1. Templo

Construir un templo

En la época musulmana, la población bastetana, era una mezcla étnica, cuya convivencia religiosa era posible produciéndose la existencia de arrabales de mayoría cristiana, como el de la Churra o Churriana, que correspondía a la zona en la que hoy se encuentra la Iglesia de la Merced. El culto cristiano se mantuvo durante la ocupación árabe a costa de altos tributos, como muestra la existencia de obispos de Baza, en el 715, Basilio, momento en que fue tomada la ciudad por los árabes, y siglos posteriores, constan Juan (862) y Servando (988) como obispos de los mozárabes bastetanos nombrados por el Metropolitano de Toledo. Al parecer, de esta forma siguieron viviendo los mozárabes de Baza, practicando sus ritos hasta el siglo XII, concretamente hasta 1175, año en el que los almohades trataron de imponer un Islam más ortodoxo, lo que supuso una oleada que atravesó todos los reinos musulmanes de Al-Ándalus, y en Baza, como en la mayoría de sus ciudades destruyeron templos, imágenes y reliquias con el fin de eliminar cualquier resto de la religión cristiana. Para algunos, como D. Alonso García de Yegros, canónigo doctoral de Baza hasta 1642, la ocultación de la imagen habría tenido lugar en 1150, coincidiendo con la invasión almohade que supuso el fin de la práctica del cristianismo en Baza.

El Rey Católico inspiró a Don Martin de Acuña, conde de Buendía, la idea de que en el tugurio que fuera cárcel de los cristianos, se levantara un templo a la Virgen Santísima, bajo la advocación de la Merced, en recuerdo a la redención de aquellos cautivos, y en 1490 se comenzaron las obras de la iglesia, dejándose para más tarde las del convento, que se destinara a los religiosos mercedarios, junto a la misma.

Tenemos que añadir aquí que para algunos la idea de construir aquel templo, fue de D. Luís de Acuña Herrera, pero quizá lo más interesante sobre este fragmento sea recoger lo que nos dice D. Luís Magaña sobre este edificio. Esta casa es un antiguo templo mozárabe que en el año 1.126, (otros sitúan esta fecha en 1.175) sirvió de prisión a un grupo de mozárabes, momento en que pudo ser enterrada la imagen. Al parecer el emir almohade Alí bén Yusuf, prácticamente lo destruyó, tras decretar la expulsión de los cristianos al norte de África.

"Fueron los más crueles enemigos del nombre cristiano, y los mozárabes de España hubieron de sentir bien pronto los efectos de aquella intolerancia, crecieron los tributos, se destruyeron y profanaron los pocos templos que se conservaban... Entonces fue arrasado el templo mozárabe de Baza, cuyos cimientos fueron hallados tres siglos después, y entonces fue también cuando, según todas las posibilidades, fue escondida la antiquísima imagen de la Virgen venerada por los bastetanos bajo el título de Piedad". (MAGAÑA 1927).

El texto de D. Antonio, comienza así:

El 28 de noviembre de 1489, en el barrio de la Churra, y junto a una casa que era presidio, para retener hasta quinientos mozárabes, que aún quedaban como cautivos de los moros bastetanos, se pactaron las capitulaciones de la ciudad entre el Comendador Mayor de León y el alcaide Hacem el Viejo, en representación del gobernador y caudillo de la plaza, el príncipe Cid Hiaya Al-Nayar.

Fue condición impuesta por el castellano que en el mismo día de convenirse la rendición de Baza se libertaran a dichos mozárabes.

El Rey Católico inspiró a Don Martin de Acuña, conde de Buendía, la idea de que en el tugurio que fuera cárcel de los cristianos, se levantara un templo a la Virgen Santísima, bajo la advocación de la Merced, en recuerdo a la redención de aquellos cautivos, y en 1490 se comenzaron las obras de la iglesia, dejándose para más tarde las del convento, que se destinara a los religiosos mercedarios, junto a la misma.