Los aspectos de scrum deben ser abordados y administrados a lo largo de un proyecto Scrum.
Roles y responsabilidades, se dividen en 2 categorías:
Son aquellos que se requieren obligadamente para crear el producto o servicio del proyecto.
Product Owner: Representante del cliente, articula los requerimientos, mantiene la justificación del negocio para el proyecto y es responsable de lograr el máximo valor de negocio.
Scrum Master: Guía, facilita y enseña las practicas de Scrum eliminando impedimentos asegurando que el equipo logre completar con éxito el proyecto.
Development Team: Crean los entregables del proyecto de acuerdo a los requerimientos especificados por el product owner.
No son necesariamente obligatorios para el proyecto Scrum.
Stakeholders: Incluye a clientes, usuarios y patrocinadores; interactúan frecuentemente con el equipo principal de Scrum.
Scrum Guidance Body: Grupo de expertos que normalmente están involucrados en la definición de los objetivos relacionados con la calidad, relaciones gubernamentales, seguridad y otros parametros clave.
Vendedores: Individuos u organizaciones externas.
Antes de iniciar un proyecto, es crucial evaluar adecuadamente el negocio para justificar el cambio, medir su viabilidad y entender su valor.
Aspectos clave en Scrum:
La justificación del negocio se basa en la entrega basada en valor (value-driven delivery).
Los proyectos implican incertidumbre, y no se puede garantizar el éxito.
Scrum busca entregar resultados y valor de forma temprana, permitiendo reinversión y demostrando valor a los stakeholders.
La calidad en Scrum se define como la capacidad del producto para cumplir con los criterios de aceptación y alcanzar el valor esperado por el cliente.
Aspectos clave:
Los criterios de aceptación establecen condiciones claras para evaluar las historias de usuario.
Scrum adopta un enfoque de mejora continua, actualizando el Product Backlog según los cambios en los requisitos y el entorno empresarial.
Los sprints incrementales facilitan la detección temprana de errores mediante pruebas repetitivas.
Las tareas de calidad (como testing y QA) se completan dentro del mismo sprint, garantizando calidad en cada entregable.
Las entregas frecuentes y la comunicación constante con los stakeholders reducen la brecha entre expectativas y resultados reales.
Los proyectos, independientemente del enfoque, están expuestos al cambio. Scrum está diseñado para aceptar y gestionar estos cambios, maximizando beneficios y minimizando impactos negativos.
Aspectos clave:
Reconoce que los stakeholders cambian de opinión y no pueden definir todos los requisitos al inicio del proyecto.
Utiliza sprints breves e iterativos para incorporar retroalimentación constante del cliente sobre los entregables.
Facilita la interacción regular entre el cliente y el equipo Scrum, permitiendo ajustes tempranos en los requisitos durante el desarrollo.
El riesgo en un proyecto es un evento incierto que puede impactar positiva o negativamente sus objetivos:
Impacto positivo: Oportunidades.
Impacto negativo: Amenazas.
Gestión de riesgos en Scrum:
Identificación: Usar técnicas para reconocer riesgos potenciales.
Evaluación: Analizar y estimar los riesgos detectados.
Priorización: Determinar cuáles riesgos incluir en el Backlog según su relevancia.
Mitigación: Desarrollar estrategias para enfrentarlos.
Comunicación: Informar a los stakeholders sobre los riesgos y su percepción de los mismos.
Los riesgos se priorizan según su probabilidad e impacto. Los riesgos con alta probabilidad y gran impacto deben abordarse primero. Es crucial comprender sus causas, áreas de incertidumbre y consecuencias potenciales.