Cambio político

¿Por qué cambian los gobiernos? No sólo las personas que gobiernan, sino también la forma misma del gobierno (por ejemplo, el cambio de un gobierno democrático a otro autocrático). Esta pregunta se la han hecho los filósofos desde la antigüedad; ya Platón elabora una de las primeras teorías sobre el cambio político.

Platón

De acuerdo con Platón, la mejor y más perfecta forma de gobierno es una forma de aristocracia. La aristocracia (literalmente, el gobierno de los mejores) en el caso de Platón se concreta en el gobierno de los más sabios. De entre los más sabios, habrá uno que lo sea más que el resto, y gobernará como un monarca o "rey sabio". Platón insiste en que esta no es una monarquía hereditaria, sino que el puesto de "rey" lo ocupará en cada momento la persona más sabia. En definitiva, propone una forma de monarquía, la monarquía del rey filósofo.

Evitar el nepotismo es una preocupación de Platón, pues cuando los más sabios tratan de favorecer a sus familiares o cuando ellos mismos se corrompen buscando riquezas personales, la aristocracia entra en crisis y se produce un cambio en la forma de gobierno: los ciudadanos ya no confían en los más sabios y ponen ahora su confianza en la que Platón considera segunda clase social en importancia: los defensores. Surge así la timocracia: el gobierno de los mejores defensores, de los mandos militares de la ciudad.

Sin embargo, los mandos militares sufren también del defecto de la corrupción: anteponen el bien personal al bien de la ciudad y así el gobierno de los mejores defensores se convierte poco a poco en el gobierno de los más ricos: la timocracia se ha convertido en la oligarquía. Como las dos formas de gobierno anteriores, la oligarquía es el gobierno de una minoría, sólo que ya no es la más sabia, ni la más valiente y hábil en la guerra, sino sólo la más hábil haciendo dinero.

Las desigualdades económicas y la percepción de que los más ricos no son los mejores gobernantes provoca la llegada de la democracia: no sólo los ricos pueden gobernar, todos pueden gobernar la ciudad. La democracia se rige por la regla de la mayoría, pero Platón no cree que la mayoría tenga el conocimiento necesario para gobernar la ciudad. Más bien al contrario, las decisiones mayoritarias no serán las mejores y con frecuencia provocarán desastres económicos o militares.

Como resultado del mal gobierno, el propio demos (el pueblo) aupará al poder a un hombre al que creerá capaz de sacarle de la crisis. Así surge la tiranía, la peor de las cinco formas de gobierno contempladas por Platón. El tirano no es el mejor en nada ni busca el bien de la ciudad; su llegada al poder es accidental y fruto de la elección basada en la opinión de la masa. El tirano busca el poder propio y el de sus afines.

Como vemos, la teoría platónica presenta el cambio político como una degeneración: con cada cambio de forma de gobierno, empeora la calidad del mismo. En cuanto a las causas de estos cambios, son debilidades humanas como el nepotismo, la corrupción, la envidia, la ignorancia o el miedo.

Marx

Un pensador que propone una explicación muy distinta a Platón del cambio político es Karl Marx. En lugar de poner el acento en las virtudes y defectos individuales a la hora de explicar los cambios políticos, Marx concentra su atención en las condiciones materiales de vida. Los seres humanos (como el resto de seres vivos) ocupan la mayor parte de su tiempo procurándose el sustento. A diferencia de otras especies animales, el ser humano no posee un conjunto de instintos que le guíen desde el nacimiento en esa búsqueda del sustento; los hombres deben emplear su inteligencia para inventar modos de producir alimentos, modos de defenderse y sobrevivir.

Al analizar las distintas maneras en que los seres humanos han organizado la sociedad con el primer y fundamental propósito de sobrevivir, Marx señala varios hechos fundamentales:

  • Un modo de producción incluye no sólo la manera de organizarse para trabajar y lograr el sustento. Incluye también un modo de organizar las relaciones sociales entre los hombres y en tercer lugar una forma de gobierno. Producción material, relación social y organización política están íntimamente relacionadas.

  • Los modos de producción son varios y han ido cambiando a lo largo de la Historia. Los hombres no se han organizado siempre del mismo modo, hay un cambio y una lógica subyacente a dicho cambio.

  • Los modos de producción que se han dado hasta el momento pueden clasificarse en dos grandes grupos:

    • Aquellos en los que las relaciones de producción, relaciones sociales y de poder son igualitarias. Todos los individuos aportan el mismo esfuerzo a la producción, reciben los mismos beneficios, mantienen relaciones igualitarias entre ellos y la autoridad política es compartida entre todos.

    • Aquellos en los que las relaciones no son igualitarias. Los miembros de estas sociedades se dividen en clases sociales diferenciadas por cuánto aportan al esfuerzo colectivo, cuánto reciben a cambio del mismo, quiénes mandan y quiénes obedecen.

Marx analiza la Historia de la Humanidad y encuentra los siguientes modos de producción:

Comunismo primitivo

  • Relaciones entre los individuos: Igualitarias: escasa división del trabajo (todos los individuos trabajan por igual y en lo mismo), distribución igualitaria de los productos del trabajo.

  • Forma de explotación entre los individuos: No existe explotación.

