Francisco Morales Calahorro

En 1873 Francisco Morales Calahorro, pasó a ser el dueño del manantial e inició los trámites para la puesta en marcha del Balneario de Morgovejo.

A través de una espectacular memoria histórica y científica, además de los pertinentes análisis, se solicitó la declaración de utilidad pública para su aprovechamiento natural y económico, que fue rechazado por el entonces alcalde de Valderrueda por las dudas sobre el caudal y la construcción entonces inapropiada para realizar tales labores.

Pero siguiendo con la búsqueda de la aceptación de la utilidad publica, la situación se regularizo con la posesión de las aguas y el establecimiento por parte de los Marqueses de la Valdavia los cuales vendieron la propiedad a principios del siglo XX a una familia de Madrid que aprovecharía el balneario en una nueva etapa historica con una fuerte difusión en toda la provincia de León.