En el caso de cronometraje manual se nombrará un número suficiente de Cronometradores, en función del número de atletas inscritos, uno de los cuales será designado Jefe de Cronometradores. Él asignará las funciones a los jueces. Estos actuarán como cronometradores de apoyo cuando un sistema de Foto-Finish automático o un sistema de Cronometraje por Transpondedores esté siendo usado.
Cómo se toman los tiempos con cronometraje manual:
En pista a la décima de segundo. Fuera de pista al segundo.
Tiempo tomado: 4' 12" 44
Tiempo dado, en pista: 4' 12" 5
Tiempo dado fuera de pista: 4' 13"
Cuando hay dos cronómetros para el mismo atleta se toma el peor de los dos.
Cuando hay tres cronómetros para el mismo atleta si hay dos tiempos iguales se toma ese; si los tres son distintos se toma el de en medio.
Tomamos: 4' 12" 44 - 4' 12" 54 - 4' 12" 62
Daremos: 4' 12" 6
Sólo se pueden usar cronómetros digitales, no de aguja.
SÍ NO
El crónómetro se acciona con el dedo índice, no con el pulgar, y se hace al ver la llama o humo de la pistola, no al oír el disparo.
Y se detiene cuando el tronco del atleta, no la cabeza o las extremidades, alcanzan la línea de meta.
Las diferencias de cronometraje se deben a los tiempos de reacción de cada uno de los cronometradores ya sea en las salidas como en las llegadas.Aceptar ser cronometrador condena a no poder disfrutar de las pruebas que se desarrollan ante sus ojos como simples espectadores; una lucha entre dos atletas que disputan un puesto en la llegada no debe apasionarlo al punto de olvidar registrar el tiempo de una llegada. Particularmente es necesario desinteresarse completamente de la prueba o de quienes son los atletas que se clasifican en los puestos que le han sido asignados para cronometrar; para esta tarea están los Jueces de Llegada.
El cronometrador debe permanecer tranquilo, aún si los tiempos anunciados no corresponden con la apreciación visual de los atletas, de los entrenadores, de otros oficiales o de los espectadores, y a pesar del ambiente bullicioso que rodea la línea de llegada.
Debe estar en buena forma, poseer buena vista, debe ser consciente y declarar claramente su tiempo registrado, sin preocuparse de los tiempos tomados por sus colegas y que difieran cualquiera que sea la causa.Si el cronometrador es sorprendido en una salida o en una llegada tiene la imperiosa obligación de anunciar “tiempo no tomado” para prevenir al Jefe de Cronometradores quien obrará en consecuencia. En la línea de meta se suele dar la mayor concentración de jueces de toda la competición. Jueces de cronometraje manual, llegadas y anotadores de vueltas, muchas veces han de compartir un espacio reducido sin estorbarse. La primera tarea, pues, en el desempeño de estas funciones para los respectivos Jueces Jefes, es hacer que todos guarden la compostura. Recibirá por separado los tiempos de cada Juez y, una vez anotados en la hoja de resultados, ordenará poner los cronos a cero.
La manera correcta de manejar un cronómetro es accionándolo con el dedo índice, y no con el pulgar, evitando hacer un gesto de movimiento hacia abajo con la mano. El cronómetro se pone en funcionamiento al ver la llamarada, o el humo, de la pistola y se detiene en el momento en que el tronco del atleta alcanza la línea de meta. Normalmente los cronometradores dan tiempos manuales inferiores a los eléctricos. Tardamos en accionar el cronómetro porque no estamos vivos a la hora de ver el fogonazo de la pistola, y en la llegada nos apresuramos a pararlo; nerviosos o excitados por la llegada nos falta un instante de calma final, que hace que nos parezca que el atleta ha llegado, cuando le faltan unos centímetros. No está de más que un juez, incluso de llegadas, ponga en marcha un cronómetro en prevención de fallos. Habitualmente el Juez Principal y otros dos jueces toman el tiempo del primer clasificado.
Salvo en carreras largas, donde se prevea que pueda haber bastante separación entre los corredores, se evitará que un mismo juez tome el tiempo de dos clasificados seguidos, sino que lo hará por lo menos con una separación de dos puestos, así, en el caso de que tengamos tres jueces para una llegada de seis atletas, el Jefe tomará al 1º y 4º, el segundo juez al 2º y 5º, y el tercero al 3º y 6º. Los tiempos se tomarán siempre por orden de llegadas, y nunca por calles. Cuando por un error no se haya podido tomar un tiempo o puesto, no se deducirá con la referencia de los otros tomados, sino que se comunicará al Juez Árbitro.
Además de los tiempos de llegada, hay que tomar los tiempos parciales que indica el reglamento, cada vuelta anotando con la ayuda de los Jueces de Llegadas, el dorsal del primer atleta y su tiempo, que se le dirá en voz alta al propio atleta si no hay reloj de pista. Si fuera posible se tomará el tiempo de todos. En carreras largas, hay que tomar los pasos kilométricos también, por lo que un Juez debe desplazarse hacia la salida del 200 para tomar los pasos de los kilómetros que coincidan allí. Hay que tener en cuenta que estos pasos kilométricos son válidos como marca oficial, y que en ocasiones los piden los propios atletas, para hacer dos o más tiempos oficiales en una misma carrera. Así en una carrera de 10.000 m. a un atleta se le debe dar tiempo oficial en las distancias de 3.000, 5.000 y 10.000. ¿Quién dijo que el puesto de cronometraje tiene poca faena.