  • Clases sociales: No existe división de la sociedad en clases.

  • Forma de gobierno: Sin estado. Bandas organizadas en torno al parentesco.

Antigüedad

  • Relaciones entre los individuos: Desiguales: la mayoría de individuos cargan con todas las tareas de producción y a cambio apenas reciben ninguno de los beneficios y no poseen nada. Una minoría apenas aporta trabajo alguno pero es dueña de todo lo producido. Los primeros son esclavos de los segundos.

  • Forma de explotación entre los individuos: Los amos se apropian de lo producido por el trabajo de sus esclavos empleando la coacción.

  • Clases sociales: Amos / Esclavos

  • Forma de gobierno: Imperios antiguos. Poder absoluto de una cúpula dirigente.

Feudalismo

  • Relaciones entre los individuos: Desiguales: la mayoría de individuos realiza todas las tareas productivas y a cambio recibe una parte de lo producido. Una minoría se reserva otra parte de lo producido y retiene la propiedad de las tierras.

  • Forma de explotación entre los individuos: Los señores se apropian de parte de lo producido por los siervos (p.ej. diezmos) a cambio de protección y empleando coacción si es necesario.

  • Clases sociales: Señores / Siervos

  • Forma de gobierno: Relaciones de vasallaje y servidumbre: los siervos juran obediencia a sus señores.

Capitalismo

  • Relaciones entre los individuos: Desiguales: la mayoría de individuos trabaja a cambio de un salario, pero no posee ni los medios de producción ni los productos de su trabajo. Una minoría posee tanto los unos como los otros.

  • Forma de explotación entre los individuos: Los capitalistas se apropian de los beneficios que producen los trabajadores a cambio de un salario que no se corresponde con la riqueza producida.

  • Clases sociales: Burgueses / Proletarios

  • Forma de gobierno: Estado democrático burgués: se protegen los derechos de los propietarios y se impiden reformas igualitarias.

Socialismo

  • Relaciones entre los individuos: Igualitarias: todos los individuos aportan según sus capacidades (hay división del trabajo) y reciben el beneficio íntegro de su trabajo. Los medios de producción son de propiedad común (comunismo).

  • Forma de explotación entre los individuos: No existe explotación.

  • Clases sociales: No existe división de la sociedad en clases.

  • Forma de gobierno: Desaparición de la autoridad política del Estado, cuya función se reduce a tareas organizativas.

En la teoría de Marx, el cambio de forma de gobierno es parte de un cambio más amplio que abarca no sólo aspectos políticos sino también económicos. Y son fundamentalmente fuerzas económicas las que impulsan estos cambios: la mayor productividad (mayor rendimiento del trabajo) lleva al cambio del modo de producción feudal por el modo de producción capitalista.

Sin embargo, esa mayor productividad tiene un aspecto negativo: el incremento de la explotación de una clase social sobre otra. La apropiación por los señores feudales de una parte de la producción lograda por los siervos es mucho menor a la apropiación de los beneficios de las mercancías producidas por los trabajadores por parte de los capitalistas. El aumento de la explotación es, según Marx, una tendencia inexorable del modo de producción capitalista y lleva a su autodestrucción en una revolución del proletariado que llevará a la instauración del modo de producción socialista.

¿Armonía o conflicto?

Tanto los naturalistas, que ven la organización política como algo necesario y fruto de la propia naturaleza humana, como los contractualistas que ven al gobierno como el resultado del acuerdo, tienen una visión positiva y en lo fundamental armónica del poder político: el poder político sirve para resolver problemas y, correctamente usado, es positivo para los gobernados.

Sin embargo, existen otros puntos de vista que resaltan el conflicto que también esta presente en las sociedades humanas:

  • Maquiavelo: el poder político se consigue y se conserva con la fuerza, el coraje y la astucia. El gobernante debe estar siempre atento a los intentos de ser desalojado del poder, y para lograr la adhesión de los gobernados debe estar atento a las emociones que suscitan en el pueblo sus decisiones: miedo (al castigo del poder) amor (admiración por la acción de gobierno) y odio (potencial peligro de revueltas contra el poder). Aunque el buen gobernante puede lograr la estabilidad política (manteniéndose largo tiempo en el poder), Maquiavelo considera los asuntos políticos muy complejos y en última instancia impredecibles. Afirma que la suerte (la fortuna) también tiene un papel que jugar en los asuntos políticos. Los errores de los gobernantes, la ambición política de sus adversarios, unidos a factores imponderables (fortuna) hacen que el cambio político sea la norma y no la excepción.

  • Marx: el poder político es un mecanismo para mantener la desigualdad económica entre los hombres. La única forma de gobierno legítima es el comunismo, pues en él no existen diferencias de clase social, el gobierno no tiene entre sus objetivos reprimir a los trabajadores y su único objetivo es organizar de la forma más eficiente la actividad económica.

  • Bakunin: para el fundador del anarquismo , ninguna forma de poder político es legítima y la libertad individual de cada hombre debe prevalecer sobre cualquier forma de poder común. Cuando es necesaria la acción coordinada, la forma política a emplear es la asamblea: una reunión temporal en la que todos los afectados tienen voz y voto.