Jamal Khashoggi

Khashoggi murió descuartizado en presencia del cónsul saudí

El periodista no paró de gritar en los 7 minutos que tardó en perder la vida, mientras le mutilaban

Pompeo viaja a Turquía para reunirse con Erdogan y reclama más tiempo para la investigación

Forenses turcos, a su llegada al Consulado de Arabia Saudí en Estambul

El secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, ha llegado este miércoles a Turquía para reunirse con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, mientras la prensa turca, a cada minuto que pasa, aporta nuevos detalles cada vez más escabrosos de lo ocurrido dentro del consulado saudí de Estambul hace dos semanas, cuando desapareció el periodista y crítico con el régimen de Riad Jamal Khashoggi.

El 2 de octubre, Khashoggi entró en el recinto consular de su país para recibir unos documentos para poder casarse. Pero una vez allí, según fuentes anónimas turcas, le esperaba un grupo de 15 saudís, enviados expresamente a Estambul para matar al periodista.

Este miércoles, estas fuentes han dado más detalles: al entrar, Khashoggi fue trasladado a un pequeño estudio al lado de la oficina del cónsul. Allí, uno de los enviados —un médico forense llamado Salah Muhammad al Tubaigy, que es, además, alto cargo dentro del Ministerio del Interior saudí— empezó a cortar partes del cuerpo del periodista, que permanecía vivo y gritaba por el dolor que sufría con las mutilaciones. Según fuentes oficiales turcas, dejó de gritar a los siete minutos: ese fue el tiempo que tardó en morir.

Hermetismo

Durante esta semana, Pompeo ha estado en Riad hablando con los líderes de la monarquía del Golfo. A la conclusión de la visita, el secretario de Estado de Donald Trump ha catalogado su estancia en Arabia Saudí de "muy existosa". En una rueda de prensa de Pompeo con el príncipe heredero saudí, a ambos se les veía muy sonrientes: "Nos han asegurado que llevarán a cabo una investigación completa y transparente y nos han dicho que cualquiera que esté relacionado con alguna actividad ilegal, sea quién sea, será castigado", ha dicho Pompeo.

El dirigente no ha querido hablar sobre si los saudís han aceptado haber asesinado a Khashoggi. "No quiero hablar de los hechos. Ellos, [las autoridades saudís], tampoco han querido. Quieren tener la oportunidad de completar la investigación y creo que eso es razonable", ha aseverado.

Pompeo se ha reunido con Erdogan y el ministro de Asuntos Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu. No han hablado a la prensa, aunque Çavusoglu ha dicho que las conversaciones han sido "beneficiosas y fructíferas".

Negación

Cada día que pasa, crecen las informaciones que apuntan que la orden de hacer desaparecer o asesinar a Khashoggi llegaron desde lo más alto de Riad. Este miércoles, según informa el diario The New York Times, uno de los 15 saudís que viajó a Estambul para interceptar al periodista formó parte del séquito de Bin Salmán en el viaje que el príncipe heredero hizo a España y Francia hace tan solo unos meses.

De los 14 restantes, además, 9 de ellos, ha confirmado el periódico estadounidense, trabajaban para los servicios de seguridad saudís, el Ejército u otros departamentos ministeriales.

Por el momento, Riad lo niega todo: su posición oficial es que todas las informaciones publicadas son falsas y que Khashoggi salió por su propio pie del consulado minutos después de entrar. Sin embargo, según la televisión CNN, los saudís estarían preparando un comunicado en el que afirman que su muerte fue un accidente; un interrogatorio que acabó mal. Una excusa que no concuerda con la versión de la policía turca.

Días antes:

Turquía investiga tóxicos y paredes recién pintadas en el consulado saudí de Estambul

El cónsul saudí se escapa a Riad horas antes del registro

Jamal Jashoggi, periodista saudí desaparecido desde el 2 de octubre del 2018

La policía turca ha registrado durante nueve horas el consulado saudí en Estambul de esta pasada madrugada —ha durado unas nueve horas—, ha estado buscando restos de material tóxico y superficies que han sido recientemente pintadas. Así lo ha explicado este martes el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que ha hablado pocas horas después de que el interior del recinto consular fuese investigado. Antes del registro de su residencia, el cónsul de Arabia Saudí en Estambul ha regresado su país en avión, según la cadena de televisión CNNTürk.

