciando algún motivo de regocijo para el pueblo.

Campana Gorda o Tan

TOQUE AL ROSARIO o a MANIFIESTO DEL SANTISIMO. Se hacía por la tarde durante todo el mes de mayo, la cuaresma y en la novena de octubre para el Rosario y en otras ocasiones para los cultos de hermandad (triduo, quinario o novena) que consistían en Rosario, ejercicio piadoso del culto, sermón del Sacerdote y exposición de Santísimo (esto no todos los días del culto) , eso sí siempre sin misa ya que como hemos indicado estas eran siempre sólo por las mañanas en que se celebraba la función principal de isntituto del culto. Solían ser de una veinte campanadas seguidas con la campana mayor (TAN) o del Rosario (TIN). Este toque no fue conocido por Fernando Saborido ya que en su tiempo se anunciaban estos cultos de igual manera que las misas.

TOQUE DE MATRACA. Igual que el toque de misa para los Oficios Divinos y las oraciones cotidianas pero los días Jueves, Viernes y Sábado Santo se usaba la matraca. Fernando Saborido recuerda que en sus tiempos no existía matraca en la torre y que se tocaba una matraca pequeña consistente en un cajoncito con unos hierros dentro tañiendo esta en la calle alrededor de la Parroquia.

TOQUE DEL DIA DE DIFUNTOS. Sólo la víspera del Día de los Difuntos, es decir el día festivo de “Tosantos”, y el día de los Difuntos hasta que terminaban las tres o más misas que se decían desde el amanecer hasta las doce de la mañana.

El toque se empezaba a las 2 de la tarde de los Santos, siguiendo hasta interrumpirse sólo por el toque de Oración o Ángelus de la Tarde. Son los “dobles del día de Difuntos”, que se componen de la secuencia pausada de BLAN-bis BLAN- bis TIN- bis TIN y así un número grande e indefinido de lentos bis TIN. Durante toda la noche se solía seguir tocando esos dobles de “los Difuntos” por los monaguillos desde la torre. Se interrumpían para dar el toque del alba, y proseguían hasta la hora del funeral solemne de los Difuntos, que se celebraba sobre las 12 de la mañana.

TOQUE A FUEGO O REBATO. En caso de incendio, bien en el pueblo, caserío o sembrado cercano. Se hacía con la campana gorda un toque muy acelerado y prolongado, que comenzaba con tres toques separados.