EL ALFABETO ÁRABE


EL ALFABETO ÁRABE ES MÁS FÁCIL DE LO QUE IMAGINAS

Una de las reacciones más comunes cuando la gente se entera de que sabes árabe es “¡Wow! ¡Tiene que ser complicadísimo! ¡Con lo raro que escriben!” Tal es el poder hipnótico de los garabatos y puntitos del alfabeto árabe que nadie se percata de que aprender el alfabeto árabe es la menor de las dificultades a la hora de aprender árabe.

Me ha tocado decirlo mil veces y no me cansaré de hacerlo: aprender a escribir en árabe es facilísimo. Te aseguro que con un mínimo esfuerzo en menos de una semana podrás escribir tu nombre en árabe o cualquier otra cosa que se te ocurra.

El motivo es bien sencillo: a diferencia de otros sistemas de escritura (como el chino, en el que cada signo corresponde a una palabra; o el amhárico, en el que cada signo corresponde una sílaba), con el abecedario árabe cada letra se corresponde a un sonido, así que no tenemos que aprender cientos o miles de dibujitos, sino que nos basta con saber dibujar 28 letras. Para que te hagas una idea, el alfabeto español tiene 27, así que te puedes imaginar lo fácil que te va a ser aprender el alfabeto árabe.

Es más, el abecedario árabe y el español son primos hermanos, pues ambos tienen la misma abuela. Los fenicios crearon hace más de 3.000 años en lo que hoy es Siria la Eva de los abecedarios: el alfabeto fenicio, que rápidamente se extendió y dio lugar a la mayoría de los sistemas de escritura que se usan hoy en el mundo.

Una rama de ese alfabeto evolucionó en el alfabeto griego, que a su vez evolucionó en el alfabeto latino, que es el que usamos nosotros. Otra rama dio lugar al alfabeto arameo, que a su vez generó el alfabeto árabe. Como ves, para tener el abecedario árabe escrito en español no tienes más que remontarte al árbol genealógico de las letras.

Si bien son muchas las similitudes entre los dos alfabetos, a nadie se le escapa que son muy diferentes. Las principales diferencias entre el alfabeto árabe y el alfabeto latino son:

  • El alfabeto árabe se escribe de derecha a izquierda. Eso al principio parece que va a crearte un cortocircuito mental, pero créeme, te acostumbrarás en seguida.


  • Con el alfabeto árabe tendrás que aprender menos trazos de lo que piensas. Esto es así porque
    un mismo signo, dependiendo de cuántos puntos diacríticos coloques y dónde (los puntos diacríticos son los que diferencian una letra de otra), definirá a un sonido u otro. Por ejemplo, a una barquita como la de abajo, si le dibujas uno, dos o tres puntos, arriba o abajo, tendrás los sonidos b, t o z. Y ese garfio suena diferente si va sin puntos, con un punto arriba o con un punto en la panza.



  • En el alfabeto árabe
    las letras pueden tener cuatro posiciones. Es decir, se escriben diferente si van al principio de la palabra, en el medio de la palabra, al final de la palabra o sueltas. Esto es, en mi opinión, lo más difícil del alfabeto árabe, pero no temas, independientemente de la posición donde se encuentre la letra el trazo es muy parecido y los puntos (de haberlos) son los mismos.


  • En el alfabeto árabe no hay vocales, al menos en el uso habitual. El árabe como lengua solo tiene tres vocales cortas (a, i, u) y tres largas (las mismas, pero más prolongadas). Mientras que en el abecedario árabe solo se incluyen las largas (que muchas veces actúan como consonantes), las cortas no aparecen. Para representarlas hay que recurrir a unas pequeñas líneas que se dibujan sobre la letra o debajo de ella, pero que en realidad no se suelen utilizar más que en libros infantiles o manuales de árabe.

Espero que conocer un poco más sobre el alfabeto árabe te haya animado a estudiarlo. En los cursos de árabe de Academia Árabe no solo aprenderás el alfabeto árabe, sino que te enseñarán a usarlo y ponerlo en práctica para que algún día tú también puedas explicar a los demás lo fácil que es aprender árabe.

Abecedario árabe

Con origen en el idioma nabateo, una ramificación del arameo imperial, el abecedario árabe posee diversos estilos caligráficos dependiendo de la región geográfica y con un sistema consonántico compuesto de veintiocho letras.

El abecedario árabe es además, el segundo sistema de escritura más utilizado en el mundo y tiene como característica especial que como toda lengua semítica (fenicia, árabe o hebrea) no utiliza vocales para su escritura, algo que sería totalmente imposible en un idioma como el español.

Además de las 28 consonantes con que cuenta el alfabeto árabe, se agregan tres vocales que tienen como característica especial un sonido largo y otro breve, dando origen así a sílabas largas o breves, que son fundamentales para la métrica adecuada de esta lengua.

Por otra parte el abecedario árabe carece de las letras "P" y "G" que existen en el español pero se colocan tres puntos debajo de la letra que sirven para la pronunciación de estas consonantes que faltan, no existiendo en este idioma una diferencia entre letras mayúsculas o minúsculas.

Conocido también como “alifato” el alfabeto árabe tiene algunas similitudes con el hebreo sobre todo en hecho que las vocales no se escriben sino que se deducen del contexto de la palabra, en tanto que las consonantes dobles se indican con un signo similar a la “W” llamado tashdid que se coloca sobre la letra en cuestión.

Así, el Corán está íntegramente escrito utilizando el abecedario árabe, siendo considerada la caligrafía de este idioma como un verdadero arte, basado en un alfabeto que agrupa las letras por similitud gráfica.

La forma de las letras del abecedario árabe varía según la posición que ocupen en cada palabra, ya sea al inicio, en el medio o al final, con la particularidad que varias letras poseen la misma forma y solo se las puede distinguir por el número de puntos y la ubicación de éstos.

ALFABETO ÁRABE