La Mujer Y El Dragon

El capítulo 12 nos presenta una historia de la iglesia (la mujer) desde el año 31 hasta el fin, o sea, nuevamente se nos presentan dos mil años de historia eclesiástica, con otros detalles que nos aclaran este período histórico.

12:1,2. Esta mujer hermosa, ataviada con la justicia de Cristo, es la Hija de Sión, la iglesia del Dios Viviente (Jeremías 6:2). El Sol es Cristo, con cuya justicia se viste la mujer. La luna simboliza los sacrificios, sacerdocio y fiestas hebreas, que eran una "sombra de lo porvenir": El Nuevo Pacto en Cristo.

12:3,4. El dragon escarlata es Satanás, el diablo. La tercera parte de las estrellas son los ángeles que cayeron con él y son los demonios. El diablo no está en un lugar de llamas, llamado comunmente infierno, sino alrededor de la tierra (Efesios 6:12). (Vea el artículo "¿Existe el diablo?")

12:5. El "hijo varón" es Cristo.

12: 6. La mujer (iglesia) huye del dragón y es protegida por 1,260 años. (Vea el verso 14)

12:7-14. La visión se interrumpe de nuevo para continuar con la historia de Lucifer, el querubín rebelde. Muestra como fue echado del cielo (monte de Dios) y su obra en la tierra contra la iglesia. El diablo obra mediante la hechicería, la idolatría, el espiritismo y otra ciencas ocultas, incluyendo las manifestaciones mediante los llamados OVNI. (Vea el artículo: "Los OVNI y la vida extraterrestre.) Los 1,260 días o "tiempo, tiempos y el medio de un tiempo", es una misma cifra: los 1,260 años de supremacía papal, cuando la verdadera iglesia tuvo que obrar en la clandestinidad y fue perseguida y masacrada.

12:15,16. La "tierra" que ayuda a la mujer representa las tierras americanas, donde los Peregrinos se refugiaron para evitar la persecución y fundan la nación delos Estados Unidos de Norteamérica.

12:17. En esta gran nación surge un movimiento que llenaría toda la tierra. Esta última iglesia o Remanente, se caracteriza por observar los mandamientos de Dios y tener "el testimonio de Jesús". Esta es la Iglesia Adventista del Séptimo Día, llevando al mundo el mensaje del Evangelio completo, incluye la observancia de la ley de Dios como una norma de justicia. El "testimonio de Jesús" es el "espíritu de la profecía" (19:10), maravilloso don manifestado en esta iglesia. (Vea el artículo: Elena G. de White.)