«Se está haciendo una investigación de qué son y qué no son unas cuantas cosas que se eliminaron pintando encima, tóxicos, etcétera. Mi esperanza es que podamos llegar a unas conclusiones de lo que ocurrió lo antes posible», ha dicho Erdogan. Lo que sea que pasó, ocurrió justo hace dos semanas, el día 2 de octubre: el periodista saudí y colaborador del ‘The Washington Post’, Jamal Khashoggi, entró en el consulado de su país en Estambul cerca de la una del mediodía para recibir unos papeles para casarse con su novia turca. Su mujer se quedó fuera esperándole; el trámite requeriría sólo unos minutos.

Pero Khashoggi nunca más salió y, desde hace dos semanas, nadie sabe nada de él. Hay algunas hipótesis: las autoridades turcas aseguran tener pruebas audiovisuales de que el periodista, dentro del consulado, fue torturado, descuartizado y después troceado por un grupo de 15 saudís que llegaron a Estambul unas horas antes con el único objetivo de interceptar a Jashoggi. En la misma tarde del martes 2 de octubre cogieron dos vuelos de vuelta a Arabia.

Estas supuestas pruebas —las del asesinato del periodista— no han sido hecho públicas. «[Durante la inspección en el consulado] hemos encontrado más pruebas que dan peso a la teoría de que Jashoggi fue asesinado», ha dicho este martes una fuente del fiscal General turco.

Posible cambio de versión

Hasta este martes, el Gobierno saudí lo ha negado todo: Riad ha estado asegurando durante dos semanas enteras que Jashoggi salió poco después de entrar; que si está desaparecido es porque quería escapar de su mujer. Pero las investigaciones turcas han avanzado y la presión internacional sobre esta monarquía del Golfo se ha intensificado: nadie se cree su versión.

Por ello, podría cambiar en las próximas horas. Según la televisión estadounidense CNN, Riad está estudiando aceptar que Khashoggi murió en el consulado: dirían, dice la cadena, que los 15 saudís que fueron a Estambul actuaron por su cuenta y sin autorización alguna. Que solo querían interrogarlo y que, al cabo de unos minutos de conversación, murió durante las preguntas.

Pero la prensa turca, que durante toda la semana pasada ha estado publicando filtraciones policiales, asegura lo contrario: que en el grupo que vino a Estambul había un médico forense y agentes de las fuerzas especiales saudís y que, además, iban cargados con una motosierra. El presidente estadounidense, Donald Trump, este martes, ha enviado a Riad a su secretario de Estado, Mike Pompeo, para que se esclarezca lo ocurrido lo antes posible.

El G7 y la UE piden una investigación rigurosa y creíble del caso Khashoggi

Exigen que sean encontrados los culpables del secuestro o presunto asesinato del comunicador en el consulado árabe de Estambul

Un manifestante muestra la foto de Jamal Khashoggi en una protesta frente al consulado de Arabia Saudí en Estambul

Los ministros de Asuntos Exteriores del G7, junto con el alto representante de la Unión Europea (UE), afirmaron que los responsables de la desaparición del periodista saudí, Jamal Khashoggi, "deben rendir cuentas".

Los ministros de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, el Reino Unido, Estados Unidos y la UE declararon en un comunicado que esperan que "el reino de Arabia Saudí realice una investigación rigurosa, creíble, transparente y sin demora, como ha sido anunciado".

Preocupación generalizada

"Seguimos muy preocupados por la desaparición del prominente periodista saudí Jamal Khashoggi", añadieron los ministros que también expresaron su apoyo a la colaboración entre las autoridades turcas y saudíes. El G7 y la UE también declararon su compromiso "en la defensa de la libertad de expresión y la protección de la prensa libre".

La declaración de los ministros del G7 y la UE se produce pocas horas después de que el rey de Arabia Saudí, Salman bin Abdelaziz, se comprometiese ante el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, a llevar a cabo una investigación "completa, transparente y oportuna" de la desaparición del periodista saudí.

Khashoggi, ex gerente general del grupo de comunicación Al Arab Media Group y columnista del diario estadounidense The Washington Post, desapareció hace dos semanas tras entrar en el consulado saudí en Estambul. Las investigaciones en Turquía apuntan a que Khashoggi, exiliado desde 2017, pudo ser asesinado en el consulado.

El posible asesinato del periodista Khashoggi erosiona la imagen de Arabia Saudí

La bolsa saudí se desploma hasta el 7% por los temores a un boicot económico internacional liderado por Trump

Mohamed Bin Salman.

El mercado de valores saudí se desplomó este domingo hasta el 7% ante los temores a sanciones de EEUU por la desaparición y posible asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi en el consulado del país árabe en Estambul.

La caída de la bolsa se produce después de que el presidente de EEUU, Donald Trump, advirtiese de un "severo castigo" en caso de que se confirme que el periodista saudí, desaparecido desde el pasado día 2 en Estambul, fue asesinado en el consulado saudí en esa ciudad turca.

Arabia Saudí ha contestado hoy que habrá represalias si resulta sancionada. "El reino asegura que en caso de ser objeto de alguna medida, responderá con mayores acciones", ha dicho una fuente del reino saudí, bajo el anonimato, a la agencia SPA.

El Gobierno saudí está seriamente salpicado y la comunidad internacional parece dispuesta a ajustar cuentas con un Estado desbocado y que no aplica las cartas internacionales de derechos humanos.

La desaparición del periodista ha conmocionado a gran parte de la comunidad internacional en un momento en el que Arabia Saudí se prepara también para albergar un foro económico, que se desarrollará en el reino entre el 23 y 25 de octubre y es considerado como el 'Davos del desierto'.

Desde hace dos días, varios patrocinadores e invitados han cancelado sus asistencia a la conferencia Future Investment Initiative (Iniciativa de Inversión Futura). Nadie quiere relacionarse con un Estado desacreditado y bajo la sospecha de crímenes institucionalizados.

Boicot internacional

Entre los ausentes el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, así como otros medios de comunicación que iban a participar, como la cadena estadounidense CNBC, CNN y la agencia de noticias Bloomberg. La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, aseveró que mantendrá su viaje al foro económico, aunque dejó claro que se encuentra "horrorizada" por las últimas informaciones de lo que podría haber sucedido.

Los hechos

Khashoggi, columnista del diario estadounidense 'The Washington Post', desapareció el pasado día 2 tras entrar en el consulado saudí en Estambul para recoger unos documentos oficiales necesarios para su boda con su novia turca. Las investigaciones apuntan a que fue asesinado y descuartizado en la propia embajada por agentes gubernamentales. Antiguamente cercano a la monarquía saudí, el periodista se distanció de ella el verano pasado, cuando el actual príncipe heredero, Mohamed bin Salman, ascendió a posiciones de poder.

Presión interna a Trump

Un grupo de senadores, liderado por el republicano Bob Corker y el demócrata Robert Menéndez, dio el miércoles a Trump un plazo de 120 días para decidir si EEUU debe imponer sanciones contra cualquier funcionario saudí que pueda estar implicado en la desaparición o muerte de Khashoggi.

Venta de armas

Hasta ahora, Trump ha manifestado reticencias a la imposición de sanciones y tampoco se ha mostrado dispuesto a suspender la venta de armas al reino, el mayor cliente de la industria armamentística estadounidense y que, solo en el 2017, acordó la compra de armamento por valor de 18.000 millones de dólares.

Preguntado al respecto, Trump explicó que otros países, como Rusia y China, han tratando de conseguir contratos armamentísticos con Arabia Saudí y argumentó que terminar con ese abundante flujo comercial podría perjudicar a la economía estadounidense. "Están ordenando equipos militares. Todo el mundo quería ese pedido (de Arabia Saudí). Rusia lo quería, China lo quería, nosotros lo queríamos. Y nosotros lo conseguimos, conseguimos todo. Y le diré lo que no queremos (...), no queremos perjudicar al empleo. No queremos perder un pedido como ese", dijo Trump a la periodista que le entrevistaba.

Mohamed bin Salman

El Gobierno saudí niega haber dado la orden de matar a Khashoggi. Pero las sospechas parecen cada vez más fundadas sobre un caso que apunta directamente al actual príncipe heredero, Mohamed bin Salman, en el epicentro de la polémica.

El Ejecutivo turco ha dicho a funcionarios estadounidenses que tiene vídeos y grabaciones de audio que demuestran que Khashoggi fue asesinado en el interior del consulado saudí en Estambul por un equipo de seguridad, que posteriormente desmembró su cuerpo.

El mismo Trump ha reconocido este domingo que las autoridades saudíes podrían estar detrás del crimen. "Se está investigando, se está analizando con mucha fuerza. Y si eso fuera así, estaríamos muy molestos y enojados. Por ahora, ellos lo niegan vehementemente. ¿Podrían ser ellos? Sí", concedió Trump, quien posteriormente aseguró: "En un futuro no muy lejano, creo que sabremos una repuesta".